Haechan

Había pasado ya una semana desde que las pruebas de habilidad habían dado comienzo y según tenía entendido el único que faltaba por hacerla era el rey de Cicury, el cual había visto escasamente tres veces desde su llegada. No sabía si debía ir a buscarlo o no, pero de todas formas me arreglé para la ocasión esperando no verme demasiado ridículo con la ropa que mi tío me había traído de Alienor en uno de sus viajes. No es que no me gustara, sino que me resultaba algo extravagante, no estaba acostumbrado al terciopelo, particularmente porque prefería el tacto de la seda. Salí de mi habitación y me dirigí al comedor para poder desayunar junto a los demás, obviando a Renjun y a mis tíos que casi no compartían tiempo con nosotros ya que les gustaba pasearse por los pueblos vecinos seguidos de sus escoltas.

Jisung me recibió con una sonrisa algo tímida y me pidió que me acercara a él con gestos de sus manos. Extrañado por su actitud me senté a su lado en la mesa mientras los platos y platillos se iban sirviendo.

—Siento mucho mi comportamiento tan lejano estos días, Hyuckie, prometo que después te lo contaré todo ¿Sí?— Dijo él mirándome fijamente y esperando de manera ansiosa mi respuesta.

—Me alegra saber que hay un motivo. No pasa nada, Sungie, pero no me vuelvas a hacer algo así, es insoportable estar alejado de ti.— Susurré en respuesta antes de abrazarlo como hacía tiempo que deseaba hacer.

Él asintió y apretó aún más sus brazos alrededor de mí por lo que pude sonreír tranquilo de tenerlo de vuelta. Sabía que si no lo presionaba y le daba su espacio él acabaría por decirme lo que le ocurría. Solo esperaba que no fuera nada tan malo como para hacerme perder los estribos.

El desayuno siguió con normalidad. Compartimos conversación con algunos de ellos mientras comíamos y reíamos. Al final de este Jaemin llamó mi atención acercándose a mí y haciendo una pequeña reverencia.

—¿Pasa algo, Jaemin? No hace falta que seas tan informal conmigo.— Expuse con una pequeña sonrisa para tranquilizarlo.

—Está bien, Donghyuck, es solo que... ¿Podrías llevarle el desayuno a Renjun hoy?— Preguntó con su hermosa sonrisa, dejándome en claro que no podía negarme.

Asentí divertido por tener que servirle a un rey cuando yo estaba a punto de serlo y simplemente dejé que pusiera una bandeja de comida en mis manos. Él agradeció mi colaboración y se fue tras Jisung que lo esperaba en la puerta.

Me dirigí hacia la habitación del mayor con mucha lentitud, no por miedo a que algo se derramara, claramente, porque mi sentido del equilibrio era exacto, sino porque no sabía si era correcto interrumpir su intimidad. Él y yo no éramos muy diferentes, de hecho, ambos teníamos la carga de un reino sobre nuestros hombros, sin padres para asesorarnos ni consuelo para nuestros pensamientos. Como la figura representante de toda Medenia tenía que aparentar seguridad y alegría por mucho que en momentos me sintiera de todo menos así. Supongo que por ese motivo también entendía esa necesidad suya de estar solo, para poder ser él mismo sin el peso de cientos de miradas que están dispuestas a juzgarlo.

Sin darme cuenta llegué a la puerta del rey en cuestión y parpadeé varias veces por haberme ensimismado tanto en mis cavilaciones. Como pude me las arreglé para llamar a la puerta y esperar a que me abrieran. No pude evitar sonreír al ver como tan solo la mitad del rostro del chico se asomó por la puerta antes de volver a cerrarla de golpe. Escuché varias cosas moverse y otras ser arrastradas antes de que de manera agitada Renjun volviera a abrirme.

—Príncipe Donghyuck, no te esperaba tan temprano.— Sonrió nervioso antes de dejarme pasar.

—Lamento si he interrumpido algo pero Jaemin me pidió que te trajera el desayuno.

—Ese niño... Gracias de todas formas y lamento el portazo.— Se disculpó él cogiendo la bandeja para dejarla sobre su escritorio.

—No hay problema... Sabes que hoy es el último día para las pruebas de habilidad ¿No?

—Sí, créeme que no lo he olvidado. Desde que llegué aquí he estado trabajando con ello y esperaba enseñarte mi habilidad, por mucho que ya sepas cual es, esta tarde cuando tuviera todo acabado. Pero como ya estás aquí creo que no vale la pena retrasarlo.— Contestó él restregando sus manos llenas de pintura, detalle en el cual me había fijado nada más entrar, en su ropa también manchada.

