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Lector Pov:

En el castillo de Rosas, en lo profundo del mas oscuro calabozo se hallaba colgado un espejo, un espejo de diamantes.

Este espejo encerraba al ex-rey de Rosas, al rey Magnifico, despues de ser derrotado por Asha y sus amigos además de haber sido traicionado por su propia esposa, la cual tomo el mando del reino en su lugar.

Magnifico: "¿Como pudo suceder esto? Yo era el rey, era tan admirado y tan amado, todo lo que hice fue por el bien de mi pueblo. Para que no sufran las perdidas que yo sufrí, ese dolor, es algo que no le deseaba a nadie. Pero ahora, ¡maldita Asha, mocosa inmadura esto es tu culpa!"

Recordó todo con dolor, como la chica que quería ser su aprendiz quería que se cumpliera el deseo de su abuelo sin medir las consecuencias de este. Tal y como le dijo el deseo no era muy especifico, el pudo volverse una inspiración para los jóvenes pero, ¿qué tipo de inspiración? Son jóvenes, si no se tiene cuidado podrían inspirarlos de la forma incorrecta e incluso serian capaces de poner en peligro a su gente. No le importaba tanto que se volvieran un peligro para el mismo, ya que el era fuerte y podía manejarlo, pero la gente común no y ellos si que podían verse afectados de forma negativa. Aun recordaba a ese que quería poner un genero llamado "reguetton", el solo pensar que su deseo ahora pudo ser cumplido le daba escalofríos.

Pero luego sus sentimientos se manifestaron en ira, la magia oscura recorrió sus venas y sus ojos se pusieron de color verde, por lo que desato su ira en contra de su prisión. Tiro relámpagos, fuego y toda clase de hechizos al cristal que lo mantenía cautivo; pero no consiguió nada. Ese cristal era un cristal especial que dispersaba la magia, y era tan resistente que a menos que fuera golpeado por un arma anti-tanque no se quebraría.

Magnifico: "¡Yo solo quería mantenerlos a salvo! ¡Cumplí deseos que beneficiarían a todo el reino, a todos! ¡Solo quería respeto! ¡¿Y así me lo agradecen?!"

Golpeo el cristal con ira, la cual fue desvanecida para dejar paso a otra emocion, una pura y profunda tristeza. Que todo su reino le haya dado la espalda le dolió, pero que su propia esposa, la mujer a la que consideraba su compañera de toda la vida lo haya traicionado lo destrozo totalmente.

Así que solo se resigno a su destino, en cambio decidió dedicarse a perfeccionar su magia para pasar el rato. La magia oscura que obtuvo era poderosa, pero supo que no tenia mucho control sobre ella y que esta era mas que capaz de controlarlo de forma negativa. Por lo que medito, estudiando todo lo que sabia para tal vez controlar esa magia por completo y encontrar una forma de salir.

Cinco años mas tarde:

Caos, eso era lo que había por todas partes, un total y autentico caos. El Reino de Rosas en el pasado había sido un símbolo de paz, estabilidad y prosperidad; pero desde que Magnifico fue derrocado y Amaya tomo el control ya no quedaban ni un rastro de la prosperidad de antaño.

Varios reinos habían temido el poder de Magnifico, reconociéndolo como un mago muy poderoso e inteligente por lo que se habían abstenido de atacar su reino, ni siquiera mandaban espías ya que sabían que serian descubiertos al momento de entregar su deseo a Magnifico y este no se quedaría de brazos cruzados. Pero cuando se enteraron de que Magnifico fue derrotado, no desaprovecharon la oportunidad para por fin invadir ese prospero reino y tomar sus riquezas.

Se mandaron espías encubiertos, debido a que Asha era joven e inexperta no supo diferenciar a los espías de la gente común y les concedió sus deseos. Algunos desearon fuerza para vencer osos, otros desearon sabiduría o habilidades de herreros profesionales y otros desearon distintas cosas que a primera vista parecían inofensivas; pero que combinadas y con la creatividad suficiente se volverían letales armas en contra del reino. Y entonces los reinos esperaron, esperaron al menor momento de debilidad mientras aprovechaban sus poderes obtenidos por los deseos para fortalecer sus ejércitos y no tuvieron que esperar mucho.

Dentro del reino de Rosas se empezó a ver poco a poco el efecto de que los deseos se cumplieran sin la supervisión adecuada, un hombre deseo que una gallina creciera de tamaño y si bien al inicio estuvo feliz, pronto ese deseo se torció. Ya que las gallinas son omnívoras, y un ave de tal tamaño comía en grandes cantidades para saciar su apetito, incluso devorando a un niño que paso demasiado cerca de ella. Asha quedo horrorizada y trato de rescatar al niño, pero llego tarde y la magia no podía resucitar a las personas.

Asha quedo en shock, poco a poco mas y mas desastres con los deseos iban acumulándose y generando malestar a la población. Pero lo peor vino cuando le concedió el deseo a un animal de tener su propio reino, distintos animales que hablaban se juntaron en ese reino pero no tuvieron en cuenta que no todos los animales se llevarían bien solo por hablar entre ellos y que mucho menos se llevarían bien con los humanos. Pronto, el inofensivo animal fue devorado por un león ambicioso, el cual convenció a todos que los culpables de todo fueron los humanos y organizando un ejercito le declararon la guerra la Reino de Rosas. 

Estos respondieron rápidamente, pero ahora que los animales podían usar armas y tácticas pudieron dar una buena pelea durante un tiempo. Al final, Asha deshizo la magia y volvió a los animales a su estado natural, pero lo hizo demasiado tarde. Los otros reinos aprovecharon la distracción para lanzar un ataque masivo en todos los frentes del reino, aprovechando las distintas habilidades obtenidas por los deseos tenían muchas mejoras; soldados con la fuerza de 10 hombres, arqueros y artilleros con puntería aterradora, otros habían deseado ser capaces de hablar con los animales y habían aprovechado ese don para domar distintos tipos de bestias y crear equipos de jinetes monstruosos, otros habían deseado comunicarse con sus amigos muertos y junto con las almas de sus aliados caídos formaron una poderosa red de espionaje, otros desearon ser expertos artesanos y estos construyeron enormes maquinas de guerra, incluso los que desearon ser mejores granjeros eran un problema ya que con ellos los ejércitos de los otros reinos no tenían que preocuparse por la comida. Sin saberlo y sin querer Asha les había dado el poder a sus enemigos para atacar a su gente.

La guerra fue brutal, Asha buscaba concederles deseos a los que querían luchar para que el reino no cayera, aunque no pudo ganar y la guerra solo se mantuvo en un punto muerto. Además, ella había ignorado algo básico en todos los seres sintientes, el poder corrompe y lo aprendió de la peor manera cuando mucha de su gente a la cual les concedió deseos para que la apoyaran se fueron del lado del enemigo con las promesas de poder y riquezas. La gente empezó a murmurar a sus espaldas, señalándola como la culpable de todo ya que nada de eso pasaba durante el reinado de Magnifico. 

Incluso el abuelo de Asha se puso en su contra, había estado usando su deseo de componer una canción para inspirar a los jóvenes, solo que en lugar de usarlo para motivarlos a algo bueno tuvo que motivarlos para que se enlistaran al ejercito. Y sintió, que si solo era la inspiración para que cientos y miles de jóvenes mueran en la primera línea entonces su deseo realmente no valía la pena. A Asha se le rompió el corazón cuando vio los ojos vacíos de su abuelo, el hombre ya estaba cansado de inspirar a varios a morir.

Con miles de personas reclamándole y exigiéndole una solución, Asha se quebró. Y destrozada fue a buscar al único que tal vez podía detener ese caos, entrando al castillo y abriendo la puerta del calabozo. Acompañándola estaba la reina, la cual ya no tenia su apariencia de antes y ahora se veía bastante cansada y decaída. Intentar mantener el reino en su estado actual la había agotado física y mentalmente, y ya no podía aguantarlo mas.

Magnifico: "A por fin, visitas."

Asha: "Su Majestad, yo...."

Magnifico: "Nada de su majestad, solo soy un hombre común. O mejor dicho, un villano, un ser maligno que no merece ni gracia ni respeto. ¿No es así señorita Asha?"

Asha quedo mortificada, recordando como había pensado eso de Magnifico cuando este se negaba a cumplir todos los deseos. Lamentando no haberse dado cuenta de que no lo hacia por maldad, solo lo hacia para mantener al reino a salvo. La reina no estaba mejor.

