Los exámenes habían terminado ya, me había ido excelente como estaba previsto y al parecer a los demás no les había ido tan mal.

—Tenemos que celebrarlo —afirmó Ty emocionado

—No festejaré su mediocridad —me negué.

—Es que para ti una calificación que no sea igual o mejor a la tuya es mediocre —me atacó Tara— pero yo estoy de acuerdo en que hay que festejar

Les di la razón, por lo menos esta vez, si ya iban a ser mis amigos iba haber cambios en esas calificaciones

—Pues hasta yo estoy de acuerdo —aceptó Amber— hace mucho que no salgo a beber

—¿Hace cuanto? —preguntó la castaña que jugaba con el cabello de la rubia

—Bueno Max tiene seis años así que... seis —arqueó la ceja dando se cuenta— mierda si necesito salir

—Paso —bufé.

—Nada de paso —dijo el castaño invadiendo mi espacio— no me vas a dejar con las dos chicas, irás conmigo y de paso invitas a tu amigo lindo.

—Se de que amigo hablas pero de lindo no tiene nada —dejé en claro— además tú no puedes tomar para que vas.

—Pues... alguien tiene que ser el chofer designado no —se excusó

—Tampoco manejas —aclare

—Por favor Cas no me dejes ir solo con ellas, no conoces a mi hermana borracha —suplicó abrazando mi brazo.

—Lo haré si no me vuelves a tocar sin mi permiso —ordené con molestia mirándole.

—Hecho —aceptó orgulloso soltándome— viernes entonces

—Uhh invita a tu novio —asintió Tara

—Si, nos cae mejor tu novio que tu —fastidió la rubia

Levante el dedo medio hacia ellos pero la verdad es que si planeaba llevarlo, no iba a soportar una noche con ellos pero la respuesta del cabron terminó por sorprenderme.

—¿Cómo que no? —me quejé con molestia

—Me encanastaría pero ese día es la presentación de los hermanos Díaz  —me recordó mientras preparaba un bocadillo.

—Perfecto entonces aún me puedo librar de esto —sonreí mirando mi teléfono el cual fue retirado de mis manos de inmediato — ¡oye! —exclamé molesto

—Irás —ordeno— además te recuerdo que no estás invitado al festival, solo les dieron dos boletos a cada unos, dos para su papá y su novia y una para Klaus y para mi

Mire al moreno, no puedo negar que me encantaba cuando se ponía rudo.

—No deberías ir a donde no soy invitado —bufé

Ander negó para besar mi mejilla riendo.

—Lo siento amor, pero te la pasarás bien —me animo

—Si como no —me predispuse a la realidad.

El dichoso día llegó, estaba deseando me diera un dolor de cabeza o cualquier enfermedad para no tener que ir, pero conforme el día pasaba me resignaba a ir.

—Me ayudas —pidió Andy dándome su corbata— la última que ate aún no puedo desamarrarla

Negué para atar la corbata y ponérsela, traía un traje azul y nos es por halagarlo pero era su color, resaltaba con su piel morena y esos ojitos castaños.

—Me encantas —dije besando sus labios.

—Lo sé —me atrajo para besarme más— pero no me excites que luego no te haces cargo de tus responsabilidades—bufó— además no quiero ensuciarme —me aparto.

Negué para tirarme en la cama, luffy se subió a la cama para recostar su cabeza en mi pecho.

—Oye eses es mi lugar —regañó Andy al perro que ni caso le hizo— como sea te compre ropa para el antro

—No necesito ropa —bufé molesto.

—Claro, no te dejarán entrar así —señaló mirándome de arriba abajo— como sea, póntelo.

Bufe pero curiosee con molestia para ver lo que había comprado para mi

—¡A la mierda que no! —grite pues ya se había ido— no me voy a poner esto

—¡Que te la pongas carajo! —ordenó

Gruñí pero terminé por ponerme la ropa, un pantalón negro demasiado justito para realzar el culito, una camisa negra de malla que dejaba a la imaginación todo pues tenía una ligera tela negra que solo cubría la mitad de mi pecho dejando ver parte del abdomen, un cinturón de cuero... me sentía indecente

Me senté en la sala a esperar cuando salió Ander para verme, una risita se le salió.

—Mierda voy al baño —retrocedió en su silla

—Quieres que te ayude, luego dices que no me hago cargo de mis responsabilidades —le guiñe

—Cállate cabron que se me hace tarde —bufo

Negué para sentarme en la mesa, cuando tocaron a la puerta me levanté para abrir, ahí estaba Klaus y Xim, ambos me devoraron con la mirada para soltar una pequeña risita.

—Son lo peor —bufé entrando a la sala

—Lo siento —dijo la morena— nos agarraste desprevenidos, te ves muy guapo.

