Yoongi ahora mismo estaba pensando que la vida le debería de odiar o algo así, estaba corriendo alrededor de la pista de baloncesto, Eran casi las tres de la tarde y sentía que iba a morir de hambre y calor, y como si eso no fuera poco, esta noche no pudo dormir demasiado porque Holly se encontraba enfermo. El rubio oía las risas de su amigo Jungkook detrás de él por ver como el mayor estaba sufriendo por esto, Yoongi tenía ganas de darse la vuelta y matar a su mejor amigo

-Jungkook: Hyung, te ves demasiado gracioso corriendo y no pudiendo más 

Dijo adelantándole para seguir corriendo, el pálido gruñó y paró de correr con la respiración agitada. Él sólo quería irse a casa y comer tranquilo después de darse una ducha. Cansado y sin ganas de seguir corriendo se fue a los baños para lavar su rostro, Min necesitaba irse a casa si o si  

Suspiró, fue a salir del baño pero uno de los cubículos se abrió, el chico que estaba ahí era Jimin quien no tardó en mirar a Yoongi de arriba abajo y empezar a reír por supuesto tapando sus labios con su manita izquierda

-Yoongi: ¿Qué te hace tanta gracia enano? 

El mayor enarcó una de mis dejas esperando una respuesta de su parte 

-Jimin: Nunca había visto a hyungie con la cara como un tomate y todo sudado

El chico se apoyó en la pared y siguió riendo, sin embargó Yoongi gruño de nuevo acercándose hasta el pelinegro, tomó su mentón y entonces la risa de Jimin paró totalmente. Cada vez que  Yoongi estaba frente de Jimin tan cerca como ahora le daban ganas de quitarle aquellas gafas de pasta gruesa que siempre trae y apartar su flequillo a un lado para poder mirarlo. Jimin es muy bonito y la gente no lo sabe porque nadie se molesta en intentar verlo

Los  ojos del menor miraban expectantes al contrario y no pasó más de unos segundos hasta que se avergonzó y apoyó su frente en el hombro del rubio 

-Yoongi: ¿Ya no te ríes? 

-Jimin: Sabes muy bien que el acercamiento físico me hace sentir nervioso Yoongi hyung

Dijo en un hilo de voz

-Jimin: Hyung, deberías de darte una ducha

-Yoongi: Lo sé, es lo primero que haré al llegar a casa créeme 

-Jimin: ¿Qué comerás? 

-Yoongi: No sé, sabes muy bien que cocinar no es lo mío

Suspiró, el mayor creçia recordar que quedaba alguna lata de ramen en la despensa y también algo de sopa de fideos, aunque claro, eso lo suponía, no estaba del todo seguro 

-Jimin: Hyungie, puedo ir a hacer su comida, no es ningún problema para mi. Además así podría  ayudarte a estudiar ¿Te parece? 

Jimin sonrió, sus ojitos se escondían detrás de esas odiosas gafas y de nuevo el mayor sintió la necesidad de quitarlas de su bonito rostro, el rubio asintió echando el flequillo del pelinegro hacia detrás para así dejar su frente al descubierto y poder darle un beso ahí, cómo respuesta obtuvo una tierna risa de parte del contrario 

La campana sonó así que ambos fueron a recoger sus maletas para irse, Yoongi entró en casa directamente mientras que Jimin se quedó en la tienda para comprar los ingrediente de la comida que harían, así adelantarían tiempo ya que mientras que el menor compraba, el rubio podía ducharse 

El pálido estaba relajándose en la ducha, por eso comenzó a pensar. Cuando conoció a Jimin se sorprendió, no tenía idea de quien era y ahora que lo conoce tampoco es que tuviera demasiado claro quien era Park Jimin. Claro que lo conoce, pero Yoongi seguía sin saber nada de su vida y eso lo jodía por completo, no había otra palabras para explicarlo 

Últimamente no ha estado mal, ninguna de estas semanas atrás lo había visto triste, tampoco llorar. El mayor se preguntaba si estaba haciendo un buen trabajo, él deseaba que si. Namjoon no para de quejarse porque decía que Yoongi pasaba demasiado tiempo con Jimin. Era cierto que desde que la amistad de ambos había comenzado a ser tan fuerte, el mayor ya casi no salía de fiesta ni nada de eso, todo aquello quedó antes de conocer al chico de mejillas abultadas 

Ahora intentaba concentrarse en Holly, sus estudios y además en que Jimin esté bien, él no merecía ser infeliz por nada en el mundo, el rubio había comprobado que el menor tenía un corazón de oro que muy pocas personas sabían apreciar por desgracia. Además de que ambos habían creado una bonita amistad donde se cuidan incondicionalmente

Pero a pesar de todo aún no ha conseguido saber nada de sus problemas, Jimin odia contar que le sucede y eso Yoon lo tenía comprobado, el menor al ser así se hacía casi imposible el poder ayudarlo de otra forma que no fuera hacerlo reír 

Yoongi se puso ropa cómoda para estar en casa y no tardó en secar su cabello para no resfriarse. Entró en la cocina mientras bostezaba, allí frente a él se encontraba el pelinegro de espaldas debido a estar cocinando. El menor estaba tarareando una canción muy flojo, se veía bastante hundido en sus propios pensamientos así que Yoon se acercó despacio, rodeó la cintura del contrario con sus brazos y depositó un beso en la nuca de este 

-Yoongi: Jimin-ah,  para qué quiero una novia si te tengo a ti~ 

-Jimin: H-Hyung! No bromees con esas cosas...

El rubio rió suavemente dejando otro beso más en la piel del cuello del menor notando como esta se erizaba bajo el tacto de sus finos labios. Eso hizo que algunas preguntas vinieran a la cabeza del mayor  ¿Jimin alguna vez habrá tenido pareja? Bueno...¿Qué le gusta a Jimin? ¿Le gustan las chicas? ¿Los chicos? Nunca antes habían hablado de esas cosas 

-Yoongi: Jimin-ah ¿Qué te gusta? 

-Jimin: ¿Eh? No entiendo su pregunta hyung, me gustan muchas cosas

-Yoongi: Me refiero ¿Qué sexo te atrae? 

El cuerpo de Jimin se tensó al escuchar aquella pregunta, tomó aire y siguió cocinando 

-Jimin: ¿Por qué la pregunta hyung? 

-Yoongi: No sé, puede que una pareja te haría feliz ¿no crees? Podría estar bien, creo que te ayudaré a buscar una ¿Qué te parce? Pero no puede ser cualquiera, para ti Jimin tiene que ser la mejor persona del mundo 

-Jimin: No hace falta Yoongi hyung, estoy bien como estoy, no me hace falta ninguna pareja ni nada de eso

-Yoongi: Oh vamos Jimin~ Alguien que  te mime,  te bese con cariño, te quiera de verdad, esté contigo pase lo que pase, y que te acepte tal y como eres ¿no te apetece? 

-Jimin: Claro que suena bien hyung pero--

-Yoongi: Nada de peros ¡te ayudaré a buscar! 

El rubio estrechó al menor entre sus brazos y este suspiró, el mayor supuso que sería por los nervios. Para Jimin esto no debía de ser fácil porque es muy reservado y tímido -o por lo menos eso pensaba Yoongi- 

Poco después ya se encontraban recogiendo la mesa después de haber terminado de comer, hoy estudiarían en la cocina porque en el cuarto de Yoongi siempre se acababan distrayendo por una cosa o por otra, así que mejor en la cocina que no tenían ninguna distracción 

Ambos estaban callados haciendo sus deberes, llevaban así una media hora y el silencio estaba siendo demasiado extraño entre ellos. Por eso es que Yoongi alzó la vista de su hija pudiendo comprobar que Jimin estaba recostado sobre la mesa, dormido con su bolígrafo en la mano y con sus labios medio abiertos sobre el cuaderno que antes estaba escribiendo

El mayor rió negando con su cabeza, no sabía el por qué pero Jimin siempre parecía tener sueño, es como si nunca durmiera por las noches y por eso de una manera u otra siempre acaba dormido cuando ambos estaban juntos y relajados

Yoongi se levantó para tomarlo en brazos, estaba dispuesto a llevarlo a su cama para dejarlo dormir ahí, la sila no tenía pinta de ser demasiado cómoda para dormir ahí un rato. Dejó al menor con cuidado sobre sus sábanas grises, este murmuraba cosas las cuales el contrario no entendía muy bien así que tampoco el prestó demasiada atención 

El mayor le quitó aquellas gafas que tanto odiaba para ponerlas en la mesita de noche al igual que los zapatos. Por último lo tapó con las finas sábanas por si llegaba a tener frío, pero Jimin era alguien que cuando dormía solía moverse bastante

-Yoongi: Jimin-ah, estáte quieto...

Susurró el rubio y el menor soltó un suave quejido haciendo reír a Yoon, aunque la risa le duró prácticamente nada

El menor al removerse hizo que sus prendas se movieran, la manga de el suéter de  Jimin se fue hacia arriba dejando ver su brazo izquierdo, el rubio no podía creerlo ¿Aquello eran autolesiones? 

Yoongi se quedó mirándolas fijamente, de verdad quería que todo esto fuera un mal sueño o algo así pero no, en el muy fondo de él sabía que esto solo era la vida misma

Tomó aquella muñeca con cuidado de no despertarlo, si Jimin no quiso decírselo será porque no quiere que lo sepa ¿no?. El mayor pasó su dedo pulgar suavemente por todas aquellas postillas de cortes en horizontal, se veían recientes. Pero además se podían apreciar también muchas más cicatrices antiguas, no eran ni una ni dos, el rubio no se había molestado en contarlas pero juraría que podían haber más de cincuenta, todo el antebrazo del pelinegro estaba lleno de estas

Yoongi mordió su labio inferior nervioso ¿Qué se suponía que debía de haceR? Él nunca antes había estado en una situación como esta, y lo peor no es que el rubio se encontrara confuso, lo peor es que Jimin estaba haciendo todas esas cosas y él no se había dado cuenta. Definitivamente Yoongi se sentía demasiado culpable ¿Qué clase de amigo era al no darse cuenta de que su menor esta sufriendo en silencio? 

Suspiró rendido ante todo, él no sabía que era lo correcto que debería de hacer, así que no le dirá nada aún a Jimin, no sabía como se lo pude tomar sabiendo lo sensible que es. Yoongi decidió esperarse un poco, informarse y después decírselo. Mientras tanto estará cuidándolo de la mejor manera que sabía 

Porque Jimin es un pequeño ángel, y no merece que nadie corte sus alas; ni siquiera él mismo

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