Episodio 1 | Renacimiento | Parte II
Hola, bienvenidos.
Me he dado cuenta de un par de cosas que salieron mal, realmente si creen que las reacciones están un poco mal o que les falta algo.
Espero que me lo hagan saber, si es quieren comentar sobre eso, como críticas constructivas o algunos errores de palabras y oraciones.
Cualquier cosa que aparezca no me pertenece...
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Apenas podían recuperarse de lo visto en la primera mitad, pudieron hacer visto con sus ojos lo que se trataría como el arma de matar más peligrosa y masiva del mundo.
Katsuki Bakugo la había encontrado eso está claro, y probó su validez en dos asesinatos a personas crueles, una vez para confirmar si es una broma y la segunda para estar seguro de si mismo.
Pero para ellos, fue para ver si es que como dicta las reglas de como usarla, que si se podía elegir el hecho de muerte y al final fue verdad.
Actualmente, todos a excepción de Nezu, estaban llegando a sufrir un estado de shock.
Más no podían hacer una pausa, sabían bien que esto tenía que continuar, por eso es que la proyección siguió.
En el Mundo Shinigami, las tornas de vida no cambiaron mucho desde que la Death Note ingresó en el Mundo Humano.
Los Shinigami caminaban por ahí, haciendo sus cosas.
—Han pasado 5 días.
Ryuk se levantó de la roca, mientras miraba hacia abajo, a un lugar en específico.
—Muy bien, ya es hora de ir.
Al parecer tendrían un descanso, luego de las dos hazañas que habían visto por parte de Katsuki Bakugo.
Volvieron a ver como es la existencia de los Shinigami, en su Mundo tan... Tan poco deseable de estar allí.
¿5 días? ¿Ya habían pasado 5 días desde lo que habían visto o algo parecido?
Tokoyami miró un poco confundido hacia el ente, y de lo que estaba hablando exactamente, parecía ser que ya estaba por irse.
¿Pero a dónde? Entonces lo pensó un poco... Podría ser que...
Está vez, se fijó un poco más en los demás Shinigami, parecía ser que cada uno portaba algo diferente en su apariencia.
Por lo que momento, se había decidido por la apariencia de Ryuk.
Iida miró fijamente hacia las nuevas criaturas Shinigami que les mostraba la proyección en el fondo.
Estaba un poco confundido, ninguno de esos seres estaba haciendo su trabajo como Shinigami, pues por algo portaban aquel puesto que también podría ser un título.
—¿Qué se supone que hacen todos los días?—Dijo Iida alzando una ceja.
Jirou soltó un suspiro, al menos ya estaba un poco más acostumbrada de ver a esos característicos seres y a su Mundo que dejaba mucho que desear.
Entonces miró hacia Ryuk, pensando un poco, honestamente un poco sorprendida de que no se haya movido de su posición durante 5 días sin hacer nada prácticamente.
La cuestión es, ¿Ahora a dónde estaría por irse?
Izuku Midoriya miró fijamente hacia allí, pues estaba muy seguro de algo, de un hecho.
Estuvieron viendo como es que Bakugo probó una de las reglas de la Death Note, y entonces el sujeto murió en un accidente.
—Es un lapso de tiempo, nos están demostrando que ya pasaron 5 días desde que Kacchan encontró la Death Note y mató a esas dos personas—Dijo Izuku como confirmación.
Bakugo estuvo al tanto, entonces dio un asentimiento, el también estaba confundido.
¿Por qué les mostraban un resultado de 5 días? ¿Qué había pasado con el y la libreta durante esos 5 días de adelanto?
Como todo lo demás, no le estaba agradando nada de nada.
Otros 2 Shinigami lo miraron casi al instante por lo dicho, parecía ser que Ryuk finalmente iba a hacer algo luego de estar quieto durante tanto tiempo.
—¿Qué? ¿Vas a algún lado, Ryuk?
—Odio decírtelo, pero todo nuestro mundo luce así.
Ryuk solo los miró tranquilamente antes de darles una respuesta sencilla del porque se quería ir.
—Es cierto, pero perdí mi Death Note.
La sangre se les helo, se les congeló ante lo dicho por el Shinigami Ryuk, escucharlo decir "Mi Death Note" fue lo que muy pocos necesitaron para confirmar.
Katsuki Bakugo no podía estar más pasmado, el sudor recorría su frente, estaba algo nervioso, ya sabía a lo que se estaba enfrentando su contraparte.
Sabía muy bien que su yo del pasado no le importaría, que se abalanzaría al combate como siempre lo hacía, pero con todas las amenazas que ha enfrentado y el secuestro que sufrió.
Tuvo una mejor manera de ver las cosas y si, tal vez se dejaba liberar un poco en combate y en contra del inútil de Deku, pero está vez este asunto involucraba a Dioses.
«¿Cómo es qué ese idiota se pudo involucrar tanto en estas cosas...?»
Y si, tampoco tenía siquiera la consideración de insultar a su contraparte.
Izuku Midoriya pensó un poco más, claramente estaba viendo lo que podría ser cierto en la teoría que pudo haber generado desde la primera aparición de Ryuk y Bakugo.
Ya más con la influencia de la Death Note, que aumentaba más su confianza sobre lo que imaginaba, esto parecía ser lo que necesitaba para estar seguro.
La Death Note que estuvieron viendo, es pertenencia del primer Shinigami que han visto, Ryuk.
«¿Un Shinigami puede visitar el Mundo de los Humanos?» Pensó Izuku mirando fijamente al Shinigami.
Si quería recuperar su libreta, tenía que moverse al Mundo Humano y a...
Bakugo...
Nezu solamente podía sonreír ante su pensamiento correcto, parecía ser que las cosas estaban teniendo relación.
Primero les habían explicado lo que es la aparición de la Death Note, como funcionaba y su demostración de validez de que realmente funcionaba.
Después, ahora con la dos víctimas que tenía en su espalda, Katsuki Bakugo confirmó con shock a la libreta.
Ahora con ese sellado, ya estaban por explicar el origen de la libreta y por supuesto que la Libreta de la Muerte tenía que tener un punto de conexión con los Dioses de la Muerte como imaginó.
«Es obvio pensar que la Death Note les pertenece a los Shinigami, después de todo. Ellos son seres que se encargan de guiar las almas a la muerte misma, por lo que utilizan cosas que está afuera de nuestra comprensión... Que tengan un arma así de simple y mortal, es de esperarse» Pensó el Director.
Los Shinigami soltaron un par de carcajadas burlonas y divertidas ante lo dicho.
—Ahora si metiste la pata, ¿Verdad?
—Espera un segundo, ¿No engañaste al viejo para que te diera una segunda Death Note? No me digas que perdiste ambas...
¿Engañar al viejo? ¿Una segunda Death Note?
—Bueno, este Shinigami es un irresponsable—Dijo Mandalay con los ojos en blanco.
Parecía ser que hasta los Dioses de la muerte son tan comprometidos, tenían sus propios fallos y ahora les revelaban que Ryuk ya ha perdido dos armas tan peligras como esas.
—Aparentemente, también es un triste y decepcionante vago—Susurro Pixie-Bob hacia un lado, para que no la escucharán.
Ahora que estaba viendo de esa manera, esos Shinigami comenzaban a dejar mucho que desear y tampoco tenían tanta presencia para intimidar.
—¿Tener dos de esas libretas? Ahora estoy creyendo que tener ese tipo de libretas, solamente es un simple juego para ellos—Dijo Snipe mirando fijamente hacia los Shinigami.
Por supuesto que sería un juego de niños para ellos tener tanto poder en sus manos, después de todo se debía a su cargo.
Sin embargo... Este Ryuk, parecía ser un Shinigami tan distinto y diferente a los demás.
—Y se supone que perdió ambas... ¿Es qué caso no sufren ninguna consecuencia de su líder o algo así?—Cuestiono Power Loader.
Se trataba de la Death Note, lo que cualquier tirano quisiera desea por querer terminar con las personas y hacer su reinado.
Otras personas, que seguramente la quisieran por otras funciones, pero al final de todo, seguían siendo asesinatos.
Que no hubiera consecuencia para los Shinigami perderla, le parecía inaudito e irresponsable del líder de los Shinigami, si es que hubiera alguno.
—Todos deberían ser esos seres tan aterradores, eso es de lo que hablan siempre.
Cementoss estaba confundido por las acciones de los Shinigami, hacían cosas que uno no imaginaria.
Se supone que son Dioses de la muerte, criaturas tan crueles y fuertes que infundian un miedo inimaginable, encargándose de guiar a los humanos a la muerte.
Eso es lo que las historias y mitos sobre la antigua era se hablaba, en cada libro, demonios a los que la humanidad ni siquiera quería atravesarse.
—Pero ellos... No son nada de eso—Dijo Cementoss.
—Por lo dicho, me hace pensar que este "Viejo" es su líder... O el sujeto con más autoridad... Que valentía la de Ryuk, engañar a su jefe por una segunda Death Note—Dijo Present Mic con una sonrisa tensa al final.
Ya habían pasado 5 días desde que Ryuk perdió su libreta al parecer, lo mismo con Bakugo que encontró una Death Note el mismo día.
Bastante coincidencia para ir hacia el lado contrario, solamente necesitaban la confirmación.
—Parece ser que a los Shinigami no se les tiene permitido tener más que una Death Note consigo, que Ryuk logrará engañar al líder Shinigami para tener una más, es un hecho que deberíamos mantener al tanto—Dijo Midnight mirando fijamente.
Parecía ser que el Mundo Shinigami no solo son criaturas que podían hacer lo que quieran.
También son controlados y gobernados por un Shinigami más, que seguramente sería alguien totalmente superior que el resto.
—Los demás también conocen la información de que Ryuk engaño a lo que es su líder por otra Death Note... Parece que a este líder en particular no le importa mucho lo que hagan su gente, ni siquiera si se trata en un asunto que lo relaciona—Dijo Aizawa con los ojos en blanco.
Como en todo lugar, el área del control no es lo suficiente para mantener todo en la tranquilidad.
Eso haría parecer que todos los Shinigami, no son los seres tan malvados que todos imaginaban, más parecían sujetos vagos que ni siquiera hacen un esfuerzo.
All Might pudo pensar acerca de eso, le sorprendía un poco el hecho de cuanta libertad tenían los Shinigami para hacer lo que quieran, sin recibir alguna consecuencia o aviso de advertencia de su superior.
Le parecía algo peligroso, que seres así estuvieran sueltos, causarían muchos problemas si tan siquiera unos pocos bajarán al Mundo Humano.
—Por cosas como está, es que nunca llegaremos a la paz...—Susurro All Might, decepcionado.
Los ojos abiertos de Endeavor si hacían presentes, quien miraba con una mirada llena de estupefacción hacia adelante, hacia todos los Shinigami.
Si de por si una Death Note ya es sumamente peligrosa en el Mundo Humano, podría haber cientos y cientos de esas libretas por todos los Shinigami existentes que portaban una.
Significaba que no solo existía un poder para matar, existían un número innumerable de libretas que podrían acabar el tiempo de vida tan fácilmente.
—Mierda...—Apenas hablo Endeavor.
Imaginar que habría tanto poder... Es sumamente aterrador.h
—Debes tener una idea de donde la dejaste.
—Si...
Dejando ambos allí, Ryuk comenzó a bajar por unas escaleras que conducía a algo mucho más importante, con paciencia.
El sabía donde la perdió, porque el lo hizo a propósito.
—En el Mundo Humano.
Los dos seres se quedaron sorprendidos por el dato, asombrados por el hecho de que Ryuk haya perdido la Death Note en el Mundo menos indicado.
—¿Qué...?
Bueno, esto es la confirmación que todos estaban esperando, no por nada ya habían hecho la teoría desde antes, y los que no lo hicieron, es cuando se daban cuenta.
De que definitivamente, la Death Note se trataba de la herramienta de Ryuk, que perdió en el Mundo Humano y Bakugo la recogió.
Momo miró fijamente hacia Ryuk, como es que bajaba por unas escaleras como si bajara del plano existencial hacia otro con solo caminar por eso.
—Vaya manera tan fácil de cruzar planos existenciales... Del Mundo Shinigami a nuestro Mundo—Dijo la Vice Presidenta de la Clase 1-A, un poco decepcionada.
Por otro lado, también estaba un poco preocupada, pues ahora que lo consideraban, Ryuk se encontraría con Bakugo tan pronto como encuentre su libreta.
Shoto Todoroki miró fijamente hacia la proyección, aunque una parte de el estaba interesado como es que los Shinigami tenían la posibilidad de bajar al Mundo Humano.
Tenía una concentración más extensa, estaba más fijado en el hecho de que pasaron ya 5 días desde que Bakugo encontró la Death Note y sabe que cosas haya hecho por todo ese transcurso de tiempo la verdad.
Además, con la llegada de Ryuk al Mundo Humano, con la primera persona quien con se encontraría, sería nada más que Bakugo.
«Espero que todo salga bien» Pensó Shoto.
Bakugo en todo momento miró hacia el Ryuk, pues su encuentro con el en esa dimensión ya es inevitable, pensar que su contraparte había recogido otra libreta que no sea la de ese Shinigami es una idea ridícula.
Parecía ser que las Death Note no llegaban tan fácil al Mundo Humano, y aunque no fuera una ley prohibida entre los Shinigami, seguramente no solía suceder por la codicia de esos inútiles mafiosos.
Sin embargo, con todo lo mostrado, los Shinigami no eran más que seres holgazanes que ni siquiera trataban de mover un brazo para eliminar personas.
Por lo que no había porque temer contra esa anomalía, solo son criaturas de mierda que se hacían pasar como caza almas.
—No me intimidas, loco de plumas—Dijo Bakugo con una declaración directa, sin miedo y sin nervios.
Lo único que tenía en la mente, es que hizo su contraparte en esos cinco días.
Iida pensó acerca de los cinco días de actividad de la contraparte de Bakugo, sinceramente la posibilidad de que el chico tirará la libreta ya es un sueño que no se hará realidad.
Con sus pensamientos del Mundo Podrido, con su forma de pensar que sería un favor para la sociedad de deshacerse del mal, matar a los criminales, a cualquiera que hizo una acción malvada.
Es difícil pensar que realmente recapacitará y tirará la Death Note a la basura, sabiendo su enorme poder.
—Será mejor que tengas cuidado, Bakugo—Dijo Iida con suma seriedad.
Kirishima permaneció sumamente preocupado por su querido amigo, mirando fijamente hacia Ryuk con sus dudas.
El también tenía claro el encuentro entre el Shinigami y el Humano, por eso es que su confianza de que algo tranquilo fuera a suceder es muy poca.
En el peor de los casos, Ryuk podría llevarse el alma de Bakugo por usar la Death Note, que es suya o algo por el estilo.
Al final de cuentas, se trataba de un Shinigami, es sumamente fácil pensar en algo así...
—Ten cuidado...—Dijo Kirishima mirando con preocupación.
Mina Ashido también se encontraba preocupada por su amigo, también sabía muy bien lo que podía significar un encuentro con un Dios de la Muerte.
Más si Ryuk podría estar en problemas por perder sus Death Note en el Mundo Humano, significa que podría estar desesperado por conseguirla.
Si Bakugo tuviera la osadía de negarle la libreta por cual acción que haya hecho en esos cinco días, podría llevar a dar un final bastante malo para su amigo.
—Usar la Death Note después de que un Shinigami la haya perdido... Ahora que me doy cuenta, es estúpidamente peligroso—Dijo Mina casi temblando.
Izuku miró un poco temeroso a lo que estuviera por suceder, no le hacía ningún bien a su pulso del corazón, el hecho de que Ryuk comenzará a buscar la libreta de la muerte.
La Death Note, la cual ahora estaba en manos del chico Katsuki Bakugo, una de las personas en las que no estaba de acuerdo que tuviera un arma como esa.
Por el mismo peligro que correspondía el utilizarla y ahora, un Shinigami lo estaba persiguiendo.
—Debería creer más en Kacchan... No es lo suficientemente tonto como para hacer desafiar o negociar con un Shinigami por la libreta—Dijo Izuku tratando de sonreír.
Deteniéndose justo al final, Ryuk miró fijamente hacia un agujero dimensional del que provenían manchas blancas, que lo más seguro es que eran almas.
Dos grandes alas crecieron en la espalda del Shinigami, entonces se dejó caer hacia el agujero, para buscar lo que estaba sucediendo ahora que la Death Note estaba en el Mundo Humano.
Entonces, en el Mundo Humano, específicamente en la Capital de Japón, la ciudad de Tokio, caía una inmensa lluvia debido a una tormenta.
Con sus alas extendidas para ayudarlo a volar, Ryuk surcó por los cielos en búsqueda de su Death Note hasta moverse en una dirección en específico.
Nadie estaría volando la capacidad de este Shinigami, que al parecer, es capaz de invocar alas sin ningún problema y volver a ocultarlas.
Tokoyami miró fijamente hacia el Shinigami, quería notar algunas similitudes entre sus apariencias y manera de hacer las cosas.
Su Quirk es una consciencia, un poder que tenía su propia manera de pensar y le servía de muchas maneras, más con sus habilidades y lo demás.
Le hacía fácil querer saber, que si por alguna razón, en esta proyección podría haber sido el Shinigami o su Darle Shadow.
No solo para parecer cool y tener alguna importancia, nada de eso, es porque estaba preocupado por Bakugo y lo que pudiera suceder cuando se encontrará con ese ser.
Mientras tanto, otros se quedaron interesados en el portal dimensional que había allí, que lo más seguro que sirven como puertas del Mundo Shinigami y el Mundo Humano.
—Si pensamos más acerca de lo que dijimos, que el Mundo Shinigami puede ser algo como el infierno, esas pequeños espamos podrían ser almas—Dijo Mirio algo incómodo de mencionarlo.
—Bueno, Joven Togata. No estás muy alejado de la realidad, esos espasmos no son pequeños efectos por la luz que resplandece, muy bien podrían ser almas—Dijo All Might con un asentimiento.
«Si siguemos los cuentos del cielo y el infierno. Quiere decir que estás almas han cometido "Pecados"» Pensó Aizawa frunciendo el seño.
¿Cuál sería el destino de esas pobres almas sin cuerpo? Ahora que estaban en un lugar tan desolado.
Otros parecieron estar más preocupados por Bakugo, pues ya se habían dado cuenta que Ryuk estaba volando los cielos de la ciudad donde vivía esa contraparte, en Tokio.
—Cada vez está más cerca, parece que pueden ir hasta donde quieran—Dijo Shoto mirando fijamente hacia Ryuk, como que al cruzar al portal, ya estaba en los cielos de Tokio.
Es de hecho un dato interesante, ya que para bien o para mal, parecía ser que ese agujero dimensional también servía para llevarte al lugar que deseabas.
—Está muy seguro por donde va... Como si supiera en donde está la Death Note en ese momento—Dijo Momo mirando hacia el Shinigami.
Apareció en Tokio sin dudar, si es que realmente la hubiera perdido, no sabría en donde siquiera se encontraba y no pudiera dar una localización tan acertada.
Además, estaba volando hacia algún lugar en específico, sin revisar por todos lados en donde estaba la libreta.
—Entonces... Podría ser que Ryuk al tener conexión con la Death Note, puede saber en donde está—Dijo Iida como para entregar una idea.
No es muy difícil de creer, pues con todo lo que habían visto, esto también fue quedarse corto.
Los Shinigami son seres totalmente superiores a los humanos, y si las cosas iban según los mitos, ellos usaban magia.
Saber donde se encontraban sus pertenencias, más si es una Death Note, no es tan difícil.
Mientras tanto, Bakugo se adentró a su casa con esta fuerte lluvia, abriendo la puerta lo recibió su madre.
Mitsuki Bakugo, miró a su hijo con una sonrisa.
—Que agradable sorpresa. Llegas temprano, Katsuki.
Katsuki cerró la puerta detrás suyo y miró a su madre tranquilamente.
—Sí. Hola, mamá. Es que...
Muchos ojos fueron dirigidos hacia la proyección, está vez con mucha más atención que antes.
Pues ya habían pasado cinco días, casi una semana, desde que el joven Bakugo se encontró con la Death Note, y desde entonces solo sabían que tenía dos víctimas escritas.
¿Puede ser que realmente haya seguido asesinando gente de un ataque cardíaco? ¿O qué había sido de la Death Note?
Aizawa pudo dejar salir un pequeño suspiro, mirando como es que Bakugo se comportaba normal, eso es bueno.
—Al menos, no ha perdido la cordura por las vidas que mató—Dijo el Profesor Principal de la Clase 1-A.
Sería bastante más problemático que haya perdido siquiera alguna parte de si mismo, pero parecía más normal.
All Might asintió, estando feliz, esto podría ser una señal bastante buena, pues quería pensar positivamente antes que erróneamente.
—Si, parece que el joven Bakugo no ha cambiado en lo absoluto de lo que vimos al principio—Dijo el ex Símbolo de la Paz de Japón.
Únicamente lo que lo mantenía inquieto, es que si aún tuviera la Death Note consigo, sería muy peligroso.
El Shinigami ya lo estaba buscando, y no tardaría mucho en encontrarlo.
Nezu no apartó la mirada mientras pensaba en algunas cosas, con todo lo visto, podían dar a tirar que no quedaba mucho tiempo para Bakugo, en caso de que Ryuk decidiera matarlo en pocas palabras.
Por lo tanto, sería tonto pensar que Bakugo tirará la Death Note así nada más, sabía bien que es imposible para la mente humana abandonar el poder de asesinar de esa manera, si es que no se asusta como en el caso del joven Bakugo de esa dimensión.
Además de que era demasiado puro, ante la oscuridad y crueldad que ya rodeaba ese Mundo tan catastrófico de homicidios.
Y en otro punto de los casos, había algo que no lo dejaba con buen sabor de boca.
«Me falta mi Té...»
Katsuki Bakugo miró un poco impresionado, pues nunca podría haber creído de ver a su madre así... Las cosas cambiaron un poco.
Podía presentir el ambiente tranquilo y no tan tenso del giro de personalidad de su madre, ahora en esa dimensión, parecía ser solo una ama de casa común y corriente.
—Maldición... Será difícil acostumbrarme—Dijo Katsuki casi haciendo una mueca.
Sus instintos estaban explotando, cada vez que estaba cerca de su madre, ya sabía que en algún punto habría un regaño fuerte, y siempre recibía algún golpe.
Izuku Midoriya también tuvo su propia sorpresa, pues es capaz de sentir exactamente lo mismo que su amigo de la infancia, que pronto se convirtió en un abusador durante una gran parte de su año escolar.
Se notaba desde lejos, el gran cambio de personalidad que había entre la tía Mitsuki alternativa y la que permanecía con ellos en el Mundo de héroes.
Antes vieron un pequeño corto de ella, ahora la estaban mirando por completo, frente a frente y las cosas son diferentes.
—Bueno, al final de cuentas, sigue siendo una increíble persona—Dijo Izuku con una sonrisa de agradó.
Minoru Mineta, el pequeño humano púrpura que sufrió mutación por su Quirk, que ahora no funcionaba, pero no es como si cambiará mucho, solo no podía tomar las esferas pegajosas de su cabeza, que ni siquiera eran pegajosas ahora.
Miró muy atentamente hacia Mitsuki Bakugo, sus impulsos pervertidos se fueron al cielo ante lo que estaba viendo.
Ante su propia opinión, siempre había opinado que Mitsuki Bakugo, la madre de su compañero explosivo terrorista. Que es una muy buena señora, y con decir eso, muy buena.
Lo malo, es su personalidad que podía cambiar en un giro de 180° de ser la de una mujer tranquila a una totalmente intimidante como la de Bakugo.
Ahora que está Mitsuki Bakugo es una persona mucha más tranquila, sin tener esos defectos y ahora que se comportaba como una ama de casa, las cosas cambiaron radicalmente...
«Bakugo... Siempre has tenido a una milf tan sexy...»
Claro que eso le bastó un golpe, proviniente de Kaminari que pudo reconocer muy bien las intenciones que implicaban la mirada del pequeño pervertido.
—¡Ah, rayos!
Pues el se había juntado bastante con Mineta, hicieron muchas locuras pervertidas juntas no pasadas de tono, y durante estos últimos días había reflexionado un poco.
Pues haberse sentido cerca de aquella fastidiosa chica de los auriculares, al final tuvo una influencia obvia en sus acciones.
Por lo tanto, ahora que se daba cuenta de los pensamientos de su amigo púrpura, tuvo que golpearle fuertemente la cabeza para sacarlo de ese embrollo.
—Oye Mineta...—Susurro Kaminari, casi en un tono muerto.
—¡¿Qué te sucede por la mente?! ¡Eso me dolió!—Exclamo Mineta sobándose la cabeza, con dolor.
—No está nada bien... Nada bien, ver de esa manera a la madre de un amigo o compañero... Es indignante—Dijo Kaminari.
Ante eso, Mineta guardo silencio.
Y afortunadamente, nadie le tomó atención a su pequeño escándalo.
Deteniéndose en su propio hablar por una pequeña confusión, de ver a su madre sonreír de forma amable y abrir sus manos, como si fuera a recibir algo.
Entonces, casi inmediatamente recordó que es lo que su madre quería y actuó rápidamente.
—Ah, los resultados de los exámenes nacionales.
Bajando su bolso hasta el suelo, abrió el cerré y comenzó a buscar.
Esto mientras que Mitsuki parecía emocionada por recibir los resultados, pues desde hace mucho que su hijo siempre ocupaba el mejor lugar.
—Los esperé todo el día.
Una vez encontrando los resultados, que estaban hechos en hojas blancas, Katsuki se los extendió a su madre.
—Ten.
Mitsuki los agarró suavemente y miró fijamente hacia el puntaje de calificación, además de la posición en la que quedó su hijo.
Una vez confirmando todo, ella no podía estar más feliz y orgullosa.
—¡Cielos! Primer lugar otra vez, son los mejores resultados que has logrado.
La sonrisa de Bakugo estaba siendo clara, parecía ser que el muchacho estaba bastante orgulloso de los alcances de su contraparte sobre resaltar, ser el mejor de alguna u otra forma ya que no habían Quirk.
No le importaba al menos, el hecho de que está contraparte suya mostrará un intelecto que lo superaba por completo, porque eso demostraba la diferencia justa entre ambos.
El es el mejor de toda la Academia usando su Quirk, mientras que su contraparte se convertía en el mejor estudiante de Japón.
—Bien hecho, creo que ya no eres tan falso—Dijo Katsuki con una gran sonrisa de arrogancia y triunfo.
Momo también estuvo sorprendida de ver y escuchar las capacidades de inteligencia que sostenía aquel Bakugo, ya que además de haber tenido ya el primer lugar en los exámenes semanales.
También habría el hecho de que lo consiguió nuevamente, está vez con mayor promedio, significando que su conocimiento solamente iba creciendo.
—Imaginó que las diferencias dimensionales van a sobresalir en estos conceptos—Dijo Momo, sorprendida.
Iida estuvo asombrado, pues ellos dos no son los únicos que estuvieron afectados por está nueva demostración de los diferentes que podían ser el Bakugo original y ese Bakugo.
Si bien, ya sabían que su compañero y amigo es un buen alumno conforme el estudio, que quedaba entre los primeros siempre.
Jamás pudo haber esperado que en esta nueva dimensión, se llevará este logro significativo.
—El mejor estudiante de Japón... Increíble—Dijo Iida admitiendo su sorpresa, con honestidad.
Asui también admitió su sorpresa, pues también se le fue tomado por debajo el hecho de que este Bakugo, se trataba del adolescente más listo de todo Japón.
Pues con su promedio oficial, ¿Quién no se sentiría orgulloso de su familia acerca de esto?
Además, que se convirtiera en algo así, podría tener sus pro y contras acerca de la Death Note, si es que en estos cinco días, nunca trató de deshacerse de ella.
—Debo decir que es impresionante—Dijo Asui con un asentimiento firme.
—Estoy de acuerdo contigo—Dijo Mina.
A ella también le sorprendía los alcances a los que podía llegar Bakugo, parecía ser que esta contraparte tenía tanto potencial si llegaba a tener una inteligencia como esa.
Sabía muy bien que nadie de ellos, ni siquiera Momo o Iida o Midoriya podían conseguir tal calificación contra los demás estudiantes de Japón.
Por eso es que es impresionante.
—Este Bakugo...
Hanta Sero miró fijamente con asombro hacia el tan calmado chico en la proyección, que aún estando en frente de su mamá.
Ni siquiera trató de alardear sobre su logro, siempre manteniéndose normal, como si se tratarse de algo tan típico para sus días.
—Nos sigue regalando más sorpresas—Dijo el chico de las cintas.
Izuku se mantuvo perplejo, altamente sorprendido por lo que les estaban demostrando, igual que los demás o mayor.
Si bien, siempre supo que Bakugo fue un gran estudiante al momento de trabajar, lo supo porque siempre fue así, desde que estuvieron juntos en la escuela, haciéndole la vida imposible.
Los dos fueron los que más destacaban del resto de sus antiguos compañeros, a veces Bakugo lo superaba, a veces el, siempre fue una batalla para quedar en el primer lugar.
Y hasta ahora, quedaron solamente en empate por todas las victorias ganadas entre ambos.
Que ahora, en esa dimensión se convirtiera en algo sumamente superior, en el mejor estudiante del país que representaban es totalmente asombroso.
Y si lo pensaba mejor, parecía ser que ni siquiera le importaba eso.
«Kacchan... Es el mejor estudiante de Japón y tiene una expectativa del mundo tan necesitada...»
Cambiando la dirección de su mirada, Izuku la fijó directamente en lo que es Bakugo, quien estaba a unos amigos más alejado de el.
«Es aterrador... Lo hace parecer como la persona más indicada para recibir la Death Note»
Por alguna razón, su brazo derecho no dejaba de temblar.
Aizawa simplemente le envío una mirada aprobatoria al Bakugo de la proyección, tal vez tenía un par de contras, ya que no le gustó nada como es que mató a dos personas sin dudar.
Optó por concentrarse más en los logros que consiguió, que son sumamente los más adecuados.
—Tal vez debería probar una táctica diferente y Bakugo pueda desarrollar más su intelecto—Dijo Aizawa, pensando.
Entonces recordó la personalidad común que solía tener Bakugo, cuando es sacado de su concentración.
—Y también... Mejorar en eso—Dijo Aizawa teniendo un tic en su ojo.
Katsuki se levantó y empezó a subir las escaleras.
—Si, eso creo. Voy a mi cuarto a estudiar, así que por favor, no interrumpas ¿De acuerdo?
—Como gustes.
Caminando hacia el punto frontal de las escaleras, Mitsuki miró fijamente hacia su hijo que iba subiendo a su habitación.
Entonces Katsuki abrió la puerta de su cuarto y casi la cierra, pero la dejó media abierta para mirar hacia su madre.
—¿Se te ofrece algo, hijo?
Katsuki solo le sonrió tranquilamente a su madre.
—Puedes pedir lo que quieras.
—No, estoy bien mamá, gracias.
Present Mic miró con una sonrisa hacia la proyección, la forma tan fácil en la que esté Bakugo ahora podía pedir lo que quiera debido al gran humor y orgullo de la madre.
—¿Lo ven muchachos? Está es una de las razones por las deberían sacar buenas notas, mantienes orgullosos y felices a tus seres queridos—Dijo el héroe de la radio, con una gran sonrisa.
Aizawa solamente pudo mirar con un tic a Present Mic, ante lo que estaba diciendo así nomás, así no deberían ser las cosas, los estudios no eran un beneficio para los padres o para cualquier persona.
—No puedes ser más...
Soltando un suspiro de resignación, el héroe borrador se acarició la nariz.
—Niños, los estudios es un beneficio único para ustedes, no para sus seres queridos, eso es pasajero—Dijo Aizawa.
Cuando terminaron de hablar, los estudiantes se quedaron en un silencio un tanto incómodo.
Mientras tanto, los demás profesores le enviaron miradas reprobatorias hacia Present Mic, quien sudo frío al final.
Bakugo por su parte pareció más sorprendido por la amabilidad y la insistencia de su madre en esa Dimensión, pues se notaba claramente la diferencia.
Nunca la había visto así, pues aún cuando el llegaba a casa con las mejores calificaciones tras ganarle al Deku, ella solamente que lo hizo bien y ya.
Esto ya le parecían un poco incómodo, no podía acostumbrarse bastante bien ante aquello.
Cerrando la puerta de la habitación, entonces es cuando Katsuki se dio la vuelta... Concentrándose en su ojo, el cual tuvo un brillo intenso muy particular.
«Ya tengo lo que quiero»
Claramente, esto fue una señal que no le gustó a nadie.
Ni los estudiantes, que tan pronto hablo de esa forma tan particular y específica, todos ellos se encontraron en una tensión sin igual.
Los héroes y profesores se quedaron igualmente bastante estrictos, su seriedad fue clave para este momento, pues finalmente se demostraría que hizo Bakugo.
Para juzgar a primera vista, aquel comentario mental y ese brillo tan familiar que desgraciadamente All Might pudo reconocer, no fue tan difícil imaginar que hizo continuamente...
Mientras que al chico en particular...
No le gustó nada, esa ambición.
Poniéndole seguro a su puerta, encendiendo la lámpara de su escritorio y abriendo un pequeño cajón del mismo...
Abrió la Death Note y... Habían muchos, MUCHOS nombres escritos en dos hojas por completo, mientras que la sonrisa de Katsuki se convertía en una más sádica, hasta dejar escapar una risa ligera.
Los ojos de cada uno... Se fue abriendo, poco a poco, cada par de miradas comenzaban a convertirse en un gran horror ante lo que estaban viendo.
Las imágenes se fueron alterando, todos fueron capaces de visualizar todos los nombres escritos en dos hojas del cuaderno.
Present Mic frunció el seño, mirando hacia la proyección, como es que Bakugo ya haya asesinado a más de 50 o 100 personas aproximadamente con la Death Note.
No es el único que se demostró decepcionado o furioso.
—No puede ser... No tiro la Death Note—Dijo Present Mic, el entusiasmo ya se había esfumado.
Midnight simplemente cerró sus ojos, mientras que negaba con la cabeza, claramente decepcionada con la contraparte de Bakugo.
Pues con esto, demostraba que ya no tenía ninguna salvación alguna de volver a la normalidad.
—¿Qué demonios...?—Dijo Midnight, no podía estar más horrorizada.
¿Cómo fue capaz que pudo escribir tantos nombres?
Aizawa simplemente negó con la cabeza, claramente estando horrorizado al escuchar la risa tan ambiciosa de aquel Bakugo.
Entonces lo supo, desde aquí es cuando se convertiría en un villano, un ser malvado que necesitaba detenerse pronto.
«Bakugo, pronto serás detenido» Pensó Aizawa, mirando fijamente hacia el muchacho.
—Joven Bakugo...
Si bien sabían que no se trataba del Bakugo de su mundo, aún así es doloroso y triste ver como es que el muchacho tan talentoso cayera ante el poder de la Death Note.
All Might ya no estaba sonriendo... No tenía tampoco un rostro de enojo, ni tampoco uno de decepción... Ni uno horrorizado, el estaba triste.
No podía creer que después de todo, no dejaría ir la oportunidad de tener el poder de un Dios en sus manos.
Endeavor solamente miró con horror durante unos segundos, mirando las incontables vidas que se han perdido por solo sus nombres y rostros...
Además, si se suponían que esos nombres son nombres de criminales. ¿De dónde pudo haber sacado tantos nombres? No creía que de las noticias a cada rato, a menos que tenga una base más de información.
Después soltó un suspiro mientras se llevaba una mano a su frente, y cerraba los ojos con estrés.
«¿Por qué todos quieren tanto poder?»
Ya no importa... Después de todo, el lo sabía muy bien sobre los esfuerzos por querer conseguir poder.
Y en el peor de los casos, Endeavor podría pensar que este Bakugo pronto se convertiría en un homicida totalmente desquiciado, todo por haberse corrompido por el poder en sus manos.
Nezu miró fijamente hacia allí, frunciendo el seño ante la risa tan fuera de lugar del joven Bakugo, estaba tan llena de ambición y deseo... Deseo por exterminar.
Además, ya es más horroso el tipo de efectos que solía haber, como esa alteración entre las hojas de la Death Note y el rostro sonriente del muchacho.
—Me temo que Bakugo está perdiendo la cordura.
Mientras tanto, los alumnos no lo podían creer.
Nejire hizo una mueca, no se sentía nada bien para su estómago y su sentir leer tantos nombres en esa libreta que estaba sumamente maldita.
—Ni siquiera tiene remordimiento—Dijo Nejire, nada bien.
Mirio soltó un suspiro, trataba de controlarse para no abalanzarse contra la proyección de holograma por culpa de lo que estaba viendo.
Criminales o no, siguen siendo vidas y Bakugo no tenía ningún derecho de elegir quien muere y quien vive.
—Solo hay que confiar... Que tarde o temprano, la ley lo atrapará—Dijo Mirio.
Tamaki miró un poco dudoso hacia su gran amigo, pues no sabía si confiar mucho ante eso realmente.
Pues había que recordar que tenía la Death Note, podría asesinar a las autoridades si se cruzaban con el y eso solo haría caer peor a Bakugo.
«No lo harán... La policía, ni nadie puede siquiera tener una oportunidad contra la Death Note» Pensó Tamaki.
Mina en estado de shock, mientras miraba hacia la icónica escena al igual que todos los demás, que no son capaces de creerlo.
Ella siempre tuvo la esperanza de que ese Bakugo se dejará de problemas y haya tirado la Death Note... Pero no pareció ser.
—Bakugo... Tu no...—Apenas pudo decir algo Mina.
Kirishima se quedó pasmado, mientras que solamente solía parpadear con incredulidad ante lo que estaba escuchando.
De todas las risas que su oreja pudo percibir de su amigo explosivo, está fue la más singular.
Aquello... Le colocó un inevitable escalofrío en toda su espina dorsal.
Satou estaba más enojado que otra cosa, pues esos nombres que fácilmente podrían ser cientos, habían caído muertos al suelo por ataques al corazón.
