2. Jake...¿Parkinson?

Noviembre, 1976

—¡No puedo!

Mackenzie se levantó de la camilla.

—¿Por qué no puede, señorita Macmillan?—Pregunto la medigama

—Porque...sería lo único bueno que voy a tener—Explicó Mackenzie—. No puedo abortarlo

—Es su decisión.

—No, no lo haré—Dijo Mackenzie, decidida

La medigama asintió.

Mackenzie salió de la habitación y vio a Evelyn y Clarissa.

—¿Que pasó?—Pregunto la primera

—No puedo hacerlo, madrina—Dijo Mackenzie—. Se qué tal vez Esther enloquezca, pero no puedo hacerlo.

Evelyn sonrió, y le acarició la mejilla.

—Tienes que pensar muy bien lo que le dirás—Dijo Clarissa

—Por el momento...no quiero que nadie lo sepa, ¿podrían guardarme el secreto?

—No tienes que pedirlo—Dijo Evelyn

Mackenzie asintió y les sornio.

—De verdad gracias, por acompañarme y guardarlo—Dijo Mackenzie

[ ... ]

Marzo, 1977

Mackenzie suspiró, cuando vio a Lucas en el pasillo, mientras platicaba con Lily Evans.

Tenía que hacerlo ahora, si no, no podría hacerlo después.

Suspiró y se acercó a la pareja.

—¿Podemos hablar?—Interrumpió Mackenzie la plática

—Estoy ocupado, y no quiero—Respondió Lucas, con una sonrisa sarcástica—. Y ahora vete.

—¿Crees que me acercaría si no fuera importante?—Mackenzie lo vio con una ceja alzada

Lucas suspiró, con pesadez.

—Ya vengo.

Lily asintió, confundida.

Ambos castaños se alejaron los suficiente para que la pelirroja no los escuchara.

—¿Que es lo que quieres?—Pregunto Lucas, con cansancio

—Antes que nada, debes prometer que lo que te diga no le dirás a tus amigas—Dijo Mackenzie, cruzada de brazos

—¿Todavía que no quería hablar contigo me pones condiciones?—Lucas la vio con una ceja alzada

—Solo...promételo.

—No haré tal cosa—Dijo Lucas—. Ahora, dime lo que tengas que decirme o me iré.

Mackenzie suspiró, mientras se pasaba las manos por la cara.

—Eres imposible—Dijo Mackenzie

—Gracias. No eres la primera ni la última que me lo dirá—Dijo Lucas, cruzado de brazos

—Bien—Dijo Mackenzie—...estoy embarazada.

Lucas lo vio con cara de interrogación.

—¿Y eso a mi que?—Lucas no le tomó importancia

—Y tengo que pedirte un enorme favor—Dijo Mackenzie, rascándose la cabeza

—No me haré cargo de él, si es lo que querías—Dedujo Lucas—. Ve y dile a Potter que lo haga.

—Mi madre me mataría, si se entera que es...

—Lo hubieras pensado antes de andar de calenturienta—Dijo Lucas, aún viendo con disgusto a Mackenzie

—Solo piénsalo—Dijo Mackenzie—. Me ayudas y te ayudó.

—No me interesa...

—Si decimos que es tuyo, no tendremos porque acostarnos en un futuro. Peter y Esther estarán encantados de que tienen a su heredero.

—Espera, ¿cuantos meses tienes que ya hasta sabes que es hombre?—Pregunto Lucas

—Tengo cinco meses—Respondió Mackenzie

—Igual no me interesa—Dijo Lucas

—Solo piénsalo, ¿si?—Dijo Mackenzie—. Jamás pensé en pedirte ayuda, pero la necesito. Y como dije, ya no tendríamos que tener sexo en el futuro.

—¿Y crees que nuestros padres creerán que tuvimos sexo? Por merlin, Macmillan. Si saben que nos odiamos a muerte.

—Les decimos que una borrachera y ya.

—No pienso hacerlo—Sentenció Lucas

Mackenzie suspiró y asintió.

