Para no hacer largo y tedioso esto, les diré que toda la semana fue exactamente igual a como era antes de toparme con esos chicos. Disfrutar en la cafetería con mis amigos, pasar por Gi al club.

Pero bueno, dicen por ahí que todo lo bueno en algún momento se termina y hoy para mí llegara ese día.

Este día en especial, Gi y yo nos dejamos ver andar juntos en horario escolar, pero no como pareja, que para nadie era secreta nuestra relación, sino más bien como capitán del equipo de basquetbol y presidente estudiantil yendo a colocar la lista de los aceptados en dicho equipo.

El rumor, al parecer, se expandió rápidamente, ya que gran cantidad de los postulados al equipo estaban frente al corcho de comunicados esperando la tan esperada lista.

Creo que no es necesario mencionar que cierto sujeto había sido aceptado en el equipo, y parece ser que él y su grupo de amigos estaban muy seguros de ese hecho, pues, los eternos 5 minutos que estuvimos Gi y yo ahí parados felicitando a los seleccionados el sujeto en cuestión no apareció.

Desde que Gi se volvió capitán del equipo y yo presidente, esta época del año era la que más despreciaba, pues nos vemos muy poco y cuando nos vemos es en reuniones para hablar con los directivos y demás capitanes de otros clubes para designar presupuestos.

Y así seguimos por una semana más, después de que se dieran los anuncios de todos los nuevos miembros de cada club.

Decir que es fastidioso sería una mentira. Si molesta no poder vernos, pues estamos tan ocupados que no podemos vernos ni por las noches, el esta en ese periodo de entrenamiento con los nuevos que no se da tiempo de mandarme siquiera mensajes. Bueno, posiblemente exagero, pues si me escribe para desearme buena noche e informar me que ha llegado bien a casa.

Semanas como estas es donde odio tener a Tae a mi lado, pues no pierde oportunidad para decir lo mala pareja que somos, pues no nos damos tiempo para nosotros por cumplir con nuestras responsabilidades.

Como no podemos ser como ellos, pues aunque Kooki está en el equipo de atletismo, siempre se da sus "escapadas" para poder verlo, así sea solo un beso rápido o un veloz saludo. Es por eso que toman a mal el que Gi y yo ignoremos nuestra existencia en periodos como estos.

Alguien toca la puerta, lo cual me da entre miedo y curiosidad, pues hace un rato ya le pedí a todos los de la junta que se retiraran y Gi esta aun ocupado entrenando como para venir a verme.

-Adelante- indico, mirando de reojo a la puerta, pero sin dejar de escribir los programas para las recaudaciones de dinero.

-Perdón por interrumpir- ahí está el pelinegro alto, caminando por la oficina mientras habla –Min me pidió que te trajera algo.

Se acerca a mi escritorio sacando de sus bolsillos frituras y algo de tomar, ofreciéndome las.

-Gracias, no tenías por qué molestarte- tomas las cosas rápidamente, para continuar escribiendo.

-Es sorprendente- continúa hablado, al parecer no capto mi cara de "ya te puedes retirar" –como logran acoplarse a este ritmo, Min se ha ido tarde de las prácticas, y llega más temprano de lo normal, y sus recesos los ocupa para hablar con el entrenador, si yo hiciera eso Baek se hubiera molestado.

-Sí, bueno, Min y yo no tenemos esos problemas, creo se debe a la confianza y que somos lo suficientemente maduros para entender nuestras responsabilidades.

Las siguientes dos horas se dedica a ayudarme, dándome algunas ideas, ofreciéndose en los preparativos, lo cual me hace pensar que no es tan indeseable como creí.

A decir verdad nuestra plática fue muy fluida, agradable.

Al terminar nos percatamos que ya es de noche, por lo cual, muy a mi pesar, decide acompañarme a mi casa, el camino hacia ella fue igual de agradable.

-¿No tendrás problemas con el entrenamiento? Te ausentaste mucho tiempo por ayudarme- no puedo evitar que el tono de mi voz lleve un poco de preocupación, pues yo más que nadie sabe lo estricto que puede ser Gi.

-No te preocupes, mi practica ya había terminado, por eso me pidió el favor- retrocede un poco mientras yo abro la puerta –fue un placer poder hablar por fin contigo, gracias Kim.

-Puedes llamarme Jin.

-y tú a mi Chanyeol, Jin, descansa- él se retira pero justo cuando entro a mi departamento, logro escuchar su grito –mañana me apresurare para ayudarte!

Cuando me doy cuenta estoy sonriendo estúpidamente, el chico es demasiado divertido y agradable como para no pensar en sus tonterías una vez que se ha marchado, eso es la causa de mi sonrisa, sí, solo eso.

Este es el momento triste para mí, el entrar a mi bañera sin Gi, pero ahora hay algo diferente, si extraño a Gi, pero no puedo evitar continuar sonriendo gracias al recuerdo de los chistes del pelinegro.

Con un poco de ánimo tomo el teléfono, al escuchar la voz de Gi, no puedo evitar reaccionar. Así que las insinuaciones de mi parte no se hacen esperar.

Una vez terminada para ambos nuestro encuentro telefónico, platicamos sobre nuestro día, y todo estaba de maravilla hasta que Gi comenta "debo de preocuparme que te escuches ten feliz hablando de tu encuentro con Park", y por supuesto que me indigno el comentario, cualquier persona en mi lugar hubiera armando un drama de eso, pero la verdad no somos así, así que decidimos bromear sobre el asunto.

Ahora si, ya limpio y des estresado gracias a la llamada de mi Gi, es momento de dormir, ya cayendo en los brazos de Morfeo no puedo evitar cerrar los ojos con un solo recuerdo en mi mente "mañana me apresurare para ayudarte!"

Ojala Gi sea el que aparezca mañana para ayudarme, es mi único deseo antes de caer profundamente dormido.