No podía creer que en esos cinco días, ese Bakugo haya cometido una masacre de ataques cardíacos.
—¡Maldito seas Ryuk, maldito seas!—Exclamo Satou, enojado.
Si no fuera por el estúpido Shinigami, Bakugo hubiera continuando viviendo como siempre lo hacía.
Aoyama permaneció bastante incómodo, pues no sabía que opinar sin sentirse mal consigo mismo, pues el también se comunicó con el mal.
Haberle pedido a All For One un Quirk para no ser un inútil entre tanta democracia, es algo que tuvo que hacerse y ahora trabajaba como traidor incubierto.
Sin embargo, pasaron los días y ahora ya no estaba tan seguro... Si de seguir de lado de All For One en ese asunto.
—Oh...
Ochako no podía estar más asustada ante lo que estaba viendo, pues apenas es capaz de procesar lo que estaba viendo.
En menos de cinco días, tantas personas ya han sido asesinadas por Bakugo sin remordimiento y parecía que lo disfrutaba.
Todo su cuerpo temblaba y trató de acariciarse a si misma, como si quisiera calmarse.
Pronto fue ayudada por un abrazo reconfortante de su amiga Jirou, quien también trató de apoyarse con el calor de su amiga.
Pues ella tampoco procesaba muy bien lo que estaba viendo, Bakugo ha asesinado ya a incontables hombres y mujeres solo por ser mayormente criminales.
—Demonios Bakugo...
—Parece que lo estás disfrutando.
La voz tan ronca y calmada, ocasionó una reacción rápida en Bakugo, quien soltó un jadeó al girar.
Un trueno retumbó, iluminando apenas la habitación y a la aparición del Shinigami, Ryuk.
Bakugo no evitó soltar un grito asustado, cuando cayó de la silla bruscamente.
Ryuk se quedó en su lugar, claramente la diferencia de altura entre el Shinigami y el Humano se hizo claro.
—No hay razón para sorprenderse. Soy el Shinigami Ryuk. Esa solía ser mi Death Note. A juzgar por tu risa ya te percataste de que no es una libreta común y corriente.
Ya no sabían que pensar, ahora el Shinigami justo ha llegado a la habitación de Bakugo por no haber tirado la Death Note en un principio.
Y ahora el estaba en graves problemas.
Kirishima no podía estar más atónito, mientras miraba hacia la proyección, le costaba oír la voz de su gran amigo de esa forma.
Tal vez no sean las mismas personas en cuanto a historia y formas de ser, pero compartían las mismas características físicamente, por lo que oír la misma voz así...
De una forma tan lejana de la justicia verdadera, le causaba un temor.
El lo presentía, todos lo hacían, todo cambiaría.
Katsuki no estaba nada feliz, no podía creer todo lo que estaba haciendo su estúpida contraparte.
Que sin piedad alguna, o remordimiento o lastima alguno, mató a tantas vidas de criminales solamente por querer hacer una limpieza inútil.
Y ahora, en el menor tiempo posible, Ryuk se encontró con la libreta, la Death Note en manos de su contraparte.
—Al menos... Mi contraparte tendrá que pagar por todas las muertes que ha hecho—Dijo Katsuki con seriedad.
Tal vez y solo tal vez, Ryuk podría llevarse el alma de su contraparte.
Claro, no le gustaba darse vencido así de fácil, siempre le gustaba luchar antes de decidir algo como esto pero... Su contraparte ya ha asesinado a muchas personas, muchas más de las que podía contar con los dedos.
Izuku se quedó igualmente callado, el estuvo bastante horrorizado por todas las vidas que su amigo de la infancia tomó, solamente para matar a la maldad del mundo.
Pues es fácil suponer que todos esos nombres, tanto de mujeres como de hombres, son criminales o personas que han cometido malas acciones.
Ahora no sabía que pensar, a pesar de eso, estaba preocupado de lo que Ryuk podría hacerle ahora.
«Desde ese ángulo, Ryuk se ve mucho más aterrador» Pensó Izuku, sintiendo su pie temblar.
Iida soltó un suspiro algo tenso, le costaba ver bien al Shinigami así, la primera toma de su rostro fue tan impactante que casi le causó un shock.
Es normal, estaban viendo a una criatura superior a los humanos, los que tenían el verdadero derecho de elegir quien muere y quien vive, ser el verdugo, el juez final.
Entonces se horrorizo... Ante la risa tan sacada de lugar de Bakugo.
Entonces es cuando supo, que perdió todo rastro de persona normal.
Shoto asintió con firmeza, estando de acuerdo con que Ryuk recuperará su libreta, para que el mundo estuviera fuera de peligro.
Después de todo, se trataba de su Death Note y eso ya se podía confiar plenamente sin errores.
Además si servía de algo, darle un castigo a Bakugo por usar la Death Note, ha matado a muchos criminales y no es algo que perdonara tal fácil.
De hecho, ni siquiera perdonar, usarla de por si ya fue algo atroz.
—Supongo que ya te llegó la hora—Dijo Shoto mirando fijamente hacia Bakugo de la proyección.
Momo tampoco estaba muy feliz con las acciones tan crueles y sadicas de Bakugo, después de todo, tampoco se sentía cómoda de que muriera.
Ya que quieran o no, seguía siendo Katsuki Bakugo, su amigo/compañero en la clase de héroe y sería difícil verlo morir así nada más, aunque tristemente se lo mereciera.
—Creo que ya me siento mal—Dijo Momo, haciendo una mueca.
Sin embargo, compartía la misma opinión que los demás, el Shinigami se veía tenebroso.
Tokoyami no parecía compartir la misma opinión, incluso Dark Shadow estaría de acuerdo con el, si bien tenía que transmitir terror y miedo por su puesto.
Ver a un Shinigami de esa forma, fue muy diferente a lo que podía imaginar, más allá de lo tenebroso, le parecía bien, magnífico.
—Se ve increíble—Dijo Tokoyami.
Kaminari solamente trató de abrazarse a si mismo un poco, pues buscaba suficiente consuelo para alejar los horribles pensamientos en su mente.
El quiso que la Death Note funcionará para que las personas sean salvadas, Bakugo ahora las usaba contra cualquier criminal sin algún peso sobre si mismo.
Eso debió haberle roto su estabilidad mental hace ya un buen rato.
—Maldición.
Katsuki solo miró a Ryuk, conmocionado en todo momento por el fenómeno que se encontraba en su habitación...
Colocó su mano en la silla al querer recuperarse.
—Shinigami.
Poco a poco comenzó a levantarse de su lugar, ya con una voz mucho más razonable y tranquila.
—Un dios de la muerte, ¿Eh?
Al recomponerse, Katsuki miró nuevamente a la criatura ya sin miedo o alteración alguna.
—Pues no me sorprende.
Ryuk miraba fijamente hacia el humano, cuando este, volvió a sonreír con juego.
—De hecho, Ryuk, te estaba esperando.
El Shinigami se mostró ligeramente sorprendido.
—¿Ah...?
Mandalay solamente negó con la cabeza, estaba claramente el hecho de que Bakugo si se sorprendió y jamás espero un Shinigami estaba en su habitación.
Después de todo, ella junto a sus compañeros en este trabajo de ser héroe, aprendieron las señales de saber las falsas y las verdades en una persona.
—Intenta mostrarse tan confiado en frente de Ryuk—Dijo Mandalay, observando.
Radgoll solo pudo negar con la cabeza, sinceramente parecía ser que el Shinigami se lo estaba creyendo por completo.
Bueno, al final después de todo, no son seres que entendían a los seres humanos a la perfección, pronto ya verían eso.
—Y es estúpidamente peligroso, en caso de que ofenda al Shinigami, las cosas se volverán peores para el—Dijo Radgoll con una mano en su frente.
Pixie-Bob no podía estar más de acuerdo con sus amigas y compañeras de los Pussycats, el chico repulsivo terminaría muero en cualquier momento.
Si Ryuk ya mostraba ser un poco tonto, que se lo digan a la cara es todavía la peor decisión.
—Bakugo sigue siendo un pequeño narcisista incluso en otra dimensión, sería sano que le bajará a ese ego—Dijo Pixie-Bob con una gota de sudor.
Tigre miró fijamente hacia el muchacho, estuvo algo desanimado al verlo perder algo de humanidad y heroísmo en esa dimensión.
Si bien estaba consciente que no se trataba del mismo chico, no pudo evitar diferenciarlo.
—Lo mejor será pensar en positivo... Si... Confiaremos en que el Shinigami no se lleve su alma—Dijo Tigre.
No. 13 miró fijamente hacia el Shinigami, realmente hubiera sido tenebroso verlo de esa forma, pero ya estaban al menos algo acostumbrados por las distintas escenas antes.
Aún así, estaba sombría, no sabía que decir a continuación antes de causar un revuelo.
—Ryuk... Está aquí, puede llevarse el alma de Bakugo por haber usado la Death Note... Después de todo, es suya—Dijo el héroe de rescate.
Recovery Girl frunció el seño, claramente nada contenta con el tipo de comentario que estaba haciendo la héroe de rescate.
No le gustaba para nada, que tuvieran una confianza tan baja pero estaba también en cuestión.
Bakugo ya había asesinado a más de cientos de personas en cinco días...
—Ya dejen de decir esas cosas, solamente preocupan a los demás y asustan a los niños—Dijo Recovery en forma de regaño.
—Es inevitable.
Ectoplasm hablo entonces, permaneciendo totalmente inseguro de que sus palabras servirían de algo de la sabiduría de la vieja doctora.
Pues no había más que pensar, así verdaderamente son las cosas cuando todo lo que sucede se hace parecer bastante obvio.
—Es inevitable, hasta los estudiantes ya saben lo que va a suceder—Dijo Ectoplasm.
Recovery lo miró por un momento más, antes de quedarse callada.
—Ya averigüe que esta Death Note es real, no me tomo mucho y ahora que vi la prueba de su poder, tengo aún más confianza en lo que haré.
—Que interesante, no estaba esperando algo así. Varias libretas de la muerte han llegado al Mundo Humano en el pasado, pero eres el primero que escribe tantos nombres.
La Death Note, ya tenía dos hojas escritas de puros nombres, tanto nombres escritos normalmente y escritos en Kanji.
—Mira a cuantas personas has matado en cinco días, la mayoría estaría renuente a escribir tal cantidad.
Nuevamente tuvieron una visualización más clara de casi todos los nombres escritos y pudieron leer bastantes, aunque solo fuera por unos segundos.
Nombres que algunos no son tampoco de Japón, y eso estaba claro... ¿Había asesinado a criminales de otros países?
Snipe casi tembló con la idea de saber que había pasado con todos ellos, además, ya le parecía algo raro que las autoridades y el gobierno no estuviera sospechando.
—Ahora que lo pensamos... Ese tal Bakugo cometió asesinatos a nivel mundial, no solo acabó con criminales de Japón—Dijo el héroe pistolero, horrorizado.
Power Loader miró fijamente sin despegar su mirada de cada nombre que fue escrito, y suponiendo que todos son criminales.
Ya no le cabía la menor duda, Bakugo ya no tenía ninguna salvación ahora que se ha enganchado tanto con la Death Note.
—Eso significa que tendrá a muchos enemigos... Llevó su amenaza de ser nacional a mundial, eso definitivamente le saldrá caro—Dijo el héroe desarrollador y creador de tecnología.
Nadie se metía a una masacre mundial y salía ileso.
—Idiota...
La molestia es clara en el rostro de Vlad King, quien también poseía cierta incredulidad por el horror de ver aquello.
No podía creer que Bakugo además de haber llevado a cabo asesinatos de la población de Japón, haya tentado con los demás criminales de otros países.
Eso es absolutamente y estúpidamente peligroso, se estaba metiendo contra todos los altos mando del mundo.
¿Cómo podría enfrentar a todos los países del mundo? Por supuesto que no, acabaría muerto.
Cementoss tampoco parecía ser capaz de creerlo, se encontraba igualmente de impactado con este dato.
Si bien supieron desde el principio que se trataba de Criminales, es gracias a esta escena más clara que pudieron identificar nombres extranjeros.
De un momento para otro, Katsuki Bakugo ya se había convertido en un homicida más grande de lo que pensaban.
—¿Es el primero que escribe tanto? Maldita sea...—Dijo Cementoss en shock ante las palabras del Shinigami.
Midnight no podía estar más intranquila y angustiada, si algún momento pudo haber tenido esperanza sobre alguna decisión buena de este Bakugo.
Todo se hizo añicos, este Bakugo perdió el rastro de cordura que le quedaba y no se detuvo a seguir matando, creyéndose en el juez final.
—Santo dios...—Apenas dijo la heroína +18.
Present Mic ya estaba casi derrumbado de la indecisión, no sabía si ponerse preocupado o no a pesar de lo que sentía.
El Shinigami ya estaba en la habitación de ese Bakugo, posiblemente muy listo de que se fuera a llevar el alma del chico.
Sin embargo, Bakugo ya ha acortado con un sin número de vidas alrededor del mundo, aunque sean Criminales, eso ya es un peso muy grande.
—El homicida más grande en la historia de la humanidad...
Ese ya es un hecho, y aquí lo tenían por delante.
Justo como lo habían imaginado al principio, o sus subconscientes.
Mientras que Aizawa no sabía que podría estar eligiendo, toda la información de golpe y la situación se estaba poniendo demasiado abrumador.
Ya había más de una cosa de la que preocuparse y poner atención, el encuentro de Bakugo con ese Shinigami Ryuk.
Y el hecho de que Bakugo ya atentó contra todo el mal de la tierra, mató a muchos criminales de otros países.
«Maldita sea... Supongo que ya no te vas a detener» Pensó Aizawa apretando su puño.
Endeavor estaba en un abrupto silencio, mientras que su rostro estaba sombrío, no se movía para nada de su posición, incluso les daba el mensaje a los demás de que estaba en trance.
Pero no... Estaba en sus más profundos pensamientos.
Su cuerpo en algún punto no dejaba de temblar, todo lo que estaba viendo ya lo estaba superando.
El asesino masivo más determinado de la humanidad, ya es un hecho.
«¿Estoy temblando demasiado?» Pensó Endeavor, mirando su mano.
All Might se sentía devastado... Todas sus esperanzas se encontraron con una enorme muralla que no las dejaron pasar, eliminando todo rastro de confianza.
—¿Por qué...?
Su mirada se veía triste, leyendo todos los nombres posible, haciéndole entender que sus asesinatos fueron llevados a convertirse en asesinatos de Criminales en muchos países.
En este momento, ahora es cuando Bakugo tendría que enfrentar a todos los países del mundo, a todos sin excepción.
Y por supuesto, empezando por Japón.
Ya no cabía de otra...
«Que alguien detenga al joven Bakugo. Por favor» Pensó All Might.
Nezu optó por no decir nada, pues sabía que cualquier comentario de su verdadera opinión ahora iba a crear un gran caos en la sala.
Sin embargo, estaba mirando fijamente hacia los nombres escritos en la Death Note, realmente le sorprendía que este Bakugo quisiera tanto limpiar el mundo de la maldad.
Tal vez este Bakugo se había precipitado más de la cuenta, pues ahora tendría que lidiar con todos los países del mundo y sin nada más que la Death Note para defenderse, pero está es una simple libreta.
Podría perderla, o que se la destruyan en un inminente ataque, pero claro... Esto no sería una pelea catastrófica que siempre solían participar.
Bakugo tendría que avanzar entre la democracia de los ejércitos, ser más astuto, el utilizaría la mente para ganar, y no usarse para pelear porque esa sería su inminente derrota.
A menos que...
Exista otra persona en esa dimensión, que pudiera encararlo frente a frente pero eso también es imposible mirándolo desde otro ángulo.
¿Cómo podría alguna u otra persona hacerle en frente a un arma tan poderosa?
Katsuki solo regresó a sentarse en su silla, mientras miraba hacia la Death Note y el Shinigami.
—Estoy preparado Ryuk, use la libreta aún sabiendo que le pertenecía a un Shinigami, y ahora el Shinigami ha llegado. ¿Qué pasará conmigo? Te llevarás mi alma, ¿Cierto?
Todos palicieron... Nadie dijo nada por el impacto.
¿Qué es acaso que Bakugo se quería morir? Ya había sobrepasado el límite de cuidado hace ya mucho tiempo.
Reto a todos los países del mundo con sus asesinatos a Criminales, usaba la Death Note a pesar de que está es propiedad de un Shinigami.
Tenía al Shinigami justo en frente...
¡¿Y le hablaba en ese tono?!
Tal vez ya dejaba de ser algo sensato, algo astuto de lo que le demostraron al comienzo.
Sin tener algún miedo o alguna duda, Katsuki miró fijamente al ser superior a los ojos.
—¿A qué te refieres? ¿Por qué los humanos inventan esas fantasías? No he venido a hacerte nada.
Ante las palabras tan calmadas de Ryuk, Katsuki lo miró algo confundido.
—La libreta se convierte en parte del mundo en el momento en que toca la tierra.
Para darle más sentido e ir directo al grano, Ryuk señala hacia el muchacho.
—En otras palabras, la Death Note ahora es tuya.
Katsuki solo agarró la Death Note y la miró fijamente.
—¿Está... Es mía?
—Si no la quieres, dásela a alguien más. Pero si lo haces, no tengo otra opción más que borrar tus recuerdos de la Death Note.
Katsuki miró fijamente hacia el Shinigami, mientras que fruncía el seño ante lo que estaban diciendo prácticamente.
¿Ahora se supone que la Death Note se vuelve propiedad de todo humano que la agarre primero?
—¿Qué rayos...?
Hasta el parecía perplejo, ¿Cómo es posible que alguien consiguiera tal poder así de fácil?
Izuku también miró estupefacto, ante las reglas tan fáciles y simples de los Shinigami ante un poder tan catastrófico de la Death Note.
¿Cómo algo tan mortal y severo puede entregarse así?
Aún así, una parte de el estaba aliviada, al parecer no le sucedería nada a Bakugo por haber usado la Death Note.
—Son muy difíciles de entender—Dijo Izuku.
—Son seres diferentes a nosotros, son superiores—Dijo el Todoroki menor, un poco tenso.
Shoto se demostró inexpresivo, pero por supuesto que también estaba bastante sorprendido por lo fácil que es obtener una Death Note si un Shinigami la pierde de vista.
La forma tan fácil en la que los Shinigami descuidaban sus armas prohibidas, es sumamente irresponsable.
—Es muy fácil para ellos pensar que la Death Note no tiene mucho valor, no son humanos y no tienen lo que nosotros solemos pensar—Dijo Shoto.
Los demás estudiantes no podía estar más de acuerdo con sus amigos, el trío de la Clase A, es decir, los más fuertes actualmente.
Momo lo pensó un poco más, ante este borrado de mente sobre los recuerdos de la Death Note, que seguramente funcionaba al renunciar la libreta.
Sin embargo, la Death Note ya es propiedad de Bakugo, siempre lo fue, desde el momento que la encontró en la escuela.
—¿Por qué todo lo que pasa es una ventaja para Bakugo?—Dijo Momo, suspirando incrédula.
