OO1 | THE UA ACADEMY

Kaori despertó temprano por la mañana, antes de que el sol se asomara por completo en el horizonte. Los primeros rayos de luz se filtraban a través de las cortinas de su habitación. La chica se estiró en su cama y respiró hondo, sintiendo una mezcla de emoción y nerviosismo en el estómago. Hoy era el día en el que debía tomar una decisión realmente importante sobre su futuro.

Sin pensarlo más, Kaori se levantó con calma y se dirigió al baño. Al mirarse en el espejo, se tomó un momento para reflexionar. Había trabajado tan duro para llegar a este punto, y ahora dos grandes academias luchaban por tenerla como estudiante: la UA y la Academia Shiketsu.

Después de lavarse la cara y cepillarse los dientes, se vistió con ropa cómoda y bajó las escaleras. El aroma del desayuno recién hecho llenaba la casa, y se sintió feliz al saber que su madre estaba despierta y que su padre aún no se iba a patrullar. Al entrar en la cocina, su madre estaba sirviendo té, mientras que su padre leía el periódico en la mesa.

—Buenos días, cariño —dijo Seoyeon, su madre, con una cálida sonrisa—. Te preparé tu té favorito. ¿Cómo dormiste?

Kaori se sentó y tomó la taza que su madre le ofrecía.

—Buenos días, mamá —murmuró—. No pude dormir nuy bien. No pude dejar de pensar en la decisión que tengo que tomar hoy.

Ante sus palabras, Kenzo, su padre levantó la vista del periódico y le sonrió con orgullo.

—Es normal sentirse así, Kaori. Esta es una decisión importante, pero sé que tomarás la correcta —habló el hombre. Confiaba plenamente en su hija. Era demasiado inteligente.

—Aún estoy demasiado indecisa, papá —la joven suspiró, perdiendo su mirada en la taza de té entre sus manos—. La Academia Shiketsu es increíble y tiene un gran prestigio. Pero, por otro lado, la UA es donde tú estudiaste y donde estudió Eraser Head. Siempre los he admirado a ambos y me encantaría aprender en el mismo lugar que ustedes.

Su madre se sentó a su lado y le acarició el cabello con ternura.

—Cariño, no importa dónde decidas ir, sabemos que serás una gran heroína. Has trabajado muy duro y tienes un gran corazón. La UA es una excelente opción, especialmente si sientes que es donde más te ayudará a crecer.

—Pero, ¿y si no soy lo suficientemente buena? La UA es bastante exigente.

Sus padres compartieron una mirada de incredulidad. Dos de las mejores academias de héroes de todo el mundo, se estaban peleando por tener a su hija como una de sus estudiantes, y aun así, ella seguía dudando de sí misma y de sus habilidades.

—Kaori, tienes todo lo necesario para triunfar —Kenzo aseguró—. Tienes el talento, la determinación y la capacidad de superar cualquier desafío que se te presente.

—Que te rechazaran sería completamente estúpido —Seoyeon continuó, haciendo que su hija sonriera con diversión.

Kaori terminó su desayuno en silencio, pensando en todo lo que había escuchado. Su mente viajo a una foto de su padre en sus días de estudiante en la UA, junto a Eraser Head. Esa imagen siempre la había inspirado.

—Creo que iré a la UA —la joven habló después de unos minutos de estar en silencio. Sus padres la observaron rápidamente—. Quiero aprender de los mejores y convertirme en la heroína que siempre he soñado ser.

—Una excelente decisión, Kaori. La UA te brindará todo lo que necesitas para alcanzar tus sueños.

—¡Les prometo que daré lo mejor de mí!

—Sabemos que lo harás —dijo su madre, sintiendo como sus ojos brillaban del orgullo—. Siempre estaremos aquí para ti.

Inmediatamente después de aquello, su padre tomó el teléfono y marcó el número de el director de la UA, Nezu. Quería asegurarse de que todo estuviera en orden y de que su hija tuviera una oportunidad en la prestigiosa academia.

Después de una breve conversación, colgó el teléfono y miró a Kaori con una sonrisa tranquilizadora.

—He hablado con el director Nezu. Está dispuesto a considerarte para una admisión de último momento. Necesitará ver tus habilidades y tus calificaciones, pero estoy seguro de que no tendrás problemas.