Se acercó a la esquina de la habitación donde había un caballete de madera sosteniendo un lienzo que era cubierto por una gran sábana opaca. Con cuidado apartó la tela dejando ver en lo que había estado trabajando y me quedé de piedra al contemplarme a mí. Era un retrato mío decorado con violetas y rosas como mi misma vestimenta. Abrí la boca sorprendido sin saber que decir, aún incrédulo por la gran semejanza que había entre el lienzo y yo. Casi parecía un calco.

—Renjun... Es fantástico... ¿Cómo...? Pero...

Él rió divertido por mi reacción y simplemente se encogió de hombros.

—Me escapaba de mi cámara de vez en cuando para ir a verte y así refrescar mi memoria de cada detalle de tu rostro, además de tener la ayuda de que hay varios retratos de tu familia colgados por el palacio. No fue difícil pero tenía poco tiempo, así que este es el resultado.

Después de comer, teniendo ya a Renjun con nosotros y prometiendo que colgaría su obra en la sala de estar en cuanto él la considerara acabada, fui con Jisung a mi habitación.

Nos tumbamos como siempre y acaricié su cabello esperando a que se relajara lo suficiente como para contarme todo lo que él quisiera.

—¿Es bonito el cuadro de Renjun?

—Tiene mucho talento, me ha dejado realmente sorprendido. Todavía no me creo que haya hecho una cosa así en tan poco tiempo. Seguramente lo tenga listo hoy o mañana así que pronto lo verás.— Contesté cerrando mis ojos y respirando con tranquilidad.

—Me alegra saber eso... Hyuckie... Lo que tenía que decirte... Verás... Es que...

—No le des tantas vueltas, pequeño.

—Chenle me besó. Y yo no quería, de hecho, no me dio tiempo ni a hablar o pensar. Pero ya he hablado con él y lo he perdonado. Por eso he estado distante, no quería que te enfadaras con él por algo como eso y lo echaras de aquí. Supongo que fue un acto algo compulsivo por su parte, pero ya ha pasado todo.— Murmuró él.

Abrí los ojos y no dije nada. Él me contó toda la situación después de eso, cómo y cuándo ocurrió y que fue el motivo por el cual me lo encontré llorando. Estaba enfadado, claro que lo estaba, Chenle era mi mejor amigo, quien mejor me conocía y también sabía cuan protector era con mi hermano. Más tarde iría a hablar con él sobre su actitud, porque estaba claro que aunque no se lo fuera a decir a Jisung, tomaría medidas con mi consejero real.

Después de eso él cambió rápidamente el tema de conversación contándome lo que había sucedido estos pocos días en los que casi no habíamos hablado, sorprendiéndome con el hecho de que había besado a YangYang.

—¿De verdad?

—S-sí... ¿Por?

—Me sorprende que hayas sido tan valiente como para darte cuenta de que por fin te estabas enamorando de alguien y lo hayas aceptado. Puede que haya pasado muy poco tiempo desde que ellos llegaron, pero aún quedan tres semanas para que los conozcas a todos aún más y asegurarte de que es YangYang con quién realmente quieres estar.

—Creo que en realidad fue lo que hizo Chenle lo que me abrió los ojos, me hizo darme cuenta de que ya no quería besos de nadie que no fuera el príncipe YangYang.

—¿Ni siquiera míos?— Dije riendo antes de tirarme encima de él para hacerle cosquillas y llenarle los mofletes de besos por mucho que él intentara evitarlos.

Fue un día bastante calmado, estuvimos hablando por horas e incluso fuimos a dar un paseo con nuestros caballos ya que hacía tiempo que no montaba a Fullsun. Cuando volvimos dentro del palacio me encontré con la atenta mirada de Xiaojun que me ofreció ir a dar un paseo mientras que Jisung me dijo que tenía "clases de piano" con Mark.

A la hora de la cena, mi retrato estaba ya colgado en una de las paredes y todos se hallaban mirándola asombrados. Sinceramente no sé quién de los dos se sonrojó más, si Renjun por recibir tantos halagos hacia su obra o yo, puesto que también elogiaban mi belleza y elegancia.

El final no me ha quedado como quería pero bueno. Sorry not sorry, si eso ya lo cambiaré más tarde. (Nada muy importante)

Hasta aquí el capítulo de hoy, Killers. Espero que os haya gustado.

Hyuck con:

Xiaojun
Renjun
Jeno
Hendery

Jisung con:

Chenle
YangYang
Jaemin
Mark

Hasta pronto 💞