El frío de otoño había ingresado finalmente a Busan, las hojas secas que caían de los árboles estaban esparcidas por las calles de la ciudad, en las aceras y siendo abundantes en los parques, que era donde la familia Min se encontraba esa tarde, disfrutando de la mejor forma esa temporada.

ㅡ¡Allá voy!ㅡ gritó el menor, antes de caer sobre un montón de hojas, que anteriormente habían juntado entre los tres en una gran montaña. Las carcajadas que soltaba a cada segundo hizo evidente la alegría del momento.

ㅡHey, tenías que esperar a que te dijéramos Koo.

ㅡLo siento papá Mimi, es que estaba muy emocionado, las hojas me dan cosquillas cuando caigo y son muy suavecitas.

YoonGi se acercó hasta el pequeño pelinegro, solo para acostarse a su lado, cerrando los ojos y aspirando el frío aire ㅡSi no te lastimas está bien, pero recuerda que debes seguir instrucciones ¿estamos de acuerdo?

ㅡDe recuerdo papá Min Min.

Una sonrisa siguió al castaño por la mala pronunciación del menor, después podrían corregirlo, imitando a ambos se acostó junto a ellos y admiraron el cielo naranja, rojizo y amarillento. Una combinación hermosa.

ㅡEl cielo es hermosoㅡ comentó JiMin.

Al escucharlo el rubio volteó inmediatamente, admirando las facciones de su esposo; nariz de botón y mejillas abultadas, cabello castaño que brillaba y un par de ojos brillantes que reflejaban el mismísimo cielo, que era donde se encontraba innumerables veces, JiMin lo hacía perderse de más de una forma.

Un suspiro acompañó su respuesta ㅡ. Lo es, es demasiado hermoso.

En medio, como de costumbre, estaba JungKook que había estado buscando algo que parecía perdido, hasta que lo encontró y con mucha ilusión alzó su mano cubierta por un guante de lana rojo donde sostenía una hoja en forma de corazón.

ㅡ¡Es una hoja de Koorazoncito!

ㅡ¿Koorazoncito?ㅡ preguntó el rubio.

ㅡAsí es papá Min Min, porque Koo lo encontró. Ahora es especial.

El castaño besó con dulzura su cabeza,  encontrando el ángulo perfecto para poder alzar su celular, Koo al ver la cámara inmediatamente sonrió, muy en grande, mostrando su hoja e inclinando su cabeza levemente hacia YoonGi.

ㅡDigan queso.

ㅡ¡Queso!ㅡ gritaron los tres al unísono, captando una preciosa imagen que era capaz de reflejar la alegría de su familia.

Una ráfaga de viento se cruzó con ellos cuando se estaban levantando, sacudiendo sus prendas en el momento en que la hoja y el gorro de YoonGi salieron volando, la hoja al ser más frágil y liviana se perdió de vista, mientras que el gorro cayó sobre la tierra a unos cuantos metros de distancia.

ㅡ¡Oh no! Perdí mi koorazoncito.

Un leve puchero se apareció en sus labios, entonces JiMin sostuvo su mano para que le prestara atención ㅡ¿No era hoy el día en que mi pequeñito se iba a disfrazar?

Los ojos de JungKook se expandieron al escucharlo, levantando una sonrisa que acompañó su emoción al empezar a dar unos cuántos saltos en su lugar, sintiendo cómo su otra mano era sostenida por el pálido. No iba a olvidar a su hoja, claro que no, aún así la llevaría en sus recuerdos.

ㅡVamos a casa, tenemos que prepararnos muy bien para esta nocheㅡ lo animó el rubio.

ㅡ¡Sí, papá Min Min!

El pálido utilizó su otra mano para acomodar el gorro del azabache, mismo que tenía un par de orejas blancas que se alzaban, haciéndolo ver como un conejito de verdad, saltando aquí y allá junto a su mochila de tortuga. Él mismo había escogido su atuendo para esa tarde y se veía increíble.

Estando en el departamento, se podían visualizar las decoraciones que resaltaban, puesto que la noche anterior Jungkook había estado utilizando sus tijeras especiales para recortar fantasmas, pegarlos donde fuera y así tener un ambiente más espeluznante, como murciélagos y calabazas con lucesitas, telarañas falsas y arañas con grandes ojos movibles, esas también las había hecho él.

Al principio de temporada no había dejado de asustarse con cada cosa que veía, porque alguna vez en el pasado esos objetos de utilería lo habían atemorizado, no obstante, tanto YoonGi como JiMin, le habían mostrado que no había mucho de que preocuparse, porque la noche de brujas que ellos llevarían a cabo sería divertida y con muchos dulces de por medio.

Las canciones infantiles también habían servido un poquito para animarlo, además los disfraces que habían escogido no era de algún monstruo o fantasma, sino algo más animado.

El olor a galletas recién salidas se esparció por toda la sala, JungKook dejó en el suelo las tijeras y corrió hacia la cocina donde estaba YoonGi sacando la bandeja caliente, con esos divertidos guantes de Frankenstein. Llevó un banquito y se paró en el para observar las figuras de calabazas, fantasmas, dulces, murciélagos y un gato muy gracioso.

ㅡUhh, huelen deliciosasㅡ exclamó con entusiasmo.

ㅡSolo hay que esperar porque aún están calientes ¿Por qué no vas a ponerte ya tu disfraz, conejito?

Los orbes del menor brillaron y se bajó de inmediato para buscar a JiMin, encontrándolo en la habitación principal arreglando los demás disfraces. Llamó su atención cuando empezó a brincar en la cama.

ㅡPapá Min Min dijo que ya podía ponerme mi drisfazㅡ dijo al caer de espalda, estirando cada parte de su cuerpo.

ㅡYa es hora en realidadㅡ se fijó en la hora, ya iban a ser las siete y a las nueve deberían estar en casa ㅡVamos a vestirte Koo.

El menor se paró de inmediato, viendo como JiMin sacaba del armario un traje de abeja, perfecto para él, junto a una diadema de antenas y una canasta en forma de tarra de miel, al verde al espejo finalmente vestido, con su nariz levemente pintada de rojo con sus mejillas sonrojadas, sonrío enormemente, corriendo mientras hacía sonidos de abeja.

Zumbando aquí y allá.

ㅡKoo abejita soy, buscando flores voy, me gustan dulces, sí sí síㅡ cantaba a cada paso que daba, rodeando el sillón mientras sus padres le tomaban fotografías.

ㅡHey, YoonGi mi amor ¿Vienes por tu disfraz también?

Y aunque el rubio quiso huir, realmente pensó que la ventana era una opción viable, no tuvo escapatoria cuando fue llevado al cuarto para ser preparado, también con maquillaje.

Evidentemente, los disfraces habían sido escogidos por JungKook el día que fueron a comprarlos, había elegido algo animado y aunque no habían muchas opciones porque en su mayoría eran más terroríficos, decidió ser una abeja y para sus padres...

ㅡTe ves hermoso YoonGi, no, adorable mejor dichoㅡ dijo el castaño, apretando la mejilla del rubio que estaba inmóvil.

YoonGi era... un oso, un traje café con colita y sus orejas, más el maquillaje, JiMin por otro lado era una flor muy bonita, el pequeño al verlos comenzó a reírse a grandes carcajadas y aunque sabían que no era a modo de burla, sino más emoción, se sintieron un poco avergonzados.

ㅡPapá osito y papá florecita, quieren mucho a Koo abejitaㅡ volvió a cantar el menor, esta vez volando entre ambos.

ㅡBien, vamos por esos dulcesㅡ animó el castaño, peinando los pétalos que rodeaban su cabeza.

YoonGi casi se aferra a la casa, pero cuando los ojos brillantes del menor lo atraparon se dio cuenta que, no podría hacerlo, debía ir y ser un oso, era la primera noche de brujas de su pequeño y, él haría todo por él.

ㅡVamos pequeña abejita, a conseguir todos esos dulces.

El menor alzó sus brazos para ser cargado, de tal forma que así estuvo hasta llegar al vecindario.

Entre los edificios había un muy pequeño parque, que consistía de un árbol y un poco de césped, ahí Koo visualizó un enorme esqueleto con tumbas al rededor, además de una enorme olla de dulces.

ㅡ¡El esoqueloeto tiene dulces!

El castaño volteó al ver la olla, pero por la forma en la que el menor se aferraba a la pierna de YoonGi, sabía que él no iba a acercarse para agarrar, así que él se dirigió con cuidado a tomar dos caramelos tal cual indicaba el letrero, al intentar tomar uno más, el esqueleto comenzó a cantar una canción bastante desafinada, ante la impresión saltó de un susto y comenzó a reír, mientras que YoonGi y Koo se habían asustado porque no se lo esperaban, por eso estaban un poquito más lejos.

ㅡLo siento señor esqueleto, tomé uno de másㅡ le dijo al muñeco antes de dejar el caramelo en la olla.

ㅡEsas máquinas están tan avanzadas ahora.

ㅡBueno, está bien que controle la cantidad que cada persona toma. Hoy es la noche indicada para abastecerse de azúcar.

ㅡ¿También puedo llenarme de azúcar papá Mimi?

ㅡUh, tú iras de poquito a poquito.

ㅡY tú también JiMinㅡ le indicó YoonGi a lo que el castaño suspiró.

Aguafiestas, pensó JiMin.

La decoración ese año había mejorado, aunque algunas eran grotescas no dejaban que el menor las viera, solo señalaban disfraces y también se acercaban a ellos para decirles lo muy adorables que se veían.

ㅡMi pequeño Koo está robando muchos corazones hoy.

ㅡ¿Los tengo que asustar papá  Mimi?ㅡ inquirió el menor, volteando hacia atrás cuando un grupo de niños asustaba a otro grupo, sus disfraces eran un poco más aterradores, solo que él no quería causar miedo, solo quería dulces.

ㅡClaro que no, si no quieres, vamos a conseguir dulces a aquella casa.

Los tres se apresuraron y tocaron el timbre, quedándose a un lado del menor que se quedó frente a la puerta sin entender mucho, la misma se abrió mostrando a una mujer con cuernitos en su cabeza y un vestido, no supo bien qué era, pero la misma chilló de ternura al verlo, poniendo hasta cuatro dulces en su bolsa.

ㅡMuchas gracias, señora toro.

La sonrisa de fémina desapareció al oírlo ㅡ¿Toro?ㅡ preguntó incrédula, pero los adultos ya habían apresurado el paso hacia otra casa.

Los niños tenían una sinceridad maravillosa.

En poco tiempo su bolsita ya estaba llena, por lo que le pidió a su papá oso que le prestara la suya para seguir llenándose de dulces, al final era una actividad que le gustaba mucho porque solo tenía que sonreír y los dulces caían inmediatamente, si hacía ojitos eran puntos extras.

ㅡMira esos vestidos de fantasmasㅡ señaló YoonGi, un par de niños iban corriendo con las sábanas arrastradas, se podían escuchar los regaños de sus madres ㅡCuando era Halloween, solía salir a ver los disfraces con mi hermana, eran tan curiosos y a ella le parecían horribles.

ㅡ¿Nunca te disfrazaste?

ㅡUh, una vez utilicé su maquillaje para hacer un intento de pirata, dijo que tuvo pesadillas por un tiempo.

El castaño soltó una risa ligera, alzando al pequeño entre ambos cada que quería dar un salto. Realmente, para él también era su primera noche de brujas, en la que salía a pedir dulces, conocía estas actividades de niño, pero nunca pudo participar en una, más que las cenas a las que asistía con sus progenitores, claro que con YoonGi habían disfrutado antes, pero yendo a fiestas con alcohol de por medio, o pasando la noche entre películas de terror.

Pero ahora que iban disfrazados de tal forma acompañando a su conejito, ahora abejita, se sentía feliz.

ㅡPapá Min Min ¿puedo ser amigo de los fantasmas? Creo que se sienten solitos y nadie los escucha, yo sé escucharㅡ le dijo al pálido, a lo que este no supo que responder.

ㅡOh, bueno... Mira, allá hay otra casa. Mejor vamos por más dulces porque pronto nos iremos a casa.

ㅡ¿Un fantasma puede comer galletitas? No me gusta mucho compartir mis galletas y si hago galletitas fantasmasㅡ iba balbuceando entre saltos, imaginando todo lo que se le cruzaba por la mente.

Se acercaban las nueve y la hora estaba afectando al pequeño, quién se había acostumbrado a dormir siempre a las ocho, por ello bostezaba a cada cierto tiempo, hasta que sus pies ya no querían caminar más.

ㅡPapá Min Min ¿me cargas?ㅡ YoonGi accedió, levantando al menor para cargarlo, el azabache se acomodó en su hombro y lo abrazó por el cuello, intentando mantener sus ojitos abiertos para seguir observando todo lo que lo rodeaba.

ㅡBueno, creo que es momento de volver a casa ¿disfrutaste esta noche, abejita?

Koo asintió efusivamente, levantándose un poquito para explicar lo que sentía ㅡMucho mucho, me gustan los dulces y los disfraces, también me gusta que estén conmigo, ahora ya no me da miedo.

El corazón de JiMin dio un vuelco, apresurándose para cargar esta vez él al menor, llenando de besos su rostro, el pequeño solo podía reír más que feliz por las cosquillas y muestras de afecto, así que también abrazó a su papá, con mucha fuerza ㅡ¿Te hizo feliz recoger dulces, papá Mimi?

Su pequeño era tan hermoso ㅡPor supuesto que sí mi conejito, recoger dulces con YoonGi y contigo, es algo especial.

Koo asintió contento, esta vez cerrando por completo sus ojos para dormir. Sabía que sus papitos iban a teletransportarse y lo llevarían hasta su camita, calientita y suave, tal vez hasta despertaría sin su disfraz, en su lugar, un pijama de dinosaurio, pero despertaría feliz porque tendría dos grandes bolsas de dulces y galletas.

Su primera noche de brujas había sido divertida, conoció muchas casas y personas, fue una abeja como quería y sus papás lo acompañaron ¡Tenía muchos dulces también! Así que Koo era muy feliz y lo seguiría siendo por mucho más tiempo.

ㅡ¿Crees que se asuste si me pongo una sábana encima y le digo que ahora seré su amigo?

JiMin alzó la ceja, terminando por apagar la luz de la habitación que compartían. Habían llegado a casa sanos y salvos.

ㅡHasta yo me asustaría, incluso si no tuvieras ningún disfrazㅡ bromeó el peligris antes de meterse a la cama, acurrucándose contra el pálido.

ㅡEres tan encantador ¿comenzamos entonces?ㅡ le dijo al oído, suave y ronco, a lo que JiMin le sonrío de inmediato mordiendo su labio.

Esa noche no dormirían porque una bolsa de dulces los estaba esperando, junto a un par de galletas y un maratón completo de películas de terror. Porque sí, también tenían su pequeña tradición de Halloween, tal vez cuando  Koo creciera podría unirse, mientras tanto dejarían que creyera que los fantasmas eran como Casper.

¡Especial 1M de vistas!

Es aún increíble para mi, estoy muy, muy agradecida y feliz por lo que ha logrado WAJ, por lo que quise dejarles este pequeño especial, con Koo abejita, espero que lo disfruten mucho 💛

bonito dibujo por takashi_kun_03 💛

bonito dibujo por jkooby_ 💛