el alfa estaba muy molesto.

demasiado.

primero, en la mañana su asistente le dijo que su reunión del día siguiente sería a las 4am porque los accionistas tenían libre únicamente a esa hora; segundo, la esposa de su padre le mando un mensaje extraño en instagram; y tercero (y no menos importante), no ha podido hablar con louis en todo el día.

era el final del día y esperaba poder llevar a cenar a louis.

la cafetería ya debía de estar cerrando y el día de hoy no tenía que hacer inventario, así que louis debía estar libre esa noche.

lo llevaría a cenar dumplings al restaurante chino junto a su edificio y así tal vez puedan ir al apartamento de louis a ver películas.

al llegar a la cafetería entra con tranquilidad a esta y se asombra al ver cómo técnicamente ya estaba cerrada.

el omega llegó al mostrador, saliendo de la parte de atrás con su vestimenta siendo diferente...

su falda era blanca de tiro alto, resaltando su cintura y caderas anchas, usaba un suéter de cuello de tortuga negro que se ajustaba a su cuerpo y tenía una fina capa de blush en sus mejillas y sus labios se veían de un bonito color delicado, pero que los resaltaba.

—wow... —la voz de harry llamó la atención del omega que dio un brinquito pequeño por la sorpresa.

el omega sonrió.

—hola, hazz. —sonrió alegre y se acercó al alfa.

—¿cerraste temprano?

—por hoy si. —el omega aseguraba unas cosas en el mostrador.

—¿tienes planes? —el alfa tartamudeó nervioso.

louis asintió emocionado y se acercó a harry para sentarse junto a él.

—brad me llamó. —louis habló emocionado. —iremos a cenar a ese restaurante elegante, ¡estoy emocionado! ¡y nervioso!

harry sintió como un nudo en su garganta se formaba.

su mirada se dirigió al omega que lo veía con emoción.

—¿crees que me veo bien? —el omega lo vio atención. —hace demasiado tiempo que no voy a una cita, y bradley me gusta, quiero gustarle...

harry bajo la mirada.

—te ves hermoso, louis. —el alfa murmuró.

las mejillas de louis se colorearon más, haciéndolo ver adorable.

—gracias, hazz. siempre sabes que decir. —los ojos del omega brillaban.

claro que siempre sabe que decir, siempre lo ha sabido y siempre sabrá qué decir. era louis, su louis y eso significaba que nunca iba a considerar que algo como esto no le llegaría a afectar.

era su louis apuntó de salir a una cita con un alfa desconocido –que además lo llamó indigente, cabe recalcar–, lo cual significa que no verá a louis por un tiempo.

y no es porque louis sea el tipo de amigo que cuando empieza una relación abandona a todos sus amigos, sino que él es el problema.

siempre que louis comienza una relación el alfa de una forma u otra ya no tiene tiempo para salir, especialmente cuando esa salida también involucra a cualquier chico de turno con el cual louis esté saliendo.

la relación más larga de louis fue en la universidad y únicamente duró un año, año en el cual harry evitó olímpicamente ver como la pareja se besaba, tomaba de las manos o incluso se abrazaban.

lo consideraba incómodo, claro que no eran celos.

era únicamente el hecho de que normalmente louis era solamente suyo y cuando iniciaba una relación, tenía que compartirlo.

eso no le agradaba.

aun así él sabe que está mierda con ese anciano no durará tanto.

o al menos eso espera.

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el alfa esperaba en la pequeña y adorable sala del apartamento de louis.

primero, por la seguridad de su amigo, esperaría a que llegará esa noche y si acaso ese maldito alfa hijo de perra lastimaba a louis, en ese momento él podría ir a matarlo.

segundo, porque conoce el protocolo de cómo ser un buen amigo. tal vez no quiere volver a ver a ese alfa, pero quiere saber cómo está louis.

incluso si sabe que en algún momento llegará louis con el aroma a otro alfa.

eso lo asquea.

bufó mientras veía esa ridícula película en la televisión, bostezando al darse cuenta que era la una de la mañana y su amigo aún no llegaba.

leo, el hermano menor de louis, se encontrada durmiendo en su habitación. el pequeño de ocho años sabía que harry iría en cualquier momento a cuidarlo esa noche que su hermano había salido, por lo cual dejó que su hermano se fuera tranquilo.

estaba debatiendo entre llamarlo y comprobar que se encontraba bien, o llamarlo y darse cuenta que el omega quizas estaba teniendo sexo.

mierda, no quería eso en sus recuerdos... al menos no de esa forma.

frunció el ceño al escuchar el sonido del cerrojo de la puerta comenzando a abrirse.

—espero volver a verte, bonito. —el alfa se escuchaba vacilante.

harry imitó su cara con una mueca y sacó su lengua al final.

—me encantaría, bradley... —louis se escuchaba feliz.

emocionado más que nada.

eso posiblemente lo lastimó.

no está celoso, pero saber que louis estaba emocionado por ver otra vez a ese alfa lo lastima un poco.

louis era un omega exigente.

era seguro de él mismo, maduro y él sabe lo que merece. eso le ha provocado que muchos alfas lo consideren como un omega difícil, pero él solamente no acepta la mierda de nadie —incluso la de harry— lo que quiere decir que sabe cuándo exigir lo que quiere y cuándo retirarse.

por eso el alfa siente esa incomodidad justo ahora... louis posiblemente si quiere volver a ver a ese anciano.

eso es extraño.

eso lo hace querer ir con él y decirle que pueden estar ellos dos como siempre y nunca se aburriría de él.

que ese alfa nunca será lo que él puede ser.

que él quiere pasar el resto de su vida con él.

porque no importa que haga ese alfa, harry siempre sería emocionante y nunca se aburriría de él.

—adiós, brad... —el omega se despidió con un beso en los labios del alfa que tomaba con posesión su cadera.

harry los veía de reojo, sabía que louis sabía que él estaba ahí.

después de unos minutos de harry vomitando en silencio por el asqueroso sonido de los labios de ambos tocándose, louis entro al apartamento y se dejó caer junto a harry en el sofá.

—¿una buena cita? —el alfa esperaba que la respuesta fuera no.

—la mejor. —louis sonrió emocionado. —él es perfecto, es inteligente, amable y fue todo un caballero. —el omega suspiró enamorado. —mierda, hace tanto que no me divertía con alfa como lo hice con él.

harry lo vio con una ceja levantada.

—un alfa que no fueras tú, hazz. —louis con confianza se lanzó a los brazos del alfa junto a él.

harry frunció el ceño al identificar el aroma a tabaco en louis.

ese aroma a alfa que estaba enamorado a su mejor amigo.

louis se separó de su mejor amigo con sencillez.

—espero me llame pronto. —el omega tomó de la comida china que el alfa había comprado.

harry intentó sonreír por su amigo.

—será su pérdida si no lo hace. —lo miro directamente mientras el omega disfrutaba del pollo agridulce y los tallarines. —¡oye! ¡acabarás con mi cena!

harry intentó rescatar su plato de las manos del omega que rió con fuerza.

—¡sabes que la comida china es mi debilidad! —louis comió otro poco de la comida, mientras evitaba que harry le arrebatara el plato. —debiste haberlo pensado antes de pedir mi comida favorita, sabes que adoro robar de tu comida.

harry sonrió.

claro que sabía que eso pasaría.

es su louis.

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4/10