Año 0

Los titanes habìan arrasado con todo, los dioses volvieron a sus reinos, las hadas vivìan tristes, pero recordando los viejos tiempos. Aunque... nada era como antes.

Las Hadas veìan con ojos de desagrado al Hada Madrina, no podìan creer lo que hizo... nunca se lo perdonarìan.

Las Hadas revoloteaban por ahì, teniendo cuidado de los titanes. Todavìa habìan quedado restos de edificios antiguos, demolidos... pero quedaban.

En una cueva, estaba una bebè recièn nacida, a lado del cadáver de su madre muerta. La pequeña necesitaba comer urgentemente.

En otra parte, El Hada Azul ya no podìa soportar màs, solo las miraba y rodò los ojos, Mientras que las demàs hadas, Flora, Fauna y Primavera, discutìan.

Fauna: Porfavor chicas, basta.

Primavera: Yo solo quisiera saber donde està esa hada con cuernos y ya verà.- Dijo la hadita azul mientras hacìa un reproche.

Flora: ¿Cual parte de que no fue Malèfica no entiendes?

Primavera: Tal Vez de transformò en otra persona, asì culparìa a una de nosotras.

Flora: O tal vez hechizò a Zeus para que no pudiera detener a su padre.

Fauna: Señoritas, dejen hablar a Azul.

Hada Azul: Gracias Fauna. Lo que les querìa decir respecto al apocalipsis que ya pasamos, tengo que decir que quien està detrás del apocalipsis.- Las tres Hadas buenas se sorprendieron y se pusieron alerta.- Es... Mary.

Las 3 hadas buenas: ¡¡¡¿QUE?!!!

Fauna: No puede ser Mary, ella no... ella no serìa capaz de hacer algo como eso.

Primavera: De seguro Malèfica se disfrazò de ella para hacer este apocalipsis...

XxXx: No deberìas estar tan segura pequeña hada.

Las 3 Hadas Buenas: MALÈFICA

Malèfica: ¡¡¡Yo no harìa nada de esto, sabiendo que mi hija morirìa. ¿Si lo tienen en cuenta hadas torpes?!!!

A Primavera le estaba hirviendo la sangre de coraje, pero Fauna la estaba tratando de calmar. Flora saliò de su trance de pensamientos- Tu eres capaz de todo Malèfica, ¿Como podrìamos confiar en ti?- exclamò Flora

Malèfica: Porque, esa maldita hada doble cara me quitò lo que màs amaba: A mi hija, a mis amigos, a...

Las 4 hadas presentes: Hades...

Malèfica suspirò con lágrimas en sus ojos: Hades...

Hada Azul: Hablando de sobrevivientes... hay algo que deben saber, vengan.- Todas las Hadas estaban siguiendo a Azul, mientras se preguntaban qué querìa. Llegaron a una roca enorme.

Primavera: ¿Nos hiciste volar hasta acà para ver una... una... ROCA?

Hada Azul: No es solo una roca comùn.- dijo sacando su varita màgica.- Es màs especial de lo que ustedes creen.- sacudiò su varita- Retiro el hechizo que conjurè anteriormente, dejanos ver lo que puse ahì permanentemente.- al instante, unas capas de roca se movieron y ahì estaba la bebè castaña llorando al lado de su madre muerta... Phoebe.

Las Hadas se hicieron para atràs, asombradas.

Malèfica: ¿Cómo es que esa bebè llegò hasta ahì?

Flora: Es casi parecida a...

Fauna: Rosa...- al momento de decir eso, las 3 hadas buenas se acercaron a la bebè, esta al ver sus apariencias se calmò pero seguìa con su cara roja y triste. La hadita Verde la cargò en brazos y la mirò con sus ojos lagrimosos. La bebè tenìa cara de estar confundida.- Ella es Bernadette, hija de Ben y Phoebe.- dijo sin dejar de ver el rostro de la pequeña.- ¿Ro-Rosa...?

Flora: Fauna, ella no es nuestra Rosa, es Bernadette.

Primavera: Tiene un parecido.

Malèfica: Es la hija de mi ex yerno, ¿Puedo verla?- ofreciò el hada negra. Fauna abrazò a la bebè y Flora y Primavera se pusieron a la defensiva.- Sé que mi reputaciòn con los bebès es horrible pero tuve una hija, fui madre y perdì a una hija, déjenme cargar a UNA bebè en mi nueva vida.- Las hadas intercambiaron miradas, y el Hada Azul intervino.

Hada Azul: Vamos chicas, denle a la bebè.

