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capitulo dieciocho

Semanas después, el fin de mes llegó para comenzar uno más y había llegado junto a él verano. Era oficialmente julio y sólo tendría que llegar el día veintiuno del mes para que este ciclo escolar terminará y sus vacaciones de verano fueran el más cálidos de los abrazos.

Harry tenía muchos planes para salir de vacaciones, su papá quería ir a las Bahamas para tomar siestas en la playa junto a una bebida en su mano y debe de admitir que se quedó sorprendido cuando le dijo que le comentará a Louis que si deseaba ir con ellos, que su aportación debía ser meterse con él a un balneario de tiburones y con eso le bastaba para obtener la mano de su hijo. Irían con Odette y Koda, nada raro en realidad, ya que siempre ellos cuatro salen de vacaciones en todo momento que tienen oportunidad, como esa vez hace varios veranos cuando fueron al país natal de ellos, Corea del Sur, solo para visitar a la familia de ellos y que fuera uno de los países favoritos que Harry ha visitado.

Su lista la encabeza Suiza cuando fueron a pasar la navidad en los alpes suizos; todo parecía como un cuento de hadas ante los magníficos recuerdos que creó ahí a sus siete años.

No han habido muchos cambios en su relación con su alfa, pasan sus tiempos libres en la universidad juntos y después de la escuela se iban su casa a estar en la sala haciendo tareas y la mayoría de las veces Louis se quedaba a almorzar junto a ellos. Otras veces, se van directamente al departamento del alfa para tener un tiempo más a solas, donde solo suceden besos subidos de nivel que no llegan a nada más que eso, no es qué el no se sienta listo para hacerlo con su alfa, es lo que más desea, solo que no era el momento.

Y agradece que su alfa siempre ha avanzado conforme a su concientización, que si desea tocarlo le pide permiso, si dice que si lo hace, si dice que solo quiere besarlo sus manos no bajan más allá de sus caderas y terminan viendo alguna película cuando llega la comida. O algunos días no pueden verse ante las razones de que él tenía que dar tutorías privadas a los hermanitos menores de Liam.

En la escuela, solo son besos cuando se cruzan a sus horas y terminan juntos en la cafetería al finalizar el día. Ha ido a algunos de sus entrenamientos en la noche para acompañarlo y después se van a cenar o simplemente a caminar tomados de la mano.

Habían recibido una invitación de Liam en la última noche del entrenamiento.

Una invitación que a él no le convencía del todo por ser una reunión libre con cientos de estudiantes que posiblemente lleguen a emborracharse hasta perder el conocimiento, algo a lo que él, sinceramente no estaba acostumbrado. Mientras que Louis decía que estaría ahí sin falta alguna; situación que puso muy tensa la situación entre ellos.

En primera porque Louis iría solo y no le preocupa que ande solo en una fiesta, puede tomar con sus amigos y hacer lo que desee; pero le atemoriza la idea que estando ebrio una omega pueda cruzarse ante sus ojos y todo irse a la mierda o que su alfa vuelva a sus andadas de hace meses.

Confía en su alfa.

Pero no confía en su versión ebria.

Y es lo que exactamente estaban discutiendo ahorita mismo en el departamento.

─ No entiendo porqué te pones en esos planes Harry, solo es una simple fiesta como todas las fiestas a las que he ido ─ dijo Louis caminando de un lado a otro por la sala mientras fumaba un cigarrillo, él estaba sentado en una de las sillas de la isla de la cocina con sus brazos cruzados fumando un cigarrillo que su alfa le había dado.

─ No te estoy diciendo que no vayas, te estoy diciendo que yo no iré, no me gusta convivir con esa clase de alfas.

─ Esa clase de alfas a las que tú te diriges son mis amigos ─ respondió Louis mirándolo fijamente con su ceño fruncido ─ solo quiero que mi omega me acompañe a una fiesta, ¿Eso es mucho pedir?

