—¿Vas por JiMin? —pregunto el peligris acercándose al mayor cuando este se dirigió a su secretario.

—Si, iré por él, aun es algo temprano, pero quiero llevarlo a comer —le dirigió una pequeña sonrisa a su amigo antes de voltearse a Juwon—. ¿Te mandaron los detalles sobre la subasta?

—Llegaron hace una hora —dijo el omega.

—Bien, mándamelos, también necesito que reserves el vuelo para este viernes a las nueve de la mañana —ordenó saliendo de la recepción junto a NamJoon.

—Veo que ya tienes todo preparado —dijo el menor.

—Si...por cierto, aun no me dices porque no van a ir tu y Jin, y sabes muy bien que no te creo eso de cuidar el cuartel —YoonGi apuntó al alfa de forma acusadora.

—Es mi celo, cae justo el sábado, así que no es recomendable...

YoonGi asintió con una expresión divertida.

—Bien, ya no dire nada —dejo caer su mano en el hombro del peligris—. Te diviertes.

NamJoon simplemente se encogió de hombros con una sonrisa y se despidió de Min para cada quien tomar caminos diferentes. YoonGi salió del cuartel y tomó su auto camino a la universidad de JiMin. Cuando estuvo afuera del edificio le mandó un mensaje a su pareja, quien le respondió que saldría en diez minutos, con ello decidió bajar del auto para dirigirse a la entrada y esperarlo afuera.

Fuera de la universidad había varios estudiantes entrando y saliendo de las instalaciones. Se dirigió a una de las bancas que había, tomando asiento miró a su alrededor antes de que su mirada recayera sobre aquel alfa de la otra vez, Eunwoo, si no mal recordaba su nombre, un amigo de JiMin. Iba pasar de largo cuando vio que se acercaba hacia él. Tuvo un mal presentimiento.

—Hey, ¿eres el novio de JiMin? —preguntó en cuanto estuvo frente a Min.

—Si soy yo.

—Aah, ya veo —el chico sonrió de un lado divertido—. Mira, solo diré que tengas más cuidado, la última vez JiMin la pasó muy mal por tu culpa, nunca se sabe que puede suceder —se encogió de hombros con expresión inocente.

—¿A qué quieres llegar? —indagó el alfa mayor, se oía tranquilo, pero la situación lo estaba comenzando a molestar.

—Solo digo que nunca sabes quien puede quitarte a ese lindo omega —dijo Eunwoo con seriedad.

YoonGi rió sin gracia y se paró de su lugar.

—¿Es una amenaza? —metió sus manos en las bolsas de su pantalón observando al de cabellos negros—. Porque te recuerdo que es mi omega y este intento de intimidación no está funcionando —avanzó un paso quedando centímetros de Eunwoo—, y te recomiendo que te pienses dos veces antes de meterte conmigo y lo que me pertenece, alfita.

Ignorando lo que fuera intentar responder el menor, se alejó de ahí de vuelta a la entrada, de donde poco después salió JiMin. Su omega no tardó en verlo, así que se despidió rápidamente de sus amigos y corrió hacia él. Lo recibió con los brazos abiertos y se dejó abrazar por su novio, al separarse beso sus labios para finalmente tomar la mano de JiMin y avanzar hacia el auto.

—¿Cómo te fue hoy? —quiso saber el mayor.

—Bien, tuvimos práctica, nos enseñaron un postre originario de México, en cuanto lo domine, haré para todos —sonrió con mejillas sonrojadas—. ¡Oh!, es Eunwoo —el rubio estiró su mano y se despidió de lejos.

—¿Son muy cercanos? —preguntó YoonGi cuando JiMin volvió su mirada hacia él.

—No mucho, solo conocidos ¿por qué? —indagó con ojitos curiosos.

—Me encontré con él antes —miró a su omega con seriedad—. Ese chico no te ve como un simple amigo, así que ten cuidado con lo que sea que intente contigo y si es posible marca mejor la distancia porque parece no importarle que tengas alfa —deslizó su mano por detrás de la espalda del menor y tomó su cintura.

—Ou... —JiMin hizo una mueca, pues no sabía cómo explicarle lo que había sucedido antes.

—¿Ya se te había insinuado? —YoonGi se paró en seco y volvió a ver al menor.

