Jin

Entre inestabilidad emocional, largas conversaciones y una noche sin dormir por fin habíamos encontrado una solución a nuestra manera. ¿Funcionaría? Aún no lo sabemos, ¿empeoraríamos las cosas? Quizá, ¿NamJoon sabía hacer el amor? Pero por supuesto.

—Quedan dos episodios solamente Jin.

—Una temporada es como una vida entera. —Me levanté de la cama enredado en la sabana con la intención de tomar una buena ducha cuando NamJoon me jalo el brazo. —Yaaa, tengo que bañarme.

—Al menos dame un último beso antes de que me vaya.

—Suena como si te fueras a ir por mucho tiempo. —Trate de verme enojado con mi expresión, él sólo sonrió.

—Hubiera querido estar más tiempo contigo antes de que terminara. —NamJoon se tomo unos minutos para acariciar mi rostro con sus dedos, paseándose por cada rincón y delineando mis labios. Mis ojos lo seguían fijamente y después de unos besos y caricias subidos de tono decidimos que había sido suficiente.

Es momento de parar aquí.

Yoon Gi

—¡Que día tan de mierdaaaaaaaaa!—Grité al tiempo que estiraba mi cuerpo sobre la silla del escritorio, me quedé inmóvil unos cuantos minutos hasta que reaccioné recordando que debía comer algo y asearme, también debería asear el estudio pues lucia más como un cuarto de locos.

     Había dejado el lugar lo más ordenado que pude, tomé mi chaqueta dispuesto a salir de ahí y obtener algo de comida y agua. Estaba absorto asegurándome de que no olvidaba nada y justo cuando abrí la puerta del estudio me encontré con Jungkook quién se sorprendió a verme, al parecer estaba a punto de tocar el timbre. Ambos nos quedamos paralizados.

—Eh... Hyung! —Dijo tratando de romper el hielo. —¿Tienes algo de tiempo?

—Estoy a punto de irme, ¿Qué quieres?

—¿Puedes hablar conmigo? —Bajo la mirada esperando una respuesta, estaba a nada de comer algo o perder el tiempo nuevamente con Jungkook.

Abrí completamente la puerta del estudio y me hice a un lado indicándole que pasara, no había nadie más en la empresa que pudiera interferir, o que pudiera entrar si quiera.

Probablemente sería la plática —o guerra— más larga y profunda que tendríamos desde hace mucho tiempo. En cuanto cerré la puerta Jungkook se me acercó demasiado, quedamos frente a frente con un espacio mínimo entre nuestro rostro.

—¿Aún no te das cuenta? —Me miró con tristeza.

—¿De qué ya perdí a Jimin?

Y su expresión pasó a ser una completamente diferente.

—Tal parece que sí eres idiota, Hyung.

Y perdí el control.

—Escúchame bien mocoso. ¿Qué te crees? —Le tomé con fuerza de la sudadera y mientras retrocedíamos con rapidez, él ni se inmutó. —Joder, ¿quién te crees que eres para hablarme así y en mi propio estudio? ¿Qué más quieres de mí?

Le miré a los ojos y me sentí débil como no me había sentido ya y lo peor de todo, ¿por qué? ¿Por qué me dolía tanto haber perdido a Park? El mundo estaba lleno de hombres de cualquier manera.

—No tienes idea de lo jodido que es perder a quién quieres, no tienes idea de cómo me siento cada vez que te paseas feliz con él y...

—¿Qué no sé cómo te sientes? —Se soltó de mi agarre y comenzó a caminar directo hacia mí. —Oh Min Yoon Gi claro que se cómo te sientes. Sé perfectamente cómo es querer a alguien y saber que esa persona no te ve de la misma manera, ¿por qué todo nuestro tema de conversación se centra en Jimin?

—Ya, no te me acerques.

—Sé perfectamente lo que sientes, ¡Por que me he pasado todos estos años haciéndome el corazón añicos por Min Yoon Gi cuándo él sólo tiene ojos para Jimin!

¿Alguna vez has sentido cuando te empieza a faltar el aire y todo comienza a dar vueltas a tu alrededor? Cómo cuando te desconectas por completo de lo que está pasando, igual a un cortocircuito en el sistema. Era como si me hubieran tirado un balde de agua fría, arrastrado sobre un camino empedrado, sentí de todo, sin piedad.

—Y sabes qué, Hyung? Si tengo que seguir rompiendo mi corazón para verte feliz... entonces supongo que no me molestaría.

Taehyung

Y ahí estaba Jung Hoseok de pie con un pequeño ramo de rosas, fue lo primero que vi una vez entré en la habitación. No dijimos nada pues sólo cruzamos miradas, entre cerrando la puerta detrás de mí y me quedé parado frente a él.

—No quiero que estemos mal Taehyung —Suspiró hondo y extendió su mano con el ramo de rosas hasta mí. —, estaba estresado y un poco molesto con Jungkook porque bueno ya sabes que tengo una estrecha relación con Suga y todo se me vino encima. De cualquier manera no tenia porque enojarme contigo... ¿podrías perdonarme?

Y comenzó a llorar como si le hubiera pisado la cola a un cachorro.

—¿Crees que por qué me compraste rosas y admites que tenía razón te voy a perdonar? —Me acerqué a su rostro levantando una ceja tratando de verme amenazante.

—Sí...—Se sintió atrapado.

—¿Sí ? —Solté una carcajada, me sentía conmovido ante la ternura que emanaba el joven hombre. Me era imposible no amarlo, no caer por él y digo, ¿de verdad existe alguien que se resista su ser?

—¿Por qué te ríes? —sorbió su nariz—De verdad lo siento.

     Trate de contener la risa y le di un beso rápido, tomé las rosas y subí las escaleras hasta mi habitación saltando como chica enamorada. La madrugada comenzaba a aparecer y sólo éramos tres personas en el departamento así que optamos por poner una película en la sala y esperarlo, bueno, quizá Suga no llegaría otra vez.
     Pronto nos quedamos dormidos en el sofa, siendo honesto odiábamos las películas exageradamente largas, entreabrí los ojos cuando escuché pasos acercarse visualizando a Jungkook observar la escena y arrodillarse frente al profundamente dormido Jimin, lo acobijo bien con la manta mientras le miraba con tristeza —seguí haciéndome el dormido a unos cuantos centímetros—, acarició su cabello, su rostro e hizo algo que nunca creí ver.

     Lo besó, ¡joder Park está dormido y su amor de años por fin lo besa! Un beso no correspondido, Jungkook se levantó y soltó un pesado suspiro para luego irse a quién sabe dónde.

     A la mañana siguiente había mucho ruido a mi alrededor, Jimin y Hobi ya no estaban en el sofá y en la puerta del departamento había al rededor de seis enormes maletas, me levanté tan rápido como pude y guiado por el ruido llegue hasta las habitaciones de arriba observando a seis chicos dentro de la habitación de NamJoon.

—¿Qué está pasando? —Pregunté asustado por la seriedad en los rostros de Jin y NamJoon.

—Despertaste, bueno, ya podemos darles la noticia. —Habló Jin en un tono neutro.—NamJoon se va.

     Ante la confusión y muchas preguntas por fin se despegaron los labios de NamJoon mientras se abría paso entre nosotros.

—Terminamos.

t,w
No me maten, aún.
Cómo sea, de verdad perdonen por no actualizar, medicina me come hasta las venas.
¿Que creen que va a pasar? ¡Solo 3 capítulos más y esto acaba!
chimes|comentarios|quejas|problemas existenciales 👇🏻🤠♥️