on my mind
El alienigena había conseguido atraparnos, echó un liquido en Dariush y le metió algo en su boca, supuse que era la lengua.
— ¡Dariush no!— escuché gritar a Alex, yo estaba en shook.
Un avión logró deshacerse del alien y corrimos lejos.
— ¡Esto no parece real!— me quejé.
— ¿No lo ves real? Porque me acaba de meter la lengua en la boca.— se quejó ahora Dariush.
— Cállate, no puedo pensar si no dejas de quejarte— dijo Gabriel.
— ¿Cómo sabes que era la legua? No sabes su anatomía... ta vez eran sus... sus testículos— dijo Alex poniendo una mueca.
— Oh no... no no no no— se quejó Dariush de nuevo— ¿Estoy lleno de bebés crudos? joder.
— Mantened la calma— pidió Gabriel.
— Tengo que llamar a mi madre— dije nerviosa.
— Eso si está viva— dijo Dariush.
— Eh no digas eso— me quejé dandole un golpe en el pecho, él me devolvió el golpe.
— Nuestros padres estarán muertos— dijo obvio, cosa que me jodió aún más.
— ¿Nunca te callas? No la toques— preguntó Gabriel a Dariush, parecía molesto.— Creo que entre mi puño y el rabo del alien tendrías que tener la boca cansada— eso hizo que Dariush entrase en un ataque y comenzaron a pelarse.
—¡Parad!— pedí sin éxito.
Ahora fue ZhenZhen la que actuó, les dio un golpe a cada uno y comenzó a hablar.
— Lo que hacemos en la vida tiene su eco en la eternidad, manteneos firmes, estad a mi lado, si os veis cabalgando solos por verdes prados y el rostro bañados por el sol no tengáis miedo, estaréis en el elíseo y ya habréis muerto— soltó muy randomly ZhenZhen.
— ¿Acaba de citar Gladiador ?— pregunté divertida.
— ¿Desde cuando habla nuestro idioma?— preguntó Gabriel.
— ¿Desde cuando habla?— preguntó Dariush obvio.
Luego volvió a hablar ZhenZhen.
— Tenemos que llevar esta llave a los adultos— señaló la llave que llevaba Alex en el cuello.
— Hay una comisaría— Gabriel parecía nervioso— está montaña abajo.
— Perfecto, cojamos las bicicletas— dije— nos dieron el código cuando llegamos, es seis seis nueve.
Gabriel se acercó y trató de poner el código, pero no fue capaz.
— vamos tío, seis seis nueve, ¿eres tonto o qué?
— Cállate Dariush— dije molesta, me arrodillé al lado de Gabriel— déjame a mi— pedí haciendo que él se hiciese a un lado, puse el código y cada uno tomó una bicicleta.
— Vamos— dijo ZhenZhen con la bicicleta.
Alex se quedó parado.
— Yo... no puedo ir, no s montar en bicicleta, pero podéis ir sin mi.
— Genial, adiós— dijo Dariush.
— No— dijo Gabriel serio— os abandonaron en el campamento, ¿Cómo te sentiste?— sin esperar respuesta continuó hablando— te enseñaremos.
— Dariush, tú garra a Alex de un lado, ZhenZhen tú de otro, le enseñamos rápido— dije mientras me subía en la bicicleta y comenzaba a pedalear.
Cada uno se puso un casco y comenzamos el trayecto hacia los ángeles.
ZhenZhen, Dariush y Alex iban más adelante, Gabriel y yo nos quedamos atrás.
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