Amaya: "Cariño, per..."

Magnifico: "¡No te atrevas a decirme cariño, me abandonaste! ¡Me pudrí en prisión por 5 años, por culpa de ustedes! ¡¿Con que cara vienes a decirme cariño?! ¡¿No tienes vergüenza?!"

La reina empezó a llorar y arrodillándose frente al espejo empezó a pedir perdón a su ex-marido una y otra vez; recordando con dolor cuando ella dijo que el merecía estar encerrado en ese espejo. Magnifico solo la miro con frialdad, ya no había rastro de ninguna emoción de su mirada, solo había hielo puro.

Magnifico: "¿Y? ¿Qué es lo que quieren mi ex-esposa y la aspirante a aprendiz?"

Asha: "Tenias razón, lo admito. Me equivoque y lo siento, ahora todo es un caos, la guerra ruge en todos lados y no da signos de detenerse."

Amaya: "Por favor, castíganos como lo creas conveniente, pero por favor ayúdanos. A este paso el reino... por favor, tu eres el único que puede solucionarlo."

Magnifico: "Mira, pase mucho tiempo en este lugar y ni siquiera me visitaste. Ni una sola vez, Amaya, me diste totalmente la espalda. Y tu, niñita inmadura no escuchaste mis advertencias creyendo siempre tener la razón e hiciste exactamente lo que te dije que no hicieras, dándome la espalda junto con todo mi reino. Todos me abandonaron, ¿así que por que quisiera ayudar? ¿Qué gano yo?"

Asha y Amaya se miraron nerviosas, pero estaban tan desesperadas que recurrieron a todo lo que podían ofrecer.

Asha: "Todo el reino te jurara eterna obediencia, yo también naturalmente y sellare el pacto con magia. Seré tu esclava, tu sirvienta, lo que tu quieras."

Amaya: "Todo el reino esta de acuerdo, todos estan de acuerdo que tu eres el único con la fuerza e inteligencia necesaria para solucionar esto. Si quieres que me vaya me iré a donde nunca me encuentres, y si aun así no estas satisfecho entonces terminare con esta inútil vida."

Magnifico las miro con frialdad en su mirada, pero al final acepto ayudarlas. Asha entonces uso un encantamiento para liberar a Magnifico, el deseo de la gente de liberar a Magnifico le permitió conseguir la suficiente magia para romper el cristal.

Y entonces Magnifico salió, y con su magia y experiencia les mostro a todos porque el era el único que merecía ser rey. Ahora con un completo control de la magia oscura hizo retroceder a los enemigos que asediaban el reino, cuando se enteraron que Magnifico había vuelto a ser rey y que ahora era mas poderoso los reinos enemigos firmaron la rendición. Bajo la estricta supervisión de Magnifico se reunieron todos y cada uno de aquellos que pidieron un deseo, Asha tuvo que ayudar al rey y soportar los insultos de la gente, que la culpaban por no haber tenido cuidado a la hora de conceder deseos, en esos momentos ella solo quería que se la tragara la tierra.

Con todos reunidos, Magnifico uso una magia prohibida, esta deshizo todos y cada uno de los deseos pedidos. A cambio, la magia de los deseos seria perdida para siempre y ni el ni nadie seria capaz de conceder ni pedir deseos. Tras pagar reparaciones de guerra los reinos enemigos se retiraron, la gente del reino de Rosas celebro pensando que Magnifico volvería a ser su rey pero pronto se desesperaron cuando Magnifico dijo que no volvería a ser mas su rey.

Estaba cansado de todo, así que se retiro a una isla desierta, donde viviría en paz el resto de su vida. La reina Amaya tuvo que hacerse cargo de lo que quedaba del reino, consiguiendo tras un tiempo estabilizar a su reino, no tenia la prosperidad de antaño pero al menos ahora ya no había guerra. Asha se volvió una marginada, sufriendo el desprecio de toda su gente pero haciendo lo que podía para ayudar.

Sus deseos de redimirse eran lo único que la impulsaban, ayudando a la reina en lo que podía para mantener estable el reino. Ella buscaba de si misma redención, y del resto ella buscaba desesperadamente el perdón.

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Pues quedo bastante bien, ¿ustedes que opinan?