O12: PERDERTE
JiMin realmente creyó que después de la tarde anterior, las cosas con YoonGi se habían arreglado, pero al llegar la mañana volvió a sentir distante al alfa, un poco menos que antes, pero esa tensión que creía había desaparecido, volvió. Por eso mismo, decidió que lo mejor era preguntar qué estaba sucediendo. No quería seguir con esa espinita de incertidumbre.
YoonGi se encontraba en la sala en una llamada, así que el rubio esperó a que terminara para hablar con él, siendo así diez minutos después.
—Hyung, ¿podemos hablar? —indago el omega.
—De acuerdo, ¿qué sucede?
—Eso es lo que quiero saber... —el menor se veía ansioso—. Últimamente te he visto muy distante, a veces siento que me ignoras, no estoy seguro que está pasando, pero quiero saberlo, si hice algo mal, dije algo, no sé...solo quiero saber por qué.
La mirada suplicante y el tono nervioso de JiMin fue como un golpe en el estómago para el alfa, no creyó que realmente las cosas llegarán a ese punto, su forma de evitar problemas terminó empeorando todo, tal como le dijo TaeHyung.
—JiMin, yo... —YoonGi soltó un suspiro tembloroso—. Es complicado, yo, no... —las palabras se atoraron en su garganta, se sentía presionado y todo eso lo estaba asfixiando.
—¿Hyung? —le hablo comenzando a desesperarse.
—No puedo decirte... —el alfa apretó sus puños, molesto, no con JiMin, si no consigo mismo.
Era un cobarde.
—De acuerdo —el omega ignoró el dolor en su pecho y la frustración de no poder saber que estaba pasando—. Si no quieres decirme, está bien, solo...dime si quieres que mantenga distancia lo haré, comprendo si ya te canso el estar cuidándome, no era tu obligación en primer lugar... —al final de cuentas, sus sospechas podían ser ciertas.
—¿Qué...?, no JiMin, eso no... —el alfa se intentó acercar al omega, pero este retrocedió en cuanto lo hizo.
—Entonces, ¿qué más podría ser? —los ojos del menor estaban llorosos, se sentía mal, toda la situación se sentía tan incorrecta. Su lobo aullaba herido, y el dolor en su pecho solo aumentaba y el silencio del alfa no ayudaba—. ¿Ves?, tu silencio dijo todo... —sin decir nada más, el menor tomó sus cosas y salió de la casa.
—¡JiMin!, espera...
Cuando YoonGi reaccionó y salió tras de él, el auto donde iba el menor ya se había ido.
JiMin durante el transcurso había intentado no llorar, pero la situación lo sobrepasaba, especialmente el extraño reaccionar de su lobo, que solo causaba que todo se volviera más doloroso. El realmente creyó que las cosas se arreglarían, que todo volvería a la normalidad, pero al parecer todo sólo estaba empeorando.
Podrían llamarlo exagerado por sentirse de esa forma por alguien que había conocido hace un poco más de un mes, pero la seguridad que le transmitía YoonGi y ese sentimiento de calidez que lo rodeaba cuando estaba con él, era algo que no quería perder. No quería perder a YoonGi.
Al llegar a la universidad, JiMin camino hasta el aula para su clase completamente perdido en sus pensamientos, su cabeza daba vueltas y vueltas a la situación y solo lograba que se sintiera peor, odiaba ese sentimiento de angustia y de sentirse tan perdido al punto de desorientarlo.
Poco después de que tomó asiento, Shuhua y Yuqi llegaron sentándose frente a él, ambas chicas lo saludaron alegres y le preguntaron cómo se encontraba, al intentar responder su voz sonó cortada y mejor agacho la mirada, sintiéndose muy transparente frente a sus amigas. Le gustaba hablar con las personas para poder desahogarse, como él igualmente lo haría, pero en ese momento, la vergüenza que lo recorrió logró ponerlo incómodo.
—¿Está todo bien Chim? —indagó Yuqi preocupaba, acariciando la espalda del rubio.
—¿Hay algo de lo que quieras hablar?, ¿pasó algo? —Shuhua posó su mano sobre la suya y la acarició con cariño.
—Discutí con YoonGi hyung... —confesó en voz baja, subió su mirada mientras mordisqueaba su labio inferior ansioso.
