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Capítulo 18

TW: MENCIÓN DE ABUSO SEXUAL, VÓMITO (Para usuarios con emetofobia)
El siguiente capítulo será demasiado gráfico en ese tema, por lo que una vez advertido, ya es tu decisión si continuar leyendo este capítulo o saltarlo.

Gracias por la comprensión.

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—¿Sobre lo que él hacía? —Jimin asintió, pero Taehyung se sentó, haciendo que el doctor se parara de forma rápida, carraspeando— Es que, yo...

—Es importante hablar sobre ello, Tae, no siempre es quedártelo, no es algo que te de pena, a ti no, es para alzar la voz, aunque no estés ya ahí, para que puedas afrontarlo, no ignorándolo en silencio.
Taehyung vio sus manos, suspiró, y después llevó esas manos a su rostro.

¿Cómo lo haría si hasta ese día seguía tartamudeando por sólo hablar de él? Taehyung cerró sus ojos y de esa forma habló.
Mostró sus antebrazos.

—Él una vez me amarró de las manos para que no pudiera manotearlo, por eso las cicatrices, después apagaba cigarrillos en mi porque no me dejaba ser un buen omega para él, era un castigo... todo era un mal-maldito castigo...

—Lo estás haciendo perfecto, Tae... —apretó sus ojos, no queriendo abrirlos, y después de tragar saliva volvió a hablar.

—Él... él... él a los trece años me dijo que esperaría en que tenga 18 para hacerme su omega, que debía ir aprendiendo a... ser un omega para él —sus manos dirigiéndose a su boca, y negó, llorando, negando— después ese mismo día me dijo cómo lo haría, mientras me tenía sentado en su rodilla viendo mi caricatura favorita, el día de hoy no puedo ver 'Hora de Aventura' sin vomitar... y era mi única caricatura...

Ver sus ojos que impedían salir las lágrimas, sus ojos rojizos, mejillas, nariz, Jimin acercó un bote cada vez más mientras lo veía hablar, Taehyung apretó sus manos, sintiendo sus uñas enterrarse en su propia piel de forma dolorosa, pero luego llevó esas manos a sus antebrazos, abrazando la sudadera de Jungkook que tenía puesta.

Suspiró— sé cocinar porque él me obligaba a hacerlo, para acercarse a mi y lamer mi cuello, para oler mi cabello y que me dirigiera a él cómo si fuera mi pareja, le-le gustaba que le dijera... Hyung, 'cariño', y yo... ¿Ya?

—Lo hiciste grandioso, Tae, sé lo difícil que es para ti aterrizar todo esto, contarlo, volver a cavar en el trauma que querías olvidar.

Nunca lo olvidaba.
Taehyung sostuvo el bote que estaba a sus pies y vomitó, haciendo al doctor saltar por verla sacar todo lo que alguna vez tuvo en su estómago.
Porque Taehyung acababa de vomitar, vómito verbal y consecuente, vómito real.

Lo hacía mientras lloraba, sollozando, y lo que hizo definitivamente al doctor saltar asustado fue un empujón en la puerta, como si quisiera ser abierta, y después varios golpes. Se quedó estático, como si no hubiera estado acostumbrado a ver eso, pero el escuchar su nombre en gritos reaccionó, corriendo a abrir la puerta.

Sin decir nada Jungkook entró, casi saltando, sólo por a su omega que en cuanto lo vio alzó sus brazos, sollozando. El castaño llevó sus manos a su propia cabeza, viendo al doctor.

—Trae agua, por favor, Jimin —el rubio le cedió el vaso al instante, y vio cómo el alfa le pasaba el vaso con sumo cuidado a su omega, viéndolo con preocupación, acariciando su espalda. Vio al doctor— no lo obligaste a contarte nada, ¿Verdad? ha pasado un tiempo de que ha-

Jimin sólo vio cómo el castaño paró de hablar y volteó a ver a Taehyung, examinándolo, y suspiró.

