Si alguien le preguntara a Yue QingYuan cual era su mayor deseo de niño sin lugar a dudas respondería que casarse con un su amado Xiao Jiu y darle todo aquello que le faltó de niño, claro que el tiempo pasó e incluso se alejo de Shen Jiu al punto en que incluso este llegó a sentir no más que odio hacía sí mismo, con el tiempo ese sueño se volvió tan efímero que solo era un deseo egoísta que se albergaba tercamente en lo más profundo de su corazón.

Tal vez fue esa terquedad  lo que provocó que aquel efímero sueño se volviera realidad, su amado Xiao Jiu había accedido a casarse con él, pasaría su vida entera con el amor de su vida, nunca estuvo tan feliz antes, ni cuando lo adoptaron, ni cuando se volvió el joven amo de la familia Yue, esta felicidad era incluso ligeramente más grande que cuando esa tarde en el café vio a Shen Jiu vistiendo un suéter que cubría la mitad de su hermoso rostro.

Ahora su sueño había cambiado, quería una familia con Xiao Jiu, después de una larga meditación llego a la conclusión que tres hijos eran suficientes, no menos, no más. Aún  recuerda con una expresión risueña como cuando le contó sus hallazgos a su prometido este le aventó una libreta a la cara mientras le gritaba "¡Si tanto quieres tres hijos dalos a luz tú mismo!".

También recuerda como Wei Qingwei le preguntó si acaso era masoquista por hablar de violencia doméstica como si fuera la cosa más romántica del mundo, ¿Acaso era masoquista? Pues, cuando se trataba de Shen Jiu era como si su paciencia fuera interminable, como si la ternura no tuviera fondo y como si su amor solo se acabaría cuando muriera, antes de eso pensar en llegar a amar alguien que no fuera Shen Jiu era algo sencillamente era algo impensable, incluso imaginárselo se le hacía imposible, tal vez si fuera masoquista, pero solo cuando se trataba de su Shen Jiu, poco le importaba si el mundo se cayera mientras su Xiao Jiu estuviera bien y feliz.

Si somos sinceros nunca creyó que amaría incondicionalmente además su Xiao Jiu, pero, las personas se equivocan.

Una tarde Xiao Jiu le había mandado un mensaje para que lo fuera a recoger al café donde alguna vez se reencontraron siendo aún adolescente, pensó que su amor solo no quería caminar, nunca imagino que tras de Shen Jiu hubiera tres niños y que su prometido le dijera "Ellos son nuestros hijos", tres niños, su Xiao Jiu tenía buena memoria, si Shen Jiu le pedía algo, Shen Jiu lo tendría y ahora quería tres hijos, bien entonces.

Registrarlos tampoco fue algo muy complicado gracias a que la familia Yue también estaba fuertemente arraigado a la política. Los niños eran lindos pero sus sentimientos hacía ellos no eran más que una buena impresión en ese momento, quien diría que terminaría adorandolos.

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• Shen Yuan •

Algunas veces Shen Yuan le daba el mismo aire que Xiao Jiu a su edad, cuando ambos eran jóvenes esa aura se veía muy semejante, incluso sus rasgos eran muy parecidos, cuando dos personas que tienen procedencias desconocidas se encuentran y comparten varios puntos en semejanza no es imposible imaginarse que de alguna manera estén emparentados.

— Lamento que Jiu'Ge te haya metido en nuestros problemas. — La cantaría voz de preadolesente tenía un tinte algo triste en el tono pero en sus expresiones no había un solo indicio de tristeza. — Fue mi culpa, arruine su oportunidad de tener una vida de recién casados.

Shen Yuan no era Xiao Jiu, Shen Yuan era Shen Yuan, no pudo evitar sentirse culpable por ver las sombras de su prometido en el niño que ahora se encontraba sentado junto a él.

— Ah'Yuan, siempre quise tres hijos, Xiao Jiu también me esta ayudando a cumplir mi sueño, quiero una familia con Xiao Jiu y también quiero hijos con Xiao Jiu y aquí los tenemos. — Admitía que no era lo mejor que había pensado pero era lo que realmente creía.

— ¿No quieren hijos propios?

— ¿Acaso no son ustedes nuestros hijos propios?

— No compartimos sangre.