—Tal vez... —soltó una risita nerviosa. Al ver el rostro serio de su pareja, supo que lo mejor era hablar—. Desde que llegué a la universidad el se me insinuaba, pero yo siempre lo ignoraba, al final se disculpó por lo intenso que se había puesto conmigo y quedamos en buenos términos, desde entonces no ha mostrado indicios de seguir coqueteando, al menos que no los haya notado —puchereo molesto, pues realmente había confiado en Eunwoo.

—No te culpo, pues tienes un corazón enorme y crees fielmente en las personas —tomó el rostro del menor y acarició sus mejillas—. Solo ten cuidado y si hace algo que te moleste solo dime, yo me encargare de él —dejó un suave beso en la cabeza de su omega.

—Bien, te diré cualquier cosa —soltó una risita.

Más tarde ambos llegaron al restaurante donde YoonGi había reservado, los llevaron a su mesa y tomaron asiento para proseguir a mirar la carta, sin embargo, JiMin siquiera pudo concentrarse, pues se quedó mirando el lugar, apreciando los toques dorados y elegantes que había, la iluminación desde las ventanas las cuales dejaban observar el lindo parque frente el establecimiento, donde los preciosos árboles de cerezo se encontraban floreciendo.

—¿Te gustaría ir a pasear luego de comer? —habló Min logrando captar la atención del rubio.

—Si, me encantaría.

Luego de ello, la mesera se acercó a ellos y preguntó por lo que ordenarían. YoonGi se encargó de hacerlo pues había notado lo concentrado que había estado su novio en los árboles que apenas si miró el menú. Dicha su orden, la mujer se retiró.

Diez minutos más tarde llegó su comida.

—¿Recuerdas la llamada que tuve el ultimo dia de tu celo? —preguntó YoonGi recibiendo un asentimiento de parte de su omega al tener su boca llena—. Bueno, era una invitación a una importante subasta que se llevará a cabo en Jeju, será esta semana el sábado así que pensé que sería una buena idea ir, nos acompañarán Tae y Jungkook.

JiMin parpadeo un par de veces mientras su cabeza procesaba la información.

—¿Iremos a la playa? —la emoción se expandía por todo el rostro del menor que hizo sonreír a YoonGi.

—Si iremos a la playa —asintió soltando una risita al ver a su novio tan feliz.

—Espera —apuntó a YoonGi—. ¿Cuándo nos iremos?

—El viernes en la tarde, en avión estaremos a una hora a más tardar, tendremos todo el día del sábado, la subasta es en la noche, aprovecharemos el domingo, pues pensaba regresarnos el lunes en la tarde, si no mal recuerdo es el día que menos clases tienes —aclaró Min.

—Sip, y no tengo nada importante que entregar, pero...¿la subasta es formal?, porque si es así no tengo nada para ponerme —mordisqueo su labio nervioso.

—No te preocupes por eso, mañana tu y Tae irán con mi diseñador personal, él los ayudará con eso.

—¿Dijiste diseñador personal?

YoonGi simplemente asintió.

—Ya lo conocerás, te agradara.

Al salir del restaurante se dirigieron al parque. Caminaron con sus manos entrelazadas disfrutando del precioso camino lleno de flores, el aire cálido de la primavera y sus aromas rodeándolos. Se encontraban en silencio, apreciando el momento y el tacto de sus manos. Ese momento se siente surrealista para ambos, pues meses atrás jamás se imaginaron estar viviendo eso.

YoonGi volteo a su izquierda y aprecio el lindo perfil de su omega quedando hipnotizado por cada detalle del rostro de su novio. Cuando JiMin llegó a su vida fue un cambio drástico en su entorno, todo dejó de ser tan monótono y aburrido, ahora había destellos de luz en cada pequeño espacio de su hogar, luz que a pesar no tener mucha fuerza al inicio, poco a poco comenzó a volverse más brillante, como aquellos ojos miel que lo tenían enamorado.

Haber apreciado el proceso que sobrellevo JiMin en aquel par de meses simplemente le demostró la increíble y fuerte persona que tenía a su lado. Sabía que aún había un largo camino por recorrer, pero él estaba dispuesto a caminar de la mano con él como lo estaba haciendo en ese momento.

Con todos aquellos pensamientos rodeando su cabeza, detuvo su andar logrando que el rubiecito igualmente lo hiciera. El omega miró curioso a su pareja al notarlo nervioso.