Todo es tan oportuno, no había nada malo en contra.
No son los únicos, también estaban los profesores que solían pensar algo similar o la misma conclusión a la que llegaban los jóvenes aspirantes.
Aizawa, el héroe borrador, claramente tenía su propia opinión ante el poco cuidado que tenían los Shinigami sobre las Death Note a las manos humanas.
Olvidan mucho la posibilidad, de que si la existencia de una Death Note se haga realidad, todo el mundo caería en guerras por querer obtenerla.
—Nada garantiza que la limpieza de memoria, mantenga oculta la Death Note para entonces—Dijo Aizawa frunciendo el seño, mirando fijamente.
All Might temía bastante, de que por algún descuido de algún otro Shinigami o el mismo Bakugo, revele la Death Note al mundo entero.
Eso siquiera rompería la poca cordura que le quedaban a las personas, y estallarían en guerras, destruyendo siquiera el pequeño rastro de paz que se solía disfrutar antes de la caótica tormenta.
—Una guerra mundial... Definitivamente hará todo, un caos—Dijo el ex héroe, sombrío.
Nezu no podía estar más de acuerdo, pero también tenía otro tipo de pensamiento a lo que podía pasar.
Caerían las demandas, las sentencias a muerte y subastas mundiales alrededor de la Death Note, ya todos debieron reconocer su poder.
Por lo que habían dos posibilidades.
Una guerra, o una subasta mundial por la libreta.
Todo depende de la salud mental de cada Presidente.
Una vez ya aclarado ese punto, Katsuki miró fijamente hacia el Shinigami, buscando saciar sus dudas.
—¿Entonces dices que puedo usar la Death Note, todo lo que quiera sin ser castigado?
Eso fue todo lo que esperaban, básicamente querían saber si habría algún lado malo de usar el poder de la muerte.
Mirio miró fijamente, hasta el podía reconocer sobre la sorpresa de este Bakugo al oír tantas ventajas sin tener alguna cosa en contra.
Es comprensible solamente en ese aspecto, y aún más por el riesgo de haber llevado cientos de muertes.
—El mismo piensa que es demasiado para bien—Dijo Mirio.
Nejire no podía estar más de acuerdo, después de todo, un poder tan masivo en las manos de humano, de por si ya es algo difícil de creer.
Que no hubiera alguna consecuencia acerca de este uso, ya es más extraño.
—Siempre hay un punto malo en un punto bueno—Dijo Nejire con seriedad.
Satou, el estudiante corpulento gracias a su Quirk de fuerza física sobre el azúcar, miró fijamente hacia la proyección, compartiendo la misma opinión.
Esto es demasiada ventaja, demasiado, lo hacía ser alguien que podía seguir liberándose ahora que no tenía ningún impedimento de hacer algo.
—Es tan... Injusto, si las cosas siguen dándole más ventaja a Bakugo, el gobierno Japonés ya no podrá hacer nada al respecto para poder atraparlo—Dijo Satou, un poco desanimado.
—No solo Japón.
Ojirou decidió participar está vez y detener a su amigo músculos, sabiendo bien ahora.
Que Japón, el gobierno y sus altos mandos no serían la única amenaza que atenta contra Bakugo ahora.
—Ahora todos los países del mundo, estarán interesados en acabar con Bakugo—Dijo Ojirou seriamente.
Se escuchaba fuerte, pero no había de otra, Bakugo ya es el homicida más grande de la humanidad en esa Dimensión, y si no lo es todavía, pronto será.
Sero pensaba que la situación no podía estar más difícil para este Bakugo, con sus cometidos, ahora se volvía una amenaza que atenta contra todo el mundo en especial.
Sin embargo, ahora parecía ser que habían cosas que podía usar a su favor para ganar.
—Bueno... Ventajas o no. Tiene que encontrar la forma para vencer las potencias del mundo entero—Dijo Sero frunciendo el seño.
Eso sonaba bastante ventajoso, pero es algo sumamente ridículo si se obtenía tal poder de matar y aún más si es un humano el que lo obtenga, así es como pensaba Bakugo.
—Pongámoslo así. Sentirás el miedo y el dolor solo conocido por aquellos que han usado la libreta.
Ante las palabras tan fáciles y simples del Shinigami, Katsuki parecía perplejo.
Bueno...
Todos en el terreno compartían la misma opinión, pero no había razón del porque mostrarse tan interesado.
O tal vez si...
Parecía ser que el Shinigami, Ryuk se estaba refiriendo que uno que usa la Death Note, tendrá una vida llena de tormentos.
No volver a ser feliz... A cambio de un poder así.
—Y cuando sea tu momento para morir, seré yo quien escriba tu nombre en mi Death Note.
En la pierna derecha de Ryuk, claramente se podía notar una Death Note resguardada por unas cadenas sujetadas a su cintura.
Después, la visualización acercó a un ángulo de toma al rostro de Ryuk, haciéndola parecer más intimidante y tenebroso ante una presente diversión maliciosa.
—Pero te advierto que el humano que use la libreta no entrará ni al cielo ni al infierno por toda la eternidad. Es todo.
Todos se quedaron en un terrible silencio... Todo de repente se había vuelto tan congelante, una gran tensión les cayó a todos por completo.
Parecía ser que las desagradables sorpresas todavía no acabarían exactamente para nada, todavía faltaba mucho para que dejarán de sorprenderse en ese punto.
Tigre miraba en un terrible shock, no siendo capaz de procesar bien lo que acababa de oír a lo último...
El alma de un humano que tocó una Death Note... ¿No podrá entrar ni al infierno o al cielo?
—Cuando todo termine... El Shinigami va a matar a Bakugo...—Dijo Tigre, en shock.
¿Cuando llegue el momento de morir para Bakugo? ¿Cuándo sería eso exactamente? ¿Cuándo se vuelva un anciano?
¿O capaz que lo terminen atrapando y lo condenen a una sentencia de muerte?
—Bueno...
Mandalay no podía sentirse más insegura, ante todos sus pensamientos, lo único bueno al final de esto, es que Bakugo dejaría de matar Criminales.
—Es un trágico final para Bakugo...—Dijo Mandalay.
Pixie-Bob parecía fruncir el seño, mientras escuchaba a su líder y amiga de los Pussycats, aunque también podría llegar a un pensamiento casi igualito.
Al final de cuentas, todo el complejo de juez de Bakugo terminará cuando encontrará su muerte en el futuro.
—Después de todo, la Death Note no es un uso gratis y fácil al que puedes acceder—Dijo Pixie-Bob cruzada de brazos, tratando de ocultar su propio shock.
Radgoll asintió, pero su rostro estaba lleno de incomodidad y conmoción ante todos los eventos que pudo observar.
El Shinigami... Como que de pronto se había vuelto alguien más tenebroso que de costumbre.
—Debe ser aterrador... Que el alma del humano que ha usado una Death Note, no pueda ir ni al cielo, ni al infierno—Dijo Radgoll, tratando de mantenerse fuerte.
No. 13 se congeló al momento en que apareció la terrible toma del rostro del Shinigami, su rostro tan cómico cambio a uno más intimidante en ese momento...
Un cambio más que suficiente para introducirle temor, uno que definitivamente no quería experimentar... Los escalofríos no eran nada cómodos.
Se abrazo a si misma, buscando la consolación.
Power Loader pareció más pensativo, por supuesto que estaba en shock como los demás, pero encontró su momento analítico.
Esto quería decir que todo es real... La vida después de la muerte, el cielo y el infierno.
—¿Qué se supone que hay entre el cielo y el infierno?—Susurro el héroe mecánico.
—Sea lo que sea...
Snipe no podía estar más impactado por las palabras de Ryuk, sin embargo, también cayó en la curiosidad a pesar de que está es mínima al lado de su sorpresa.
Con esto, se confirmaba que Katsuki Bakugo en esa Dimensión, tendría una vida nada feliz, estaría condenado al sufrimiento por su tonta expectativa de matar a los Criminales y limpiar la maldad.
—Debe ser aterrador y mortal para el alma, si es que el castigo es no entrar al cielo y el infierno—Termino Snipe.
Ectoplasm tampoco se quedaba atrás, en sumo shock por escuchar atentamente sobre la nueva información que es entregada.
En primer caso, el más allá existía, se los revelaban en frente de sus narices y segundo caso, Bakugo llevaría una vida triste.
—Vaya... Son muy pocas consecuencias, pero están a la altura en las ventajas—Dijo Ectoplasm apenas.
Cementoss miró muy fijamente hacia el Shinigami, estando muy concentrado en la segunda Death Note que guardaba consigo mismo en su cadera.
Parecía ser que solo perdió la que sostenía Bakugo en ese momento, la otra la tenía a salvó consigo mismo.
—Ya veo... Por eso necesita Death Note...
Claro, tampoco dejaba atrás el hecho de que desde este momento, Bakugo tenía ya marcado su final fatal.
Si el gobierno Japonés y el mundo no se encargaban de el, Ryuk lo haría en la recta final de esta aventura de asesinatos.
Midnight soltó un suspiro agotador, simplemente el shock no dejaba que su rostro se encontrará sumamente pálido, la tensión no la dejaba pensar con claridad en estos casos.
—Carajo...
Suceda lo que suceda, el punto es que Katsuki Bakugo en cualquier momento estaría pagando por sus asesinatos cometidos.
Present Mic guardó un sombrío silencio, lo que delataba a este experimentado héroe, son sus manos que no dejaban de temblar con los puños cerrados.
El y muchos otros, estaban totalmente conscientes de lo que significaba esto, el Shinigami no lo dijo pero todo indicaba...
Que estando ya muerto, Bakugo sufriría una tortura inimaginable en el más allá, entre el cielo y el infierno, en la inmensa nada...
Vlad King trató de mantenerse cuerdo, pero sinceramente a estas alturas ya no es tan fácil como antes pudo haber sido, el golpe de la incertidumbre es fuerte y nada piadoso.
—Esto será solamente una carrera de tiempo.
Sus ojos no se apartaron de la proyección, mirando fijamente hacia el Shinigami con desagrado.
—Aquí habrán dos finales... El mundo atrapa y sentencia a Bakugo... O el mismo Ryuk terminará sentenciándolo con la misma arma que utiliza para "limpiar el mundo".
Aizawa no sabía que pensar al respecto, después de todo, Bakugo seguía siendo su alumno y le preocupaba lo que le pudiera suceder ahora que se enfrentaba a una situación sin salida alguna.
De todos modos, ya no hay forma de salvarlo para ese momento, ya está condenado por haber usado la Death Note hace cinco días en esas dos muertes.
—Pase lo que pase... Este mocoso terminará muerto—Dijo Aizawa tocándose la frente, con frustración.
¿Por qué sus estudiantes no pueden ser más normales?
Endeavor parecía desesperado, mientras que estaba cruzado de brazos, su dedo no dejaba de levantarse y caer, repetidas veces.
Pero no, está demostración es más que suficiente para reconocer el gran shock que recorría por dentro del héroe de fuego más poderoso del top de Japón.
«Mierda»
All Might por su parte, tenía la mirada pegada al suelo, estando en un silencio tan tenso y tranquilo a la vez, su rostro en la oscuridad.
Su sonrisa no es presente, su expresión no tenía emoción... No dejando ver claramente que es lo que el ex Símbolo de la Paz pensaba realmente.
«Imposible»
Nezu optó por juntar sus manos, claramente sin parecer alguna reflexión acerca de esto, estaba más pensativo ante las cosas.
Honestamente, el Shinigami no dejaba de asombrarlo, cada vez con ventajas tan altas pero con desventajas tan grandes, las cosas parecían igualarse.
Bakugo jamás sería capaz de cumplir su meta, ya que mientras que siga matando Criminales, otros simplemente aparecerán y así serán las cosas.
En caso de que ya no haya, y Bakugo muriera cuando Ryuk o el gobierno lo matarán, los Criminales poco a poco volverán a salir, cubriendo el mundo de la misma maldad.
Además... La Death Note es un cuaderno, ¿Qué pasará cuando escriba todos los nombres del mundo y se le acaben las hojas?
Al acabar, Ryuk no pudo evitar soltar una risa, una risa de entretenimiento.
Al fin, su aburrimiento acabaría gracias a este tonto humano que encontró su Death Note "perdida".
Katsuki no dijo nada, solamente miró fijamente al ser de la muerte.
Debido a las características de Ryuk, dejaba ver una silueta bastante interesante en la pared.
Humano y Shinigami, ambos de distintos puntos, se estaban mirando frente a frente, tranquilidad y conmoción.
—Ahora ya sabes que te espera una vez que mueras.
¿Debería sentirse asustado?
No... Imposible...
Katsuki miraba hacia la proyección, cuestionándose a si mismo por dentro, no sabiendo que sentir, lo único que si sabía es que algo lo estaba obligando a sentir una emoción.
Después de todo, todos quieren que haga algo, todos los que están aquí y los que lo están observando con detenimiento, esperaban a que actuaba como siempre lo hacía...
Como aquel chico repulsivo, lo único que quería es reventar villanos con sus explosiones hasta el cansancio, o decir alguna u otra cosa estúpida por su carácter fuerte.
Pero por más que su ser lo deseaba... Había otra cosa más que lo dejaba inmovil, en seco... Algo mucho peor que aquella vez que conoció al peor enemigo de los héroes, All For One.
«Deja de estar temblando... Maldita sea» Pensó Katsuki, haciendo una gran mueca de frustración mientras sentía sus piernas como palitos a punto de romperse.
—Maldita Death Note... Malditos Shinigami de mierda...—Susurro Katsuki, sin dejar de sentir una gran tensión en todo su cuerpo.
Izuku no podía sentirse más que preocupado, tal vez angustiado por lo que les estaba sucediendo, tanto al Kacchan héroe y el Kacchan villano.
Simplemente, el también estaba horrorizado... Si este Bakugo continuaba usando la Death Note, ya no tendrá la oportunidad de tener una vida tranquila en el más allá y morirá a causa de la misma arma que lo condenó.
Ahora lo entendía... Ya no hay nada que hacer para salvar a Kacchan, sin embargo...
—Por favor... Debe haber alguna oportunidad...—Dijo Midoriya casi en silencio, mirando hacia abajo.
Momo solo negó con la cabeza, totalmente en desacuerdo de su amigo peliverde, claramente pudiendo escuchar lo que dijo.
En estos momentos, ya es completamente imposible para este Bakugo salir vivo de ese problema, a menos que su momento de morir ya sea siendo un anciano.
Sin embargo, seguiría siendo condenado por usar la Death Note en el más allá... No entrando a los dos pases de mundo más importantes y quedaría en la nada.
Tristemente... Seguía siendo un precio justo, por haber tomado sin permiso el poder de los Dioses.
—Después de todo... ¿La comunicación con cualquier Dios es mala?—Dijo Momo de una forma deprimida, mirando hacia el suelo.
Shoto se quedó allí, bastante tenso en su propio lugar... Sobre todo por estos nuevos dilemas que cruzaban por su mente, sin dejarle de sorprenderle.
Parecía ser que mientras más avanzaba esto, más conocerían acerca del poder de los Shinigami y la Death Note, ya sean ventajas como desventajas, o conceptos de doble filo.
¿Es suficiente castigo? Le parecía muy asombroso, y también bastante desanimado que ahora, este Bakugo tendría que vivir esa condena hasta el día de su muerte, que es cuando comenzará su verdadero infierno.
No estaba preocupado... ¿Por qué debería de estarlo cuando se estaba volviendo una realidad?
—Obtener el poder de matar a un Dios de la muerte... A un costoso precio, ¿Por qué dejemos pasar ese detalle desde el principio?—Apenas hablo Shoto Todoroki, en shock.
Iida se miró una mano, su seño fruncido es claro y sin dificultades de demostrar su horror... Su mano no dejaba de temblar.
Fue golpeado duramente por el precio que hay que pagar una vez hayas usado la Death Note, una tortura como ninguna en el más allá, vivir en la nada... Solo y sin nada.
Es más que suficiente para volver loco a cualquiera, pero una locura mucho mayor a la que han visto.
De todos modos, ya no importaba si la Justicia atrapaba a Bakugo, en cuanto Ryuk sienta que este vaya a morir, actuará más rápido que los policías y se encargará de matarlo a un ataque en el corazón...
—Para estar perdiendo dos... Solamente cuida de una—Dijo Iida mirando fijamente hacia ese detalle.
Tokoyami tuvo que dejar su favoritismo ante la interesante apariencia del Shinigami, para prestarle más atención al triste destino de Bakugo.
Sufriría por no ser ya feliz, significando que muy pronto podría corromperse por el poder de la libreta... Lastimosamente, tendría su momento de muerte y adiós...
Nunca más volvería a disfrutar de una paz considerable, una vez que se le niegue el permiso al Cielo y el infierno.
«Entonces... Hay más planos existenciales que conocemos y creemos» Pensó el chico suspirando.
Kirishima no sabía si preocuparse por su amigo, después de todo, ese Bakugo ya había cometido demasiados asesinatos como para siquiera tratar de pensarlo.
Por más que le gustará que la Justicia detuviera a este Bakugo, significa que lo llevarían a la sentencia de muerte por el homicidio más amplio en toda la humanidad...
Y siquiera antes de que lo llevarán a su lugar de muerte, caería muerto por el ataque al corazón cuando el Shinigami escriba el nombre en su libreta.
—Tampoco es que debimos tener muchas esperanzas... ¿No es así, Kaminari?
—Si...
Kaminari no podía estar más de acuerdo, ya no importaba si Bakugo es atrapado, si muere de viejo o al final muere por algún accidente, toda su vida estaría condenada a muchos horrores.
Ya con las palabras de Ryuk, se sabía que cualquiera que toque la libreta, no tendrá la vida feliz que podría haber tenido, por el uso de la Death Note y su malicia para matar.
La única ventaja que podría tener la Justicia de atrapar a Bakugo, es que sus asesinatos terminarían mucho más rápido.
—Si... Tienes razón... Pues, ¿Qué persona podría tener siquiera alguna pista para atrapar a Bakugo cuando ni siquiera el comete los asesinatos directamente?
A este punto, dudaban que siquiera la persona más inteligente en las fuerzas armadas, pudiera hacer algo para detener a Bakugo.
Si es que en primer lugar, exista esa persona con tales habilidades.
—No me gusta decir estas cosas... ¿Por qué las dimensiones alternativas tienen que ser así?—Dijo Kirishima exhausto, mirando hacia el cielo por un momento.
Ojirou pensaba más en las posibilidades sobre esto, después de todo, si alguna persona tendría la oportunidad de escoger alguna persona para lidiar con esta situación.
En base a las mentes y la inteligencia, claramente muchos aquí solicitarían al Director Nezu para resolver este caso... No por nada es el más inteligente.
Ya que estaba de acuerdo en algo, tal vez Bakugo muera cuando muera pero si se logra detener los asesinatos antes, sería mucho mejor.
—No hay nadie más... Que el Director Nezu para detenerlo—Dijo Ojirou mirando fijamente hacia la proyección.
Aoyama permaneció bastante desanimado, como que de repente sus opiniones acerca de este Bakugo parecen cambiar poco a poco.