—Bien, no lo hagas—Dijo Mackenzie—. Ya veré como le hago, y si te digo una cosa Lucas. Si yo caigo tú caerás, ¿lo entiendes? Me importará muy poco que Peter sepa que aún sigues hablando con Lily.

Mackenzie se dio la vuelta aún escuchando los llamados de Lucas.

[ ... ]

Abril, 1977

Mackenzie se rio cuando vio a James caerse en el pasillo, a lo lejos.

Llevó su mano, inconscientemente, a su vientre.

A pesar de que ya tenía 6 meses, usaba un hechizo para que nadie notara el vientre grande. Y no le había mencionado nada a James sobre el embarazo.

Sintió como alguien la tomaba de la cintura y la arrastraba hacia un salón vacío.

—¡Suéltame!—Grito Mackenzie

Se dio la media vuelta para ver al castaño de ojos cafés.

—¿Que te pasa? ¿Estás enfermo?—Cuestionaba Mackenzie—. ¿Por qué tienes que ser siempre tan salvaje...

—Lo haré—Interrumpió Lucas

—¿Que? ¿Que harás?—Mackenzie se cruzó de brazo

—Dire que es mío—Dijo Lucas

Mackenzie relajó la expresión de su rostro y dejó caer sus brazos a los costados.

—¿Por qué? ¿Por qué ahora si quieres?

—Lo consulte con mi almohada—Lucas se sentó en una silla—. Y me di cuenta de que, si digo que es mío, no tendríamos porque acostarnos en el futuro.

Mackenzie arrugó su frente.

—Si me hubieras dicho eso desde el principio—Dijo Lucas, como si fuera lo más obvio

—Pero yo—Mackenzie se cayó—...¿es tu forma de decir que yo tenía razón?

—No—Lucas negó con la cabeza—, pero eso si, chica Macmillan. No entraré al parto. Y cuando nazca, no creas que yo me parare en la madrugada porque esté llorando.

—Nadie te lo pidió—Mackenzie se cruzó de brazos—. Lo único que quería era que dijeras que es tuyo.

—Pues ya está—Lucas se levantó de la silla—. Ahora, tengo cosas más importantes que hacer.

—Gracias—Dijo Mackenzie, antes de que Lucas saliera del salón

Lucas no se volteó, pero alzó los hombros restándole importancia.

No supo porque, pero Mackenzie sintió como si un peso fuera quitado de encima.

Ahora solo tenía que decirle a su madre...

[ ... ]

Septiembre, 1977

—¿Que?—Fue lo único que dijo Mackenzie ante la propuesta de Peter—. ¿Quieren borrarle la memoria?

—Así es—Dijo Peter—. Si nos ayudas...

—Están mal, si creen que los voy a ayudar—Dijo Mackenzie, cruzándose de brazos

—¿Por qué no lo harías?—Pregunto Esther

«Porque se está haciendo cargo de un bebé que no es suyo» Pensó Mackenzie

—Porque no soy tan cruel—Contestó Mackenzie

Si Lucas la había "ayudado" en mentir y decir que el bebé era suyo, lo único que podía hacer Mackenzie era evitar que le borraran la memoria.

—Sabemos que aún no hace muchas cosas porque aún piensa en...esas...chicas Evans—Dijo Peter

—¿Cosas como cuales?

—Como otro heredero—Habló Esther

—¿Que?—Dijo Mackenzie—. ¿No les basta con Jake?

—Jake es el heredero de los Parkinson—Dijo Esther—. Y yo necesito uno para los Macmillan.

—Madre, por el amor de merlin—Mackenzie se pasó las manos por la cara—. Hace 2 meses que di a luz.

—Lo hemos hablado con Lucas y él no quiere otro hijo—Dijo Esther

—Y está en todo su derecho, así como yo—Dijo Mackenzie

—Mackenzie, no nos hagas tomar...

—¿Es que acaso se están escuchando?—Dijo Mackenzie—. Me están pidiendo que vuelva a quedar embarazada, cuando hace 2 meses di a luz. Enserio que...son de lo peor.

Dicho eso, salió de la oficina y subió a la habitación de Jake.