Kaori asintió con rapidez al escuchar esas palabras. Ahora tenía una oportunidad, y estaba decidida a dar lo mejor de sí misma.

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Cuatro días habían pasado desde que Kaori dio su examen de admisión. La chica había pasado aquellos días sin poder dormir bien, nerviosa por la respuesta. Sin embargo, todo aquello terminó cuando el video de aceptación a la UA había llegado durante la noche anterior.

Ahora, Kaori se encontraba lista para asistir a la UA. Despertó temprano, su corazón latiendo con una mezcla de emoción y nerviosismo. Luego de vestirse con su nuevo uniforme de la UA y asegurarse de que tenía todo lo necesario en su mochila, bajó las escaleras para encontrar a sus padres esperándola en la cocina.

—¡Te ves hermosa! —su madre exclamó en cuanto la vio, acercándose con rapidez. Kaori tuvo que retroceder para evitar chocar con la mayor.

—Gracias, mamá —la chica respondió, riendo levemente—. Pero no es para tanto.

—Estoy segura de que tendrás a todos tus compañeros comiendo de la palma de tu mano —Seoyeon continuó. Al escuchar la mención del sexo masculino, Kenzo comenzó a prestar atención a la conversación—. No me sorprendería que los enamoraras a todos.

—Mi pequeña aun es una niña. No puede tener novio hasta los cuarenta años —el hombre espetó, cruzándose de brazos.

—No planeo tener pareja aún, así que puedes estar tranquilo —Kaori murmuró. Un leve rubor adornaba su rostro.

—¿Habrán aceptado a Todoroki? —su madre preguntó repentinamente. La joven sonrió ante la mención del chico, eran mejores amigos desde pequeños, así que le emocionaba la idea de verlo todos los días.

—Me sorprendería que no lo aceptaran —Kenzo respondió—. Después de todo es el hijo del héroe número dos. Debe de ser igual de fuerte que él.

Una mueca se apoderó del rostro de Kaori al escuchar como nombraban al padre de su amigo. Hace un par de años, Shoto le había contado todo sobre la historia de su familia, por lo que odiaba a aquel hombre.

—Como sea. ¿Estas lista para tu gran día? —preguntó su madre con una sonrisa cálida mientras le daba un abrazo.

—Más que lista —respondió Kaori, tratando de mantener la calma a pesar de los nervios.

Después de un desayuno rápido, salieron de casa y subieron al vehículo de su padre. Durante el trayecto, su padre le dio palabras de ánimo, recordándole que tenía todo lo necesario para triunfar en la UA. Su madre, sentada a su lado, le sostuvo la mano y le sonrió con confianza.

—En mi primer año era conocido por ser un poco rebelde —Kenzo comenzó. Seoyeon rodó los ojos con diversión al notar que, nuevamente, su esposo iba a relatar historias de sus años como estudiante—. Recuerdo cuando nos desafiamos a nosotros mismos en un ejercicio de rescate simulado. Mi equipo y yo estábamos decididos a ser los más rápidos en encontrar a las víctimas simuladas escondidas en el bosque artificial. Fue una locura, pero al final, terminamos rescatando a todos antes que los otros equipos.

—Y no te olvides del incidente con el monstruo de lodo en el examen de defensa personal —su madre agregó. Kaori los miró con atención—. Tu padre siempre ha tenido una manera única de lidiar con las situaciones difíciles. Aunque admito que me preocupaba cada vez que escuchaba hablar de sus hazañas.

La joven sonreía ampliamente, imaginándose a su padre de joven enfrentando desafíos emocionantes y superando obstáculos en la academia.

—¿Y qué hay de los exámenes finales? —preguntó Kaori—. ¿Cómo era luchar contra los robots gigantes?

—Los robots de la UA eran realmente aterradores —el hombre continuó, mirando a su hija por el espejo retrovisor—. Recuerdo una vez que mi equipo y yo nos enfrentamos a uno de los modelos más antiguos. Teníamos que trabajar juntos para encontrar su punto débil y desactivarlo.

La conversación continuó entre risas y recuerdos mientras Kaori absorbía cada detalle de las historias de sus padres, emocionada por empezar su propia aventura en la UA.

Cuando llegaron a la entrada de la UA, Kaori se quedó maravillada al ver el imponente edificio. Sus padres se bajaron del coche con ella, queriendo darle una despedida adecuada.

—Estamos muy orgullosos de ti, cariño —dijo su madre, abrazándola fuertemente—. Sabemos qué harás grandes cosas aquí.

—Recuerda siempre quién eres y de dónde vienes —ahora fue el turno del hombre para hablar. Sus ojos brillaban con orgullo—. Tienes la fuerza y el corazón de una verdadera heroína.

—Gracias, mamá, papá. Prometo que daré lo mejor de mí.

Después de despedirse con un último abrazo, Kaori se dio la vuelta y comenzó a caminar hacia la entrada de la UA. Apenas había dado unos pasos cuando una chica de cabello largo y azul se le acercó con una sonrisa brillante.

—¡Hola! Eres Kaori, ¿verdad? —exclamó la chica, claramente emocionada. La aludida parpadeó, un poco sorprendida por la repentina y entusiasta bienvenida—. ¡He escuchado mucho sobre ti!

—Sí, soy yo. ¿Nos conocemos?

La chica sacudió la cabeza rápidamente.

—No, pero soy Nejire Hado, de tercer año. ¡Soy una gran fanática de tu padre! ¡Es un héroe increíble!

—Gracias, Nejire —la menor murmuró con una sonrisa. Le gustaba la energía de aquella chica—. Es un honor conocer a alguien que admira tanto a mi padre.

Nejire asintió, para luego tomar a Kaori del brazo con naturalidad.

—¡Ven, déjame mostrarte todo! La UA es un lugar increíble y quiero asegurarme de que tengas el mejor primer día posible.

Kaori se dejó guiar, sintiéndose aliviada de tener a alguien tan amigable a su lado. Mientras caminaban, la mayor le contó sobre los diferentes edificios, las clases y algunos de los profesores. La emoción de Nejire era contagiosa, por lo que la chica no pudo evitar empezar a sentirse más relajada y entusiasmada por todo lo que estaba por venir.

Cuando finalmente llegaron al salón de la menor, Nejire le dio un abrazo rápido.

—Si necesitas algo, no dudes en buscarme. ¡Te veo después, Kaori!

—¡Gracias, Nejire!

Finalmente, Kaori se paró frente a la puerta del aula 1-A de la UA, con el corazón latiendo fuertemente en su pecho. No pudo evitar sentirse levemente intimidad cuanto vio lo gigante que era la puerta de entrada.

Luego de unos segundos, la chica respiró profundamente y empujó la puerta. El salón estaba lleno de estudiantes charlando animadamente, algunos nerviosos como ella, otros completamente confiados. Algunos la miraron curiosamente cuando entró. No apartaron su mirada de ella mientras caminaba hasta el fomdo del salón.

—¡Quita los pies del escritorio! —Kaori escuchó como un chico desconocido exclamaba.

Cuando dirigió su mirada hacia el lugar del que provenían los gritos, logró ver como un chico alto parecía regañar a un chico rubio.

—¿No te parece una falta de respeto a los estudiantes y a quienes hicieron el escritorio? —continuó.

—Claro que no. ¿A que escuela fuiste, perdedor? —el rubio preguntó con una sonrisa de superioridad.

—Fui a la academia privada Somei. Me llamo Tenya Iida —respondió educadamente. Kaori sonrió con diversión al notar que parecía un robot.

—¿Somei? Eres de la elite, ¿no? Será divertido aplastarte.

—¿Aplastarme? Que cruel —Iida exclamó con sorpresa—. ¿De verdad quieres ser un héroe?

En ese momento, la mirada de los chicos que estaban discutiendo se dirigió hacia la puerta del aula, notando la presencia de un nuevo estudiante.

—Buenos días. Soy de la academia privada Somei... —el de lentes se acercó con rapidez.

—Te escuché —el chico de cabello verde lo detuvo. Una sonrisa estaba en sus labios—. Me llamo Midoriya. Es un placer conocerte, Iida.

Kaori se encontraba sentada en su pupitre, mirando a través de la ventana del aula mientras esperaba la llegada de Shoto Todoroki. Sabía que él entraría en cualquier momento. Desde que se habían conocido, habían desarrollado una amistad sólida y sincera.

La atención de Kaori dejó de estar puesta en sus compañeros cuando notó como la puerta del salón se abrió con suavidad y Shoto entró con su típica calma. Su presencia era imponente y tranquila, con su expresión seria y su cabello bicolor destacándose en el ambiente. Una mueca de felicidad se formó en su rostro cuando vio a su amigo.

Se había puesto más lindo desde la última vez que se vieron.

La joven esperó pacientemente a que el chico tomara asiento junto a ella. Cuando lo hizo, Kaori se dirigió a él con una sonrisa.

—¡Hola, Shoto! —saludó la chica, inclinándose ligeramente hacia él—. ¿Estas emocionado?

El aludido la miró con su mirada serena pero cálida, mostrando apenas una pequeña curva en sus labios.

—Hola, Kaori —respondió en su tono pausado—. No me emociona estar aquí. Sabía que entraría, pero supongo que tu si estas feliz.

—¡Claro qué sí! Aquí han estudiado demasiados héroes a los que admiro —exclamó Kaori con entusiasmo moderado—. Por cierto, ¿cómo te fue en el examen de admision?

El cuerpo del chico se tensó levemente al recordar como un estudiante le había hecho competencia. No lo conocía, pero era realmente fuerte.

—Podría haberlo hecho mejor —Shoto se limitó a responder. La chica asintió con lentitud. Con el tiempo había aprendido a leer a su amigo, por lo que sabía qué era un tema del que no quería hablar—. ¿Cómo te fue a ti?

—Me hicieron pelear contra cinco robots gigantes —se quejó—. ¡Eran cinco contra uno!

—Aun así, ganaste.

—Sí, pero fue injusto —Kaori continuó —. Pero al menos le agrade al director Nezu, fue bastante amable conmigo.

Shoto asintió, escuchando con atención. Él no era una persona conversadora, por lo que disfrutaba de escucharla hablar. Kaori era una de las pocas personas que no lo irritaban.

La conversación qué los chicos estaban teniendo se vio interrumpida cuando una chica de cabello castaño se acercó a ellos.

—¡Hola! Soy Ochaco Uraraka —la desconocida se presentó, mirando con una sonrisa a la chica de cabello rosa—. ¿Puedo sentarme aquí contigo?

—¡Claro! El asiento de adelante esta vacío —la contraria respondió—. Soy Kaori Satou. Es un gusto conocerte, Ochaco.

—Lo mismo digo. ¡Espero que nos llevemos bien!

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Kaori se encontraba hablando animadamente con sus compañeros. Apenas se estaban conociendo, pero algo le decía que serían grandes amigos en un futuro.

—Si vinieron a hacer amigos vayan a otra parte —la voz del profesor Aizawa resonó en la habitación—. Esto es un curso de héroes.

Todos los estudiantes lo observaron con sorpresa al ver como había un hombre en el suelo dentro de un saco de dormir. Kaori rió para sus adentros, siempre había pensado que parecía una oruga al usarla.

—De acuerdo, tardaron ocho segundos en callarse —Aizawa continuó, saliendo lentamente de su saco de dormir—. El tiempo apremia. Ustedes no son nada sensatos.

Todos los presentes aún seguían bastante sorprendidos con su presencia. Todos sabían que, al ser un profesor en la UA, también eres un héroe profesional, pero nadie conocía a aquel hombre. A excepción de Kaori, quien lo admiraba desde el primer día que lo conoció.

—Sé que es un poco repentino, pero pónganse esto y salgan —Aizawa indicó, sacando el traje deportivo de la UA de su saco de dormir.

La joven Satou sonrió con emoción ante sus palabras. Estaba realmente impaciente por conocer la habilidad y los dones de todos sus compañeros.

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Kaori venia saliendo del vestidor de las chicas con una gran sonrisa. Mientras sus compañeras y ella se cambiaban por el uniforme deportivo, habían hablado bastante. La verdad es que todas eran unas chicas muy dulces y agradables.

Ahora, la chica se encontraba caminando por los pasillos de la academia para poder llegar al patio, en donde el profesor Aizawa y sus demás compañeros la estarían esperando. En el camino se encontró con el chico de cabello verde que iba en su clase. Aún no sabia su nombre, ya que no habían tenido la oportunidad de hablar.

Como si se hubiera dado cuenta de que alguien lo estaba observando, el desconocido se dio la vuelta, conectando su mirada con la de Kaori. Los ojos del chico comenzaron a brillar con emoción mientras una sonrisa se dibujaba en sus labios.

En menos de dos segundos ya se encontraba frente a la chica.

— ¡Tú eres Kaori Satou! ¡Tu padre es uno de mis héroes favoritos! —exclamó con rapidez. La joven rió levemente ante su actitud. Era la segunda vez en el día que le pasaba algo como aquello, y eso que era su primera día—. ¡Es un honor conocerte!

—Sí, soy Kaori —respondió entre risas—. Y yo aún no se cual es tu nombre. ¿Cómo te llamas?

—¡Soy Izuku Midoriya! —dijo con la misma emoción—. Es increíble estar en la misma clase que la hija de un héroe tan legendario.

—Estoy emocionada por esta actividad —la chica murmuró, comenzando a caminar. Izuku se apresuró para poder ir a su paso—. ¿Tu lo estas?

—¡Claro! Estoy ansioso por poder escribir sobre el don de todos.

—¿Escribir? ¿Tienes un vlog o algo así? —preguntó. Rápidamente, el chico se sonrojó. No había pensado bien en lo que dijo.

—No, no es eso —respondió torpemente, moviendo sus manos con desesperación—. Tengo una libreta en donde escribo sobre las habilidades y las debilidades de todas las personas que poseen un don.

—¡Suena genial! —Kaori exclamó con emoción. Izuku ladeo la cabeza, confundido. Era la primera persona que no se burlaba de el.

—¿En serio?

—¡Si! Estoy segura de que te será de gran utilidad cuando te conviertas en un héroe —la chica respondió—. Incluso creo que podría darte ciertas ventajas en clases.

—Pienso lo mismo —el contrario estuvo de acuerdo. Un suspiro de alivio abandonó sus labios—. No puedo esperar a ver el don de todos. Estoy seguro de que son geniales.

—¿Cuál es el tuyo? —Kaori cuestionó, inclinándose levemente para observarlo con atención. El rostro de Izuku se sonrojó ante la cercanía.

—Aun no lo sé controlar muy bien —murmuró, alejándose rápidamente de la chica—. Cada vez que lo uso termino lastimado.

Kaori iba a responder, sin embargo, se vio interrumpida cuando escuchó las voces de sus compañeros cada vez mas fuerte. Cuando elevó la vista logró darse cuenta de que ya habían llegado al lugar en donde realizarían las practicas.

—Ahí están —la voz de Aizawa resonó, haciendo que los chicos se tensaran—. Ahora podremos comenzar con el examen de dones.

—¿Examen de dones? —preguntaron todos al unísono.

—¿Qué hay de la iniciación y la orientación? —Ochaco cuestionó con confusión.

—Si van a ser héroes, no hay tiempo para ese tipo de eventos. Las tradiciones de la UA no tienen restricciones —el hombre negó con frialdad, dándose la vuelta—. Así es como los profesores imparten sus clases. Han hecho exámenes así desde primaria, ¿no? —preguntó, enseñándoles una tabla de puntajes—. Pruebas físicas en la que no usan sus dones. El gobierno todavía se basa en puntajes que no toman en cuenta sus dones. No tiene mucho sentido. El ministerio de educación solo pierde el tiempo. Bakugo, fuiste el mejor en el examen práctico. En la escuela, ¿cuál fue tu record de lanzamiento de pelota?

—Sesenta y siete metros —respondió el rubio.

—Inténtalo ahora con tu don —indicó, dándole espacio al chico para que este pueda avanzar—. Hazlo como quieras, pero en el círculo. Rápido y esfuérzate.

Bakugo no lo dudo y rápidamente comenzó a estirar su cuerpo. Luego de tan solo unos segundos, empujó la pelota con una gran explosión.

—¡Muere! —el rubio exclamó.

Kaori compartió una mirada confundida con Izuku. No lo conocía demasiado, pero sin duda aquel chico que producía explosiones con sus manos no era su favorito. Era demasiado gritón y agresivo.

Luego de unos segundos, la pelota finalmente tocó el suelo. El profesor Aizawa se dio la vuelta, dejándole ver a los estudiantes la distancia que había recorrido.

—¿Lanzó 705 metros? ¿En serio?

—¡Eso es genial!

—Kaori, es tu turno —el profesor Aizawa habló, haciéndole saber a la chica que tenía que pasar al frente.

La aludida asintió, siguiendo la instrucción del hombre de arrojar una pelota utilizando su habilidad. Una vez que estuvo en el medio del círculo, Kaori se concentró en absorber la energía solar que la rodeaba.

Elevando la pelota entre sus manos, la chica visualizo el flujo de la energía solar que atravesaba su cuerpo. Con cuidado y precisión, canalizó esa energía hacia la pelota, evitando el exceso o el descontrol de su don. Luego, aplicó solo una fracción de su capacidad para hacer volar la pelota.

El balón se mantuvo en el aire por unos cuantos segundos, pero finalmente cayó al suelo. El profesor Aizawa se apresuró en mostrar su resultado.

—No esta mal —murmuró. Estaba conforme con su resultado, pero sabía que podía lograr más.

—¿No está mal? —Mina replicó. Se veía realmente sorprendida—. ¡Hiciste 700 metros!

—Podría haberlo hecho mejor —Kaori se limitó a responder, sintiendo como Bakugo le daba una mala mirada.

—Midoriya, tu turno —Aizawa habló.

Al escucharlo, el cuerpo del chico se tensó de forma inmediata. Estaba demasiado nervioso. Después de todo, era el único estudiante que no había destacado en ninguna prueba, por lo que probablemente estaba ocupando el último lugar.

Después de soltar un suspiro nervioso, Izuku se abrió paso entre sus compañeros hasta llegar al círculo que se encontraba en medio de la cancha.

—Si Midoriya sigue así, tendrá un mal resultado —Iida comentó.

—Por supuesto —Bakugo exclamó—. Es un insecto sin un don.

—No hables así de él —Kaori habló, dándole una mala mirada. El rubio la observó con molestia.

—¿O si no que, perdedora?

La chica alzó las cejas con incredulidad. Estaba lista para responder, sin embargo, se vio interrumpida cuando la voz de Iida sonó por sobre la suya.

—¿Sin un don? ¿No viste lo que hizo en la prueba de admisión? —el de lentes continuó, haciendo que Kaori comenzara a prestar atención. Izuku le causaba curiosidad.

—¿Qué fue lo que hizo? —preguntó en un susurro en dirección a Uraraka.

—Perdió la oportunidad de ganar puntos por salvarme —respondió, mirando al chico de reojo—. Su poder es genial, pero se destruyó el brazo izquierdo y ambas piernas.

¿Un don que destruía su propio cuerpo? Para Kaori fue imposible no pensar que aquella era raro. La única respuesta coherente que encontraba era que su cuerpo no estaba preparado para su poder, pero no tenia sentido. Después de todo, llevaba años con su don.

Tiempo después, Izuku finalmente había lanzado la pelota. Se había roto el dedo, pero había logrado alcanzar los 705,3 metros.

El resto de las pruebas transcurrieron con rapidez durante el día. Cada uno de los estudiantes había tenido al menos un ben resultado, aprovechando la oportunidad para destacar al usar sus dones en distintas actividades, a excepción de Izuku, quien solo parecía haber destacado en el lanzamiento.

—Bueno, les mostrare los resultados. El total es la combinación de lo que obtuvieron en cada prueba. Sería una pérdida de tiempo explicarlos, así que se los enseñare.

Luego de que aquellas palabras salieran de su boca, los puntajes de todos se proyectaron a su lado. Rápidamente todos los estudiantes comenzaron a buscar su nombre.

Kaori sonrió en grande al notar que había quedado en el quinto lugar. Estaba consiente de que podía seguir mejorando, pero no era un mal lugar para comenzar el año.

—Lo de la expulsión era mentira —Aizawa habló, mirando a los jóvenes con una sonrisa. Estos se quedaron estáticos en su lugar, incrédulos—. Fue un truco para incitarlos a que usaran sus dones al máximo.

—¿Qué? —exclamaron a la vez.

—Pues claro que era mentira. Era obvio si lo pensaban bien —respondió Momo.

—Eso fue todo por el día de hoy —el hombre dijo—. Hay copias del plan de estudios en el salón, así que revísenlos cuando vayan.

Rápidamente, todos asintieron, aún están algo desconcertados por haber sido engañados. A pesar de eso, Kaori estaba realmente feliz.

Su primer día en la UA había sido genial.

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Luego de un par de horas, Kaori llegó a casa después de su primer día en la UA, sintiéndose exhausta pero emocionada. Al abrir la puerta, fue recibida por el familiar aroma de la cena que su madre estaba preparando.

—¡Ya estoy en casa! —la chica exclamó.

—¡Cariño! —gritó su madre desde la cocina—. ¡Cuéntame todo! ¿Cómo fue tu primer día?

Kaori sonrió mientras dejaba su mochila en el suelo y se dirigía hacia la cocina.

—Fue increíble, mamá —dijo mientras se sentaba en la mesa—. Conocí a muchos compañeros nuevos y tuvimos nuestra primera clase de entrenamiento.

—¿Y cómo te fue en el entrenamiento? —preguntó su padre, apareciendo en la puerta del salón—. ¿Pudiste mostrar tus habilidades?

—Sí, papá, lo hice —respondió Kaori con entusiasmo—. Todos son realmente fuertes, ¡ytienen dones increíbles! Eraser Head es muy estricto como profesor, pero aprendí mucho.

—¿Y qué tal tus compañeros de clase? —preguntó su madre mientras servía la cena—. ¿Hiciste algún amigo?

Kaori asintió mientras aceptaba el plato que su madre le ofrecía.

—Sí, hice algunos amigos —murmuró con una sonrisa—. Uraraka es muy simpática, e Izuku es increíblemente apasionado sobre ser un héroe. También tuve la oportunidad de hablar con Shoto.

—¿Todoroki? —interrumpió su madre, dejando caer la cuchara con dramatismo. La chica asintió lentamente—. ¡Cuéntame más!

—Sí, mamá, el chico que conoces desde qué es un niño —dijo Kaori, riendo levemente por la reacción de su madre. Por alguna razon, amaba al bicolor—. Sigue siendo igual de reservado y serio con sus objetivos. Aunque fue interesante verlo usar su don. Ha mejorado mucho desde la última vez que lo vi.

—Estoy segura de que sí —dijo su padre, sonriendo mientras tomaba asiento—. Es muy talentoso.

—Lo es.

—No puedo esperar para conocer más sobre tus días en la UA —Seoyeon dijo mientras comenzaba a servir su propia cena—. Y especialmente sobre Shoto.

—Mamá, es solo un amigo —musito Kaori, rodando los ojos con diversión—. Pero prometo contarte todo.

La conversación continuó mientras cenaban, con Kaori detallando sus clases, los profesores y las primeras impresiones de sus compañeros. Su madre seguía haciendo preguntas, mientras su padre escuchaba atentamente. Para Kaori, fue un alivio compartir su emocionante primer día en la UA con sus padres, sabiendo que tenía su apoyo incondicional para absolutamente todo.

Ahora, tenía que prepararse para el segundo día. Porque si bien el día de hoy había sido intenso, las clases de verdad comenzaban mañana.

JES'S NOTE !

HOLAAA <3 aquí estoy yo nuevamente publicando un fic que dije que no iba a escribir 🤷🏻‍♀️

la verdad, tenía pensando que esta historia se quedara enterrada en mi borradores para siempre (más que nada porque me da vergüenza iqjdkajdk), pero ahora que bnha terminó, me vi en la OBLIGACIÓN de subirla. no iba a soportar vivir mi vida con normalidad sabiendo que mi comfort anime había terminado 😭

yo odio los slowburn, pero este fic va a tener esa temática, más que nada por la personalidad de shoto 🫶🏻 ASI QUE PREPÁRENSE PARA SUFRIR Y DESESPERARSE HASTA QUERER SACARSE LOS PELOS

PD: tengo un tablero en pinterest con más información sobre kaori y el fic en general por si quieren ir a darle un vistazo. aparezco como n6ptunes

GRACIAS POR LEERME <3 luv u.