"El nuevo acróbata y el payaso"

•Alerta de Jax Angst
•Proceso de duelo

Se oyen las pisadas resonando en dirección a un pequeño escondite que solo dos integrantes circenses conocían. Ya se estaba haciendo tarde para el entrenamiento y manejar a dos novatos no era para nada una tarea sencilla.

No obstante, los chillidos propios de los conejos ponían de nervios al instructor de ambos novatos; estaba preocupado por su otro alumno.

Koufmo: *toca la pared* ¿Jax, estás ahí dentro?

El conejo de pelaje lila asomó de un agujero en la pared pero sin su característica sonrisa burlona y altanera. Se miraba más temeroso y que sin duda había estado llorando al tener parte de su pelaje más oscuro y pegajoso.

Koufmo: se te hace tarde para entrenar, ya sabes que el jefecito no mantiene vagos

Jax: no quiero ir a entrenar...

Koufmo: *se sienta en el suelo* vamos niño, tienes que entrenar para volverte acróbata extremo

Jax: *niega y se vuelve a meter en la madriguera*

Koufmo: *suspira mientras saca algo de su sombrero* huele, tengo algo que seguro te va a gustar

El conejo olisqueo dándose cuenta que el payaso sostenía una zanahoria así que un poco más animado se asomó de su escondite nuevamente solo para arrebatarle la zanahoria y volverse a esconder para comer tranquilo y dejando al payaso en palmo de narices.

Koufmo: (va a ser difícil) mira, le daré a Ragatha el camerino que ambos se han estado peleando si no sales en este instante

Jax: no eres mi papá

Koufmo: pero sí tu instructor; sal de ahí ahora mismo señorito *se cruza de brazos*

El conejo salió con una mueca de fastidio puro, ya había oído esa frase más veces de las que podía contar a lo largo de su vida en la aburrida granja familiar. Se sentó al lado del payaso pero mirando a otra parte.

Koufmo: mucho mejor ¿No lo crees?

Jax: cállate...

Koufmo: *molesto*hey, más respeto que ya hago mucho con enseñarte a ser acróbata

Jax: como sea... ¿Qué es lo que ibas a decirme que es tan importante?

Koufmo: que te vayas a entrenar con Ragatha, pero veo que no te encuentras de buen humor ¿Pasó algo hace rato que no quieras decirme?

Jax: es que... *se abraza a las rodillas mientras jala sus orejas suavemente* quiero volver a la granja... No puedo hacer nada bien aquí...

Koufmo: ¿No estabas aburrido de la granja de tus padres? Mira, todos tenemos nuestros deslices niño; pero no es motivo para renunciar. Además, practicabas gimnasia desde conejito ¿No es verdad?

Jax: *asiente*

Koufmo: ¿Entonces cuál es el problema?

Jax: estoy cansado y harto de no poder hacer bien ninguna de las rutinas que me han puesto a practicar... Creí que estaba hecho para esto pero creo que me equivoqué... *sus ojos se cristalizan* Tenían razón sobre mí; no seré más que un inútil y tonto conejito granjero...

El payaso miraba al acróbata con una mirada llena de lástima, esperaba grandes cosas de parte del conejo. Después de todo había visto lo feliz que estaba cuando se metió a trabajar al circo.

¿Estaba exigiéndole demasiado? ¿O simplemente tenía miedo de volverse a caer desde lo alto?

El conejo se limpió las lágrimas y escondió la cabeza entre sus brazos con una clara impotencia, el pobre no se la estaba pasando para nada bien. Koufmo pensó y pensó y al final le puso una mano de consuelo en el hombro.

Koufmo: Jaxy... ¿Sabes qué decimos cuando dudamos de nosotros mismos?

Jax: *niega*

Koufmo: inténtalo y fracasa, pero no fracases en intentar. Quiero que adoptes esa frase, que la hagas tu filosofía de vida

Jax: ¿Pero cómo? Yo ya siento que dí lo mejor de mi mismo y sigo cayendo...

Koufmo: es que así es, este circo es como una universidad; vas a fracasar una y otra y otra y otra y otra y otra vez; tendrás un triunfo y seguirás fracasando después. Pero así es la vida, no es un campo de flores; es una prueba de resistencia y resiliencia *le acaricia el mentón* tú ya has resistido bastante, ahora debes recuperarte de esta ruptura porque el tiempo que se va no volverá nunca

Jax: ¿Me ayudarás? No puedo hacerlo solo... Por más que quisiera todavía no conozco todos los trucos...

Koufmo: claro que te ayudaré, te daré consejos, correcciones y todo lo que tú y Ragatha necesiten saber. No quiero que cometan los mismos errores que yo cometí cuando empecé mi trayectoria de payaso... Pero a veces, es necesario equivocarse para aprender y dar un paso atrás para tomar impulso

Jax: no te merezco... Enserio que eres luz...

Koufmo: que va, solo hago lo que un instructor hace. Ahora vamos niño, tienes mucho que aprender *le extiende la mano* toma mi mano, los del circo siempre nos ayudamos

Jax despertó, seguía teniendo esos mismos sueños...

Estaba sudando frío y tenía lágrimas en el rostro, así que se levantó de su cama dejando a un lado las cobijas. Aún no amanecía... Pero no tenía sueño...

Jax: esos recuerdos otra vez... Dios, como te extraño Koufmo... En serio que te extraño demasiado...

Era una pena que el payaso no vendría a animarlo o por lo menos a consolarlo. Jax acarició sus orejas como siempre lo hacía cuando estaba estresado; no obstante, al poco dejó la tristeza atrás...

Seguía teniendo un propósito que cumplir...

Jax: haré valer tu legado... Te lo prometo, viejo amigo...

Se regresó a la cama y empezó a mirar el techo para tranquilizarse... Poco a poco el sueño lo volvía a invadir hasta que finalmente se quedó dormido con una sonrisa melancólica en el rostro.

Después de todo, tenía que estar listo para dar las clases en la mañana.

Tengo que dejar de plasmar mis experiencias de la universidad en las historias...

En fin, se me cuidan