Se detuvo de golpe, cuando vio a Lucas pasearse por la habitación con el bebé en brazos.

Lucas sintió que lo veían, por lo que giró su cabeza.

Vio a Mackenzie y rodó los ojos, dejando a Jake de nuevo en la cama, quien comenzó a llorar.

Mackenzie rodó los ojos y se acercó para cargar a Jake.

—No deja de llorar—Se quejó el Parkinson

—Pues yo no le escuche llorar mientras lo cargabas—Dijo Mackenzie, viendo al Parkinson

—¿Que querían?—Pregunto Lucas, refiriéndose a Esther y Peter

—Creía que estaban locos—Dijo Mackenzie—. Pero creo que les hace falta un psiquiátrico.

—¿Hasta ahora te das cuenta?

—Querían que les ayudara a borrarte la memoria—Dijo Mackenzie

La sonrisa de Lucas desapareció.

—¿Y qué les dijiste?—Pregunto Lucas

—¿Me ves cara de idiota?—Dijo Mackenzie—. Les dije que no. No es que me agrades, pero es lo menos que puedo hacer después de...tú sabes después de que.

—Hace como dos semanas me dijeron que querían otro nieto, ¿puedes creerlo?

—Me lo dijeron—Dijo Mackenzie—. Dijeron que Jake era el heredero de los Parkinson, pero que Esther necesitaba el de los Macmillan.

—Si tan solo supieran que Jake es el de los Macmillan—Susurro Lucas

—¡Cállate!—Dijo Mackenzie—. ¿Qué tal y están en el pasillo y te escuchan?

Lucas la vio con una ceja alzada.

—¿Heredaste la locura de tu madre?—Dijo Lucas—. Deben estar planeando como hacer que tengan otro nieto.

[ ... ]

Octubre, 1977

—¡Enserio que están dementes!—Grito Lucas—. ¡¿Como se les ocurrió?!

—Era necesario—Dijo Esther

Mackenzie tomó a Lucas del brazo cuando lo vio que iba a acercarse a Esther.

—No valen la pena—Dijo Mackenzie, acomodándose a Jake en brazos

—Me vale que no valgan la pena—Dijo Lucas—. ¿Como se les ocurrió darnos...amortentia?

—Se los dijimos—Dijo Peter

—¡Por merlin!—Lucas se pasó las manos por el cabello—. ¡¿Es que acaso no entienden?! ¡Acaba de dar a luz hace menos de 6 meses! ¡Y ustedes ya hicieron que se embarazara de nuevo!

—Eso quiere decir que los Parkinson somos...

—¡Quiere decir que eres un maldito animal sin razón de pensamiento!—Grito Lucas, interrumpiendo a Peter

—Cuidado en cómo me estás hablando—Dijo Peter

—¡Me vale!—Grito Lucas—. Mackenzie sal de aquí.

—Pero...

—¡Sal de aquí!—Grito Lucas, haciendo que Jake comenzara a llorar y Mackenzie se asustara

Mackenzie vio a Esther y Peter, con algo de temor. Pero aún así, se dio la media vuelta y salió de la oficina.

Mackenzie estuvo en la habitación de Jake, durmiéndolo. Hasta que vio a Lucas, entrar a la habitación.

Mackenzie tapó de Jake y cerró la puerta. Y fue a la habitación.

Soltó un grito de sorpresa, cuando vio a Lucas sentado en la cama, con la ropa desgarrada.

—¿Pero que...Mierda?—Dijo Mackenzie—. ¿Los mataste?

—¿Que? No—Dijo Lucas, mientras se quejaba del dolor. Mackenzie veía la sangre de Lucas en las manos—. Es mi propia sangre. Aunque ganas no me faltaron.

Lucas alzó la cabeza y vio que tenía un golpe en el ojo.

—Mejor ni te cuento como me fue con los crucios, ¿verdad?—Dijo Lucas, sarcástico

—No seas idiota por una vez en tu vida, Lucas—Mackenzie buscó entre el armario hasta que sacó el botiquín

—¿Que harás?—Pregunto Lucas

—¿Te quieres quedar con todas esas heridas?—Pregunto Mackenzie

—¿No es más fácil con hechizos?—Dijo Lucas

—Pero no sería divertido para mi—Dijo Mackenzie—. Quítate la camisa.