—Demasiado cúbrete un poco exhibicionistas —dijo Klaus poniéndome su saco

Un blazer negro que iba a juego con la ropa.

—Joder eso no es mejor —señaló el quitándomelo y aventándome la cobija de la sala.

—Ya entendí estoy muy guapo, cambien el tema —ordené

—No eres el único guapo— aclaró Klaus posando.

—Se ven muy bien —asentí— pero gracias por invitarme.

—Lo siento eran cupos limitados —se disculpo la morena— pero hey vas a salir no.

—Más a la fuerza que de gana —me quejé

Sant entró, la última vez no habia sido tan amable con él... y hoy tampoco tenía ganas.

—Santiago —le tendí la mano.

El chico me miró para apartarla y darme un abrazo, estaba por apartarlo de un putazo cuando me susurró algo que me hizo detenerme.

—Gracias por lo que hiciste por Klaus —agradeció y entonces entendí la razón del abrazo.

Suspire para darle unas palmaditas.

—Ay dios creo que me morí —dijo Ander entrando a la sala mirando la escena.

—No lo hiciste —aclaró Klaus— creo...

Una sonrisa pícara salió de su carita, entendía esa cara...

—No, guarda tus sucias intenciones, eso no pasará —ordené

—¿Por qué no? —se metió Klaus indignado

—Contrólense los dos —ordenó Xime

—Solo estás celosa porque tu fantasía con León no se cumplió —gruñó el rubio recibiendo un golpe en el abdomen sacándole todo el aire

—Será mejor que nos vayamos —asintió Santi— nos vemos Cas —se despido ayudando a su novio.

Me acerqué al mío para besar sus labios.

—Diviértete —le dije

—Lo dudo mucho es ópera —se quejó— pero tú si hazlo, emborráchate lo digo en serio.

Negué para darle otro beso y verlo irse, me acosté un rato hasta que llegaron por mí pues el chofer nos llevaría para que pudiéramos beber sin preocupación

—Pero qué guapo —dijo la castaña saludando— es raro verte sin pijama quirúrgica

—Es verdad —se quedó pensando su gemelo— en fin listo para divertirte

—Si eso quisiera me hubiera quedado en casa —bufé— será mejor que nos vayamos antes de que me arrepienta

El chofer dio marcha, ya estábamos todos en el coche pues Ethan llegaría más tarde, al llegar había una cola inmensa para entrar.

—Andando  —asintió Ty— tengo un plan, dos en realidad —me miró de arriba abajo sonriendo

—Reflexiona tu comentario quieres —pedí incomodo.

Lo analizo para asentir

—Perdón fue inapropiado, no debo aprovecharme del físico de alguien más —se disculpó— pero si tengo un plan —miró a su gemela

Llegamos al principio de la fila donde ya se encontraba el cadenero.

—Estamos llenos, formense —ordenó la montaña.

Los gemelos sacaron al unísono sus tarjetas negras con una sonrisita.

—¿Sigue lleno? —preguntó Tara astuta

El cadenero se limitó a darnos la entrada con el bullicio de las personas que esperaban, adentro como dijo el señor era un caos.

Conseguimos una mesa para los cuatro donde no tardaron en llegar las botellas de amonton y los aperitivos

—Cortesía de los gemelos —sonrió Ty— disfruten

Las chicas no tardaron en tomar una botella cada una, si bien tome uno o dos tragos pero nada más pues emborracharme solo lo hacía si tenía problemas que enterrar y en estos momentos no me sentía con esa necesidad... al contrario de las chicas.

No tardo más de dos horas para asquearme del lugar, nos habíamos quedado en la parte arriba que era un poco más exclusiva, me recargué en el barandal para ver a las chicas que cantaban a todo pulmón

—No sabía que era karaoke —dijo Ethan llegando recargándose en los barrotes a mi lado

—No lo es —negué divertido.

—Entonces...

—No quieres saberlo —asentí viendo como Ty luchaba por bajar a las dos chicas ebrias— pensé que no ibas a venir

—Ah las clases se alargaron —dijo burlón

Negué para tomar un trago de refresco y extenderle uno de los shots de tequila que había en la mesa.

—Salud —asentí

—A la mierda lo necesito —asintió para tomar de fondo

Unos minutos después no tardo en llegar el castaño con las dos chicas a tropezones dejándolas caer en el sofá

—Estoy harto —bufo— tú —señaló a Ethan —llegas tarde así que no perdamos tiempo —dijo sin más tomándolo de la mano para llevárselo

Sonreí, los veía juntos.

—Hola preciosa quieres bailar —dijo un chico a la castaña la cual sin dudarlo asintió para irse con él... aún así los mantendría vigilados

—Joder ya se había tardado, lleva toda la noche tirándole miraditas —bufo la rubia tomando de su trago.