Podía entenderlo prácticamente... La ansia de querer poder, para no ser un inútil ante esta sociedad que derrota a los seres más débiles.
Sin embargo, a diferencia de el... No quería matar a nadie y tampoco tenía su fecha de muerte condenada.
—Oh... El brillo de Bakugo desciende—Susurro Aoyama sombríamente.
Mirio no hizo nada más que suspirar y pensar, que apenas lo poco que habían estado viendo, fue más que suficiente para entregarles noticias y menciones aplastantes.
Bakugo va a morir, desde eso ya tenían claro desde la primera visualización, por su perspectiva de ser el juez final, el verdugo de todos los Criminales en esa sociedad tan normal.
De eso no tenían la menor duda... Lo que más los horrorizaba, es que el alma de Bakugo no tendría ni un descanso en el cielo y ninguna tortura en el infierno.
Después de todo, ya sabían que significaba, cualquier mente humana llegaría a la locura por una soledad infinita.
Tamaki ya no tenía razones para dudar que hay después de la muerte, al parecer existía aquella idea fanática de que realmente exista el cielo y el infierno.
Por ende, Dios y el Diablo... Después de todo, es común pensar que el Todopoderoso Dios y el todo maligno Lucifer/Satanás gobiernan aquellas zonas espirituales.
«¿De verdad existe el diablo?» Pensó Tamaki, abrazándose nervioso.
No podía estar más horrorizado... De que lo que le sucediera a Bakugo.
Nejire tembló fuertemente ante la presentación del Shinigami, totalmente distinto a los antiguos ángulos de su apariencia, ahora podía ver una vista más aterradora.
No ayudaba el hecho de que el destino de este Bakugo ya estaba más que asegurado, y ahora no sabía bien que pensar.
No pagaría por sus actos...
—En verdad... Es horrible—Dijo Nejire todavía temblando.
Ochako primero estuvo pasmada, ahora sabiendo que sin importar que se hiciera, Bakugo ya no se salvaría de su muerte en unos años si es posible que la ley no lo enfrente temprano.
Ella tampoco se salvó... Desde el principio sentía que algo malo estaba en Ryuk, ahora con estás tomas no hicieron mucho trabajo.
—Mirándolo desde allí, ni siquiera un Villano agarraría una libreta de la muerte—Dijo Ochako mirando con temor.
Jirou solamente negó con la cabeza, sabiendo bien que nadie, ningún Villano con el intelecto suficiente tomaría la libreta, simplemente estarían usando a otras personas para que obedecieran a quien matar.
Un precio así, no frenaría a nadie y tampoco a este Bakugo por lo que podía ver, después de todo, la conmoción es pasajera y demostrarían que este Bakugo es diferente.
Si en verdad estaba esperando a un Shinigami como dijo, también debió haber esperado algo así.
Por más horrible que sea.
Mitsuki llegó justo a la puerta y la tocó dos veces, llamando la atención del chico y el Shinigami.
Katsuki rápidamente volteó la cabeza hacia la puerta, cuando escuchó la voz de su madre.
—¿Katsuki?
Ryuk solo necesitó levantar la mirada y mirar hacia el chico.
—No hay problema, atiende.
Muchos parecieron preocupados por la reacción que la Señora Bakugo pudiera hacer a continuación, por la aparición de un Shinigami en la habitación de su hijo.
Por lo tanto, se confundieron mucho al ver a Ryuk tan confiado, parecía que no le importaba en lo más mínimo que otra humana lo viera.
Katsuki no estaba nada feliz ante la confianza de Ryuk ante su madre, pues el no deseaba que su madre tuviera alguna mala reacción o que sufriera de algo por verlo ahí.
—Shinigami idiota—Dijo Bakugo, claramente enfurecido.
Si se atreve a hacerle algo a su madre...
Izuku simplemente negó con la cabeza rápidamente, dejando de lado cada pensamiento para concentrarse en esto.
Aunque tuviera la confianza de que nada estaba por suceder por una pequeña teoría, todavía no evitaba que la preocupación cayera sobre sus hombros.
No podía, no podía... No soportaría que algo le sucediera a su tía Mitsuki, fuera lo que fuera.
—Tía...
Aizawa optó por no dejar de lado, mirando fijamente hacia el Shinigami, claramente teniendo su propia sospecha.
Después de que sus pensamientos milagrosamente fueron acertados a pesar de que se arrepentio de seguir con esa supuesta farsa antes de que les demostrarán la verdad, ahora ya no podía dejar ninguna idea a la ligera.
«Si la Señora Bakugo es capaz de verlo... ¿Entonces por qué nadie en ese mundo conoce lo que es una Death Note y un Shinigami a estas alturas?»
Aquí algo no olía bien...
Y no son los gases de Mineta.
Sin más opciones, Katsuki guardo la Death Note debajo de su cama y se levantó.
Caminando hacia la puerta, terminó por abrirla para ver con claridad a su madre.
—¿Qué sucede?
Mitsuki lo miró con una gentil sonrisa, trayendo consigo un par de manzanas en una cesta.
—Pensé que querrías manzanas, los vecinos nos las trajeron.
Mirando por encima del hombro de su hijo, casi alza una ceja por la falta de luz.
—¿Por qué está tan oscura tu habitación? Te dañarás la vista.
Por alguna razón, Mitsuki no es capaz de ver a Ryuk, cuando el Shinigami veía fijamente hacia la puerta.
Katsuki, claramente confundido doblo un poco su cuerpo para ver claramente a Ryuk.
«¿Qué está pasando? ¿Mama no lo puede ver?»
Bueno... Ahora tenía razón, ahora sabía porque en este momento, las cosas más estúpidas y obvias que uno podría pensar, se volvían realidad.
Aizawa no podía estar más perplejo, de lo que acababa de pensar en menos de 10 segundos, se volvía realidad.
«Supongo que se volverá una clase de juego... Que las cosas más irracionales son las que más son acertadas» Pensó el héroe borrador, todavía perplejo.
Si así estarían pensando para formular algunas ideas y teorías, entonces muy pronto se volvería bastante común imaginar que las situaciones de Bakugo estarían cambiándose repentinamente a cada momento.
Cambios... Que definitivamente no se le podía adivinar, si son para su propio bien o mal.
Por la seguridad del mundo, tenía que tener la mente fría y desear que los cambios sean para mal de Bakugo.
Pues por supuesto, igual que todos en el terreno, esperaban que viniera alguna persona o personas, que puedan ser confiables y detengan a Bakugo.
Un policía común no sirve, ni tampoco uno de alto prestigio. Pues su oficio es el rescate, negociar y muchas otras cosas en las peleas por la justicia y la paz para los ciudadanos.
En este punto, considerando la inteligencia de Bakugo, se va a necesitar algo más que músculos.
Se va necesitar... Una mente maestra.
Pero... ¿Quién podría? ¿Quién tiene el intelecto para hacerle frente a Bakugo?
Shouji soltó todo el aire que había contenido en el, con gran alivio al ver que la madre de Bakugo estaría bien, después de todo, nadie quisiera ver a un Shinigami.
—Las cosas no se saldrán de control... Que bueno—Dijo el de los brazos.
Mina tenía el mismo pensamiento que muchos, estando de acuerdo con su compañero de los brazos ante está situación que claramente es un gran alivio.
Por lo menos, les demostraban otra habilidad que seguramente se trata del Shinigami, que es únicamente visible a los ojos del ahora dueño de la Death Note que antes fue suya.
—Por un momento, casi me asusto por la mamá de Bakugo—Dijo Mina mirando fijamente hacia la proyección.
Luego de que su madre se despidiera y se fuera, Katsuki cerró la puerta.
—La libreta que encontraste originalmente me pertenecía a mí, y como eres tu quien ahora la usa, eres el unico que puede verme y claro mi voz solo la puedes escuchar tu.
Extendiendo uno de sus brazos, Ryuk toma una manzana de la cesta en el escritorio de Bakugo.
—En otras palabras, la libreta es un lazo entre Katsuki el humano y Ryuk el Shinigami.
Explicado el punto, Ryuk no tardó más y le dio una mordida a la manzana...
—¡Deliciosa!
Quedó satisfecho por el sabor y miró hacia la manzana.
No le dieron importancia el hecho de que Ryuk se haya quedado impresionado por el sabor de la manzana, por más estúpido que sea.
Más, estuvieron mucho más concentrados en la forma en la que hablaba Ryuk, ahora se entendía una de las razones del porque los Shinigami y la Death Note todavía son un misterio.
—El Shinigami es únicamente visto por el humano que tomo la Death Note, ya veo...—Dijo Power Loader mirando analíticamente hacia la proyección.
Parecía ser otra habilidad que más que sea una ventaja, es totalmente útil para que los humanos no caigan en la tentación por desear la Death Note al descubrir su existencia, o el hecho de mantener al Shinigami alejado de los humanos.
Los humanos son seres débiles, pero la cosa se vuelve diferente cuando tienen las herramientas que impulsaba las posibilidades de sus capacidades, y con la tecnología que tenían a este tiempo de la historia, el ya lo sabía.
Los mismos humanos, podrían someter a los Shinigami con la suficiente tecnología y ingenio, pero necesitaba de asegurarse algo antes de llegar por completo a esa conclusión.
En cambio, Aizawa no estaba tan confiado de aquello, estaba más pensativo de lo que podría significar todo aquel que de alguna manera, toque la Death Note.
Después de todo, a la vista de los demás puede seguir siendo una libreta normal y muy rara por la forma en que está hecha... Pero si llega algún momento que otra persona lo toque...
¿Qué podría pasar?
«La posibilidades de que otra persona toque la Death Note... ¿Podrá ver al Shinigami?»
Afortunadamente para el Profesor Tutor de la Clase 1-A, no es el único con el mismo pensamiento y camino al que quería ir.
Momo miraba fijamente hacia la proyección, muy pensativa al respecto de lo que estaba diciendo el Shinigami Ryuk.
Por ahora, no parecía que estuviera por hacer algo malo hasta que llegará el momento de morir de este Bakugo, por lo tanto no tendrían porque preocuparse.
Lo que más le atraía la atención, es como es que Ryuk explicaba la razón del porque solo es que Bakugo es el único que puede verlo, un lazo... ¿Entre Shinigami y Humano?
«Hacen parecer que no importa que otra persona toque la Death Note, no funcionará y no podrá ver a Ryuk» Pensó Momo.
Para el Todoroki menor, no podía dejar de pensar que esto no es ninguna desventaja o ventaja para Bakugo, es más como un reglamento que hay para un Shinigami al bajar al Mundo Humano.
Afortunadamente, nadie más saldría afectado de ver a un Dios de la Muerte ahí mismo, cosa que pudo haber pasado con la madre de su compañero explosivo.
Suponía que no tenían porque alterarse mucho, hasta que llegará el momento de comprobar la validez de la misma idea.
Tampoco podían ignorar la posibilidad de que si Bakugo renuncia a la Death Note, cosa que nunca va a suceder, ya tampoco podría ver a Ryuk.
Katsuki cerró los ojos por un momento, queriendo pensar ahora que tenía al dueño original de su ahora Death Note.
—Solo tengo una pregunta que hacerte.
De fondo, se podían escuchar fuertes mordiscos mientras que Katsuki abría los ojos y miraba al responsable.
—¿Por qué me elegiste a mi?
Bueno... Parecía ser que alguien más no dejaba de buscar respuestas, y es muy comprensible para todos allí.
La Death Note, es una libreta que es un arma, el arma más peligrosa que nadie pudo haber imaginado, ni siquiera Nezu que es el más inteligente.
Un poder de los Dioses básicamente, que Ryuk la haya perdido ya es simplemente un cuento, una excusa, una simple excusa de su parte.
Pues lo único que quería, es dejarle la libreta al Mundo Humano y bajar.
¿El motivo de por qué acción? Eso es lo que no sabían.
—Bueno...
Kaminari no sabía que más decir, tenía la misma idea que todos los demás.
Bakugo hacia buena elección de preguntar porque la Death Note, el arma tan masiva, hubiera caído para el, que el pudiera elegirla.
—Es una buena pregunta—Dijo Kaminari, rascándose la nuca.
Todos le dieron la razón, hasta Nezu.
Aunque por supuesto, es una cosa que ya todos lo sabían, Kaminari fue el único que decidió decir algo.
Mientras tanto, no pudieron ignorar los sonidos constantes de fondo... Hubieron muchas opiniones sobre esto, algunas muy divertidas.
Pero el hecho es que... Ryuk se haya obsesionado con las manzanas
Mientras tanto, Ryuk lo ignoró y siguió comiéndose las manzanas, cada una de un solo mordisco, totalmente viciado en el sabor.
Aquello irritó un poco al mejor estudiante de Japón.
—Oye, ¿Siquiera me estás escuchando?
Ryuk al tragar la última manzana, paso una mano por sus labios, pensando más en el sabor de la manzana.
—Las manzanas del Mundo Humano valen el viaje, ¿Cómo puedo describirlas? ¿"Jugosas"?
Katsuki lo miró fijamente, claramente con autoridad en sus ojos rojos.
—Responde mi pregunta.
¿Realmente le estaba hablando de esa manera? ¿Un humano hablando con autoridad hacia un Shinigami?
¿Qué no podía ser más estúpido? Claramente a pesar de que Shinigami no tenía nada en contra, podría enfurecerse.
—¿Por qué nadie tiene autocontrol?—Dijo Endeavor, negando con la cabeza, decepcionado.
Con cada palabra que salía de la boca de Katsuki, es más que suficiente para opinar algo al respecto, que no le importaba nada ahora que traía un trato con el Shinigami.
Endeavor podía notarlo, ese Bakugo ya no podía estar más seguro y confiado de lo que hacía.
Shoto tenía una opinión diferente, aunque le seguía pareciendo también una estupidez de hablarle así, a una criatura que pudiera desvanecerte cuando quisiera.
Siempre había una razón detrás de las acciones de este Bakugo, pudo darse cuenta fácilmente que todas sus acciones son respaldadas por su propia lógica.
«Bueno... Tal vez pueda entenderlo, Bakugo está muy seguro de hablar así con el Shinigami por el trato que han hecho» Pensó el heredero de su padre.
Tal vez sea la razón del porque se sentía tan seguro, de hablarle a una criatura superior como lo es Ryuk.
—Hay no puede ser...
Midnight no pudo más, simplemente se acarició la frente con frustración ante las acciones totalmente impulsivas de este Bakugo.
No le bastaba usar el poder de los Dioses para su perspectiva incrédula y mala, ahora no tenía ningún respeto por el mismo dueño de tal poder.
Un Dios de la Muerte, una criatura mucho más poderosa de lo que es el Ser Humano, con o sin Quirk.
—Este ya es otro nivel de su imprudencia... Justo cuando creí que tenía una responsabilidad y personalidad diferentes—Dijo Midnight.
Estaba aterrorizada, eso es lo que pasa.
Mina igualmente temblaba sin parar, abrazándose a si misma con temor a que Ryuk se molestará por la imprudencia de Bakugo hacia el.
La forma en la que trataba de referirse al Ser tan superior al humano, de manera tan simple y autoritaria por un ego mal hecho.
—¿Quién podría hablarle así a un Shinigami?—Susurro Mina, cerrando sus ojos, nerviosa.
All Might miró firmemente hacia Bakugo, claramente con una expectativa reprobatoria ante las acciones de su estudiante estrella hacia un Dios de la Muerte.
Quieran o no, un Shinigami es mucho más peligroso que su mismo rival, mucho más que cualquier otro humano con algún poder fenómeno.
Por lo que, hablarle así a un Dios es totalmente peligroso.
—Hay cosas que no cambian—Dijo el ex héroe, con un suspiro.
Izuku no podía estar más preocupado por su amigo, pero no sabía si es correcto hacerlo en ese momento, pues ya no estaba seguro de nada.
Este Bakugo ya es homicida... Y por las últimas cosas que han sucedido durante estos meses, siendo el quien trata de ser héroe, es cuando pudo conocer el otro lado de los Villanos.
La mayoría de ellos llevaron a ese punto su salud mental, en la oscuridad por todo el sufrimiento que pasaron... Pero lastimosamente, nada de eso justifica sus acciones malvadas.
—Ya no digas nada... Kacchan—Dijo Izuku casi como súplica, mirando fijamente.
Aizawa miraba fijamente a ese Bakugo, pareciendo desesperado por algo, mientras que estaba de brazos cruzados.
¿Es correcto hablarle así a un Dios? Por supuesto que no, toda insolencia traía sus consecuencias cuando se hacía algo no debido.
Sin embargo, el podía notar a cierta ciencia, que a Ryuk le importaba un comino que tipo de forma es la que se refieren a el.
Pues el tenía otra cosa que hacer.
«Sin embargo, debemos mejorar ese punto» Pensó Aizawa mirando hacia su alumno.
Katsuki Bakugo no podía estar más molesto y orgulloso consigo mismo, pues en esta otra dimensión, le demostraba otros puntos de el y sus diferencias.
Es sumamente molesto que no le pusieran atención por algo tan insignificante como comer manzanas, y un poco feliz por la forma en que se demostraba tan valiente.
Al menos podían concordar en algo en que no tuvieran problemas, que es increíblemente irritante que no les pusieran atención cuando estuvieran hablando de algo importante.
No obstante, conocía el tipo de miradas que recibía a su alrededor, pues debido a su tiempo en la Academia en que se esmeró por calificar, se acostumbró al nuevo tratado que le daban.
De ser adorado como alguien único, paso a ser como uno más que tiene sus momentos sobre los demás.
Ryuk miró hacia el chico, dejando salir un leve resoplido.
—Ah... Yo no te elegí, ¿No lo ves? Todo fue un accidente. ¿Creés que tu fuiste elegido por ser inteligente? no seas vanidoso.
Al chico no pareció gustarle las palabras del Shinigami o solo le dió igual, aún así, Katsuki miró hacia el Shinigami por completo.
—Simplemente cayó cerca de aquí y tu simplemente la encontraste, eso es todo lo que pasó.
Las cosas se enfocaron en las reglas de la Death Note, las cuales están escritas en inglés.
—Por eso escribí las instrucciones en Inglés, el lenguaje más común en el mundo humano.
Vlad King asintió, escuchando claramente cada una de las palabras que decía el Shinigami, claridad y atención.
Estaba siendo demasiado específico, pero entendían el punto de que Bakugo simplemente fue el primer humano que todo contacto con la Death Note por mera casualidad.
No por su inteligencia, no por sus habilidades, solo por suerte de aquella libreta con un poder tan desicivo... cayera en su preparatoria.
—Sin embargo, esto no es del todo accidente—Dijo el héroe músculos mirando fijamente hacia la proyección.
Momo miró fijamente, realmente aquí demostraba que esto no es un accidente, ni tampoco ningún descuido por parte del Shinigami Ryuk.
Tanto ella, como los demás lo sabían muy bien al oír la parte en que se forzó en escribir las instrucciones en tal idioma.
—Si realmente hubiera sido un accidente... ¿Por qué razón escribiría un lenguaje humano antes de supuestamente perderla?—Dijo Momo frunciendo el seño.
Present Mic asintió, estando de acuerdo con el comentario de una de las niñas más inteligentes en su Clase de Inglés.