Él puso sus ojos en blanco, se puso de pie para caminar hasta donde estaba su alfa pero pasó por su lado hasta llegar a la mesita donde estaba el cenicero y apagó su cigarrillo. Se giró a ver a Louis quien lo miraba con su ceño fruncido.

─ Lo digo por eso mismo, no faltará el primero que vaya y te ponga una omega en las piernas, ¡y tú estando muy ebrio la aceptes! ─ Louis se pasó su mano por la nuca y Harry siguió hablando ─ iría contigo, pero no voy a convivir con ellos.

─ ¿Eso es lo que te preocupa?

Él no tuvo que responder, ya que su alfa sabía exactamente la respuesta correcta.

─ ¿Te preocupa que vaya a la fiesta y actúe como si no me importaras?, habrá demasiados ojos que me ubicarán y no faltarán las fotos que te lleguen, ¿crees que arriesgaría todo este tiempo junto a ti por otro omega? ─ Louis pareció ponerse furioso, se acercó hasta él con pasos firmes que le provocaron tragar saliva.

─ Es lo que siempre hacías cuando estabas ebrio en las fiestas.

─ Desde que estoy contigo no voy a fiestas por darte ese tiempo a ti.

─ ¿Me lo estás reprochando? ─ Louis miró al techo y lamió sus propios labios cuando terminó de decir eso.

─ ¡Tómalo como quieras!, ¡no es mi culpa que no confíes en mí a pesar de que me importas lo suficiente como para llegar a faltarte! ─ gruñó su alfa un tanto furioso.

Él subía y bajaba su pecho ante las respiraciones agitadas por esto que estaba pasando.

─ Haz lo que quieras, ve a esa fiesta, no me importa lo que hagas, solo si arruinas esto Louis, en tu puta vida vuelves a saber algo de mi.

Louis gruñó.

Louis no entendía los miedos de él; las personas cambian, sabe que lo hacen. Pero de solo pensar que el Louis de hace medio año regresé le estaba martillando la cabeza.

─ Si vas o no a la fiesta, no es mi puto problema, lo que me pone furioso es que pienses que voy a cagarla ─ dijo su alfa, dando la media vuelta para caminar hacia otro lado ─ ya no soy el mismo de antes que se revolvacaba con el primer omega que le bailaba y se lo iba a follar al primer cuarto libre ─ se giró a verlo, ─ Creo estar lo suficientemente cuerdo como para no acordarme que te tengo a ti.

Él soltó un suspiro y pasó las manos por sus ojos, malditos sentimientos de querer llorar en los momentos donde no debe hacerlo. Solo debía dejarlo ir y confiar lo suficiente como para saber que Louis no caería por nadie más. Quitó las manos de sus ojos y observó que su alfa estaba frente a él mirándolo fijamente.

─ ¡En la fiesta estará el estúpido de Briar, tu estando ebrio!… él solo va aprovechar ese momento… para volver a querer acercarte a ti. Va a querer coquetearte porque sabe que yo no estoy a tu lado.

─ ¡Entonces ven conmigo para que eso no pase si es lo que más te preocupa que vaya y me revuelve con Briar!, ¡eso no pasará, maldita sea!

─ ¡No voy a ir a cuidarte de que no metas tu nudo en él! ─ gritó Harry muy furioso por la manera en que Briar ahora era el motivo de sus peleas una vez más.

Louis tenso su mandíbula.

─ ¡Por lo menos él no desconfiaba tanto de mí! ─ gruñó su alfa contra su cara al borde del enojo. Harry arqueó sus cejas ante ese último comentario y trago saliva lentamente.

Louis sabe que llevó esta discusión directamente a un acantilado en el instante en que su omega se quedó callado sin decir nada más.

─ Entiendo, creo que… ya entendí tu punto Tomlinson  ─ dijo en un tono entrecortado y dando un paso hacia atrás para ir por su mochila.