—¿El alfa que viene a recogerte? —cuestiono la chica rubia, recibiendo un asentimiento de parte del omega—. Comprendo, ¿qué sucedió?
JiMin dudo al principio, pero al final explicó toda la situación, igualmente contó cómo era su relación con YoonGi antes de todo eso y lo mucho que temía que aquello se perdiera por lo que sea que estuviera pasando. Las chicas lo escucharon, no lo interrumpieron y lo dejaron desahogarse con calma.
Agradeció de todo corazón aquel gesto.
—Tengo una duda —Shuhua volteo a ver discretamente a su amiga, quien asintió de acuerdo—. Dices que YoonGi siempre fue cercano a ti, además de que todo el tiempo te decía cosas lindas y te apoyaba, ¿también tenía actitudes o gestos especiales contigo? —la chica lo miró curiosa con aquellos grandes ojos cafés que tiene.
JiMin recordó la vez que salieron al centro comercial y lo ayudó con sus zapatos y tratar la situación con sus compañeras, también cuando cocinaron juntos, pequeños detalles como a veces tocar su mano o como ayer cuando acomodo su cabello, detalles que hasta ahora estaba notando.
Al lograr enlistar algunos, se los comento a las chicas, quienes se miraron entre sí, llegando a la misma conclusión.
—Chim, ¿alguna vez sospechaste si YoonGi tiene sentimientos por ti? —comentó Yuqi recibiendo un rápido asentimiento de Shuhua estando de acuerdo.
—¿Gustarle a YoonGi? —JiMin miró a ambas con expresión incrédula—. Eso...no, no es posible... —al decirlo en voz alta, su lobo se mostró totalmente en desacuerdo, como si aquello lo ofendiera.
—No quiero asegurar nada, pero esas actitudes no las tiene un alfa con un amigo, al menos que él esté interesado —intentó explicar Shuhua.
El omega se quedó callado ante eso, su corazón quiso creerlo, pero su mente lo descarto al instante.
«Eso no era posible», se recordó a sí mismo.
—Si le gustara no me estaría ignorando como lo está haciendo... —admitió con voz quebrada.
—Eso es lo que aun no entiendo —dudo Yuqi confusa—, pero cambiando el enfoque, JiMin, ¿a ti te gusta YoonGi?
Park guardó silencio sintiendo sus mejillas calentarse, sus amigas rápidamente sacaron conclusiones.
—Yo... —suspiro con cansancio—. Si, me gusta YoonGi —admitió con vergüenza —. Estoy jodido —tapó su rostro con sus manos.
Las chicas lo consolaron y estuvieron ahí para él, ninguna siguió hablando del tema al ver lo incómodo que era para el rubio. Agradeció su consideración.
Durante el día, las cosas estuvieron algo desastrosas, en clases JiMin apenas lograba concentrarse, solía distraerse mucho y no prestar atención, eso logró algunos problemas con los maestros y uno que otro momento vergonzoso al no darse cuenta que le estaban hablando. Era un caos total y por más que lo intentara su cabeza no dejaba de divagar.
Pensaba en YoonGi y en la discusión de esa mañana, en las sospechas de sus amigas y sus sentimientos actualmente admitidos. Todo era un lío, y por más que intentaba hallar una salida, no encontraba ninguna.
En el receso, JiMin decidió ir a comprar una botella de agua y para su suerte terminó encontrando a Eunwoo en ese momento. Al pagar su compra se encargó de ignorar al alfa y volver con sus amigos, no estaba de ánimos para tratar con él, pero a como estaba yendo su día no se sorprendió cuando vio que su plan falló por completo y el pelinegro estaba hablándole para que se detuviera.
Al final se desesperó y se detuvo, solo dejaría que le dijera lo de siempre para rechazarlo y poder seguir con su día.
—Creí que no me escuchabas —dijo Eunwoo parándose frente al omega con aquella sonrisa coqueta que lo caracterizaba.
—Si lo hacía, simplemente te estaba ignorando por si no te diste cuenta —dijo de forma tosca. Cuando se sentía mal, termina reflejándose en mal humor, como ahora.
—Bueno, últimamente andas un poco agresivo, ¿no crees?, que tal si te relajas un poco, yo puedo ayudarte —ofreció el alfa dejando salir un poco más su aroma para atraer al rubio.
Lo único que logró fue asquearlo, el lobo del omega lo rechazó por completo. Al sentir el asco, JiMin tapó su nariz y miró molesto al hombre.
—Deja de esparcir tu olor, ¿quieres?, no vas a lograr nada, entiéndelo.
Harto de la situación, simplemente se fue de ahí.
JiMin salió con sus amigos de la universidad al término de sus clases, sabía que lo más probable es que Taehyun, el conductor vendría por él. Su pecho se contrajo de solo recordar lo que vendría llegando a casa, esa distancia tan agotadora, el solo quería encontrar un lugar seguro y realmente fue lo suficiente ingenuo al pensar que YoonGi podría serlo.
Él es solo un extraño en la vida del alfa, no podía ser tan ambicioso.
Cuando estuvo a punto de ponerse a llorar de nuevo, su celular sonó con una nueva notificación, al prender su teléfono se quedó mirando el contacto por varios segundos antes de atreverse a desbloquearlo. Era YoonGi. Al abrir el mensaje, sus ojos se empañaron.
yoongi hyung <3
online
Lamento mucho lo de la mañana,
no merecías que me negara a decírtelo,
tienes todo el derecho de estar enojado,
pero si me permites quiero hablar contigo
y decirte todo, quiero arreglar las cosas
contigo Jiminie
JiMin simplemente mantuvo su mirada clavada en el mensaje sin creer realmente que las cosas iban a arreglarse. Sabía que tal vez no debía dejarse llevar tanto, que no sabía si realmente YoonGi estaba dispuesto a cumplir lo que decía, sin embargo, seguía confiando en él, le creía y solo esperaba que el alfa no lo decepcionara.
jimin
yo tampoco quiero que estemos
así, hablemos en casa :(
Luego de contestar, su celular comenzó a sonar, YoonGi lo estaba llamando, con una sonrisa contestó la llamada.
—Hey —fue el saludo del alfa en cuanto aceptó la llamada.
—Hola —dijo el omega con un tono nervioso.
—Iré por ti a la universidad e iremos a comer, ahí te explicare todo, ¿de acuerdo?, solo dame quince minutos para poder desocuparme por completo —explicó con calma.
—Bien, te espero —la sonrisa en su rostro simplemente no desaparecía.
—Perfecto, nos vemos Jiminie.
—Nos vemos YoonGi hyung.
Y con ello, la llamada finalizó.
Todo se iba arreglar, todo volvería a la normalidad.
Estuvo muy metido en sus pensamientos hasta que Jisung le habló explicándole que ya debían irse, JiMin entendió y les dijo que vendrían por él. Pensaba quedarse, pero al final decidió acompañarlos hasta la esquina. Durante el transcurso hablaron un poco más hasta que llegó el momento de despedirse por completo.
Cuando vio a sus amigos alejarse lo suficiente, decidió regresar. Tomó su celular y revisó la hora, viendo que faltaba un poco todavía para que llegara YoonGi. Después de eso, lo guardó en su mochila y siguió avanzando.
Pero, mientras más avanzaba un extraño sentimiento comenzó a recorrerlo.
Sentía que lo seguían.
Cuando se volteó a ver detrás suyo, sus ojos se llenaron de miedo y su corazón se aceleró al ver a dos hombres caminando con rapidez tras de él, el recuerdo de aquella noche en la que estaba huyendo con Sunmi atravesó sus memoria, llevaban el mismo traje y tenían la misma compostura. El terror comenzó a consumirlo, así que decidió empezar a correr, pero al voltear enfrente chocó con otro alfa, cayendo de sentón, su mochila aterrizando a un lado suyo. Su voz desapareció, estaba aturdido, no sabía que estaba pasando.
De un momento a otro se encontraba siendo tomado por los tres alfas y siendo arrastrado hacía una camioneta, se movió, pataleo, hizo lo que pudo, pero sabía que sus posibilidades eran nulas, aquellos hombres eran mucho más fuertes que él, jamás podría vencerlos. Sus ojos comenzaron a llenarse de lágrimas y a deslizarse por sus mejillas.
Estaba asustado, desesperado, se encontraba en una encrucijada y no sabía qué hacer, lo único que su cabeza podía pensar era en YoonGi.
Cuando estuvo dentro la camioneta, lo voltearon de espaldas y amarraron sus manos, pies y boca, estaba inmóvil.