Si antes pudieron haberlo pensando, ahora es más fácil saberlo, las cosas dejaban de ser una coincidencia como pudieron haber esperado.
Ya no es un accidente, o un descuidado.
—Ryuk no la perdió, la dejo caer en el Mundo Humano—Dijo Present Mic, mirando fijamente al Shinigami.
Pero no entendían porque...
Ryuk es un Shinigami, un ser que a su propia perspectiva, podría estar mirando la libreta como un simple trabajo si no es su herramienta de trabajo.
Pero estaban muy seguros, que de cualquier forma, el debía estar consciente de lo que podría ser la Death Note en las manos de un humano.
Claramente nada fue del agrado de Katsuki, este se inclinó un poco y hablo en un tono un poco más elevado.
—Entonces, ¿Por qué la dejaste caer? Incluso escribiste instrucciones específicas. Así que no intentes decirme que esto fue un accidente.
—¿Me preguntas por qué? Lo hice porque estaba aburrido.
Katsuki claramente se sorprendió por la respuesta del Shinigami.
—¿Aburrido?
Bueno, nadie podía estar más atónito ante las palabras dichas por el Shinigami, que allí mismo.
Les estaba demostrando que a ellos, la Death Note no es más que una herramienta para divertirse, no para hacer su trabajo de guiar a los humanos a la muerte como el ciclo de la vida.
Ya que quieran o no, la muerte existe, para todos y alguien tiene que encargarse de eso, por eso es que tratan de no odiar o tener alguna cosa en contra a los Shinigami.
—¿Cómo podrías dejar caer al Mundo Humano una libreta de la muerte así nada más?—Dijo Ectoplasm, totalmente perplejo.
La Death Note es el arma que cualquiera necesita para cumplir sus objetivos más ilógicos en su sociedad, un arma que en las manos de un Humano sería la perdición de la misma raza.
O como Bakugo, que intenta por lo menos, acabar con los Criminales... Que a pesar de ser visto como un acto bueno para otras personas, sigue siendo malo.
Sin embargo... Las cosas hubieran cambiado tanto, cuando algún Criminal o persona totalmente malvada haya tomado la libreta.
—¿Solamente por un aburrimiento? Creía que los Shinigami eran más responsables... No esto—Dijo Cementoss.
Si pudiera, el héroe de cemento podría haber puesto sus ojos en blanco, por esto que estaban viendo.
Los Shinigami son Dioses, criaturas que debían ser totalmente distintas al humano, aquellos desagradables seres que atraen la responsabilidad de llevarlos a la muerte.
¿Cómo es qué uno perdía su Death Note a propósito? Y por una razón todavía más estúpida que eso, por sus malas decisiones, la humanidad podría ser exterminada.
—Los Shinigami... Nadie de ellos hace su trabajo—Dijo Snipe, frunciendo el seño.
Ya estaba claro, todos los Shinigami son seres que no tomaban en serio su puesto de trabajo, por más decepcionante que fuera.
Son seres que ya no les importa hacer lo que debían hacer, y con lo que habían visto, preferían jugar.
A excepción de Ryuk, que llevó el tema de entretenerse a otro nivel... Su arma, el arma masiva...
Eso es aún peor de lo que podrían hacer en su trabajo.
—Ya veo...
Nezu solamente pudo mirar sin saber que pensar al respecto, decepcionarse definitivamente no, tal vez si, si se ponía a pensar en las expectativas que había tenido.
Ahora podía verlo con claridad, como es que a los Shinigami, tener un arma tan poderosa como la Death Note consigo y desperdiciarla de esa manera.
Claro que ellos no desean la Death Note para asesinar de esa manera, aunque tuvieran esa libreta, sería de usarla en caso de emergencias o a manos de los jueces cuando hay juicio para un Criminal o Villano.
—Después de todo, los Shinigami no son muy diferentes a los humanos en ese punto... Son irresponsables e infantiles—Dijo Nezu, como declaración firme.
Como toda mentalidad inmadura.
Jirou, cuando llegaban al punto de hablar sobre los Dioses, nunca se habría imaginado este tipo de cosas.
Los Dioses son aquellos seres que realmente son los que deciden todo, los verdaderos jueces de la humanidad, los que deciden en el cielo.
Sin embargo... Ahora que veían frente a frente a Un Shinigami, un Dios de la Muerte, es sumamente increíble verlo así.
—¿Aburrido...? ¿Dejó caer una libreta de ese poder solamente por un aburrimiento?—Dijo Jirou, incrédula.
Kaminari tenía la mirada sombria, decir que no estaba asustado es un disparate, la incredulidad golpeaba duramente al pobre muchacho.
La forma tan fácil con la que los Shinigami se referían a ellos, como simples ratas de experimento o un entretenimiento mediante el sufrimiento y la muerte... No le hacía nada bien.
—Jirou...—Dijo Kaminari.
Siendo llamada por el rubio, Jirou giró su cabeza hacia su dirección.
—¿S... Si?
—No te sorprendas... De la perspectiva de un Shinigami... Somos simples hormigas—Dijo Kaminari.
Sero miraba preocupado a sus compañeros, parecían bastante asustados por esto, algunos más pensativos y otros que parecían neutrales.
No los culpaba, hasta el estaba confundido y nervioso por la razón en la que Ryuk defendió su acción.
¿Quién imaginaria que los seres que debían ser los más serios, diría algo así?
Una vista del Mundo Shinigami se enfocó, sobre todo a estos seres que jugaban o hacían cosas fuera de lo que es su tarea.
—La verdad es que los Shinigami no hacemos mucho en estos días, la mayor parte del tiempo la pasamos durmiendo o jugando, si te molestas en escribir nombres en la libreta, los demás se ríen de ti por trabajar tan arduamente. Ni siquiera tiene caso escribir el nombre de otro Shinigami porque no podemos morir, y como vivimos en el Mundo Shinigami, no nos divierte matar a aquellos que viven en el Mundo Humano. Así que pensé que me divertiría más si venía yo mismo.
Los Shinigami, aquellos seres superiores, Mismos Dioses, a veces considerados vil demonios por su deber.
Son los encargados de guiar el alma de todo ser vivo a la muerte, lo que se suponía que serían criaturas totalmente horripilantes que nadie quisiera ver.
Bueno, la realidad golpeó duramente a todos los presentes, quienes nuevamente volvían a conocer otro lado, un punto más importante de como son estos Shinigami.
Parecían niños...
Katsuki Bakugo estaba en shock, uno muy molesto en el cual la incredulidad es el centro de atención, con su mirada totalmente puesta en ese escenario tan fatal.
De todo lo que podría haber pensando al respecto, siendo los Shinigami los seres más peligrosos, ahora solo son perezosos desinteresados.
—Solo son... Ratas con alas—Dijo Katsuki, mirando fijamente a los Shinigami.
Nejire miraba en shock, hacia lo que hacían los Shinigami habitualmente, parecía que hacer su trabajo ya no es nada importante para ellos.
Es una simple burla, una en la que no estaban interesados en continuar, ahora solo buscaban matar su aburrimiento con el poder que se les fue dado.
—Solo busca diversión en nosotros...—Dijo la chica.
Tokoyami igualmente parecía decepcionado, pues no creía que aquellos seres tan interesantes son realmente criaturas las cuales es una pena observar.
Solo se tomaban en juego todo lo que representan, además de que ya no es nada increíble saber que no podían morir realmente.
—¿Estos son los verdaderos Shinigami?—Susurro el chico, desanimado.
Shoto se guardó la sorpresa para más tarde, estaba más concentrado en estás nuevas referencias para dar a conocer otras habilidades de los Shinigami.
En primer lugar, parecía que ningún Shinigami se esmeraba a trabajar y hacerle honor a sus nombres, retrocediendo a jugar solamente.
La otra cosa por decir... Es que estos Shinigami son seres inmortales.
—No les interesa deshacerse de vidas humanas... Ni cumplir con su trabajo, ya veo porque siempre se encuentran aburridos—Dijo el Todoroki menor, frunciendo el seño.
Los héroes también parecían afectados por la obvia narración de Ryuk, del porque siempre se mostró tan aburrido.
Y con debida razón, los Shinigami no son más que criaturas tan extrañas que todavía no entendían muy bien, al poco tiempo les enseñaban otra cosa que siquiera es difícil de aprender.
All Might no podía estar más disgustado, que la única alternativa que tenían los Shinigami para sacarlos de su infantil aburrimiento por su falta de trabajo, es jugar con la Humanidad.
Jugar con la inocencia y sufrimiento causante por ellos mismos, de un Mundo en el cual no son originarios.
—Los Shinigami realmente necesitan a un mejor líder—Dijo All Might, cruzado de brazos.
Aizawa señaló hacia All Might con un asentimiento, aclarando que estaba de acuerdo con el.
Con todo lo mostrado, ya podían dar por confirmado, como es que los Shinigami tenían tanta libertad debido a su pésimo líder, que debía ser igual que ellos.
Tanta libertad es muy mala, como para seres como ellos.
—Su líder debe ser otro Shinigami más, uno con un intelecto muy irracional—Dijo Aizawa frunciendo el seño.
Mandalay soltó un suspiro agotador, realmente no deseaba hablar mal de los Shinigami, pues sentía que en cualquier momento tendrían su Karma y su consecuencia de hablar así de ellos.
Pero tampoco podía negar que sus compañeros heróicos tenían mucha razón, el líder Shinigami debería ser más responsable con su gente.
Sin embargo, el hecho de que no podían morir si fue una sorpresa.
—Los Shinigami... ¿Son inmortales?—Dijo Mandalay, sorprendida.
Ryuk tomó la Death Note que originalmente fue suya, la abrió y vio todos los nombres, del primero hasta el último.
Dándose cuenta, que solo había una víctima a la que Katsuki eligió la causa de la muerte.
—Como sea, estoy sorprendido de cuantos nombres has escrito. Pero ¿Por qué solo escribiste la causa de muerte del sujeto del camión?
Katsuki que pareció mirar hacia la ventana, se dio la vuelta uelta para mirar hacia Ryuk.
—Si no escribes la causa de muerte, la víctima sufre un ataque al corazón, y esa es la mejor parte de la Death Note, Ryuk.
El Shinigami solo lo miró fijamente, parecía ser que el chico ya tenía algo en mente.
—Ya acabe con la lista de los peores Criminales del mundo. Eventualmente acabaré con todos.
¿Acabo con los peores Criminales del Mundo? Ahora con más razón, los países tendrían mucho más deseo de detenerlo de cualquier forma.
Izuku miró fijamente hacia el Bakugo de esa Dimensión, estando bastante asombrado por su fuerte determinación por querer eliminar a la maldad de la sociedad.
Sabía bien que estos Criminales, son los sujetos más malvados de esa Dimensión pero matarlos no lo hacía mejor.
—No... No lograrás nada, siempre habrá maldad...—Dijo Izuku incómodo.
Momo asintió, estando de acuerdo con las palabras de Midoriya, pues todos allí sabían la verdad en eso.
Es horrorizante escuchar a Bakugo decir eso con tanta naturalidad, y ahora confirmaron que definitivamente esos nombres son de los Criminales alrededor del mundo.
Durante cinco días, escribió todos esos nombres, originales y provinientes diferentes de muchas partes del mundo.
—Eventualmente, saldrán más Criminales y jamás podrás detenerlos—Dijo Momo.
Shoto miraba fríamente hacia Bakugo, parecía ser que el indiscutible poder de la Death Note ya había tomado total control de su mente.
Lastimosamente, se aferró a una meta tan imposible de conseguir, a causa de un método tan repulsivo como ese.
Además, ante todo el historial de asesinatos que ya llevaba, que se expandía a lo mundial, ya lo volvía en la peor escoria.
—Te has convertido en la peor escoria en la sociedad—Dijo Shoto con simpleza.
Iida se encontraba muy decepcionado por el camino que había decidido tomar su amigo, o no, ya que es otro Bakugo.
De todos modos, es triste ver como es que Bakugo se estaba hundiendo en la misma oscuridad solamente por un poder que le pertenece a un plano existencial distinto.
No hay forma de ayudarlo de esa situación, solo merecía una sentencia justa y bien merecida por sus actos.
—No tienes porque entusiasmarte tanto, la ley te atrapará—Dijo Iida seriamente.
Kirishima miraba un tanto pensativo, eliminar a los peores Criminales tendría ventajas y desventajas, aún más si realmente intentaría ir en contra de los demás Criminales.
El peligro se volvería nulo, la paz llegaría en sus momentos y la tranquilidad sería el climax, pues con menos sujetos malos en las calles sería más seguro.
Lo malo de ese trabajo... Son las muertes de los mismos que pueden causar esos problemas.
—Pero... ¿Eso no causaría el pánico en las personas?—Cuestiono Kirishima, inseguro.
—No.
Nezu se tomó el momento para hablar al respecto, mirando fijamente hacia la proyección para decir sus siguientes palabras, que son como la guía para los demás.
El Director de la mejor escuela de héroes, simplemente tomaba el centro de atención con una sola palabra para aclararles algo.
—Los civiles estarán tranquilos, y conociendo como es que son los humanos, muy seguramente comenzarán a idolatrar al joven Bakugo.
—¿Cómo es qué podrías estar tan seguro de eso?—Cuestiono Radgoll, nada tranquila.
Por supuesto que nadie estaría feliz de escuchar esas palabras provenientes del Director, sin embargo no podían quitarle el hecho de que podría tener razón, otra vez.
Ya que al acabar con la mayor cantidad de Criminales, Bakugo le daría al mundo un corto ciclo de paz y seguridad.
—Sin embargo...
Una sonrisa creció en Nezu, parecía ser una bastante astuta y segura de si mismo.
—Los únicos que caerán en pánico, serán los mismos altos mandos de cada país, y posiblemente las autoridades de cada uno—Dijo como declaración final.
Los demás decidieron esperar, sabían que en cualquier momento eso se decidiría, tarde o temprano.
Ese mundo se enteraría que había alguien más, que se encargaba de acabar con la vida de los Criminales, ya no hacia mucha falta para saberlo.
Eso lo tomó un poco por sorpresa a Ryuk, quien miraba al primer portador de una Death Note que decidía tener un propósito fijó con la Death Note.
—¿Cuál es la razón para hacerlo?
—Solo es cuestión de tiempo para que se den cuenta de que alguien está eliminando a estos Criminales. Quiero que el mundo sepa de mi existencia, ¡Que hay alguien en este mundo que esta juzgando a los malvados!
Pixie-Bob negó con la cabeza, en una rotunda negación ante las palabras fuertes y declarativas de este Bakugo.
Claramente estaba muy afectado por tal poder, pero ya llegaría algún momento en que recibiría lo que merecía.
—¿Y quién eres como para juzgar a los malvados? Idiota—Dijo la heroína apretando los dientes.
La perspectiva superior del chico ya la estaba desesperando.
No es la única, Radgoll estaba igual que su compañera y amiga, no pudiendo creer lo tan bajo que había caído ese muchacho como para hacer algo así.
Ya no tenía salvación de todos modos, nombres de cientos y cientos de Criminales ya hacían en esa libreta sin que pudieran hacer algo al respecto.
Ya no tenían las esperanzas de que sea salvado, pues ya había caído en la tentación del poder.
—Ya no hay alternativas tonto, pronto te atraparán—Dijo Radgoll.
Tigre miraba fijamente hacia la fuerte decisión y determinación del muchacho en cumplir aquella enorme fantasía que cargaba.
Si bien es bueno poseer tal actitud, no es nada bueno para un objetivo como ese.
—Las personas no son nada buenas... Caen en la oscuridad de la maldad y van a hacer sus crímines pero eso no da ningún derecho para que tu puedas juzgarlos—Dijo el héroe músculos de los Pussycats.
Snipe negó con la cabeza ante la decisión de Bakugo, la cual realmente habían visto venir desde hace un poco de tiempo antes ya.
Definitivamente el muchacho deseaba convertirse en algo que no merece, además... Había una cosa muy importante.
—No puedes juzgarlos... No cuando te convertiste en lo peor de todos ellos—Dijo Snipe mirando fijamente hacia la proyección.
Cementoss soltó un suspiro, realmente es bueno ver tanto optimismo en los jóvenes pero nunca para estos propósitos tan erróneos.
Bakugo ha sido afectado por el poder de la Death Note, de eso no tenían la menor duda pero ya es demasiado que haya originado un objetivo así.
—No eres ningún héroe... Tampoco un salvador, solo eres el peor Criminal en la historia—Dijo Cementoss.
No. 13 guardo su propio silencio, pero es claro percebir que el héroe se encontraba sumamente decepcionado por Bakugo de esa Dimensión.
Las tornas no han cambiado, seguía siendo un chico que se alzaba con una perspectiva superior a la de todos, queriendo buscar ser el más importante, sobresalir.
Al menos con ellos, es un héroe que trata de hacer lo correcto a su manera...
En esa dimensión... Se había vuelto un villano sin algún reparo o solución que se pudiera encontrar para salvarlo realmente.
El ojo rojo del Humano se movió con convicción, el ojo rojo del Shinigami se movió ante la determinación demostrada.
Honestamente, el Shinigami no podía creer que el primer humano que se esmeraba por utilizar la Death Note en un uso tan molesto, tuviera alguna forma similar a el de ver este Mundo tan ridículo y aburrido.
—¿Por qué te molestas? ¿Qué es lo que tratas de conseguir al juzgarlos? Es decir, ¿Qué te importa?
—Porque...
Katsuki desvío un poco la mirada, mirando hacia la lluvia tan descontrolada junto a la tormenta, con un pensamiento claro pasando por su ser.
—También estoy aburrido.
Ryuk solo se quedó en silencio, mirando fijamente hacia el joven, quien terminó por mirarlo nuevamente.
Sin embargo, Katsuki por esta vez demostraba seriedad.
—No quería creerlo al principio, pero ahora es obvio, ahí hay algo en la libreta que hace que los humanos queramos usarla una vez más.
Bakugo miraba fijamente hacia aquella cosa, no pareciendo nada feliz de la coordinación que estaban teniendo su contraparte y el Shinigami.
Al parecer, la primera demostración de su contraparte y el Shinigami ya estaban teniendo sus frutos aquí.
—Entonces... Esos pensamientos de pura mierda comienzan a conectarse, ¿Eh?
Izuku es capaz de notarlo, la conexión tan importante que estaban teniendo el Humano y Shinigami en ese momento tan exacto.
Desde el principio habían comenzado a darles pistas sobre el punto de conexión que tendrían Bakugo y Ryuk, parecía ser ahora cuando sus pensamientos salían a flote.
Por más que no quería, es la realidad... La perspectiva de Bakugo conectaba con la perspectiva de un Shinigami.
—Ryuk también se sorprendió por la respuesta de Kacchan, de eso no cabe duda—Dijo Izuku sintiéndose un tanto extraño.
Mina Ashido, se comportó insegura ante la respuesta de Bakugo, ¿Realmente trataría de justificar todas sus acciones bajo la emoción de aburrimiento?
Eso es lo que diría un Criminal desquiciado que muy seguramente diría algo al respecto de como comenzó a matar.