—Creo que ya fue suficiente no —le quite el trago

—A la mierda que no —bufó tomando otro vaso— si no voy a cojer hoy al menos déjame beber tranquila

—Pues es tu cuerpo no el mío así que adelante —asentí

Ella bufo, claramente si tenía muchas cosas que ahogar con alcohol

—Llame al padre de Max —contó

—¿Y que pasó? —se me salió el lado chismoso

—Tenías razón —dijo con un dejo de asco— él no sabía que tenía un hijo... lo único que sabía es que yo lo abandoné

—Yo siempre la tengo —asentí— ahora que prosiguió

—Quiere conocerlo —suspiró

—Pero tú no quieres eso no...

— No quiero que lo lastime —me interrumpió dolida— a mi me pueden hacerme lo que quieran pero a mi Max... el desea tanto tener un padre, y si lo defrauda... él no lo va a soportar y yo... yo menos

Asentí analizando la situación era algo que de verdad le dolía

—Si me dieran a elegir volver a pasar por lo que pasé o nunca haber conocido a papá y no pasar por el dolor de su pérdida... elegiría siempre volver a pasarlo porque eso significa que al menos tendría todos los momentos que tuvimos —establecí— no le quites a tu hijo la oportunidad de crear esos recuerdos

La rubia me miró con las lágrimas amenazando en salir

—Joder porque no todos los hombres son como tú —bufó

—Jodidamente hermosos, algunos lo son pero la mayoría son gay —asentí lo que le sacó una pequeña risa— eso, esa sonrisa es la única que debes de poder tener la oportunidad de cumplir el deseo de tu hijo.

—Tu siempre sabes qué decir verdad —se giró hacia mí

—Cierto, aunque muchas veces no les guste —asentí

—Puedes llegar a ser un cabron lo sabes —me atacó

—Estoy enterado —asentí— Andy no se cansa de decírmelo

La distancia se había acortado entre los dos

—Como quisiera que alguien me amara como tú amas a Ander —dijo mirándome

—Algún día lo...

No pude acabar cuando sus labios ya estaban sobre los míos, un segundo y la aparté con suavidad

—Lo siento pero eso no —negué

—Perdón —susurró acostándose en el sofá para dormirse.

Ty regresó con Ethan en el momento correcto

—Creo que su cuerpo solo soporta dos botellas de vodka —me burle— me tengo que ir me está doliendo la cabeza.

—Oh espera deja llamo al chofer...

—Está bien iré caminando, necesito aire fresco y estoy cerca —asentó— cuida de las chicas quieres

Ambos asintieron, me fui de ahí y como dije no estaba lejos solo 2.5 kilómetros que hice con una ligera caminata rápida para despejar la mente

Llegué a casa agotado física y mentalmente que lo único que quería era meterme a la cama a dormir, entré a la habitación para ver a mi moreno dormido, para ser alguien que no puede mover la mitad de su cuerpo siempre encontraba la manera de quedar atravesado por toda la cama.

Me quité la ropa para solo quedarme en calzoncillos, me acosté acomodando a mi novio, estaba un poco caliente pero nada de qué preocuparme, se despertó por el movimiento para ver la hora y sonreírme

—¿Como te fue borracho? —preguntó divertido

—No te vuelvo hacer caso en la vida —suspire.

Andy sonrió para acomodarse sobre mi, colocando su cabeza en mi pecho y posando su mano bajo mi pectoral

—¿Qué tan malo fue? —preguntó aún adormilado

—Tara vomitó a unas chicas, creo que Ethan y Ty se comieron en el baño de hombres y Amber me beso...

—Bien por ella, se nota que te traía ganas —murmuró

—No estás molesto —cuestione.

—Oh claro que si, tendremos una platica constructiva ella y yo —afirmo — no puedo meter a Xim en esto porque ella practica artes marciales pero una buena plática si tendremos —dijo estrujándome más.

Suspire un poco más aliviado

—Y conmigo no estás molesto —murmuré

No optuve respuestas, bajé la mirada para verle

—Ander...

—¿Te sientes bien? —me preguntó preocupado

—Si... por —pregunté

—Tu corazón se escucha raro —me examino

—Tal vez me va a dar un infarto —bromee

Ante mi respuesta el solo palideció, entonces recaí en que aunque fuera una broma... podía ser una posibilidad

Buenas, buenas... perdonen la tardanza pero aqui está el capítulo de hoy con dos sorpresas.

Número 1: Aslan con su outfit que claramente se veía uf 🤤

Número 2 acabó de publicar UNDEAD, que viene siendo la historia del papá y la mamá de Aslan así que si quieren saber un poco más de su historia los invito a darle una leída ✨