─ No, Harry… no, no es lo que quise decir…

─ Disfruta de la fiesta ─ terminó de decir frente a su cara y retrocedió hasta caminar a pasos apresurados hasta la puerta del departamento de dónde salió azotando la puerta y dejando a Louis solo en la sala con un remordimiento de conciencia que su lobo empezó a sentir en el instante en que los aromas dulces ya no eran suaves, si no agrios.

𓍢ִ໋🌷͙֒

Louis se sentía un completo idiota.

Ya había durado mucho tiempo sin cagarla.

Habían pasado varias horas de su pelea con Harry y se sentía un imbécil por haber corrido detrás de él. Solo se quedó ahí en la sala recapitulando las palabras que brotaron sin permiso ante su cruel enfado. Se suponía que había llegado hasta aquí para poder embriagarse, sin embargo, tan solo había podido pasar por su garganta la mitad de una botella en todo el rato que las luces y la música llevaban sonando por toda la gran mansión.

El lugar de la fiesta era gigante. La casa de Liam era de tres pisos, cada una con su propia terraza, en el patio trasero estaba la enorme piscina donde muchos ya estaban nadando y otros cuantos estaban dentro de la casa bailando y bebiendo las botellas de alcohol que parecían ser infinitas. Pero para evitar accidentes, Liam sólo había dejado a su disposición de todos ellos el segundo paso, donde eran las habitaciones de huéspedes y donde Louis había visto que ya muchos se habían encerrado, ya que él tercer piso les dijo que estaba prohibido subir.

Ya que estaba la terraza más alta y no quería que alguien idiotamente ebrio saltará desde ahí.

Louis no se sentía del todo bien

Seguía pensando en las cosas que se dijeron gritando y las cosas que debieron solucionar. Pero sus amigos habían pasado por él y solo dijo "si" ante la pregunta que si estaba listo para beber hasta perder la cabeza. Solo tomo sus cosas y es donde llegó hasta aquí, eran las nueve de la noche y todo el ambiente estaba en su punto máximo, el ya se había lanzado a la piscina hace un buen rato, pero quería tomar algo así que se salió y fue hasta la barra para pedir la bebida más fuerte que tuvieran.

Llevaba un short corto, sin camisa y sin sandalias, en su mano una bebida y en la tira era donde sostenía su cigarrillo. Recargado contra la pared en tanto sus amigos lo rodeaban para platicar cosas absurdas.

─ ¡Hey Tommo! ─ le gritó uno de ellos ante el fuerte sonido de la música de fondo.

─ ¿Si? ─ respondió él, girándose para hacerle caso.

─ ¿Ese de ahí no es tu omega? ─ alzó la mano hacia la dirección que le mostró y Louis giró su cabeza hasta donde el dedo apuntó.

Mierda.

Si era Harry.

Su omega estaba en la fiesta, caminando entre un espacio considerado de gente e iba acompañado de un alfa del cual no conocía pero tenía su mano apoyada en sus hombros desnudos. Harry vestía una diminuta falda de cuero negra con olanes de tablones que mostraba sus gruesos muslos y una blusita roja estilo corsé con encaje negro que dejaba desnudo sus hombros y cuello, sus rizos estaban más esponjosos cayendo por los costados de su cabeza hasta la altura de su barbilla y en sus pies llevaba unas zapatillas converse blancas.

─ Mierda, sí lo es ─ respondió Louis, tomando todo el trago de su vaso y abriéndose pasó para ir hasta donde estaba Harry, a quien no perdía de vista por ningún solo momento mientras avanzaba más y más.

Iba avanzando hasta que las personas fueron cerrando su paso y lo perdió. Avanzó y cuando cruzó en medio de toda esa gente Harry no estaba y eso lo enfureció de solo pensar sobre quién podría ser ese alfa que iba acompañando a su omega.

Por el lado de Harry.