—Está temblando —ahora dijo más para él y se acercó a ver al menor, que se aferró más a él— lamento haber entrado de esa forma aquí, Tae, lamento haber gritado, de repente llegó el llamado...

—No es eso, Jungkook, es sólo que tengo miedo de soñar feo hoy por hablar de él, siempre que hablo de él sueño feo... —besó su frente, llevando las piernas del menor arriba de las suyas y suspiró, acariciando su cabeza.

—Me aseguraré de levantarte cada que des indicio de soñar con él, ¿Si, cariño?—Jimin negó repetidas veces, no queriendo ver cómo el omega empujaba al alfa, pero sólo vio cómo el otro asintió.

Antes de que ambos salieran, el rubio habló.

—Jungkook, quiero hablar contigo, que Tae se quede aquí si quieres.

El primer mencionado suspiró, y lo vio.

—¿Tienes otro paciente? —negó— por favor hablemos en mi casa, Tae tiene que estar en el nido para que pueda descansar —le mostró la pastilla que le acababa de dar el otro, y suspiró. Asintiendo, ganándose una sonrisa del alfa. Ésta alzó un poco más el cuerpo de la omega, y salió.

Jimin vio cómo el castaño lo depositaba de una forma cuidadosa en la cama experimentada, y se ocultó un poco al ver al omega despierto, hablar. Tragó saliva al ver sus manos jugar.

—Hablaré un rato con el doctor Park, Tae, tú duerme aquí, si necesitas algo recuerda que yo estoy en la sala.

Apenas salió del cuarto, vio al rubio, y cruzó los brazos— ¿Qué necesitas hablar?

—De tu relación con Tae —le señaló la silla para que se sentara y le cedió un té. El rubio suspiró— no esperé que la marca fuera tan fuerte, Jungkook.

—Ni yo, pero, hemos avanzado mucho —rasca su cuello nervioso, suspirando.

—Mira, yo no te puedo contar sobre lo que me habla Kim en sus sesiones —el rostro que le mostró, uno serio, le demostró que lo tenía tan presente que hasta parecía decir 'y ni deberías'— pero si te puedo decir que tú eres un factor demasiado gigante en que vaya avanzando bien, va mejorando, una víctima de ese abuso tarda en recuperar esa vida en años, unos hasta mueren antes de hacerlo, y ver cómo él logra tanto, no me suelo envolver de esta forma con mis pacientes, pero estoy tan agradecido que te hayas dado cuenta que él necesita esta terapia y no sólo 'amor'.

Soltó todo, y Jimin, en los 3 años que conoce a Jungkook, es la primera vez que lo ve sonriendo, pero con lágrimas en los ojos.
Es la primera vez que lo escucha sonarse la nariz con el dorso de su mano, porque siempre carga con algún pañuelo.
Es la primera vez que lo ve así de afligido. Relame sus labios.

Lo vio sonreír de nuevo, soltando una risita, y asintió.

—Entonces los 150 dólares por hora realmente deberían costar más, Tae, Tae está avanzando... estoy tan orgulloso de él— esa sonrisa, el rubio asintió repetidas veces, palmeando la mesa, levantándose, dejando la taza boca abajo.

—Entonces me retiro, sólo quería decirte eso... y no deberías servirle tanto té a las visitas, si no quieres mejor pon una escoba en la entrada, así ni una plaga entra.

—Se me fue la mano, y ve con cuidado, Jimin, saluda a Yoongi de mi parte.

Mientras dijo eso, se levantó, vio si su omega seguía dormido, y suspiró, viendo su agenda.
El fanático del orden movió su pie, acariciando la agenda, viendo en la hoja final, con la letra más hermosa que había visto.

''Cada día va a ser mejor que el anterior.
-Te quiere mucho mucho, TaeTae''

Un latido fuerte, una sonrisa, y llevó una mano a su rostro.

Sí, y él, Tae, lo sabía más que nadie.

Bueno, ya se terminó el maratón y espero que lo hayan disfrutado c:

5/5

(Cualquiera error será corregido más tarde)

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