—¿Debería noquearlo? —habló uno de los hombres.
—No, la orden era solo llevarlo, sin ningún golpe, lo quieren en perfecto estado —dijo el otro.
—Qué triste, hubiera sido divertido jugar un poco con él.
Dicho eso, la puerta fue cerrada y la camioneta comenzó a moverse.
«Hyung...ayúdame» rogó con todas sus fuerzas.
TaeHyung se encontraba de camino hacia la universidad de JiMin, quería ver como estaba y tal vez llevarlo con él a pasar la tarde, sabía que las cosas con YoonGi le afectaban mucho y quería ayudarlo a distraerse un poco. En el camino vio arrancar una camioneta de la esquina de la universidad, acelerando en cuanto se internó bien a la calle. Al verla tuvo un mal presentimiento, así que le pido al chofer que parara.
Al bajarse su pecho se apretó cuando vio la mochila de JiMin en el suelo, la tomó y vio que todo estaba ahí, entonces su cabeza rápidamente conectó las piezas y volteo hacía donde se había ido la camioneta.
—No, no, no —negaba mientras el pánico comenzaba a inundarlo—. Mierda, esto es...
Volteando hacia sus guardias pidió que buscaran a los de JiMin, quienes debían haber evitado toda esta situación. Luego de eso, se subió a la camioneta y pidió que lo llevaran al cuartel. Sabía que cuando llegara, y contara lo que pasó, YoonGi estaría molesto. Mucho.
La historia se repetía, tal vez algo diferente, pero estaba sucediendo. TaeHyung solo rogaba que JiMin no tuviera el mismo desenlace que el de su hermana. Sus ojos se humedecieron y abrazó la mochila del rubio.
Pronto una llamada entró a su celular, al ver el contacto sintió su corazón apretarse.
—Tae, amor, ¿está todo bien? —fue lo primero que escucho al contestar.
La voz de su alfa solo logró que las lágrimas comenzaran a salir.
—Kook, ¿YoonGi está contigo? —indago en cambio.
—No, está en su oficina, ¿qué sucede? —la voz preocupada de JungKook lo destanteo, pero hizo lo posible para calmarse.
—Es sobre JiMin cuando llegué al cuartel les explico, estoy bien, a salvo, pronto llegaré, ¿de acuerdo?
—Bien, llega pronto.
Poco después se encontraba llegando al cuartel, al entrar a la oficina de Min se encontró con un ambiente pesado, y lo entendió cuando vio a YoonGi casi correr hacía él hecho un desastre de emociones.
Al parecer JungKook dijo algo antes de que él llegara.
—¿Dónde está? —preguntó el alfa en cuanto estuvo frente al menor.
TaeHyung mostró la mochila de JiMin y vio cómo el mundo de YoonGi comenzó a derrumbarse, el rostro del hombre se contrajo y tomó la mochila con cuidado, observándola como si pudiera darle alguna respuesta.
—Se lo llevaron hyung...—al decirlo, el ambiente se sintió mucho más tenso y con un aura pesada.
El alfa retrocedió y pasó sus manos sobre su rostro, JungKook y NamJoon vieron como YoonGi se dejó caer sobre el sofá, estaba conmocionado, pero aquello pronto se transformó en una furia indescriptible.
—Ese hijo de puta las va a pagar caro —al pararse de su lugar, se veía dispuesto a matar al causante de todo esto, sin embargo, fue detenido por Kim.
—Se que estas molesto, pero escúchame, armaremos un plan, te prometo que lo tendremos de vuelta pronto —habló con calma el hombre.
YoonGi solo pudo asentir y su cabeza reprodujo la despedida de JiMin hace solo veinte minutos. No iba a perderlo, no lo haría, no cuando por fin decidió luchar por él.
Sin importar que, recuperaría a JiMin y haría pagar aquellos malnacidos.
2/2
EL YOON DE MULTIMEDIA ME MATO AAH
en fin, aparecí cinco mil años después, tuve
unos problemitas y hasta ahora puedo
publicarles estos caps, una disculpa,
más que nada porque aparezco y con el
drama jaja, los amo
pero buenooo, que el yoongis se nos
pondra en modo asesino,
¿que puede pasar...? 🙀
en fin, aún falta mucho por
recorrer, pero les prometo que
les compensare todo esto u.u
se les ama~
mena
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