—¿Aburrido? Eso es demasiado tonto—Dijo la chica de piel rosada.
All Might frunció el seño, pues realmente encontraba algo de verdad en las palabras de Bakugo, sea lo que sea.
La Death Note es conocida por su grandioso poder, las capacidades con las que se podía alcanzar.
Hacía que el humano tenga tantos deseos de querer usarla, algo tan importante que motivaba al mismo joven a utilizarla para cumplir su objetivo.
—No importa... Sigue siendo incorrecto e inmoral, joven—Dijo All Might.
Endeavor soltó una ceja, mirando como es que el Shinigami parecía tener algún mínimo interés por descubrir el motivo del joven por hacer eso.
Claramente podía darse cuenta que Ryuk estaba sorprendido, y si no, tal vez interesado por el aburrimiento que tenían ambos.
Sin embargo, el no podía permitirse aceptar que Bakugo estuviera por ahí, matando a quien quisiera, ya que lo presentía.
Parecía ser que el chico, estaba preparado de eliminar a cualquier persona que se interponga en su meta.
—Es una situación muy peligrosa para el gobierno—Dijo Endeavor mirando fijamente.
Por ahora, tendrían que estar conscientes que Bakugo llevaba una ventaja muy grande contra sus enemigos.
Un retroceso de tiempo se hizo claro, hacia un día en un pasado no muy alejado a 5 Días, con una lluvia parecida.
«Los mate a ambos...»
Se trataba de una voz temblorosa, a punto de quiebre.
Katsuki Bakugo de hace cinco días, minutos luego del segundo nombre escrito, caminaba bajo lluvia en un callejón solitario y oscuro, impactado de la incredulidad por sus actos ciegos.
«¡En verdad mate a esos hombres, eran vidas humanas!»
Todos se mostraron algo sorprendidos, de que les mostraría que había sucedido entre esos cinco días, empezando por el exacto momento donde Bakugo comprendió el poder de la Death Note.
Más fue su sorpresa al oír los pensamientos del joven, la forma en que se escuchaba tan estupefacto por sus acciones.
Nezu asintió con aprobación, el realmente nunca había creído que Bakugo haya tomado una decisión de un momento a otro, es decir, que no dejará de lado con simpleza al poder de la Death Note.
Claramente estaba estupefacto, perplejo de haber acabado con esas dos vidas ante un poder tan extraordinario y ilógico.
—Es normal, ninguna persona saldría con un estado mental ileso después de eso—Dijo Nezu.
Midnight tenía una expresión sombria, escuchando dolorosamente todas las pobres palabras de Bakugo que decía en sus pensamientos menos reconfortantes.
Se sentía... Como si hubiera estado frente a una situación tan grave que apenas pudo salir vivo, siendo un pequeño que necesitaba la ayuda de alguien más.
Que buscaba consuelo, que quería salir del punto de quiebre en el que estaba en ese momento.
—Bakugo...—Dijo Midnight con tristeza.
Esa fue la primera y única oportunidad... Que hubieran tenido para salvarlo de ese terrible destino que eligió seguir.
Nejire miró confundida hacia la proyección, como es que Bakugo se escuchaba asustado y perplejo de haber cometido tales asesinatos.
Hace un momento, creía que el chico ya portaba ese pensamiento tan repulsivo de acabar con la malicia del mundo a través de asesinatos tan simples y irreales.
—¿Ah...? ¿Entonces Bakugo nunca había tenido esa idea loca?—Dijo Nejire sorprendida.
Ochako también parecía sorprendida de lo que estaba pasando, mirando un poco tomada por la guardia baja ante este recuerdo de hace cinco días.
Con toda la naturalidad con la que habló ese Bakugo hace momentos atrás, hacia creer que tuvo una idea para acabar con los Criminales.
—Eso parece...—Dijo Uraraka.
Asui también pensaba que es un hecho que no se podía dejar de lado, ella miraba fijamente hacia lo que estaba ocurriendo allí.
Bakugo se sentía... Tan asustado, inseguro y necesitado para que lo ayudarán en ese momento.
Viéndolo de otro modo...
—El... Está perdiendo todo rastro de su humanidad—Dijo Tsuyu reconociendo bien lo que estaría por suceder.
Un presentimiento se lo indicaba.
Jirou escuchó con suma atención a las palabras de su amiga rana, reconociendo bien que tal vez ella podría tener razón.
Realmente podía escuchar a Bakugo, tan desolado ante las víctimas que acababa de asesinar por primera vez.
Totalmente, podía escuchar el punto de quiebre en el que se encontraba.
Ella llegó a su propia conclusión, una que podría haber servido si Bakugo no hubiera hecho las cosas solo.
Si tan solo tuviera algún acompañante en ese momento, podría haberlo ayudado para no caer en el abismo oscuro en el que se encontraba actualmente.
En su camino habitual, recargado en la pared, se detuvo.
«¡No pasará por alto! Además... ¿Q... Quién soy yo para juzgar a los demás?»
Los adultos, es decir, los héroes profesionales parecían devastados, o al menos una parte de ellos, reconociendo bien a donde querían llegar a esas palabras.
Todos lo presentían, esas palabras seguían siendo los de un chico inocente, o al menos que tenía el razonamiento que muchos querían que esté Bakugo tuviera.
Pero claro... Estaban devastados por lo que eso significaba, el punto final de su inocencia.
Los adolescentes, es decir, los estudiantes que aspiraban a convertirse en los héroes de sus propios sueños. La gran parte estaban muy confundidos ante lo que estaba sucediendo, sin embargo, la otra muy pequeña parte son conscientes.
Igualmente como sus maestros y héroes los cuales apoyarse, sabían que nada bueno saldría de eso, se encontraban viendo la última pisca de remordimiento de Bakugo ante esas dos vidas humanas que terminó asesinando.
La parte final, de como podría ver la Death Note, de un arma masiva en la destrucción de la humanidad, a la herramienta de salvación de la humanidad.
Lastimosamente, cometiendo crímines letales y graves que llevarían a una sentencia de muerte.
La mirada roja de Bakugo, no se despegaba del suelo... Parecía pensativo.
«No... No... Un momento, tal vez estoy equivocado»
Levantando la mirada, el muchacho parecía más determinado a cumplir algo.
«Esto es lo que he pensado últimamente, ¡el mundo se está pudriendo y quienes lo causan merecen morir!»
La visualización se enfocó en una pantalla comercial, noticias muy posiblemente de homicidios.
«Alguien debe hacerlo, ¿Por qué no yo? ¡Aunque signifique sacrificar mi mente y mi alma, lo vale, porque el mundo no puede continuar así!»
Bueno, la forma en que había cambiado de opinión había sido demasiado pronto para el gusto de todos, de todos modos, ya sabían que significaría cuando esté Bakugo llegué a su hogar.
Muy posiblemente continuaría asesinando a los Criminales que en su día actual, ya hacían en las hojas de la Death Note.
Un gran número de gente asesinada, cuerpos por donde sea...
Es una vista que nadie quería ver, nadie cuando el causante es Bakugo a través de la Death Note.
Nezu seguía mirando ya con una expresión más comprensiva y serena, ante las cosas que este joven parecía pensar.
—El objetivo es noble, salvar al mundo que se encuentra podrido a causa de un sacrificio honorable.
Realmente pensándolo de ahí, haría que cualquier persona estuviera de acuerdo y no tenía porque haber culpas al respecto.
No obstante...
—El medio con el que se logra, es un concepto imposible de considerar—Dijo Nezu seriamente.
De igual forma, no importaba hacer un comentario más allá, pues el resultado ya se lo habían mostrado.
Durante esos cinco días, Bakugo acabó con todos los peores Criminales a nivel mundial.
All Might simplemente negó con la cabeza, totalmente en desacuerdo con el ideal de Bakugo, el que les estaba mostrando
No tenía mucho para que el joven pueda considerar salvar el mundo podrido, cometiendo algo que un héroe jamás haría.
—Tal vez los Criminales son el peor lado de la humanidad, los que no dejan disfrutar la paz, pero no significa que la muerte sea la solución—Dijo All Might, decepcionado.
All Might se miró el puño por un momento, el cual estaba apretándose en una fuerte presión, la que ya no tendría cuando salieran de allí.
Nadie merece la muerte... Ni siquiera su peor enemigo.
Endeavor frunció el seño, parecía ser que el muchacho siempre, al menos, entre tanta oscuridad por su camino tan vil, caminando encima de los cadáveres que han caído por el ataque al corazón.
Trataba de mantenerse a flote, en la pequeña luz que deslumbra de su noble objetivo, saciar la maldad para darle la paz al mundo.
Uno podría pensar que estaba bien, que al final todo valdría la pena... Pero para Bakugo ya no sería nada bueno, su muerte llegaría y jamás estará con sus seres queridos descansando en el cielo.
—Me niego a aceptar, que está es la solución para curar al mundo, ahora es un asesino—Dijo el héroe de fuego, nada contento.
Aizawa pensó acerca de la ley, después de todo, aunque no le gustará y estuviera decepcionado por el camino que este Bakugo diera a elegir.
Tenía la razón en algo, que ese mundo fuera tan peligroso que nadie podía siquiera salir a caminar normal, antes de ser atacado por alguna persona, debido a que la ley es insuficiente.
Alguien realmente debía haber algo para acabar con ese peligro... ¿Pero es realmente necesario asesinar?
«No... Los asesinatos no son la solución a un problema» Pensó Aizawa negando con la cabeza.
Vlad King negó simplemente la cabeza, tal vez alguna que otra persona todavía cuerda y con mucho sufrimiento mental, podría aceptar esta forma de limpiar el mundo.
Ellos no, ellos son héroes, los héroes que traerán el nuevo mañana y la paz que All Might les dejó como legado, preparar al joven Midoriya a ser el nuevo símbolo que mantenga en control a toda la maldad.
Claro que no aceptarían que la forma de cumplir, salvar al mundo, es matando a los mismos que causan su destrucción, no podían hacer eso.
—Siempre se trata de paciencia, el tiempo es la clave... Los dos métodos funcionan momentáneamente...
La mirada del Profesor de la Clase 1-B, se enfureció mientras miraba hacia el Bakugo de la proyección.
—Pero solo uno es el que prevalece.
¿Matar a las escorias de la humanidad realmente acabaría con la maldad en el mundo? Claro que no...
Habían más formas de limpiar la maldad de este mundo, por más tardadas y estúpidamente nobles que sean, seguían siendo mejor que hacer lo que este Bakugo está haciendo...
Convertirse en lo peor de la humanidad.
Ahora en el Salón de Clases, mientras que el profesor explicaba y escribía un tema en el pizarrón.
Katsuki pensaba en su asiento, acerca de lo que acababa de conseguir mientras trataba de fingir que prestaba atención.
«Me pregunto, ¿Qué pasaría si alguien más hubiera encontrado la libreta? ¿Ahí alguien más que yo que sería capaz de eliminar a la escoria de este mundo? Si no lo hago yo, ¿Quién lo hará? Eso es, no hay nadie, pero yo puedo hacerlo. De hecho, soy el único que puede, lo lograre, usando la Death Note cambiaré el mundo»
Bueno... Pensándolo de esa forma, que de alguna manera, la Death Note no hubiera caído en la preparatoria del chico...
Sería totalmente catastrófico, claramente que dependiendo de la persona, si es de aquellas personas sensibles, muy seguramente dejarían la Death Note y perderían todos sus recuerdos.
Ya sean como Bakugo y su forma ridícula pero muy cierta de ver la oscuridad del mundo.
O...
El rostro de Midnight indicaba señales que pensar en las posibilidades de otro usuario más repugnante de la Death Note, se crearía un caos imposible de arreglar.
Las cosas serían muy preocupantes si la Death Note no hubiera caído justo para Bakugo, como un lugar más peligroso...
—Sería mucho peor que un Criminal tuviera tal cosa—Dijo Midnight.
Present Mic asintió a su gran amiga y compañera de trabajo en la Academia, su rostro nada contento básicamente daba a significar el mismo pensamiento.
Por más que dolía admitirlo, no podían negar que es la realidad, al final de todo, Bakugo intentaba asesinar a los Criminales y no vidas inocentes, a diferencia de lo que haría un sujeto malvado.
—Un horror...—Dijo Present Mic con desolación.
La iluminación golpeó el rostro de Katsuki, ahora que se cambiaba... A un bolígrafo escribiendo sin parar en una hoja.
Tan pronto reconocieron aquel bolígrafo, todos se quedaron sin aliento casi en un instante.
Sabían que significaba y lo que estarían por ver, lastimosamente...
No tuvieron tiempo de prepararse mentalmente, y enfrentaron un horror, una vista que nadie desearía ver en su vidas.
Se trataba del chico, en su escritorio de su habitación, seguía escribiendo con rapidez.
Un Criminal comenzó a perder el oxígeno en su celda, hasta que colapsó en frente de su compañero de celda que estaba asustado ante lo que acababa de ver.
Nezu lo entendió, ya sabía que estaban viendo en ese momento tan exacto.
Se trataba de las víctimas escritas por Bakugo en esos cincos días, por lo tanto, permaneció preocupado por las reacciones de su personal y alumnos ante este acontecimientos.
No solo sería este Criminal, muchas más escorias de la humanidad iban a colapsar por la fuerza perversa de un Shinigami a través de un arma tan poderosa como Death Note.
En otras palabras, estarían por ver una escena que para los villanos es toda una bella pieza de arte.
Para ellos los héroes, sería un horror que jamás pudieron imaginar, hasta para el sería un acontecimiento que nunca creyó ver, por lo que se preparó también.
De todos modos, ya sin siquiera ver a la gente a su alrededor, el Director es capaz de sentir tanta incertidumbre, odio, horror y incredulidad.
Mientras que Katsuki, en su habitación, seguía escribiendo nombres de Criminales sin perder la concentración, subiendo la mirada para reconocer la información de los peores Criminales del mundo en su pantalla.
Otro Criminal que caminaba por ahí, se derrumbó con un ligero jadeó de asfixia.
Bakugo no dejaba de escribir en la Death Note, mirando hacia la pantalla de su computadora y la hoja.
Los Criminales siguieron cayendo y cayendo, muertos por un ataque cardíaco que detenía su corazón, todos al mismo tiempo, dándole un impacto muy fuerte a la inseguridad y el caos del peligro, como también una gran incredulidad al mismo mundo.
Estaban viendo una completa monstruosidad, la forma tan fácil en que los Criminales caían muertos al suelo, ahogándose ante el sentir del corazón detenerse.
Todos esos cuerpos que caían al suelo, sus expresiones tan dolorosas e incrédulos, todo eso originaba horror en todos los presentes.
Mandalay miró fijamente hacia la proyección, con una mirada llena de horror y su boca semi abierta, ante todos los cuerpos que seguían cayendo al suelo.
Primero fue uno... Después fueron más, estaba muy segura que más de 50 cuerpos colapsar.
Tanto fue el impacto que no pudo decir ninguna palabra, en su lugar, la respuesta que necesitaron todos fue el constante temblor de su cuerpo.
Los ojos de Midnight estaban abiertos como platos, siguiendo la caída de todos los Criminales por puro instinto que actuaba primero que su voluntad.
Ni ella, ni nadie de las otras espectadoras podrían siquiera estar tranquilos ante un suceso tan desquiciado y extremista.
—Todos... Están muriendo así nada más—Susurro Midnight con suma tensión en su ser.
Nejire normalmente trataba de mantenerse tranquila, no tratar de demostrar mucho de sus emociones más profundas, pero está vez no lo logró.
El horror superó su carismática personalidad tan carismática y insoportable, mirando con un rostro sombrío a todas las muertes que se presentaban.
—Espeluznante...
Está es solo otra amplia diferencia de lo distintos que pueden ser la contraparte de ellos, para Momo esto es una prueba para finalizar el hecho que en otras Dimensiones no eran más que otras personas con sus cuerpos y identidad.
Como las heroínas mayores, Momo también se encontraba en shock por lo que estaba viendo, más le afectaba expresión sin dudar de Bakugo.
—¿Está asesinando a esa velocidad... Sin remordimiento?—Dijo Momo sin poder creerlo.
Ya lo había visto venir... Pero es totalmente distinto a confirmarlo.
Jirou no podía estar más pálida en este momento, su cuerpo no dejaba de temblar ante la escena tan repulsiva.
Un sin número de asesinatos ya se hacían completados en menos de 50 segundos, muy seguramente sobrepasando la cantidad que uno se imaginaria...
¿Cómo alguien podría pensar que habrá muertes así de fácil? Es tan traumante ver esta escena.
Aún más... Sabiendo quien es el verdadero responsable, que a propia voluntad, decidía asesinar a todas esas personas.
Mina reconocía desde el principio que este Bakugo en particular es totalmente desconocido para ellos, no es el buen amigo que se encontraba en el terreno.
Aún así, verlo con tanta neutralidad cometiendo estos múltiples asesinatos, sería una imagen que lastimosamente no podría sacar de su cabeza.
Por lo tanto, como con los demás, permaneció en silencio mientras que seguía mirando con horror a lo siguiente.
Tsuyu se quedó en un terrible silencio, sus ojos pegados en la proyección, uno pensaría que se encuentraba tranquila pero es un pensamiento erróneo.
Su cuerpo está en un estado de tensión, pues ella tampoco es capaz de soportar bien todos estos asesinatos cometidos a una manera tan fácil como es.
Habrían imaginado que saltaron esos cinco días para no ver esto exactamente, o que por alguna razón, lo muestren con más cuidado.
Pero no, la proyección les estaba mostrando directamente y honestamente todo lo que pasó con Bakugo junto a la Death Note mientras que Ryuk esperaba.
—Escalofriante...
Si pudiera, Ochako quisiera vomitar en este momento para liberarse de todas las horribles tensiones que hacían en su estómago.
Todo lo que estaba viendo en la proyección, es algo que sumamente la asustaba, la aterraba y la naturalidad de Bakugo en esa acción no es muy agradable tampoco.
El horror se presentó en la chica, quien se abrazó el estómago.
—Que... Alguien... Lo detenga—Dijo Ochako horrorizada.
En un movimiento para deshacerse de la fatiga de su brazo, Bakugo extendió su brazo y el sudor latente salpicó de sus dedos junto al bolígrafo, repitiendo la misma acción varias veces.
Los Criminales que fueron escritos y recordados siguieron colapsando alrededor de todo el mundo, muertos y muertos, las peores escorias en la sociedad estaban muriendo.
El sonido de los cuerpos caer al suelo brutalmente, y el sonido de los jadeos ante el ataque no desaparecía, simplemente seguían continuando.
Los Criminales no dejaban de ser asesinados por el poder tan ilógico de la Death Note, tener que estar viendo tal masacre es totalmente distinto.
Aizawa parpadeó varias veces con incredulidad, es totalmente diferente imaginarlo que verlo, toda la incertidumbre se estaba juntando en el terreno y lo presentía.
Si bien el horror no dejaba de hacerse presente, el Profesor de la Clase 1-A trató de encontrar la solución y calmarse a tiempo, cosa que fue difícil.
Nadie estaba acostumbrado a ver algo como esto, tantos asesinatos al mismo tiempo.
