Con el audio que envío Samuel, no he logrado conciliar él sueño esperando para hablar con él, Guzman me había visto de forma rara y jamás me imaginé que llegaría a notarlo. No estaba lista para hablar de este tema con el y podría afectarlo más de lo que ya está.

Me llegaba a imaginar que Carla o Polo pudiera matar a mi hermana, ese audio no me parecía lo suficiente para demostrar que tuvieron que ver con su muerte.

Había llegado en pensar en Christian, el hecho de que ellos tres eran inseparables hace tiempo atrás, posiblemente podía saber algo lo que ocultan ellos dos pero no me podía adelantarme demás, con tal de saber la verdad.

Cuanto más pienso en ella, más pienso en mis padres y en Guzman por todo lo que están sufriendo, mamá dijo que podríamos superarlo pero ella no, yo tampoco podré superar hasta saber la verdad por completo.

X

59 horas desaparecidos

—Hablemos de Polo

—¿Polo? ¿Por qué? —preguntó Carla a la inspectora confundida y paralizada.

—Estamos investigando si algo de lo sucedido aquí desde el inicio del curso pudiera tener que ver con la desaparición de Samuel —explicó la inspectora y Carla estaba totalmente callada—. ¿Te contó polo lo que pasó en la piscina?

Carla miró hacia la inspectora con cierta confusión y sin saber que responder

X

Llegó el día y me levante más temprano antes de que sonara la alarma, me vestí lo más pronto posible para llegar a Las Encinas y hablar con Samuel y Rebe de este nuevo descubrimiento, le di la excusa a mis padres de que me había quedado con una compañera para repasar una materia de la clase. Llegue a las Encinas y me encontré a Samuel y a Rebe en las escaleras que dirigen al instituto.

—Samuel ¿Has descubierto otra cosa? —pregunte mientras nos dirigíamos al instituto.

—Fue lo único que encontré en su móvil, Polo sabe algo que Carla sabe por igual.

—¿Y has pensado que pudiera ser con respecto a lo de mi hermana?

—He llegado a pensar lo mismo, y lo peor es que ando consiguiendo la pasta suficiente para pagar la fianza de mi hermano.

—Podría ayudarte un poco...

—No Alice —me interrumpió Samuel—. Prefiero que vos no tengas problemas con tu hermano o tus padres. Viendo que me estás ayudando en la fianza del asesino de vuestra hija.

—¿Y de donde sacarás el dinero? —pregunte curiosa.

—Mi madre le está ofreciendo un trabajo a Samu, necesita gente de confianza y que no tiene pinta de camello —dijo Rebe con seriedad.

—¿No crees que eso es peligroso Samuel?

—¿Por que peligroso? —preguntó confundido—. Ni en mi puto trabajo no me pagan lo suficiente para alcanzar la pasta.

—¿Y se te ocurre otra forma de conseguir dinero? —el negó—. Samuel se qué haces lo posible por sacar a tu hermano de la cárcel y demostrarles que él no fue pero, tengo miedo que te pueda ocurrir algo malo como a Christian y me preocupa mucho pero, no cometas una locura. Solo piénsalo.

Dejé a Rebeka y a Samuel mientras me dirigía a nuestro aula, el trabajo en las drogas de la mamá de Rebeka pudiera ser riesgoso y podría morir o quedar sin una pierna como Christian. Tome mi asiento y por suerte él aula no estaba lleno de gente y solamente pensaba en mi hermana.

—Hola —dijo una voz cerca de mi lado, era Ander—. ¿Cómo estás?

—Normal, ya no te vi toda la noche en la Red Party.

—Me fui con Omar, el hermano de Nadia ¿Seguro que lo conocéis no?

—No pero, Nadia me ha platicado de él y ustedes tienen una relación —Ander solamente se rio un poco.

—Seguro Nadia te contó sobre lo qué pasó con su padre despues de la fiesta —yo solamente lo observé con cierta confusión y él comenzó a explicar el suceso—. Omar tuvo una discusión con su padre y terminó revelándose, tanto que lo corrió de la tienda y se está quedando en mi casa pero se encuentra bien.

—Nadia me había contado sobre su padre y con respecto a lo que pudiera reaccionar sobre la sexualidad de Omar, créeme que algún día comprenderá que hacen buena pareja —le di unos golpes pequeños en su hombro y sonrió poco.

—Gracias Alice —suspiro y frunció el entrecejo—. Alice, se que eres amiga de Samuel y déjame decirte que les creo, no creo que Nano haya matado a tu hermana.

—Gracias Ander, aún me cuesta creer que ya no esta aquí y siento que estoy reemplazando su lugar.

—Marina fue una buena amiga y se que la extrañas, como también nosotros la extrañamos, hablamos luego —dijo Ander al levantarse de su asiento luego de que Nadia había llegado a aula y se sentó a mi lado, saludándola con un beso en la mejilla.

—¿Como está tu padre?

—Baba está mejorando —dijo con voz neutral.

—Oye Nadia... me entere de lo qué pasó con tu hermano, Ander me lo dijo todo y lamento que tuvo que pasar eso.

—Baba es un buen padre pero, se que quiere a Omar a su manera y a mi por igual. La clase está por comenzar

La clase de Inglés estuvo normal como de costumbre con las clases al igual que en la clase de Química, Samuel y yo no nos hemos hablado desde que le dejé en claro que debería pensar bien si aceptar la propuesta de la madre de Rebeka o no.

Hubiera aceptado mi ayuda en secreto con tal de sacar a su hermano, Rebeka me comentó que al final que Samuel aceptó la propuesta de su madre, Polo había llegado a mi casa para ver a mi hermano, lo saludé pero de forma fría luego de los audios que me envió Samuel la otra noche.

X

—Polo siempre me pareció un chico estupendo —respondió Cayetana con una sonrisa

—¿No tienes nada más que contarme sobre el? —preguntó la inspectora con las manos entrelazadas y a su lado estaba su computadora y Cayetana solo tenía la boca abierta—. ¿Nada sobre lo qué pasó?

—¿Que paso?

—Después de la muerte de Marina y la llegada de su hermana gemela a este instituto instalaron cámaras de seguridad por todo el edificio —la inspectora hizo que la pantalla se convirtiera a modo tableta separándolo del teclado y le mostró a Cayetana imágenes en la piscina donde se apreciaba ella junto con Polo tendido en el suelo mientras Cayetana golpeaba su pecho gritando por ayuda—. ¿Seguro que no tienes nada que contarme?

X

Al día siguiente en las Encinas, tampoco le había dirigido la palabra a Samuel y solo podía hablar con Rebeka y me había invitó a una fiesta esta noche con Valerio junto con Nadia.

—¿Por cuanto tiempo no me dirigirás la palabra? —dijo Samuel antes de entrar al aula con carácter molesto luego de que pocas veces lo he estado ignorando.

—Samuel, me entere que aceptaste el trabajo de la mamá de Rebe y créeme que no estoy de acuerdo con esto, me hubieras pedido la pasta y se lo hubiera sacado a mis padres con tal de sacar a tu hermano.

—Créeme lo que estoy haciendo y es la única forma de sacar pasta más rápido para pagar la fianza —negue para ignorarlo y estaba a punto de dirigirme al aula hasta que Samuel me detuvo con algo que me sorprendió mas que nunca—. Nano quiere conocerte.

—¿Que estás diciendo Samuel? —me acerqué a él con gesto sería.

—Que Nano quiere conocerte, le hable sobre ti y sabe que eres la hermana gemela de Marina ¿Quieres ir conmigo esta tarde a la cárcel para visitarlo? —me costaba creer que Nano quiere conocerme y no se si sería buena idea, no tenía miedo para nada pero pienso que solamente para recordar a mi hermana y me alejaba de Samuel a pasos lentos pero antes de entrar al aula, tome una decisión.

—Aceptó ir.

X

—¿A qué viene esto? Porque Samuel, Alice y Polo no era ni amigos —respondió Cayetana negando con la cabeza tratando de sonreír—. Hay mucha otra gente que tendría mil motivos para quitárselo de en medio a Samuel y con respecto con Alice, notaba que le temían por el parecido a Marina.

—Creía que no conocías a Samuel y a Alice.

—Y no, pero... la gente decía que desde lo de Marina había cambiado, que se había vuelto más violento y que iba con malas compañías. Con Alice, dice que se convirtió en otra persona y que nadie conocía quien era la verdadera ella, hasta llegó a amenazar a pocas personas en este lugar y hasta a mi por igual.

—¿Amenzar? —preguntó la inspectora con el ceño fruncido—. ¿Porque Alice te amenazo?

X

—Como hermana de Guzman ¿Sabeis como era la relación de Polo con Samuel?

—Samuel nunca hablaba con ese tio —comentó Alice con seriedad.

—¿Y cómo es tu relación con Polo?

—A pesar de que es el mejor amigo de mi hermano Guzman —Alice apartó la vista hacia a la ventana de su lado derecho y después la miró de nuevo—. Nunca hemos tenido una conversación.

—Alice, he escuchado algunos comentarios que Samuel y tu formaron un equipo para investigar más sobre la muerte de Marina y que llegaron a la conclusión de que Polo está involucrado en todo esto.

—Todo lo que dice son tonterías, si Guzman pensara que toda esta mierda que dice es verdad, hubiéramos tenido una discusión.

—¿Y cómo es tu relación con Nano?

—¿Que tiene que ver Nano con la desaparición de vuestro hermano?

—Varios de tus compañeros, me contaron que Nano y tú sostuvieron una relación amorosa tan sólo pocas semanas desde que fue liberado ¿Tienes alguna idea si Nano tuvo que ver con la desaparición de Samuel?

—Admito que conocí a vuestro hermano, pero nunca hemos tenido un noviazgo como dice esos tíos y solo habíamos una charla, en la prision —respondió Alice con seguridad.

X

No se si había sido una buena idea en haber aceptado la invitación de Samuel de visitar a Nano en la prision y estoy a tiempo de arrepentirme de esta decisión, por suerte mis padres y Guzman no saben nada.

Había quedado con Rebe de vernos en su casa para irnos a la discoteca después de la visita de la cárcel y mi hermano tenía una cena con Lu, junto con Ander y Omar, en pocas palabras una cita doble.

Samuel y yo quedamos de vernos en su casa, opte por irme a caminar desde mi casa hasta la casa de Samuel, llegue y toque la puerta, me recibió su mamá y al verme se quedó en shock.

—¿Marina? ¿Como es posible...? —dijo la mamá de Samuel con voz baja asustada pero había sido interrumpí por la voz de Samuel que se dirigía hacia la entrada.

—Mamá, ella no es Marina —le explica—. Es Alice, es la hermana gemela de Marina y de Guzman.

—¿Porque nunca me habeis dicho que tenía una hermana gemela?

—Porque hasta hace poco tiempo me entere de su existencia —le comentó Samuel y le expliqué mi historia y mi estancia en Nueva York y su mamá se quedó más tranquila—. Alice y yo vamos a ver a Nano. Quiere conocerla.

—¿Nano dijo eso? —dijo su mamá observando fijamente a Samuel confundida y a mí por igual, yo en cambio me quede callada y cambio su expresión a seriedad y fría— Seguramente para desquitarte de mi hijo.

—No señora —negué—. No voy para desquitarme de él, iré porque Nano quiere conocerme y yo que él no haya sido capaz de asesinar a mi hermana Marina. Ojalá pudiera ayudarles de alguna forma para pagar su fianza.

Lo último que comenté fue una indirecta para Samuel que él mismo pudo comprender, aun seguía molesta que haya aceptado el trabajo de las drogas pero presiento que algo malo pasará.

Salimos de su casa de camino a la cárcel, por un momento me estaba sintiéndome nerviosa y Samuel y yo estábamos más callados que nunca hasta que él rompió el hielo.

—¿Estás seguro que quieres ir a ver a mi hermano? Todavía estás por arrepentirte.

—Estoy segura, no tengo miedo para nada —dije con seguridad al llegar a la entrada de la prision, realmente me siento preparada.

—¿Vamos? —asentí y entramos al lugar, llegamos hasta la sala de visitas a traves de una pared que solamente podríamos hablar en ella sin tener contacto.

El policía llamó a Nano para hablar con nosotros y tomamos asiento para esperarlo, pasó algunos pocos segundos y al final había llegado.

Me observo fijamente mientras se sentaba y parecía un chico demasiado atractivo con un carácter rudo pero sin tener miedo a cualquier cosa y en cambio, me sentía tímida para pronunciar una palabra, Samuel estaba callado y me observaba con cierta seriedad.

—Hola Alice —me saludo Nano con una sonrisa pequeña, por un momento había pensado que me llamaría por el nombre de Marina.

—Hola —dije con voz baja sin dejar de mirarlo a los ojos—. Me dijo Samuel que querías verme ¿Es cierto?

—Si pero no para que me recuerdes a Marina, en realidad quería verte porque quiero hablar contigo —me quede sorprendida.

—¿Y de qué quieres hablar conmigo? —pregunte con cierta curiosidad.

—Yo se que, te desquitarás de mi porque piensas que mate a tu hermana.

—No Nano —negué con serenidad—. No vine hasta aquí para desquitarte con vos por mi hermana Marina, si vine es porque tú deseabas hablar conmigo.

—Quiero que sepas que yo no mate a vuestra hermana y he hecho todo lo posible por demostrar mi inocencia —dijo con seriedad.

—Lo se Nano, yo te creo —dije con voz tranquila y él me miró sorprendido—. Yo no creo que tu hayas sido capaz de matar a mi hermana.

—¿Porque crees en mi?

—Por que se que amaste a mi hermana y estaban esperando un hijo, Marina había tomado la decisión de abortar pero ella se arrepintió porque quería tenerlo y que ustedes formarían una familia —sonreí y Nano sonrió por igual—. Samuel me lo contó todo.

—Pienso que tu, aparte de mi hermano son los únicos que creen en mi —mire como Samuel sonrió y reía por su comentario—. Siempre quise a tu hermana.

—Lo se, tu no mereces estar aquí Nano y el que tiene que estar en tu lugar es el verdadero asesino de mi hermana. Quiero ayudarte para sacarte de aquí pero no sé cómo.

—En lo único que puedes ayudarme es buscar evidencia de que no mate a tu hermana y que no soy el puto asesino, pienso qué Christian sabía algo antes del accidente.

—Lo se —concorde con el, pensativa—. Y pienso que su accidente no fue un accidente como todos piensan, pudo estar planeado —ambos me observaron con impresión acerca de mi teoría—. Con el objetivo de callarlo y que con ese accidente es la forma de silenciarlo.

—¿Nadie ha tenido contacto con Christian? —negué y el bufó molesto—. ¿Tus padres saben...?

—No lo saben —lo interrumpí—. Y es mejor que no lo sepan hasta que encontremos la evidencia, lo suficiente para demostrar que tú no estás involucrada en su muerte.

—Eres increíble Alice, si me libero de esta puta prision, estaré eternamente agradecida contigo y no sé cómo pagártelo —mis mejillas comenzaron a sonrojarse y Nano pudo notarlo viendo cómo se reía de mi rostro—. Te ves linda sonrojada, y no eres como la marquesita o tu hermano.

—No se que decir pero, te lo agradezco.

—Si todo vuelve a la normalidad ¿Aceptarías un vino, un agua o lo que sea?—me dijo Nano y lo acepte.

—Eres gentil Nano.

—Y vaya que me tomaste por sorpresa al enterarme de tu existencia —Nano sonrió.

X

Después de la cárcel me fui a casa de Rebeka para prepararnos para la fiesta en la discoteca, Nadia también fue invitada por Valerio, la mamá de Rebe me había recibido y me comentó que se encontraba en su gimnasio.

Desvíe mi mirada y baje hasta el sótano encontrándomela haciendo abdominales

—Chica ¿Como te fue con Nano? —me pregunta Rebe luego de que termino de calentar.

—Normal —dije cortante y después le conté lo sucedido.

—¿Normal? ¿No pasó nada fuera del otro mundo? —Rebe comenzó a reírse—. ¿Por que tus mejillas están coloradas? —vaya, no sabía que mis mejillas se encontraba aún coloradas después de la prision.

—Nano, parece ser un tipo... bueno y no un asesino. Por un momento pensé que me llamaría Marina.

—Alice ¿No me digas que te habéis enamorado de Nano? —no sabía que responder a su pregunta, había conocido a Nano en persona por primera vez y comenzó a hablar de manera gentil.

—Nunca me había enamorado de alguien, he estado fuera de Madrid por tanto tiempo y mis padres tiene miedo que me pase lo mismo como a Marina. Además, no creo que Nano esté enamorado de mi y creo que seré el recuerdo de Marina.

—Pelirroja, si ese tío no te ha llamado de otra forma, es porque sabes quien eres y creo qué tal vez quiere conocerte más —suspire y lleve una mano.

—Podía ser una buena idea pero, pienso que en cualquier momento me llamaría como mi hermana. A decir verdad, no me molesta que Nano estuvo enamorada de mi hermana, ella también se merecía enamorarse de alguien y tenía muchos objetivos pero, alguien lo arruinó.

—¿Y qué piensas hacer al respecto con Nano?

—No lo se —dije confundida—. Es que no puedo dejar de pensar que Nano no apartaba la vista de mi, tampoco no quiero pensar que él llegaría a enamorarse de mi solo por el parecido a mi hermana y no por mi.

—Alice, si ese tío se llega a enamorar de ti no será por tu gemela, será por ti ¿O tienes miedo por Guzman?

Aún seguía confundida, estoy teniendo sentimientos encontrados pero, mi corazón me dice otra cosa. Ahora no se que hacer ¿Rebeka tendrá razón?