Espero que les guste~

Nota: Que no se note que me aproveche que tenía inspiración para esto :3

Se suben en Rhonda y se alejan de la isla, Branch en el fondo junto a los gemelos, cantando esa melodía que sigue resonando en su mente y Poppy senada a su lado, su propia voz suave uniéndose a la suya de manera casi distraída. Paseándose por ahí como animal enjaulado esta John Dory, quien parece extrañamente ansioso por primera vez desde que el viaje empezó y en el volante esta Bruce, quien escucha con una ligera sonrisa la radio, un dúo resonando apenas dentro del vehículo.

-Ah, como me gusta esa canción- tararea con encanto, golpeando el volante al compas de la tonada, decidido a ignorar el extraño ambiente que los rodea.

-Esos son los locos que secuestraron a Floyd- JD se paro a su lado con el ceño fruncido y el segundo mayor hace una mueca ante eso, sin haberse dado cuenta de ese detalle.

-Rayos, ellos me gustaban- bufo con mala cara, apagando la radio después del anuncio de un concierto. Se estaban quedando sin tiempo y aun les faltaba no solo un hermano, sino encontrar algún equilibrio para que la armonía fuera perfecta esta vez.

-Voy a ser directo y decir que no creo que Floyd resista tanto- Branch comenta con cierto desinterés, sintiéndose cansado si debía ser sincero y con muchas ganas de dormir para que el tiempo pasara más rápido pero desconfía de esos dos y no se anima a cerrar los ojos.

-Vamos, Bitty B, no es necesario ser tan negativo- JD le dirigió una mirada entre molestia y decepción, algo que ni siquiera removió algo en el menor, quien enarco una ceja.

-¿Sabes donde esta Clay? ¿Tienes idea siquiera a donde vamos?- enarco una ceja, sintiendo una punzada de satisfacción cuando el otro apretó los labios con con frustración. -Exacto~- se apoyo del tono contra Darnell, medio hundiéndose en su pelaje. JD hace grandes gestos, como si quisiera gritar, pero mira la caja del troll gris y se abstiene, dándole la espalda para agarrar un almohadón, ahogando lo mejor posible un grito. Bruce se levanta de su lugar, haciendo una mueca que intenta ocultar lo mejor posible, sin saber si debía intentar hablar con el menor o intentar consolar al mayor. -Por suerte para ustedes, creo que tengo una idea- llamo la atención de todos los presentes. -¿Cómo supiste que estaba en Pueblo Berteno?- miro al mayor, quien dejo al almohadón a un lado para responder.

-Rhonda siguió tu aroma- enarco una ceja, confundido. -¿Por qué?-

-Porque eso es lo que necesitamos- Branch se levanto de un salto, repentinamente más animado, acercándose a una de las paredes y levantando su puño, golpeando la pequeña vidriera que había allí, el sonido del cristal rompiéndose sobresaltando a todos.

-¡Branch!- exclamaron con pánico, la reina y los gemelos siendo los primeros en acercarse.

-¿Estás bien?- la troll rosa toma la mano ajena entre las suyas, revisándolo con preocupación.

-Hermano, eso no se hace- Darnell negó con la cabeza, ignorando como los mayores se erizaban un poco ante eso.

-¡Vendas, necesitamos vendas!- Cooper se sacudió, luciendo casi al borde del llanto.

-Tranquilos, estoy bien- bufo con cierta diversión, zafándose suavemente del agarre para mostrar su nudillo intacto. -Piel dura, ¿recuerdan? Ventajas de mis años en el bosque- lo dice con una sonrisa orgullosa. -Debo decir, John Dory, eres un maldito y asqueroso acumulador...- Branch hace una mueca con cierto asco, ignorante de la mirada llena de ofensa que el mayor le dirige. -...pero supongo que por esta vez, eso es algo bueno- rebusca en su cabello, sacando un palo para enganchar una parte de la ropa interior que había estado resguardada tras la pequeña vitrina.

-¿En serio guardaste eso?- el de cabello violeta hace una mueca ante el fuerte olor que viene de aquella cosa.

-Son de colección- se encogió de hombros, como si eso fuera toda la respuesta necesaria.

-Eres un asco- Bruce decidió volver al asiento del conductor con las manos en alto, sin querer siquiera seguir esa conversación, mientras JD hace un ligero puchero. Todo la tenían en su contra al parecer.

El plan del aroma funciona. Rhonda los termina llevando a un lugar de aspecto algo aterrador, aun más ahora que ya oscureció y no hay una sola luz además de la que viene del vehículo que se mantiene quieto mientras ellos bajan y avanzan con pasos cauteloso. Es un poco escalofriante si debían ser sinceros.

-Alto- Branch les hace un gesto brusco, todos deteniéndose en seco, mirándolo con los ojos bien abiertos. No pueden verlo bien pero las orejas grises están extrañamente arriba, moviéndose apenas en señal de estar escuchando algo en aquel lugar, su cola agitándose mientras sus ojos recorren su entorno y se fijan en una gran cosa que se eleva por encima de ellos. -Hay alguien ahí- hace un gesto hacia el frente y es entonces que una explosión de humo sucede. Es ligera y se desvanece rápido pero es suficiente como para sobresaltar a alguno de los presentes.