Harry había estado acostado en su cama desde que había peleado con su alfa, no tenía ni ganas de levantarse por un vaso de agua y pocas lágrimas se habían secado en sus mejillas. Hasta que recibió el mensaje de uno de sus mejores amigos Stiles Stilinski, con quien comparte muchos cursos desde que entró a la secundaria le llamó para preguntarle si iría a la fiesta de Liam Payne, a lo que Harry terminó contándole lo que había pasado con Louis. Su amigo, le dijo que era un idiota y que no iba a permitir que el anduviera bajoneado por un inútil alfa, así que le dijo que pasaría por él en treinta minutos y que más le valdría estar listo con una minifalda, bragas y escote puesto o lo bañaria con un balde de agua helada si él llegaba a su casa y no estuviera listo.

Su amigo era gay, a lo que no le preocupaba del todo si los veían juntos.

Regresando con Louis. El alfa seguía buscando una aguja en un pajar de gente, hasta que vio una cabeza de rizos caminar hacia afuera para llegar al patio, entonces siguió esa cabeza, jurando que se trataba de su omega. Cuando llegó, observó que si era Harry, tenía una bebida en su mano mientras platicaba con el alfa que estaba frente a él, ambos recargados en una mesa.

Se acercó queriendo saludarlo, pero el alfa que estaba junto a su omega se acercó a susurrarle algo al oído y Harry se enderezó para seguirle el paso a otro lugar, alejándose de él nuevamente. Sintió su corazón quebrarse tan solo un poco, o si no por completo; el omega con quien había hablado hace apenas unas horas y habían terminado en malos términos por una absurda pelea ahora estaba ahí navegando entre el mar de gente alejándose cada vez más que el trataba de estar cerca.

Regreso hacia dentro de la casa y la música que eran ruidos sin sentido habían cambiado a la canción de Hypnotize de The Notorious B.I.G y la gente empezó a gritar ruidosamente, él no sabía que estaba pasando o porque esa canción había empezado a sonar. Hasta que llegó con sus amigos y todos ellos estaban mirando al mismo punto de la habitación, un alfa palmeo repetitivamente su pecho y alzó su dedo para señalar lo que estaban viendo, cuando él se giró sus ojos se expandieron y su mandíbula cayó hacia el suelo al ver que Harry estaba arriba de una mesa bailando de la manera más sensualidad posible.

─ Oh mierda ─ gruñó Louis, acercándose hasta donde estaba su omega.

Harry bailaba como si su vida dependiera de ello y movía sus caderas de un lado a otro, con sus manos sosteniendo sus propias caderas para guiar el ritmo y bajar lentamente hasta quedar de rodillas y alzar su cuerpo al ritmo de la canción. Después se puso de pie y subió sus manos hacia el cielo para despeinarse, bajo sus manos a su blusita corsé y extendió sus manos en su pecho para subir a su cuello y abrir sus ojos para sonreírle a Louis quien era uno de los tantos alfas que estaban en primera fila para ver más allá debajo de los movimientos que ese diminuta falda dejaba apreciar.

Harry parecía disfrutar lo que hacía.

Todos los alfas estaban aullando al mirar a su omega bailar encima de la mesa tan sensual que la coqueta sonrisa de sus labios era el plus perfecto para que provocará babear a todos.

─ Gracias dios, por crear semejante dulzura ─ fue lo que escucho Louis de un alfa que estaba a su lado observando a Harry bailar.

Desvió su mirada unos segundos hacia el alfa que había visto con su omega durante un largo rato, estaba gritando para apoyarlo y sonreía orgulloso de lo que hacía, movía sus manos al aire como festejo y después hacía una imitación con las manos de tirarle billetes.

Qué maldito.

Ya lo reconocía.

Era Stiles Stilinski, novio del alfa Dereck, su compañero de equipo y uno de los amigos de su omega. Por supuesto que iba a ponerlo arriba de la mesa a bailar, si él nunca le cayó bien Stiles y sabe que moriría de celos en el momento en que Harry se pusiera a bailar arriba de la mesa acaparando la vista de muchos alfas.

