Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

O33

pov's yeo baeky

En medio del mareo, y el fuego que comienza a expandirse, unos fuertes brazos me toman para salir del vehículo prestado. Estoy segura que el padre de SeokJin nos matará al ver su pobre deportivo quemado por nuestra imprudencia. Pese a que este momento es horrible, la emoción se encuentra en mi pecho, aún teniendo el casco puesto levanté la vista, TaeHyung tiene su ceño fruncido mientras me carga hacia otra parte más lejana. Escuchando los gritos, el fuego es apagado rápidamente, todos se preguntan que hace conmigo.

Cuando ya no hubo más personas cercas, me dejó sobre un banco, no sé que parte es esta, pero la oscuridad es fuerte. Mis articulaciones duelen por el golpe que me di.

—Hola...—salude.

—¡¿En qué estabas pensando?! ¡Podrías haber muerto, Baeky! —sus gritos comienzan a llenar el lugar, puedo verlo al borde del colapso— ¡Joder, estabas dentro de un vehículo en llamas!

Me quite el casco para que me vea.

—¿Entiendes ahora, TaeHyung? Así es como me siento cuando tu te arriesgas.

—Es diferente.—negó— No puedes estar aquí, no sé quién te dejó entrar pero ahora mismo te iras a tu casa.

—¡No puedes decirme que hacer!

—Sí, puedo.—me tomó de la muñeca, haciendo que el casco cayera, me arrastró hacia donde los demás estaban.

SeokJin me observó lleno de pánico, con JiMin y Haeri a su lado. Intenté forcejear, siempre he tenido fuerza, pero ahora que él está tan enojado es imposible convencerlo de dejarme. Entiendo que debió haber imaginado lo peor, yo también me asuste.

—Llévalos a casa.—pidió al rubio— La carrera volverá a empezar.

—¡Es injusto! —grite— ¡No quiero que él me lleve, quiero estar contigo!

—Baeky...—cerró sus ojos, frustrado— Entiende que es lo mejor.

—Sigues guiándote por esas estupideces, yo sólo quiero lo mejor para ti, y sé que tú quieres eso para mi. Pero lo mejor para mi eres tú, TaeHyung. Comprende.

Me soltó, había dejado una marca en mi muñeca, con pena vio aquello, arrepentido. Se alejó sin decir palabra, siendo seguido por la castaña atrás suyo. Tuve la necesidad de gritarle, de patalear o lo más mínimo para desahogarme, pero no emiti ningún movimiento.

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro