—“¿Dices que podemos desaparecer en cualquier momento?”— Preguntaste muy preocupada alejandote del chico.

La personalidad del pelirrojo tomó el control del cuerpo del de ojos azules, tomó con cuidado tus manos para tranquilizarte y tratar de mantener el ambiente calmado.

—“Tranquila, debemos ser pacientes en no asustarnos. Todo estará bien, te lo prometo.”— Dicho esto te abrazó con cariño.

Ambos se separaron y decidieron salir para calmarse un poco, al menos hasta encontrar un método para escapar.

>…<

En la entrada de la ciudad venía Mearest manejando sin muchas ganas de volver a su casa, se notaba bastante cansada e irritada por todo lo que estaba sucediendo. Tomaba su celular y llamó a tu hermana la castaña contestaría rápido, del otro lado del celular se le escuchaba bastante preocupada por su madre.

—“¿¡Mamá dónde estás!? ¿¡Estás bien!?”—

—“Si querida tranquila, ya voy a casa.”—

La mayor habló un rato con su hija y después colgó la llamada, al menos se sentía feliz de tener aún a una de sus hijas pero eso no le llenaba el vacío de la otra.
Mientras, aquella castaña estaba con Pico aún en el hospital esperando a Keith. Parecía ser que ya era su último día ahí cosa que tenía felices a ambos, tenían planeado ya todo un día entero para salir y distraerse de lo que había sucedido.

El peliazul saldría por un pasillo en silla de ruedas y con suero conectado a su muñeca, los chicos que lo esperaban al final del pasillo se notaban bastantes inquietos al verlo. Al tenerlo cerca Cherry lo abrazaría con cuidado y besaría su mejilla; el pelinaranja le dió pequeñas palmadas en su hombro a su amigo mientras sonreía. La enfermera les indicó que le pusieran constantemente el suero ya que aún no podía comer bien, ambos asintieron y se fueron con Keith.

Les parecía un poco triste el hecho de verlo serio no se veía triste o decaído, al contrario se sentía feliz de estar con su novia y su mejor amigo, solo le molestaba el fuerte dolor que sentía en su garganta y cuerpo.

—“Tienes defensas bastantes fuertes.”— Dijo Pico viendo al chico en silla de ruedas.

El peliazul sonrió por la gracia que le causó el comentario.

—“Bueno, quieres ir al parque?”— Preguntó Cherry a su pareja quien asintió positivamente a la pregunta.

Fueron a un parque que estaba a unas cuadras de donde estaban seguro llegarían en 20 minutos, en el camino iban hablándole a Keith sobre algunas cosas que habían sucedido esa semana en la escuela.
El chico se veía bastante entretenido a lo que ellos le decían, realmente se sentía feliz de estar con ellos otra vez.

>…<

POV ________.

Seguir afuera solo me está cansando más no puedo evitar sentirme así realmente quisiera salir de aquí junto a Louis, ¿de verdad tiene que ser así? El recordar como llegué aquí simplemente me estresa.
Al menos caminar junto a él me hace sentir un poco más segura trata de hacerme sentir mejor, ahora lo pienso y tal vez haberle hablado distinto desde antes hubiera cambiado el hecho de haber terminado aquí. Suspiré viendo hacia abajo mientras apretaba mis puños.

—“¿Pasa algo _______?”— Preguntó él.

—“Nada, solo pienso algunas cosas.”—

Al caminar nos invadía el silencio incómodo mientras yo seguía pensando en mi familia, en todo lo que puedo perder en cualquier momento.
De pronto sentí una presión rara en mi pecho y un nudo en la garganta, eso de pensar en mi madre de un momento a otro me hizo sentir mal. ¿Por qué siento que algo pasará? ¿Es algo bueno o malo? Le pedí a Louis que regresaramos mejor a "casa", amablemente aceptó y llegamos en unos minutos. Aún no me sentía muy bien así que mejor decidí meterme en mi habitación a mirar el techo; suspiré y puse mis manos en mi rostro.

—“Quiero salir de aquí.”— Murmuré.

Sin darme cuenta me dormí en cuestión de segundos como si algo me hubiese dormido, pensaba en que mañana iríamos a esa escuela rara y tan.. Vacía algunas veces.

POV Mearest.

Llegar a mi hogar no era lo que esperaba de hecho, últimamente no lo ha sido. Subí las escaleras para irme a mi habitación y al entrar todo estaba en silencio, no había ningún rastro de sonido. Cerré la puerta y dejé mi bolso en un buró que estaba al lado de mi cama para después tirarme en ésta última, me sentía bastante cansada sinceramente. Miré unos instantes el cajón del escritorio que estaba enfrente de la cama, se veía abierto, me levanté para cerrarlo y me percaté del dichoso casete donde estaba ella. Una emoción y tristeza invadió mi cuerpo no sabía que hacer, traté de tranquilizarme y lo tomé con las manos temblorosas.

—“Hija..”—

Él no estaba aquí por lo que podría tratar de sacarla, no soy muy buena al tratarse de "magia" o lo que sea pero podría intentarlo.
Conecté la consola a la televisión que había en el cuarto, tendría que hacer todo rápido.
Puse el casete que estaba un poco roto cosa que me preocupó ¿y si le pasó algo a ella? No, no, no, no debo pensar eso.

—“Vamos.. Vamos..”— Murmuré rogando.

El juego funcionó! Vaya, me siento tan.. Feliz. Tan pronto como pude me puse a buscarla, pero solo estaba aquella escuela y los diálogos del chico pero, no estaba él.
Me concentré como pude para buscarla entre aquellos códigos y entre todo pude verla.

—“_______.. Mi niña..”— Hablé para mi tratando de no llorar, no quería perderla de vista.

Puse toda mi energía y fuerza en lo que pude para sacarla vi que todo eso se hacía verdad al ver como la pantalla dejaba de verse sólida, no dudé ningún segundo y me metí por ella.

—“______, _______, despierta hija.”— La movía para despertarla, pero nada pasaba.

Sentía el tiempo corriendo muy rápido y que en cualquier momento llegaría él a estropear todo, no dudé en nada ya no había nada que perder. La cargué como si un bebé fuera de nuevo y salí de ahí con ella; pude escuchar al chico gritar su nombre notando que había salido con ella.
Los ojos del joven hicieron contacto con los míos era inevitable ver su esperanza en ellos. ¿Qué debería hacer? ¿Lo saco también? Todo el estrés lo sentí recorrer mi espalda.

Aún seguíamos mirándonos dejé a ________ en el suelo con cuidado y adentré mi brazo para sacarlo, no podía dejarlo ahí menos sabiendo que Cherry y ______ querían ayudarlo en un principio.

—“Ven, ya podrás ir a tu casa.”— Le dije dándole mi mano.
Más pronto que tarde tomó mi mano con fuerza y retrocedí para sacarlo, fue impresionante ver como dos cuerpos se separaban entre pixeles y sonidos saturados estaba totalmente atónita.
La pantalla volvió a su estado sólido al haber salido él, podía ver que el chico no podía creer lo que estaba pasando siendo sinceros yo tampoco. Pero reaccioné al ver a mi hija despertar no me contuve y me abalancé a ella para envolverla en un fuerte abrazo.

—“¿Mamá? ¿E.. Eres tú, de verdad?”— Pude escuchar que me dijo.

—“Si hija, s.. soy yo!”— Lloré al tenerla en mis brazos.

La solté cuando escuché mi celular sonar, me levanté rápido y miré que era él, mi esposo. Le contesté rápido mientras salía de la habitación para irme.

POV Narrador.

Tenías tus brazos al rededor tuyo envolviendote en un abrazo tu sola mientras llorabas de la emoción, no podías creer que había sucedido. Louis te miró sonriente y te abrazó fuerte, ambos estaban envueltos en un abrazo fuerte mientras lloraban sin creer que por fin habían salido de ese horrible lugar. Se separaron por un susto fuerte entre ambos al ver a tu madre abriendo la puerta con fuerza y rapidez.

—“Tenemos que irnos ya, él ya viene.”— Dijo bastante agitada.

Ambos se miraron y asintieron rápido a la orden de la mayor, salieron los tres mientras ella llamaba a tu hermana. Con todo el dolor de su corazón tendría que pedirle que dejara a su novio en aquella ciudad, no había otra alternativa si él se enteraba de lo que había sucedido los mataría a todos sin pensarlo. Manejaba a toda velocidad por las calles para llegar a aquel parque en el que estaban, el pelirrojo pidió que lo dejara mejor con su abuelo y él se encargaría de que ambos se escondieran.

—“Por favor señorita Mearest, quiero ver a mi abuelo de nuevo. Yo lo llevaré lejos conmigo nos esconderemos en otro estado.”— Rogó el chico viendo a la mayor.

—“Louis..”— Miró al joven con una expresión bastante triste y decaída.

—“Mamá ahí está!”— Gritaste señalando a Cherry quien estaba despidiéndose de Pico y Keith.

—“¿Tranquila si? Todo estará bien, yo cuidaré de Keith y haré que te llame todos los días.”— Hablaba el pelinaranja consolando a la chica.

La castaña al ver el auto de su madre subió rápido y se despidió con sus manos de los chicos llorando. