Los ojos caídos de Anna apareciendo por la puerta me hicieron sonreír y agradecer. El destino sí quería que escuchase aquel audio.

Anna no dudó en traerme lo que le había pedido. Estaba seguro que al salir del hospital, le daría una buena propina a la mujer por su dulce y considerado trabajo.
Vino en menos de cinco minutos con algo que me causó nostalgia. No disponían de una grabadora en el hospital pero Anna, al ser una mujer muy, humilde, decidió prestarme un viejo CD Walkman (que creí que ya ni existía, pues eso lo usaba cuando era niño).

Apenas me dió el aporreado aparato, se sentó a mi lado sobre la cama. Sus ojos estaban inmersos en el CD de mis manos.

—¿Te lo dió ella? —preguntó inocentemente.

—Así es. Por eso pedí una grabadora.

—¿Realmente la amas? —ella no podía ser más directa.

Inmediatamente me puse colorado de vergüenza. No debía admitirlo pero sí, estaba loco por Bianca. (Bueno aunque creo que muchos ya lo suponían)

Anna se rió ante mi reacción y me sobó la canilla antes de volverse a incorporar.
—Ella era muy linda persona. Hacen una bonita pareja ustedes dos. Bueno te dejo solo, tengo trabajo que atender.

—Muchas gracias... Por todo —dije con sinceridad mientras colocaba el CD dentro del aparato.

—Sé que harías lo mismo por mí. No me lo agradezcas —exclamó y se retiró dando suaves pasos que sonaron en eco mientras se alejaba por el pasillo.

Estaba muy nervioso, me sudaban las manos. El walkman se cerró con un clic ligero y me coloqué los audífonos en cada oreja. Respiré hondo de nuevo con el dedo tembloroso sobre el botón de Play.

La nostalgia de la melodía me llegó al corazón. La voz rasposa del vocalista era más que conocida para mí.
Chad Kroeger es un gran cantante y Nickelback es de mis bandas favoritas.
Me sorprendí que Bianca escogiera aquella melodía, una de las que más había marcado en mi vida la banda.

Ya en el estribillo de la canción, volteé la cajita del CD y noté un pequeño papelito en la esquina izquierda del plástico. Saqué la parte de detrás donde estaba el papelito y lo desdoblé para leer su contenido.

Con letras casi diminutas y un pequeño sticker de pikachu, decía: “Travesura realizada (03/06/13)” marcando la fecha de aquel día.

El último día que iba a permanecer en el hospital.