-¡¿Quién anda ahí?!- las luces se encienden, mostrando el rostro de un payaso realmente feo, cuya boca se abre y se cierra mientras habla, con un eco raro. -¡¿Quién osa invadir estos terrenos sagrados?!-

-¡Escucha!- Branch es quien se arma de valor para adelantarse, ignorando el intento de los otros para que se quedara con ellos. No va a mentir, el payaso ese es horrible y algo escalofriante, pero enfrento cosas peores en el bosque. -¡No queremos problemas ni contigo, ni con quien este ahí!- porque puede escuchar pasos ligeros entre toda la conmoción. -¡Solo estamos buscando a alguien llamado Clay!- hay una pausa repentina y todos allí se mantienen tensos, esperando cualquier reacción de aquella cosa.

-¿Son...trolls?- la voz aun es gruesa pero ahora, tiene un tono tentativo, casi sonando esperanzado.

-Trolls del pop y del funk- enarco una ceja, haciendo señalando a los presentes, quien tragan y sonríen lo mejor que pueden. No hay una respuesta directa pero la gran boca con dientes chuecos se abre y algo redondo sale de allí, amarillo al parecer, rebotando hacia abajo y Branch retrocede un paso justo a tiempo para que aquello se vuelva de repente aun troll de piel rosa, el cabello alboroto rubio y su mirada seria mientras los analiza.

-No puede ser...- hay una lento y muy brillante sonrisa dibujándose en su rostro, luciendo extrañamente familiar, en especial para el sobreviviente. -...¡Hola!- su voz es chillona, con emoción apenas contenida, mientras se remueve apenas en su lugar. -¡Mi nombre es Viva y es tan fantasti-villoso ver a otros trolls por primera vez en años!- suelta una pequeña risa antes de moverse, veloz, abrazando con tanto entusiasmo a JD que lo alza y luego haciendo lo mismo con Bruce. -¡Oh cielos, trolls nuevos!- se detiene frente a los gemelos, su sonrisa tan grande que no parece caber del todo en su rostro. -¡Adoro como se ven, son adorables!- su cola se agita tan rápida que es un borrón rosa, abrazando a los gemelos antes de detenerse en seco frente a Branch, quien se tensa y parpadea ante ella. No puede evitar notar el parecido con Poppy. -¿También quieres un abrazo?- dudo un segundo, repentinamente nerviosa y el menor cree que puede ser debido a su falta de color. Debe ser una sorpresa para ella. -No sé si estaría bien darte un abrazo, por eso pregunto, y me encantaría hacerlo, porque seria como una bienvenida, pero no quiero hacerte sentir incomodo y extraño, así que no hay presión ni anda por el estilo- esta divagando y él se pregunta si puede divagar tan rápido como ella.

-Yo...- mira de reojo a sus amigos, quienes lucen tan perdidos como se siente. Vuelve a mirarla con expresión pensativa. Se ve y actúa como Poppy, con unas cuantas copas de azúcar extra encima que pueden ser la causa de su acelere pero aun así, es como ella. -...claro- le muestra una sonrisa torpe y abre los brazos. Viva chilla, dando pequeños saltos en su lugar, antes de obligarse a calmarse un poco y acercarse para rodearlo con sus brazos, en un abrazo amable a pesar de todo su entusiasmo y energía. La reacción es tan familiar que lo hace sonreír con un poco más de sinceridad y le devuelve el gesto. JD y Bruce los miran fijamente, ofendido y celosos, esa es la actitud cálida de Branch que parece estar dirigida a cualquiera menos a ellos. Eso duele.

-¡Bienvenido!- se separa, tomando sus manos entre las suyas para darle un ligero apretón y Branch solo le puede sonreír, bufando con cierta diversión cuando ella se abalanza sobre Poppy, quien luce confundida a pesar de su sonrisa. Están hablando, la reina luciendo por primera vez en su vida como si tuviera algunos problemas para seguirle la felicidad y el entusiasmo a Viva, quien parece no saber que hacer primero y habla muy rápido.

-Es agradable, me gusta- Cooper sonríe con encanto, viendo a su amiga interactuar con la extraña.

-Y rápida, me costo un poco seguirle el ritmo al hablar- Darnell agita una de sus orejas, sintiéndose un poco atontado.

-Intenta entender a Poppy cuando tiene una sobredosis de azúcar- el sobreviviente bufo con diversión, mientras los gemelos haciendo una mueca de espanto de solo imaginarlo. Él se adelanta cuando nota que su amiga ya esta entre abrumada y mareada, parándose a su lado, apoyando una mano en su espalda para mantenerla estable. -Oye, disculpa...- mira a Viva, quien se detiene para darle toda su atención, curiosa. -...¿nos puedes decir donde estamos?- eso es suficiente para darle un respiro a la reina.

-Oh, cierto, que mal educado de mi parte- se lleva las manos a la mejilla, escandalizada, y de un rápido movimiento, se aleja de ellos para pararse frente a la resbaladilla frente al payaso.

-¿Así se sienten los otros cuando me conocen?- Poppy parpadea, mirándolo con los ojos bien abiertos. Esta encantada con Viva, eso es bastante notable, pero también le costo un poco seguirle el ritmo.

-Sip- asintió con una sonrisa divertida, mientras ella parpadeaba nuevamente.

-¡Mis Putt Putt Trolls, es hora de salir!- Viva aplaude y hay pequeñas pelotas coloridas rodando por el piso, volviéndose trolls que la miran fijamente en espera de ordenes, en una clara señal de que ella es la líder de esa zona. -¡Prendan las luces para darle la bienvenida como se debe a nuestros invitados!- las luces se encienden y por primera vez desde que llegaron, pueden ver mejor su entorno.