Lucas la vio con una ceja alzada.

—¿Es que acaso no te bastó...

—No seas imbecil—Interrumpió Mackenzie—. Estaba bajo el efecto de la amortentia, no generas nada en mi.

—No me digas eso por favor, Macmillan—Mackenzie rodó los ojos cuando vio que Lucas se ponía una mano en el pecho, ofendido—. Me tiraré, me suicidare.

—Casi te creo—Dijo Mackenzie, con el mismo sarcasmo

Lucas se quito la playera y se dio la media vuelta, dejando que Mackenzie empezara a curar esas heridas.

Mackenzie sonrió cuando escuchó la maldición que Lucas soltó, cuando la Macmillan colocó el algodón con alcohol.

—¿Que vamos a hacer?—Pregunto Mackenzie, rompiendo el silencio

—¿De que?

—Sobre...el embarazo—Dijo Mackenzie—. Yo...

—Podré ser todo un maldito e hijo de puta—Dijo Lucas—. Pero, jamás te obligaré a hacer nada, chica Macmillan. Es tu decisión.

—Admito que—Mackenzie suspiró—, no aborte a Jake, no solo porque era...bueno, tú sabes. También tenía miedo. Había leído miles y miles de folletos, donde decía que todo podía salir mal. Y que, podía morir hasta yo.

—Lo tendrás, entonces—Dedujo Lucas

—Bueno...si tu también quieres—Dijo Mackenzie—. Porque este si, es tuyo.

—Por ese si voy a tener que pararme en la madrugada—Dijo Lucas

—Se que también lo haces por Jake—Dijo Mackenzie—. Dentro de tu oscuro y maldito corazón de metal, Jake se ha ganado un pedacito. Pero muy, muy, chiquito. ¿Qué pasa si es niña?

—Querrán volver a hacer algo como lo que hicieron—Dijo Lucas—. Roguemos porque sea Niño.

Mackenzie asintió.

[ ... ]

Agosto, 1978

—Jake...—Mackenzie suspiró, cuando vio como el castaño con pecas tiraba la harina—. Por merlin.

Mackenzie se acercó a Jake, y lo levantó del piso.

Subió las escaleras y para llegar al baño, tuvo que pasar por enfrente de su habitación.

—No deja de llorar—Se quejó Lucas, cuando vio a Mackenzie—. ¿De donde se apaga?

—¡Lucas, es tu hija, no un juguete!—Dijo Mackenzie

—Creo que tiene hambre—Dijo Lucas, mientras aún cargaba a la bebe y se paseaba por la habitación

—O revísale el pañal, tal vez le hace falta un cambio—Dijo Mackenzie—. Le di de comer antes de dártela. No es hambre.

—¿Qu-quieres qu-que yo...le cambié el pañal?

—Yo tengo que bañar a Jake—Dijo Mackenzie—. Se tiro toda la harina encima.

—Te lo cambió—Lucas se acercó a Mackenzie—. Yo lo baño y tú le cambias el pañal a Paige.

Mackenzie rodó los ojos, bajo a Jake y tuvo que poner su pie para que no caminara, después tomó a Paige.

—Algún día tendrás que cambiárselo—Dijo Mackenzie

—Prefiero terminar mojado de agua por Jake, que cambiar un pañal—Dijo Lucas

Mackenzie suspiró, cuando Lucas corrió al baño con Jake en brazos.

Entró a la habitación y cambió el pañal de Paige.

Paige Liliane Parkinson, era una bebe con poco cabello—aún, porque apenas tenía un mes—, rubio castaño como el de Lucas, pero tenía los ojos de Mackenzie.

Peter y Esther no estaban contentos con la menor de los Parkinson.

Mackenzie suspiró, mientras miraba su anillo en su dedo anular de la mano izquierda.

Hace dos meses se había casado con Lucas. Y hace uno Lucas había terminado Hogwarts.

Mackenzie aún tenía su último año, y no quería dejar a Jake y Paige con Esther y Peter.

Sentía que en cualquier momento se darían cuenta que no es un Parkinson. Lucas había hecho algunos movimientos para demostrar, solo ante Esther y Peter, que Jake era un Parkinson.

Y no querían a Paige, por se niña.

Y aunque, este año Jake se había tenido que quedar con ellos, Mackenzie aún tenía miedo.

Sabía que Peter y Esther no le harían nada a Jake, pues era el heredero, pero Mackenzie no quería que Jake creciera con los ideales de ambos mayores.

Sobre todo, porque Mackenzie noto—desde que Jake comenzó a caminar—, que era muy travieso. Lo que la hacía recordar a James.

—Ya quedó—Lucas entró a la habitación

Mackenzie tuvo que reprimir su risa al ver a Lucas con la playera mojada.

—Prefieres cualquier cosa antes que cambiar un pañal, ¿cierto?

Lucas solo asintió.

—¿Como le harás cuando yo regrese a Hogwarts?

—Tendré a mi compañero de vida...

—Kepi no te resolverá la vida siempre—Mackenzie levantó a Paige, cuando Jake comenzó a saltar en la cama desnudo

—Jake, por favor—Dijo Lucas—. Necesito cambiarte. Te vas a enfermar.

Jake se rio, y siguió saltando en la cama.

[ ... ]

Octubre 31, 1981

Mackenzie vio a los tres niños dormir.

Pansy Parkinson, la menor de los Parkinson, era toda una Macmillan en cuestión de físico.

Había sacado el cabello negro de Esther, tenía los ojos de Mackenzie y las pecas.

Pansy estaba en su cuna, mientras Paige y Jake estaban en la cama.

Jake ya tenía 4 años, su físico era igual al de Mackenzie, excepto en el cabello y las personalidad, esa la había sacado de James.

Paige había llorado por dormir junto a Jake.

Paige tenía 3 años, y era igual a Lucas, en el físico. Excepto los ojos.

Apago la luz de la habitación. Lucas había salido al ministerio, ahora el Parkinson trabajaba ahí.

Esther había muerto hace unos meses, peleando con unos mortifagos.

Los Parkinson y los Macmillan eran creyentes de la sangre, pero no seguirían a Voldemort.

O eso creía Mackenzie hasta hace unas semanas que había escuchado a Peter hablar con alguien en su oficina.

Sabía que Voldemort tenía el plan de matar a...Harry Potter.

Mackenzie no supo nada más de James o incluso Lucas, no volvió a saber más de Lily.

Por eso se sorprendió cuando Peter lo mencionó. Parecía que Peter no estaba contento con que aún las Evans vivieran.

Mackenzie escribió en un pergamino una pequeña nota. Sabía que, si su plan salía como lo había planeado. Lucas leería esa nota y no dudaría en matar a Peter.

Dejó la nota en la cama, tomó su varita y salió de la habitación.

Fue a casa de Barty.

—¿La tienes?—Pregunto Mackenzie, en cuanto Barty abrió la puerta

—La tengo—Dijo Barty—. ¿Para que la quieres?

—Te contaré después, es un plan con Lucas—Mintió Mackenzie

Barty entrecerró los ojos y le entregó un pedazo de pergamino con la dirección y donde se encontraba la casa de los Potter.

Barty era un Mortifago y eso lo sabía Mackenzie, por lo que le había pedido que investigara la ubicación de los Potter.

—Peter es el guardián—Dijo Barty

—Te veo mañana—Se despidió Mackenzie

Cuando Mackenzie encontró la casa, suspiró al ver la casa.

Claro que tuvo que conjurar un hechizo.

Tocó la puerta y espero unos segundos.

—¿Quien es?—Se escuchó la voz de Lily del otro lado

—Soy...yo, Mackenzie.

—¿Como sabemos que lo eres?

Mackenzie pensó en cómo poderlo comprobar.

—Una de las últimas veces que hablaste con Lucas...interrumpí su conversación diciendo que si no fuera algo importante no me acercaría—Dijo Mackenzie

Espero otros segundos, hasta que la puerta se abrió mostrando una pelirroja con los brazos cruzados.