Así que se acercó y jaló a Harry de las piernas para subirlo a su hombro. Con su dorso cayendo sobre sus espaldas y sus piernas siendo abrazadas por sus brazos.

─ ¡Louis William Tomlinson! ─ gruñó Harry dando golpecitos en su espalda y moviendo sus piernas mientras que su alfa lo cargaba fuera de la atención del público. Movía sus pies pataleando como una causal rabieta por haberlo bajado de la mesa. ─ ¡Bájame alfa estupidooo!

Pero, había pasado lo que Stiles le había dicho que sucedería.

─ ¡Te llevas el entretenimiento! ─ gritó uno de los alfas.

Louis lo giró a verlo con su ceño fruncido.

─ ¡Louis, bajame! ─ chilló Harry, no podía bajarse porque su alfa lo sostenía con la fuerza suficiente para mantenerlo quieto. Tenía sus brazos sosteniéndose de su espalda para no caerse, hasta que vio que Louis empezó a subir los escalones para el segundo piso de la habitación y cuando estuvieron en el oscuro pasillo lo bajo ─ ¡Uhh, tonto!

Los pies de Harry tocaron el suelo y con sus manos arregló su faldita junto a su blusita, mirando con su ceño fruncido a Louis.

─ ¿Qué crees que estabas haciendo allá?

─ Bailar, duh.

─ Parecías querer provocarme para que hirieron en celos por todos esos alfas que te miraban con ganas de subir a devorarte entero, sobre todo por la manera en que vienes vestido.

─ ¿Te gustó mi faldita y mi corsé?, son de Vuitton ─ sonrió socarronamente ─ me visto como quiero, no me importa si no te gusta.

─ Jamás te habías vestido así de sexy, omega.

Harry no debía sonrojarse de las mejillas.

─ ¿Por qué viniste? ─ preguntó Louis.

─ Para buscar a un alfa que quiera darme el más gordo de los nudos, ¿crees que luzco lo suficientemente sexy como para que me busquen?

Louis gruñó.

─ El único nudo que vas a recibir es el mio, maldito omega provocador ─ gruñó y empujo el cuerpo de Harry contra la pared, ajustando sus manos sobre sus caderas para alzarlo tan solo un poco y que su omega diera un sobresalto en el instante en que los labios del alfa se juntaron hacia los suyos en un desordenado beso.

Louis empezó a besarlo sin orden y rápidamente, donde sus lenguas fueron lo primero que invadieron al otro mientras que las manos del alfa iban bajando hasta en medio de las piernas de su omega para meter su mano y que con sus dedos diera un leve toque en su humedad. Harry abrió la boca mirándolo a sus ojos cuando sintió sus dedos empezar a mojarse, se siguieron besando, con Louis devorando cada fragmento y restregando sus cuerpos en la oscuridad del pasillo, siendo hipnotizados por las respiraciones entrecortadas de los jadeos bajos.

Louis no se estaba midiendo en ser prudente, estaba tomándolo ahí mismo donde personas más al fondo estaban en la misma situación. Se separaron de sus labios y bajó hasta su cuello del omega, Harry ladeó su vista hacia sus costados y las mejillas se le sonrojaron cuando observó a una pareja teniendo sexo al final, después había una pareja donde alguien estaba de rodillas chupandosela a un chico, los cuartos ya estaban cerrados porque no dudaba en que otros estaban teniendo sexo.

Cuando sintió sus piernas temblar por la manera en que Louis estaba restregando sus dedos y sus labios besando su cuello, llevó sus manos al rostro del alfa para que lo mirará.

─ Vamos a otro lugar ─ rogó el omega.

Louis asintió.

─ ¿A dónde quieres ir, nubecita?

─ Vamos al tercer piso, no voy a resistir ni un minuto más si no empiezo a montar tu nudo justo ahora.

cuando escribí esto, las red flags no existian así q Shut up 🫦

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