Fauna aceptò y se la entregò a Malèfica: Si se parece mucho a Aurora.- exclamò el Hada Negra.- Pero... también me recuerda a Mal cuando naciò.- Malèfica veìa con tiernos ojos a la niña, en serio le recordaba a Mal de bebè, cuando Fauna le tocò el hombro en señal de compaciòn, pero Flora y Primavera tenìan angustia por la pobre niña.

Malèfica al momento de sentir la mano de Fauna en su hombro, lo quiò y les debolviò a la niña, Flora y Primavera pudieron respirar otra vez.

Hada Azul: Ustedes la pueden cuidar, ¿Verdad?

Primavera: Lo mejor es que ella viva sola, y nosotras la vigilemos por la zona.

Flora: Mientras tanto, le ocultarèmos la verdad.

Las Hadas asintieron.

Y asì pasaron los años, y la pequeña bebè se habìa convertido en una niña. Empezò a agarrar cariño por las 5 hadas. Sip, a Malèfica también le guardò cariño.

Pasaban los años, y las 5 hadas habìan escondido victoriosamente a la pequeña niña del Hada Madrina. Lo cual no era tarea fácil.

(...)

Año 15

Una chica de 15 años bajaba por los escombros y plantas, regresando a su casa: Esa cueva donde le dieron a luz la convirtiò en su hogar. 

Bernadette era toda una mujer ahora.

En esa cueva podìa descansar, dormir, y las hadas le habìan ayudado a cavar y hacer su casa bajo suelo. La cual habìa quedado increìble.

La roca era la cueva en la que naciò.

Ber ya tenìa 15 años, y salià de vez en cuando para divertirse. Las 5 Hadas le advirtieron a Ber que por ninguna razòn, se acercara a una casa azul, ya que esa era la casa del Hada Madrina. No puede saber de su existencia.

La chica regresaba a casa después de un dìa de viajes, hasta que notò algo raro, sentìa la presencia de algo... o alguien. Las hadas le advirtieron sobre El Hada Madrina, No puede ser que ella estaba detràs de Ber.

Ber se girò para ver si alguien la seguìa, pero no, no viò a nadie. Se encogiò de hombros y siguiò con su camino.

Llegò a su cueva.

Bernadette: Hadas!!! ¿Como estàn?

Flora: Muy bien Rosa... digo, Ber, ¿Y tu linda?

Ber rodò los ojos, era la vez número 10000000000 que le decían "Rosa" "A C C I D E N T A L M E N T E", cosa que ella detestaba: Muy bien. Pero... santo susto el que me di allà afuera.- dijo mientras dejaba su mochila en la silla de roca.

Primavera: ¿Cual susto Ro... pequeña?- sonriò nerviosa

Ber: Bueno, estaba caminando de regreso a casa, cuando sentì la presencia de algo... o alguien.

Hada Azul: ¿Era Mary?

Ber: ¿Quien?

Hada Azul: El Hada Madrina.

Ber: Ay, no. Nuncamente. Solo... sentì una presencia... fantasmal.

Fauna: Ya sabes, nunca debes dejar que el Hada Madrina te vea, corazòn.

Ber: Si lo se hada Fauna. Bueno. Voy a mi habitaciòn. Las quiero.

Todas las Hadas presentes: Nosotras a ti.

Ber se condujo a su habitaciòn, y se acostò a dormir, fue un dìa muy atareado.

(...)

Ber: Auch, ¿Porque hay mucho escombro donde no deberìa haber?- exclamò la pequeña al apreciar una montaña de escombros. Escalò la montaña de escombros y notò que era un monstruo de escombro.- Upps, perdòn señor. Siga su paso.- la bestia se movió y Ber saltò fuera del animal. Y vio un edificio gigante, el cual era blanco.- ¿Que serà eso?

La chica se acercò y el edificio decìa: "Museo de historia cultural"

Ber: Huy, esto es interesante.- entró en el museo.

Y esa, fue una decisión que agradecerá siempre haber tomado...

Paseaba por todos los pasillos, cuando encontró una tele pequeña. Se acercó a ella y la quiso prender, pero no servía, hasta que vio un cable.

Ber lo agarró y buscó un hoyo para conectar el enchufe, lo encontró y ahora si, prendió el televisor, dejando ver una imagen de un rey pasando un rato con su novia, y dándole una fresa con chocolate, Ber vio la escena con ternura, luego apareciò una escena de los mismos chicos, el chico estaba hincado y la chica estaba muy sorprendida, la chica dijo que si a algo y empezaron a celebrar todos. La pelimorada bajò de la plataforma donde estaban y fue a abrazar a una peliazul, estaban muy felices. 

Al final vio a 4 chicos abrazarse, la pelimorada, la peliazul, un chico con cabellos largos, y un chico con cabello blanco. Apagò el televisor y siguió caminando.