—Bakugo... Ya no tiene salvación—Dijo Aizawa, mirando fríamente.
Este Katsuki Bakugo... Se ha convertido en un homicida, por supuesto que no es uno cualquiera.
Tal vez el más grande en toda la humanidad.
Katsuki Bakugo se encontraba en shock, mirando fijamente hacia la escena que se presentaba, pues el tampoco podía ser capaz de ver a su contraparte, una persona con su misma apariencia que hacía estás cosas...
Ver el trabajo terminado, es totalmente distinto que al ver su desarrollo, como este que es una clara demostración de esas palabras.
El remordimiento y el asombro de ver al principio todos los nombres, no se comparaba al gran horror de ver esto.
—Mierda...—Dijo Katsuki, incrédulo.
Izuku Midoriya estuvo pasmado, perplejo de lo que estaba viendo, la forma tan natural y nada piadosa en que este Bakugo se encargaba de eliminar a tantos Criminales...
Por alguna razón se sintió mal, por supuesto que el desconocía por completo a este Katsuki Bakugo, lo mantuvo presente desde que comenzaron.
Sin embargo, es difícil no sentir nada ante el rostro tan tranquilo de su viejo amigo mientras hacía asesinatos por todo el mundo.
—Todos están muriendo... Siguen sin parar—Dijo Izuku, temblando tenso por el sonido de cada caída al piso y cada ahogó.
Shoto se mantenía cruzado de brazos, ya sin querer la mirada después de lo poco que vio en la proyección, la forma tan fácil y consistente de Bakugo en acabar con estás personas.
Más que tristeza o decepción de lo que hacía Bakugo, el se encontró más incómodo de lo normal y optó por mirar hacia otro lado.
Claro, tuvo que cerrar los ojos para tratar de resistir ante el terrible sonido de las víctimas muriendo, que es algo difícil de aguantar.
La única solución a la que podría aferrarse, aunque su consciencia de héroe no se lo permitía... Es que todos estos muertos son escorias.
Iida temblaba de incertidumbre y shock mismo, ante cada Criminal que caía al suelo, muerto por el ataque al corazón, es una vista que el pequeño aspirante a héroe no es capaz de resistir.
Por más que quisiera pararse, lanzarse hacia este Bakugo y molerlo a golpes furiosos como rápidos, no podía, no es capaz porque es solo una grabación de otra Dimensión.
Sus músculos formados se tensaron en cuanto las palmas de sus manos se cerraron.
—¡Maldita sea! ¡¿Realmente necesitas terminar con ellos?!—Exclamo el Presidente de su Clase, furioso.
—Es una total masacre...
Kirishima se encontró pálido, mirando con una emoción claramente baja, cada cuerpo que caía al suelo es más que suficiente para aumentar el terror y el horror que tenía en ese momento.
Los Criminales estaban cayendo como moscas, muy seguramente que muchos de ellos al mismo tiempo por la velocidad tan sorprendente en que este Bakugo escribía los nombres.
Tan rápido caían al suelo, que lo tomaba como una masacre a pesar de que no había ni un rastro de sangre.
—Esto no es de hombres...—Dijo Kirishima en voz baja, deprimido y asustado.
Kaminari trató de abrazarse para calmar su fuerte temblor, pues el pobre no es capaz de aguantar tanta muerte así de simple y rápida.
Tal vez no había sangre, no había maldiciones, no habían explosiones ni destrucción... Lo único que había, son gritos ahogados en la terrible desolación en la muerte y los cuerpos que seguían colapsando sin piedad.
Pero eso es más que suficiente para entregarle, un horror que jamás alcanzó a ver.
—¿Es... Esto... La... La maldad... En persona...?—Dijo Denki.
Ojirou frunciendo el seño, en enojo al ver tantos asesinatos delante de el, su cola se movía descontroladamente por puro instinto ante el horror tan difícil de dirigir.
A lo largo de ser un estudiante en la mejor Academia de héroes, tuvo que presenciar muchas cosas horribles como ver a un héroe demacrado al punto de la muerte.
Pero nada, ni nadie, se puede comparar a esto, está crueldad y desquició tan pura que entregaba el mensaje de que Bakugo se dejaba abrazar por la oscuridad misma y poco a poco... Llevarlo a las ruinas.
—Son más de 100 personas muriendo y muriendo... De una manera tan fácil... ¡La Death Note no tiene límites maldición!—Dijo Ojirou apretando los puños.
Hasta que finalmente... Las dos hojas enteras de la Death Note estuvieron llenas por muchos nombres y Katsuki se tomaba unos minutos para descansar, pues paso toda la noche buscando y eliminando.
—Al principio escribí los nombres de los peores Criminales en los que pude pensar, era como limpiar al mundo poco a poco, hasta que eventualmente nadie cometa maldades jamás. Y mientras que los culpables merecen ser castigados por sus crímines mueren de un ataque al corazón, aquellos menos culpables pero que causan problemas a los demás, lentamente serán eliminados a través de enfermedades y muertes accidentales. Entonces y solo entonces el mundo se moverá en la dirección correcta.
Volviendo al presente, se notaba que la tormenta se había calmado.
Katsuki miraba fijamente hacia el Shinigami, con una sonrisa presente.
—Será un mundo nuevo, libre de injusticias y poblado de personas a quienes yo haya juzgado honestas, amables y trabajadoras.
Un objetivo noble, el cual alcanzar con tanto esmero, las personas ni siquiera tenían de que preocuparse, hasta los niños de más corta edad podrían salir a jugar con sus amigos ahora que no hay peligros.
Las familias podrían descansar, las defensas no tendrían que ser necesarias, todos tendrían sus vidas felices.
Pero...
Es una paz que nunca se lograría, ya sea por los esfuerzos de todo el mundo, o ser obligados por el poder desquiciado y repulsivo de la Death Note.
Además, no existe un mundo perfecto, veas por donde lo veas, es por eso que Katsuki Bakugo "Kira" fallaría totalmente en su misión.
Ectoplasm se quedó totalmente mudo... Después del gran horror que habían presenciado anteriormente, tantas muertes causadas solamente por un bolígrafo y una libreta.
No sabía que pensar, todavía sentía una gran molestia de ver tantos asesinatos cometidos en minutos y horas completas.
Ahora venía con la perspectiva de darle un nuevo método de vida al mundo, simplemente el no es capaz de aceptarlo.
—No... Ni siquiera con la Death Note podrás crear un mundo así, pagarás por tus actos—Dijo Ectoplasm.
Snipe no pudo evitar pensar lo mismo, después de todo, el tampoco quería dejarse engañar a pesar del objetivo tan perfecto para vivir en la paz y seguridad.
¿Realmente aceptarían un mundo tan bondadoso después de que su desarrollo fue tras la muerte? Ninguna de las personas cuerdas estarían de acuerdo, vivirían que con el más mínimo error, serían considerados anomalías para Bakugo y los mataría.
Además, de que el chico no aguantaría mucho tiempo antes de que la vejez lo mate, si es que el condenado es realmente capaz de dejar a un lado las autoridades y vencerlos por completo.
—El poder de la Death Note... Lo está afectando más de lo que imaginé—Dijo Snipe.
De todos modos, hace ya un par de minutos, que supieron que este Bakugo no tendría salvación alguna de su mente tan corrompida.
Endeavor solamente frunció el seño, su mirada estaba totalmente puesta en su puño, que estaba tan apretado que sus uñas atravesaron su piel y la sangre no tardó en salir.
Un sin número de recuerdos pasaron por su mente en ese momento, todo el sufrimiento que le hizo pasar a su familia tan rota... Todo por sus esfuerzos de querer el poder suficiente para vencer a su ex rival.
Y ahora, este gran impacto de ver como es que la Death Note guardaba tanto poder, uno tan repulsivo que el ni siquiera deseaba tener... Fue encontrado por un maldito adolescente puberto en el patio de su escuela.
Escuchar sobre un mundo así de feliz... Causaba que Endeavor entrará en un enorme conflicto, recuerdos falsos de su familia siendo feliz con el hijo que perdió.
Hasta que nuevamente, su cerebro le hizo recordar la cruda realidad de su vida, como es que todo el gran muro que estuvo construyendo por años, se derrumbaba de un solo impactó.
—No...
Volviendo a subir la mirada, Endeavor trató de encarar a la contraparte del mocoso explosivo, sus ojos brillaron con intensidad en el enojo.
—Tu no eres nadie para juzgar... Solo un maldito asesino.
All Might no podía estar más en conflicto, la gran escena que había visto fue más que suficiente para darle a su pecho, un sentimiento demasiado fuerte de odio y impotencia.
Ver tantas personas morir... Aunque sean Criminales, no es un suceso que su actitud heróica pudiera aguantar de la nada.
Pero escuchar la grandiosa paz y el mundo tan maravilloso que quería conseguir este Bakugo, también es suficiente razón de confusión que competía con el otro lado.
Es un objetivo noble tan noble y tan pacífico... Un mundo en el que simplemente reina la tranquilidad y un dulce amor, aún así...
El rostro de lo que fue un poderoso héroe, se arrugó y cambió a una expresión bastante fuerte de decisión.
—Sigue siendo un mundo renacido de la muerte, ¡No puedo aceptarlo, joven Bakugo!—Grito All Might, dejándose llevar por un momento.
No es lo que el quería... Ni su difunta maestra Nana Shimura, ni su ex instructor Gran Torino, ni siquiera los antiguos portadores del grandioso One For All.
Ryuk solamente lo miró expectante, tal vez un poco sorprendido por la forma en que Bakugo haría uso de su Death Note.
—Pero si haces eso, tu serás la única mala persona que quede.
De acuerdo... Eso cortó un poco la tensión del lugar ante el pensamiento tan razonable de Ryuk, el Shinigami.
No parecía muy entusiasmado, o que disfrutaría de esta gran masacre que solamente continuaría como toda una personalidad tan malvad.
Solo es una confirmación más de que los Shinigami, no pensaban siempre en las muertes causadas por sus libretas con tal poder.
Algo que es sumamente curioso... Pues incluso parecía que Ryuk no se pondría en el lado de Bakugo, que simplemente se mantendría natural entre los bandos que lucharían por la seguridad del mundo.
La fuerza perversa de la Death Note.
O...
Las fuerzas especiales del Mundo.
Después de todo, sería bastante bonito y relajante que las autoridades, los mismos gobiernos hagan posible el arrestó de este Bakugo.
Saber que ya no mataría personas con la Death Note, los dejaba tranquilos pero claro... Esas esperanzas son casi nulas, como un sueño.
¿Quién de todo el mundo, sería capaz de hacerle frente a la Death Note y la inolvidable inteligente de este Katsuki Bakugo?
Imaginar las posibilidades de quien podría ser la mente maestra, que detendría a Bakugo y el poder de la Death Note.
Un policía... Un agente... Un espía... Un soldado... Un detective...
Pero claro, las autoridades y la ley no son los únicos con aquella posibilidad, también habían otro tipo de personas que podrían detenerlo.
Como la misma maldad que trata de purificar y eliminar.
Un mercenario... Un asesino en masa... Ladrones... Estafadores... Violadores... Etc.
En fin, muchas personas pueden detenerlo.
—No entiendo de que estás hablando, Ryuk...
En un solo instante, el rostro determinado y confiado de Bakugo en su objetivo, había cambiado a un rostro inocente y normal, enseñando su identidad baja.
—Soy un estudiante honorífico considerado como uno de los más brillantes de Japón.
Nezu miraba fijamente hacia el chico, entendiendo muy bien lo que estaría por suceder en este momento.
Aunque es claro, es obvio que algo así sucedería. Que se encargaría de mantener su identidad de juez final en secreto, es algo lógico que todos pensaron por supuesto.
Sería estúpido no mostrar una protección de su verdadera identidad, no duraría nada contra los sistemas y la información que se cubría en Japón de su persona.
—Es realmente una gran ventaja que tenga una inteligencia de ese nivel pero no estoy muy seguro...
Una pequeña sonrisa astuta creció en el Director, mirando fijamente hacia Ryuk.
—Si será capaz de enfrentar a las mentes maestras de todo el mundo—Dijo Nezu con una sonrisa.
No estaba subestimando el ingenio que portaba este Bakugo, tal vez podía compararse al de un espía experto o el mismísimo detective más inteligente y capaz.
Pero tenía que enfrentarse a todo el mundo si quería ganar y hacer el mundo que deseaba, lo que quería decir que las múltiples amenazas y retos simplemente se volverían más grandes.
Hanta Sero se rascó la nuca, sumamente nervioso y decepcionado del pensamiento que apenas hizo de lo que acababa de ver.
Ver a Katsuki Bakugo con ese tipo de expresión en el rostro, fue tan impactante que por un momento creyó que su cabeza se giró en contra de su voluntad para mirar al Bakugo que conocían perfectamente.
Claramente la diferencia es clara, y eso se pudo notar con bastante facilidad.
—Supongo que si Bakugo logra mantener una identidad tan inocente... Será difícil descubrir la verdad—Dijo Sero.
—No digas eso...
Satou apretaba y juntaba sus puños, claramente el grandulon no estaba nada feliz con lo que este Bakugo acababa de hacer.
Como algunos otros, el enorme deseo de saltar hacia adelante y bombardear a este chico que supuestamente es su compañero Bakugo, es sumamente interesante.
El rostro del muchacho estaba sombrío, toda la ira que recorría por sus músculos es claro.
—En este momento, Sero—Dijo Satou, cortando el comentario del chico de las cintas.
Entonces, igualmente de un momento a otro, el rostro y pensamientos de Katsuki volvieron al centro, sus verdaderas intenciones a flote.
—Y yo...
El puño del muchacho se había cerrado... Mientras que sus ojos brillaban furiosamente por su entusiasmo de cumplir su deseo.
—¡Yo me convertiré en el Dios de este nuevo Mundo!
Ryuk solo pudo jadear asombrado, su mano tembló emocionadamente hasta cerrarse en un puño entusiasmado, deseando diversión.
«Es tal como lo pensé, los humanos son muy interesantes»
Un gran silencio acababa de cubrir todo el terreno... Toda la tensión parecía haber desaparecido de un solo empujón, como si estás nuevas palabras fueran la solución de calmar la estresante situación de los espectadores.
Ryuk... Por su parte, tenía el claro pensamiento de que iba a divertirse mucho, permitiéndole a este chico utilizar su cuaderno de la muerte para un objetivo tan imposible de alcanzar.
Pero la historia que estaba por crear, sería algo sumamente único, algo que por supuesto dejaría una marca en las historias mundiales.
Esto simplemente es el comienzo... Y no dejaba de dejarlos en jaque mate por las sorpresas.
Katsuki Bakugo se quedó mudo... Sus puños que estuvieron apretados tan fuertemente por todas las sadicas acciones de su contraparte, dejaban de poner tanta presión hasta abrirse...
El ya no tenía palabras para decir algo, el insultar ya no es suficiente para expulsar toda esta terrible frustración que recaía sobre todo su ser.
Este sujeto imbécil no dejaba de hundirlo y indignarlo en una terrible irá por sus tonterías, ahora salía con esta expectativa tan tonta.
¿El Dios del nuevo Mundo? Que ridiculez.
Izuku Midoriya tampoco estaba en las mejores condiciones en cuanto a reacción, después de todo ese horror al que fueron expectantes.
Las expectativas y la imagen de superioridad que tenía este Bakugo, son totalmente distintas a las que tenía Kacchan actualmente.
Su incredulidad solo sabía aumentarse ante cada cosa absurda que decía este Bakugo.
—¿Un...? ¿Realmente dijo que quiere ser...?—Apenas dijo Midoriya.
Shoto Todoroki llevó sus manos hacia sus mejillas, cerrando sus ojos con cansancio y incredulidad cuando terminó por darse cuenta que la proyección dejaba de producir cosas, indicando que se terminó.
Realmente habían sido muchas cosas pero para resumir, ahora tenían que tener cuidado con este Bakugo, apenas empezaban y ya había tanta muerte.
Lo que llegó al climax, fue ese comentario tan estúpido que acaba de hacer.
—No seas tan crédulo...—Dijo Shoto, frunciendo el seño.
Ochako desvío la mirada, totalmente nerviosa ante lo que acababa de oír de los pensamientos del Shinigami.
Básicamente parecía ser que este ser no tenía problemas con lo que quería Bakugo, y le dejaría usar la Death Note a su gusto para que pueda divertirse.
—Que malvado—Dijo la chica.
Nejire pareció tensarse, pero no, simplemente estaba sorprendida por lo que acababa de suceder.
Luego del gran horror que presenciaron en cuanto Bakugo asesinando a Criminales sin parar, fue una experiencia que nadie quisiera disfrutar.
Ahora les entregaban este resultado final, de todo lo que estaba haciendo el poder de la Death Note en la mente de Bakugo.
—El poder de la Death Note... Lo lleva a perder la razón—Dijo Nejire, dudosa de eso.
Eso no es nada bueno...
Momo negó con la cabeza, no estaba nada tranquila, todavía es afectada por un fuerte shock ante esta noticia.
No olvidaría ese momento tan cruel en que Bakugo asesino a tantos Criminales, es incapaz de dejar de lado esa escena y venían a entregarles otra noticia tan mala.
Tenía que darle la razón a su amiga, Bakugo se estaba saliendo de control, más de lo que ya es.
Aizawa estuvo tentado a arrancarse un mechón de su cabello caído, mientras que se rascaba un poco por la enorme frustración y decepción.
El horror de ver a tantos Criminales muertos así de fácil había disminuido, solamente para conocer otro dato que no lo dejaría descansar.
Ahora salía con esto, con una farsa tan grande.
—Realmente deben detenerlo, estás demostraciones de complejo superior ya son muy peligrosas.
All Might apretó fuertemente los dientes por lo mismo que todos, solamente que no podía estar creyendo lo que estaba escuchando.
Ryuk simplemente se divertiría como es que Bakugo tomara vidas humanas por su complejo, mientras que simplemente el muchacho salía más y más afectado por el poder de la Death Note.
—No... Demonios.
Nezu que se mantenía allí, tardó un par de segundos antes de soltar un suspiro bastante normal, no tenía ninguna anomalía.
Simplemente no podrías descubrir cual es el verdadero pensamiento del Director.
«Esto saldrá muy mal, tanto para Bakugo y el Shinigami... Como para las autoridades»
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Bueno... Nunca imaginé que la segunda parte tendría mucha más duración, hay como 7,000 palabras o más de diferencia, tal vez sea poco pero a estas alturas del capítulo es mucho esa pequeña diferencia.
En fin, lo siento si se les hizo larga la espera, pero creo que ya no podré actualizar tan rápido como antes, porque me tomo un día o dos de descanso o simplemente no he alcanzado a escribir por unos asuntos.
Presiento que hay alguna u otra reacción que no están totalmente pegadas al personaje, si no están cómodos, por favor háganlo saber, les agradecería bastante.
Por cierto, en este libro no habrán parejas ni nada, es decir, nada de romance... Creo que ya es más que suficiente haber suplantado a los personajes originales de Death Note por los personajes de My Hero Academy.
Además para que no sea una distracción al momento de los espectadores al comentar algo.
Nos vemos y gracias por leer.
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