—El día que me di cuenta que me empezaste a gustar fue la noche de nuestra primera comida como familia, te quedaste dormido así que te lleve a tu habitación, al acostarte no pude evitar admirarte mientras dormías, tu expresión tan serena entre todo el caos que había a tu alrededor —soltó un suspiro tembloroso mientras tomaba las manitas de JiMin y acarició el dorso de estas con cariño antes de enfocar su mirada en aquellos ojos mieles—. Desde ese momento no hubo forma de que mis sentimientos se detuvieran.

—Alfa...

—Te amo y es la primera vez en mi vida que estoy tan seguro de algo —sonrió al ver los ojos llorosos de su novio y como una linda sonrisa se estiraba en sus labios—. Te amo y espero jamás dudes de ello y espero tampoco yo hacer que lo pongas en duda.

Lo amaba y era el mejor sentimiento que podía estar viviendo en esos momentos.

Y como era debido sellar esa promesa, deslizó sus manos hasta aferrarse a la cintura del omega y pegarlo a su cuerpo para finalmente besarlo. Sus labios tomaron con delicadeza los contrarios saboreando el dulzor que lo embriagaba cada que besaba a JiMin, derritiéndose y quedando a merced del omega. El menor rodeo sus manos sobre el cuello de YoonGi atrayéndolo más hacia él.

Se perdieron en los labios del otro, poco a poco dejando que sus pulmones volvieran a tomar aire. Al separarse, juntaron sus frentes y se encerraron en su propio mundo alrededor de los brazos del otro.

—También te amo, alfa —sonrió con dulzura—. Gracias por salvarme y ser esa luz que tanto necesitaba —confesó con el corazón apunto de estallar de amor.

—Gracias a ti, Jiminie.

Y entre sonrisas sinceras continuaron con su recorrido antes de volver a casa.

Cuando entró a la tienda, quedó anonadado al ver todas las prendas y conjuntos tan increíbles que había. Junto con TaeHyung se acercaron a ver un par de prendas antes de que una amable beta se acercara a ellos quien los saludó con cortesía. Ambos igualmente le saludaron con amabilidad.

—El joven Kim los espera —la chica comenzó avanzar hasta dirigirlos a la parte trasera de la tienda.

Al llegar, ambos miraron a su alrededor encontrándose con un lugar iluminado, había varios maniquíes, cintas para medir entre otros materiales de costura. El joven que los iba a atender hizo aparición en el centro del espacio, al verlos los saludó agitando su mano y una linda sonrisa. Era un lindo omega de cabellos color melocotón.

—Finalmente puedo conocerlos —se acercó al par de amigos—. Un gusto, soy Kim Suno —se presentó.

—Igualmente, soy Park JiMin y el Kim TaeHyung —correspondió con una sonrisa.

—De acuerdo, no hagamos más largo esto y comencemos —dijo Suno avanzando hacia una gran mesa.

Al acercarse, el de cabellera colorida les mostró el par de ideas que tenía en mente conociendo la etiqueta del evento, igualmente ya había avanzado en los trabajos para simplemente darle los últimos ajustes y poder entregarlos a tiempo. Dio inicio con JiMin.

Mientras tomaban sus medidas les ofrecieron algo de tomar y un par de snacks.

Su estancia con Suno fue realmente agradable, pues era un chico animado y muy amable, explicaba todo lo que hacía, los toques que le daría para que se viera mucho más atractivo y algunos consejos para que lo usara en otras ocasiones. Igualmente se entero que YoonGi pidió que su conjunto llevara los mismo colores que los de el alfa para que fueran combinados, detalle que aprecio.

Al terminar su turno, se vio en el espejo y aunque no estuviera listo, la idea ya se lograba ver y a JiMin le estaba encantando. Después de que el rubio se fuera a sentar, TaeHyung se posicionó en medio y Suno comenzó a trabajar en él.

—¿En el viaje piensas usar lo que compraste? —indagó el castaño mientras lo miraba con complicidad.

—Posiblemente, creo que será...interesante —sonrió inocente.

—Ese tipo de eventos pueden llegar a ser interesantes o muy aburridos, depende de los dramas que se formen en el transcurso —dijo TaeHyung—. Aunque las subastas tienden a ser algo intensas, ya que siempre hay una joya preciosa de gran valor que todos quieren en sus manos, aunque siempre el más ambicioso es el más fácil de derrotar —el omega hizo una mueca, recordando a alguien específico.

—¿De quien hablas? —indagó JiMin intrigado.