— Ah'Yuan la sangre no es necesaria para que ustedes sean nuestros hijos.

Al lado un pequeño niño sorbia su nariz intentando torpemente retener las lágrimas en sus ojos, QingYuan lo abrazo mientras limpiaba torpemente las lágrimas en los ojos del niño, esa fue la primera vez que se sintió un verdadero para Shen Yuan.

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• Wei Ying •

Un día no tan lejano al día que conocío a esos tres niños Shen Jiu lo había llamado para pedirle ir al evento escolar en Yunmeng Jiang ya que Shen Yuan se encontraba en periodo de estro y no podía dejarlo solo, naturalmente accedió.

— ¡Yue'Ge! — El pequeño sonrió de forma brillante mientras lo veía llegar — Bienvenido, gracias por venir — Al final de su oración la voz del niño se hizo suave y algo avergonzada provocandole una risita.

— Por supuesto que vendria Ah'Ying.

— Cierto, cierto, el evento es sobre dibujar o pintar a tu familia, si no te gusta no hay problema, no soy el mejor pintando pero aún así quería que alguien la viera y pues tú sabes.

Asintio algo ansioso por ver la pintura mientras el pequeño niño tenía las manos apretadas mientras lo guiaba en dirección a donde la pintura era exhibida, todo el pasillo estaba hermosamente decorado por dibujos y pinturas simples de familias, la emoción de ver su propia familia en los ojos de Wei Ying le daba algo de escosor en el corazón.

Y ahí estaba, dos adultos, uno vestía un traje formal mientras que el otro llevaba una camisa de vestir verde agua en conjunto con unos pantalones de vestir ligeros, al de Shen Jiu se encontraban dos niños de caras suaves, uno de ojos verdes y el otro de ojos cafés, del lado contrario justo al lado del hombre de traje se veía un niño de sudadera roja que sujetaba tiernamente la esquina de la manga del traje, las personitas relucian en el fondo de bambus y mariposas.

Los ojos de Yue QingYuan ardieron ligeramente.

Abajo del cuadro las palabras "Primer lugar brillaban", su vista por se movió al niño que lo veía expectante, esa fue la primera vez que Yue QingYuan se sentía un verdadero padre para Wei Ying.

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• Xie Lian ▪︎

Ellos dos habían perdido en monopoli y caminaban en dirección a la tienda más cercana a comprar los pedidos del resto, sin lugar a dudas Xie Lian y él tenían la peor suerte de todos los presentes.

— Una soda para Ying'Ge, una sopa instantánea para Yuan'Ge y unas papitas para Jiu'Ge — Xie Lian se esforzó por recordar los pedidos mientras los contaba con sus dedos, QingYual le acaricio el cabello en respuesta mientras una ligera risa salía de su boca.

— Ah'Lian es muy inteligente.

— No lo soy, pero quiero llevarles todo y hacerlos feliz Yue'Ge.

La declaración del menor lo sorprendió, nunca espero que el más pequeño, aquel que fuera cuidado con mucho cariño y amor por sus hermanos fuera tan dulce y cariñoso. Bajo la vista y se topo con la mirada decidida del pequeño, los ojos cafés brillaban y sus labio estaban pegados en forma de línea mientras debes en cuando los abría para volver a recitar el pedido con miedo de ser olvidado.

Sonará estúpido y él mismo lo sabe pero en ese momento tan cotidiano fue en el que se sintió un verdadero padre para Xie Lian.

— ¿Y Ah'Lian que quiere?

— ¿Eh? — El pequeño se sobresalto – No lo se, Yue'Ge ¿que hago? No lo había pensado.

QingYuan río.

— Vamos por dulces para todos. — Levantó la mano al aire como si fuera a una misión muy difícil, el niño contagiado por la emoción copió el gesto y ambos caminaron más rápido hacía la tienda de conveniencia.

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Esa primera vez se había vuelto un siempre, esos niños eran sus hijos y quien dijera lo contrario sería golpeado por él, nadie nunca tocaría a sus niños, esos encantadores niños que eran sus hijos. Yue QingYuan no podía estar más feliz, había cumplido su sueño, tenía una hermosa familia con Shen Jiu.

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El día del amor y la amistad no debe ser solo para amor romántico ¿verdad?