Se siguen escuchando disparos al interior de la casa, tras esperar un poco mas, se da cuenta que la casa es dominada por un silencio absoluto.

Al salir de la habitacion se encuentra con un cadaver, toma el cuchillo que este lleva, en caso de que exista algun sobreviviente.

Al llegar a las escaleras, puede ver que la chica esta a los pies de estas, su cuerpo esta apoyado contra la pared.

Alejandro baja con sumo cuidado, no quiere alertarla de su presencia, cuando ya esta lo bastante cerca es sorprendido con una puñalada en el estomago. La atacante cae al suelo sin las fuerzas para levantarse. La victima apreta el cuchillo para no perder la conciencia por el dolor en su estomago y se arroja con todas sus fuerzas sobre la mujer, apuñalandola en un frenesi de frustracion, rabia y dolor.

— ¡Se acabo, se acabo, se acabo! — Grita mientras retira y vuelve a clavar el cuchillo.

Antes de repetir el acto nuevamente escucha el sonido de las sirenas de la policia. Suelta el cuchillo y se queda sentado, su vista se empieza a volver borrosa, antes de que todo oscurezca logra ver al agente Martinez ingresar.

Cuando recupera la conciencia descubre que ha sido llevado a un hospital, su muñeca esta con una esposa que lo une a la cama. Eso no es un buen indicio. Martinez se encuentra sentado en una silla.

— Es bueno saber que recuperaste la conciencia. — Comenta al ver la cara de confusion del muchacho.

— Yo... ¿estoy arrestado?

— Asi es, lo que encontramos en tu casa fue una masacre sorprendente, seis personas muertas y tu con una puñalada en el estomago, tienes muchas cosas que explicar al juez.

Un mes despues, Alejandro conto todo lo sucedido con Whatkill en un tribunal, ha pesar de ser una victima se le considero responsable de parte de los sucesos, a causa de que oculto la identidad de los otros sobrevivientes se le acuso de obstruir la ley, como resultado se le dieron veinte años de carcel.

Para Alejandro la carcel es un lugar seguro, ha visto horrores increibles en tan poco tiempo que de modo rapido se adapto a la vida que se lleva.

Su familia lo visita y apoya, saben que fue una victima de un psicotico, los otros sobrevivientes tambien vienen, cada uno le mostro una cicatriz con forma de mascara de gas, gracias a ella, ya no pueden volver a jugar.

Una tarde llego una visita, le parecio extraño, su familia y los otros sobrevivientes ya habian hecho la visita mensual.

Por la puerta entro Maichel con un pequeño bolso. Los guardias se retiraron.

Ambos se sentaron frente al cristal y tomaron el telefono.

— No puedo creer que lo derrotaste. — Dice Maichel admirado.

— Fue una locura, jamas olvidare lo que he visto y hecho... — Mira hacia atras. — Quiza cuando salga me sentire limpio de lo que he hecho.

— Me alegra que hayas encontrado un modo de calmar tu conciencia. — agrega Maichel. — Yo tambien logre encontrar un modo de resolver mis conflictos.

Alejandro se alegra de escuchar eso. — Si necesitas ayuda, cuenta conmigo.

Maichel inclina la cabeza y sonrie. — Pues... La voy a necesitar. — Deja su bolso en el suelo.

— ¿Ellos te dejaron entrar con un bolso?

— No pueden tocarme. — Contesta el visitante. — Pero volviendo a lo que puedes hacer por mi, debo decirte que ese dia que me sacaste del psiquiatrico, me salvaste de perder la cordura.

— Espera... ¿Ellos te dejaron libre o escapaste?

— ¿Escapar? Ellos me sanaron. — Maichel saca de su mochila una mascara de gas y se la coloca. — Me ayudaron a hallar el modo de cumplir mi deseo.

Alejandro aprieta el auricular con todas sus fuerzas y con su otra mano golpea el cristal que los separa. — ¡ No puedes hablar en serio! ¡Mataron a tu familia! ¡Son homicidas!

— Ellos liberaron a mi familia de este mundo cruel, mientras que tu le quitaste la oportunidad de abandonar este mundo a los otros jugadores. — Se acerca al cristal. — Espero que cuando salgas de este lugar, vengas a jugar conmigo.

Alejandro lo mira lleno de rabia.

Maichel se quita la mascara, dejando ver una sonrisa desbordante de emocion. — Juguemos pronto.

El prisionero ve como su visita de retira y en el cristal halla una nota pegada.

Recuerda
Whatkill jamas dejara de jugar.