[06]
— Estoy en casa. — Susurró el alfa con voz ronca mientras sentía las paredes internas de su omega apretarle en un cálido recibimiento mientras sentía el lubricante natural de éste salir libremente de él. Jimin gimió feliz mientras los besos del pálido descendían desde su cuello hasta su pecho dejando pequeñas marcas por su travieso camino mientras penetraba de forma lenta y tortuosa al menor de ambos.
— M-Más rápido. — Demandó el rubio mientras trataba por todos los cielos de mantenerse en su lugar y no obligar al alfa a que lo empotrara en alguna superficie plana con violencia. — H-Hyung. — Pidió en un último susurró al sentir como este salía de su interior de forma repentina.
— Como pida mi cachorro. — Susurró el alfa viéndole fijamente con la misma intensidad de siempre. Jimin sonrió mientras llevaba sus manos temblorosas al rostro del pálido y lo acercaba hasta él, justo en el preciso momento en que éste decidió entrar de forma abrupta en su interior. El gemido de placer murió entre ambas bocas mientras una acostumbrada danza de poder y sumisión se desarrollaba en aquella habitación.
...
— Siento que esta niña me odia. — Mencionó JungKook asqueado mientras veía la mancha de vomito en su camiseta. Taehyung negó divertido mientras veía a YoonJi dormir en la cama tranquilamente.
— Yo te dije que la dejaras tranquila que acaba de comer y tú decidiste lanzarla por los cielos. — Regañó el omega mientras veía el ceño fruncido de su pareja.
— Tú dijiste que era malvada y ahora la estás defendiendo. — Gruñó este mientras poco a poco y con sumo cuidado se retiraba la camisa.
— Igual tienes que bañarte así que deja de quitarte eso con cuidado. — Señaló el omega mientras se acercaba hasta el alfa y lo ayudaba a desprenderse de la sucia prenda. — Además, cuando duerme parece un angelito, nada comparado con Jimin. — Susurró divertido. JungKook negó.
— Por lo menos todavía no hace alguna gracia. — Exclamó feliz el alfa mientras se acercaba con cuidado hasta el pequeño cuerpo durmiente y colocaba las almohadas al lado de este. — Ven, vamos a bañarnos.
— A mí no me vomitó. — Se excusó Taehyung mientras se olía disimuladamente. JungKook negó divertido.
— Pero quiero que me acompañes. — Susurró moviendo las cejas animadamente. Taehyung enrojeció completamente abochornado por la cantidad de cosas que estaba transmitiéndole su lazo mientras avanzaba hasta el menor de ambos.
— Si se despierta YoonJi, tú la vas a dormir. — Amenazó. JungKook asintió.
— Mírala como duerme. — Señaló a la bebé quien tenía un gesto de cansada. — Ni se dará cuenta.
...
— Jimin-ah. — Jadeó el alfa al sentir el momento exacto en el cual su nudo hacia presencia dentro del menor. El rubio dejó caer su cabeza a un lado mientras otorgaba su cuello en un sumiso acto de amor al alfa que parecía morir por marcar aquel cuello una vez más. YoonGi encajó los dientes y el gemido de placer que el rubio soltó fue suficiente para que este se corriera en medio de ambos mientras sentía el lazo reforzarse con más fuerza.
YoonGi se dejó caer entre la curvatura del omega mientras este con sus manos delineaba la pálida espalda del mayor. No importaba cuantas veces estuviera con el alfa, Jimin estaba seguro que cada día y cada toque era diferente.
Había un algo en ellos, algo que lo hacía sentirse diferente al resto y que lo mantenía en la punta del cielo, siendo solamente ellos quienes conocían ese secreto.
— Estoy en casa. — Susurró las mismas palabras del pálido mientras sentía la respiración tranquila de su pareja. — Siempre estoy en casa cuando estoy contigo, te amo hyung.
— Yo también te amo. — Correspondió el pálido mientras besaba la renovada marca en el cuello de su omega y sentía su lazo vibrar por la felicidad que los embargaba a ambos mientras el interior del omega era llenado con la semilla del pálido.
— ¿Cómo estará YoonJi? ¿Crees que es muy tarde para llamar? — Preguntó el omega de forma repentina. YoonGi lo meditó por unos momentos.
— Son las siete de la mañana Jimin-ah, creo que quisiste decir muy temprano. — El omega parpadeó confuso mientras veía por el rabillo del ojo en dirección hacia la ventana. La escasa luz del sol entraba efímeramente a la habitación.
— Imposible, no he dormido casi nad... — Jimin negó mientras sentía la mirada burlona de su pareja sobre él. — Entiendo, ya, ¿vamos por el desayuno? — Preguntó mientras sentía a su lobo quieto dentro de su interior pero la mirada profunda que le dedicó su alfa más el movimiento certero que este hizo dentro de él le hizo callar.
— Yo creo que no. — Susurró divertido mientras besaba la boca de su omega y empezaba otro lento vaivén.
Lo que restaba de sus celos tenían que aprovecharlos al máximo.
...
— Día dos desde que traje el demonio a mi casa, ya no sé quién soy. — Exageró el alfa mientras se grababa con su teléfono. Taehyung a su lado negó divertido mientras veía la cara divertida de su pequeña sobrina. Si YoonJi no fuera tan chiquita, juraría que se estaba burlando de JungKook y sus dramas.
— Ya deja de decirle demonio, es una bebé.
— ¡Es malvada, siempre que quiero acercarme a ti me muerde!
— Quizás le gusta mi olor y el tuyo no. — Mencionó encogiéndose de hombros mientras veía a la bebé balbucear cosas sin sentido mientras movía sus manos.
— Seguro está diciendo algo sobre matarme. — Exageró el menor. Tae negó mientras veía el rostro de la bebé.
— ¿Quién es una ternurita? — Preguntó ignorando los berrinches de su alfa.
Yo, obvio. Balbuceó en su lenguaje infantil mientras veía al alfa hacer pucheros. El conejito no. Rió divertida mientras le hacía señas al alfa. Taehyung llenó de besos la carita de la menor mientras esta reía ante la molestia de su tío conejito.
YoonJi había ganado.
...
Jimin abrazó con cariño el cuerpo de su pequeña angelita mientras esta parecía olerlo con desesperación. Taehyung le observaba entre divertido y picardioso mientras que JungKook lo veía como su salvador.
— ¿No les dio problemas? — Preguntó el rubio.
— No.
— Sí. — Las respuestas de Taehyung y JungKook se encontraron. Jimin frunció el ceño mientras veía a la pareja.
— No le hagas caso a JungKook, dice que YoonJi le odia porque no lo dejaba dormir. — Mencionó restándole importancia al tema. El alfa negó mientras veía a Jimin.
— Tengo ojeras y marcas de mordidas por todos lados, o es malvada o no soporta a los alfas. — Concluyó el menor. Jimin negó divertido mientras veía a su bebé. YoonJi reía animadamente.
— Quizás solo soporta a un alfa. — Jimin mencionó.
— O tal vez será una alfa y por eso no te soportaba. — Agregó Taehyung mientras veía a YoonJi quien parecía estar maravillada con su padre omega. — ¿Dónde está YoonGi-hyung? — Inquirió al no ver al pálido.
— Aquí. — Y con ello la pequeña bebé alzó la cabecita mientras veía a su mayor adoración acercarse hasta ella. Jimin negó para sí mientras le entregaba el saltarín cuerpo a su pareja. YoonGi sonrió enternecido mientras escuchaba los balbuceos de su hija.
JungKook por su parte, observó con el ceño fruncido a aquella niña. Estaba seguro que se estaba burlando de él.
— Espero te portaras bien. — Susurró viendo fijamente a su pequeña niña. YoonJi rió y aquello fue suficiente para el alfa mientras agradecía a JungKook y Taehyung y se marchaba de regreso a su hogar con su pareja e hija.
Quería dormir abrazado con sus dos amores.
...
¡Hola!
Muchas gracias por leer, votar y comentar. ¡Me alegran mucho, mucho!
No extiendo el lemon en este fanfic porque realmente me gusta su ritmo fluff y divertido, así que no lo creo necesario, sin embargo... Les otorgo pequeños extractos para que no digan que soy malvada (? Jajaja.
YoonJi es malvada con todo aquel que no sean sus padres aunque con el tío Taehyung tiene debilidad jaja.
Disculpen cualquier error y muchas gracias por leer.
No olviden seguirme. También mi cuenta de respaldo:
¡Hasta la próxima!
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro