Hana se encontraba en su habitación
haciendo videollamada con su mejor amiga, la cual seguía molesta porque la pelinegra decidió volver a su casa y no quedarse a dormir en la suya como habían quedado, ya que se echaban de menos y tenían demasiado de que hablar.
Aún así se emocionó cuando le contó lo sucedido con Jungkook, hasta le pidió los mínimos detalles y soltaba gritos de emoción como también aplausos. Pero cuando le contó que este decidió no verla más, enfureció, lo cual se lo esperaba demasiado.

―Es un grandísimo idiota ―habló entre dientes―. ¡Y tú aún así quisiste buscarlo!

―Félix me convenció.

―¿Y él qué sabe? No quiso arriesgarse conmigo, pero a ti te insiste en que lo hagas cuando claramente no tienes que hacerlo. Idiota ―dijo lo último en un murmuro casi inaudible.

―Oye, él creyó que era lo correcto, hasta yo lo creí por un momento.

―¡Era obvio que no! Yo dije que seguro se le subió la fama a la cabeza.

―Nunca dijiste eso.

―Bien, sólo lo pensé. ¡Por algo no le agrado!

―O tal vez porque lo criticabas.

―Oh, vamos. No fue nada ―rodó los ojos―. Es un idiota al que se le subió la fama.

Hana estaba negada a pensar igual que ella, porque luego de lo que habló con Taehyung, logró comprender porqué lo hizo y lo entendía perfectamente, como también iba a respetar su decisión.
Aún así pensar en que no iba a volver a abrazarlo, provocaba una presión en su pecho. Sabía que ahora iba a ser muy difícil solamente verlo sonreír y reír detrás de una pantalla. Quería volver el tiempo atrás, donde simplemente lo admiraba para desaparecer la decepción, como también el dolor.

―No. No es eso. Creo que fue la mejor decisión ―suspiró―. ¿Acaso piensas lo que pasaría si alguien se entera que Hyunjin lo golpeó? ¿Si alguien se entera que él se veía con una fan?

―Agh, pero la manera en la que hizo todo...

―Lo sé, pero debo aceptarlo. En algún momento va a dejar de doler.

―¿Te gusta Jungkook? ―preguntó sorprendida.

Al escucharla abrió los ojos a la par sin poder creérselo, pues de sólo pensar en eso se sentía estremecer y provocaba un cosquilleo en su estómago. Se repetía una y otra vez que jamás podría verlo de esa manera, que sólo era una persona que admiraba y se había encariñado demasiado por lo tierno que se le hizo las veces que se vieron. Pero luego recordaba la última vez, su orbes oscuros que la admiraban, su dulce sonrisa, su manera de entrelazar sus dedos al caminar y ese pequeño beso robado.

Sacudió la cabeza para quitar ese pensamiento, porque no quería creer que se sentía atraída por él. Eso le provocaba miedo ya que Jungkook decidió alejarse, por lo que sufriría más, y además, era incapaz de creer que pudiera llegar a sentir lo mismo.
Se le hacía imposible, más imposible que el antes poder llegar a imaginárselo a él y a Taehyung leyendo su historia.

―¡Te gusta!

―¡¿Qué?!

―¡Claro que sí! Jungkook te vuelve loca.

Quería negar aquellos sentimientos, pero al voltear hacia la ventana y ver a Hyunjin salir mientras hablaba por llamada, se sorprendió.

―¡Hyunjin!

Sin importarle aquella videollamada dejó el celular en el mueble cercano en la sala, ya que su emoción por verlo, por poder hablar era demasiado intensa, por lo que no podía pensar con claridad y salió dando un portazo.

Al voltear y verlo de espaldas aún concentrado en la llamada, sonrió sintiendo su corazón golpear con demasiada fuerza por haber corrido.

―¿Hyunjin?

Este al escuchar su voz volteó sorprendido, sin poder creerse que ella estuviera en frente. Pues, pensó que luego de lo sucedido ahora la fémina tampoco era capaz de querer hablar, de querer verlo.

―Te llamo luego, ¿sí? ―soltó una risilla al escuchar su respuesta―. Yo también estoy emocionado por eso. Adiós.

―¿Q-Quién era?

El sólo hecho de verlo reír y hablar de esa manera hacía que sus inseguridades despertaran, que volviera a su cabeza la idea que le terminó por estar enamorado de alguien más.
Sabía que lo que tenían se terminó por más que ella no quería para nada eso, sabía que estaba en todo su derecho de estar con alguien más, pero no podía hacerse la idea de que pasara.
No sabía cómo podría soportar saber que estaba entrelazado a alguien más, que podía llegar a amar a otra chica que no era ella, que ahora sus ojos iban a mirar a esa persona.

―¿Acaso importa?

―Sí, me importa.

―Se trata de mi primo que vive en Australia. Me dijo que en cuanto esta mierda acabe, vaya a visitarlos.

―Oh...

Hana quería reír por lo tonta que se sentía, pero a la vez estaba aliviada y sus inseguridades habían desaparecido rápidamente, porque notaba en su mirada lo sincero que era.

―¿Ahora vas a decirme qué es lo que quieres?

―Hablar contigo sobre lo que ha pasado.

―Oh, ¿tu novio Jeon Jungkook te ha pedido que me reclames por ese golpe? ¿Acaso no puede hacerlo él? ―soltó una risa amarga.

―No es mi novio y nada de lo que piensas es así ―aclaró acercándose y mirándolo angustiada―. Hyunjin yo jamás te engañé, no...

―Ya deja de mentir. Sólo lo empeoras.

―¡Me conoces, Hyunjin!

―¡Ya no sé qué es verdad, y qué no lo es! De un momento a otro te veo con Jungkook, y Diablos, siento que estoy volviéndome loco ―expresó llevando la manos a su cabeza y soltó un suspiro.

―Lo sé. Todo parece demasiado irreal, pero nunca te engañé. Lo único que te ocultaba es que escribía en Wattpad.

―¿Qué? ―preguntó atónito.

―Lo que has escuchado. Escribía una estúpida historia de Jungkook, y tenía vergüenza que tú lo supieras.

―E-Espera. Vi esa aplicación en tu celular muchas veces, pero jamás me esperé ésto.

―En verdad me avergonzaba decírtelo y hasta ahora siento lo mismo, pero si no me crees puedo llamar a Félix o a Misuk que ambos lo saben. Hasta puedo buscar mi celular...

Hana tiene la intención de volver a su casa, mientras se reclamaba por no haber salido con el celular, pero sintió la mano de Hyunjin que la tomaba de la muñeca haciendo que volteara a verlo.

―No es necesario.

―¿Me crees? ―preguntó ilusionada.

―Supongo ―murmuró algo inseguro― ¿Y Jungkook, qué? ¿Cómo es que sales con él?

―Leyó mi historia. La persona con la que hablaba era él, pero juro que no lo sabía porque no me lo dijo hasta hace un tiempo.

―¿Qué? ―arrugó el rostro―. Diablos, Hana, lo que me cuentas es... es imposible. Siento que en verdad quieres hacerme enloquecer.

―Lo sé, pero es la verdad.

―Es demasiada información para procesar ―murmuró pasando las manos por su rostro―. Lo siento. Ya no quiero seguir escuchando más. No puedo.

Al ver como empezaba a caminar hacia su casa, sentía como el miedo se apoderaba de ella y un nudo se formaba en su garganta, porque necesitaba un abrazo de él. Necesitaba que volvieran a ser los de siempre y que olvidaran todo lo sucedido.

―¡Tenías razón sobre él!

―¿A qué te refieres? —volteó a verla con el ceño fruncido.

―Creo que... Creo que tenías razón sobre que quería algo de mí e iba a aburrirse.

―¿Qué carajos? ―se acercó tomándola de los brazos, provocando que se sorprendiera―. ¿Se atrevió a pedirte...?

―¡No! Pero él... él me besó y desapareció.

Hyunjin soltó sus brazos mirándola dolido por lo que acababa de confesarle. Ella tragó en seco sin ser capaz de seguir mirándolo, pero es que no se sentía capaz de ocultarle algo así porque sabía que si volvían merecía saberlo.

―Hyunjin, lo siento.

―No lo hagas. No te disculpes.

―Lo siento ―murmuró tratando de acercarse, pero este se alejó―. Te sigo amando. Quiero estar contigo.

―¿Se supone que después de lo que pasó tengo que esperarte con los brazos abiertos? ―alzó la mirada dejando notar las lágrimas acumuladas, que provocaron que el corazón de ella diera un vuelco por la culpa―. Olvídalo, Hana. No es así.

―Hyunjin...―tomó su brazo cuando estaba dispuesto a volver a entrar.

―¡Déjame en paz, Hana!

Al escucharlo lo soltó permitiendo que este caminara hacia su casa y entrara dando un portazo, mientras ella rompía en llanto abrazándose a sí misma, sintiendo un profundo dolor en su pecho. El llanto se le hacía demasiado doloroso, cubriéndose la boca con la mano, sintiendo cómo las lágrimas no dejaban de brotar. Su corazón se rompía aún más y se aceleraba cada vez más al recordar sus palabras, tanto así, que llevó la otra mano al pecho debido a tanto dolor, pensando que quizás así no dolería más.

(...)

Hana se encontraba en su cama, recostada mientras algunas lágrimas caían empapando su cojín, lo cual no le importaba para nada. Sólo sentía la necesidad de saber qué era lo que pasaba por la mente de Hyunjin, ya que la suya no dejaba de traerle recuerdos de todo lo que vivieron, como mejores amigos, tanto como novios, dándose cuenta que se la pasaba viviendo y deseando un pasado que ya no iba a volver.
Trataba de mantenerse ocupada, pero siempre volvía a esos recuerdos por más que no quisiera. Y dolía, realmente le dolía pensar en que la única que lloraba de los dos, era ella.

Su celular vibró a su lado, pero no le prestó atención porque no sentía ganas de nada más que de llorar. Pues, en las últimas semanas sus emociones y pensamientos parecían encontrarse en una montaña rusa sin final.

Al volver a vibrar soltó un quejido de frustración, para luego limpiar sus lágrimas y tomar su celular.
En cuanto bajó la barra de notificaciones y vio que se trataba de Wattpad, entró sin dudar a aquel mensaje, sintiéndose temblar porque se trataba de Jungkook.

Hana, necesito saber algo.

¿Estás ocupada o estás ignorándome?

En ese momento sentía como el oxígeno abandonaba sus pulmones y no sabía qué contestar, ya que no se esperaba para nada que volviera a hablarle porque había tomado una decisión.
¿Acaso debía contestarle? ¿Debía cuando él nunca se atrevió a hacerlo y sólo desapareció?

Sus manos temblaban mientras seguía releyendo aquellos mensajes, debatiéndose entre lo que estaba decidida a hacer antes y lo que sentía.

¿Qué quieres, Jungkook?

Los segundos se le hacían eternos hasta que vio el nuevo mensaje, lo que provocaba que sintiera su corazón golpear contra su pecho. Llevó la mano a su pecho y tomó una bocanada de aire tratando de calmarse, porque Jungkook siempre causaba sus nervios y que su corazón se acelerara.
Era experto en eso hasta con unos simples mensajes, lo cual Hana odiaba de gran manera, porque antes de él su vida era tranquila y lo disfrutaba demasiado.

¿Cuándo vas a actualizar, Hana?

Es una broma, ¿cierto?

No.
Sólo quiero saber eso.
Hace un mes no actualizas.
Hasta he estado leyendo otras,
pero ninguna me gusta tanto como
tu historia.

¿Por qué me ignoras y luego
apareces con esta pregunta
como si nada?

Estuve ocupado.

¿Por qué no me dices la verdad?

¿Qué verdad?

Que tomaste la decisión de alejarte
por lo que sucedió.
Sólo tenías que decírmelo
y lo hubiera entendido.

ESTÁ BIEN.
SÍ, ME ALEJÉ PORQUE TE BESÉ.
Y SOY UN COBARDE.
AHORA NO PUEDO DEJAR DE PENSAR EN ESE BESO.
Y NO SÉ QUÉ RAYOS HACER PORQUE
SÉ QUE ESTUVO MAL.

¿Qué?

Por favor, perdóname.
Soy un imbécil.
Permíteme volver a verte.
Dejaré mi miedo a un lado y  te sacaré todas tus dudas.
Pero déjame verte.
Aunque sea por una última vez
porque sé que ahora me odias.
Por favor, di que sí, Hana.

¡Hola!

¿Se esperaban que Jungkook volviera de esa manera? ¿Creen que Hana sea capaz de aceptar?

Espero que les haya gustado, no se olviden de votar y comentar

¡Nos leemos pronto!