—¿Que es lo que quieres?—Pregunto Lily

—Se qué tal vez no me creas, pero...él lo sabe—Dijo Mackenzie

Lily bajo sus brazos, se hizo a un lado y Mackenzie entró a la casa.

—¿Que quieres decir?—Pregunto Lily, una vez estaban en la sala

—Se que Peter es su guardián—Dijo Mackenzie

Lily iba a hablar, pero en ese momento entró James a la sala.

Mackenzie le sonrió, apenada.

—¿Macmillan?—Dijo James, confundido

—Peter no es solo su guardián—Explicó Mackenzie—. También es un Mortifago, que dio su ubicación a quien ustedes saben.

La cara de terror de ambos Potter, Mackenzie la recordaría.

—¿Como te creemos?

—Barty me lo dijo—Explicó Mackenzie

Justo en ese momento se escuchó un fuerte golpe fuera de la casa.

—Intentan pasar el hechizo—Dijo Lily

Justo en ese momento, Mackenzie hizo un hechizo de protección en ambos. Que los desmayaría en unos minutos.

Lo había aprendido para ponerlo en Jake y Paige, cuando ella tuvo que regresar a su último año de Hogwarts.

—Suban—Dijo James, para después agarrar a Mackenzie de los brazos—. Pon a mi hijo a salvo, Mackie. Es lo único que te pido.

—Lo haré, tranquilo—Dijo Mackenzie

Mackenzie había investigado, y solo había una forma de salvarlo.

Mackenzie vio como James y Lily se daban un beso. Después Mackenzie siguió a Lily.

Ambos entraron a la habitación de Harry.

—No tiene su varita—Dijo Lily—. Tengo que...

—No puedes bajar—Intervino Mackenzie—, a menos que quieras morir y dejar a Harry sin madre.

—Pero...

—El estará bien, lo prometo—Dijo Mackenzie

Mackenzie comenzó a morderse las uñas. Lily se acercó para hablar con Harry.

La puerta de la habitación fue destruida y Mackenzie y Lily se pusieron delante de Harry.

—¡Quítense de mi camino!—Dijo Voldemort—. O tendrán el mismo destino que James Potter.

—¿Que?—Dijo Lily, en shock

—¡Quítense de mi camino!

—¡Tendrás que matarme!—Dijo Lily

—Con gusto—Voldemort sonrió—. ¡Avada Kedavra!

Lily cayó al suelo.

—Mackenzie, se buena y quítate—Dijo Voldemort

—Es solo un Niño—Dijo Mackenzie

—¡Quítate!

—¡No!

—¡Avada Kedavra!

Mackenzie sintió la maldición impactar contra su pecho.

Su visión se volvió negra. Al menos, esperaba que su plan haya funcionado.

[ ... ]

Lucas hizo bola aquel pedazo de pergamino. Escuchó como la puerta de la casa se cerraba.

Tomó su varita, su daga y bajo de las escaleras, no sin fijarse si los tres menores aún seguían durmiendo.

Hizo lo que Mackenzie sabía que haría.

Al día siguiente Barty le dijo que Mackenzie había muerto.

Lucas no dudó en irse de Inglaterra, con Kepi y los tres menores.

Tenía claro que Jake, Paige y Pansy crecerían lejos de Inglaterra. Para ser más precisos en Alemania.

HOLAAAA

¿Que les pareció?

¡Aquí no eres una zorra, Mack!

¿Quie piensan sobre que Mack no le dijo nada sobre Jake a James?

El hecho de que, si Mack hubiera seguido con su embarazo, toda la historia hubiera sido diferente. Aquí la prueba.

Peter y Esther, pueden pasar años, y aún así, los odio.

Mack en este alternativo/*

Mack murió salvando a lo que más quería y lo que más odiaba...James y Lily...

Esperen la parte dos...

¿Que más les gustaría ver en los alternativos?

Psdt: recuerden que este libro es un alternativo de la saga, pero los capítulos no están relacionados...al menos no todos. Por eso, el anterior no tiene nada que ver con este.