—James Su, ese omega es hijo de un importante mafioso en Tailandia, tienes un par de contactos aquí en Corea, pero eso no le quita lo serpiente, cuando tengas la desgracia de conocerlo lo entenderás —soltó un largo suspiro—. Y ahora que lo recuerdo, lleva un tiempo interesado en YoonGi, creo que será divertido ver como retuerce al ver que su amado amor imposible ya tiene dueño —sonrió.

—Creo que será interesante esta subasta... —JiMin asintió interesado ante la nueva información.

—Si que lo será Jimin-ah.

Al llegar el viernes, JiMin se fue directamente a su casa para tomar sus maletas y salir junto a su alfa.

Estando finalmente los cuatro en el auto camino al aeropuerto, los nervios y la emoción en JiMin comenzaron, pues llevaba mucho tiempo sin ir a la playa y el simple hecho de compartirlo con personas importantes lo hacía mucho más significativo. Durante la siguiente media hora TaeHyung y JiMin se enfrascaron en una conversación sobre lo que podían hacer ese día, sabían que no había muchas opciones, pero pensaban en algo sencillo que diera un buen inicio a su pequeño viaje.

Llegando al aeropuerto, los guardaespaldas bajaron las maletas y se adentraron al lugar. No fue hasta que empezaron a dirigirse a registrar todo lo necesario sobre su viaje que cierto rubio comenzó a preguntarse sobre el vuelo, pues no recuerda que YoonGi mencionara algo sobre los boletos.

No fue hasta el comentario de JungKook que lo hizo entender todo.

—Todo está listo con el jet, recibió la revisión necesaria y el piloto es de confianza, fue el que llevo a tus padre a Alemania —dijo el alfa revisando la tableta en sus manos.

—De acuerdo, entonces ya podemos irnos —YoonGi le hizo una seña a su guardias en cuanto iniciaron a caminar—. ¿Sucede algo? —preguntó el alfa al ver que su pareja se veía absorta en sus pensamientos.

—¿Por qué no me dijiste que tenías un jet privado? —observó al mayor anonado.

—Es el avión de la familia y olvide mencionarlo, ¿sorprendido? —dijo en tono divertido.

—Si, cada día soy más consciente del alfa que tengo a mi lado —sonrió tiernamente.

YoonGi simplemente correspondió el gesto antes de darle un pequeño beso en la frente a su omega.

JiMin observaba todo con emoción, apreciando el jet frente suyo, que se volvió mucho más impresionante al entrar. Con TaeHyung tomaron asiento en los respectivos lugares y siguieron hablando sobre sus planes para los siguientes días. Aproximadamente veinte minutos después el avión despegó.

—Confiesa, ¿qué es lo que quieres de la subasta? —JungKook entrecerró sus ojos de forma juzgadora.

YoonGi sonrió burlón.

—Me conoces bien.

—Tu no vas a este estilo de eventos mas que sea por una razón, en este caso es una subasta, si no es por contactos, es por lo que se subastará, así que dime que es —el joven alfa se dejó caer en su asiento esperando la respuesta.

—Voy por la joya principal —se encogió de hombros restándole importancia.

JungKook en cambio negó con una sonrisa de lado decorando su rostro. Acomodándose, se inclinó hacia adelante recargando sus codos sobre sus rodillas.

—Es un diamante, la competencia estará reñida.

—Lo sé, apostaría lo que sea necesario.

JiMin y TaeHyung casi saltan de alegría en cuanto pusieron un pie en el aeropuerto. Igualmente luego de hacer todo lo necesario en cuanto su llegada se dirigieron a la salida donde los esperaba un auto. En el transcurso hacia el hotel, Park observaba por la ventana la preciada vista del paisaje con una enorme sonrisa.

Llegando al hotel, se dirigieron a la recepción, en donde YoonGi se encargó de revisar sus reservaciones para finalmente se les entregará las tarjetas de acceso.

Pronto se encontraron en su habitación, con la cual JiMin quedó encantado al verla, más con la preciosa vista al mar que tenía

—¿Te gusta? —preguntó Min mientras abrazaba a su omega por detrás.

—Si, tengo muchas expectativas sobre este viaje —confesó el menor volteando a ver su alfa quien le sonrió al verlo tan feliz.

—Me encargaré de cumplirlas.

Era su primer viaje juntos así que debía ser inolvidable.

finalmente les traigo capitulo, una
disculpa por la desaparición, pero aquí
estamos.

vieron esa escena en el parque, a mí me
tiene encantada 😞💌.

en fin, se vienen cositas.

se les quiere, mena 𖹭.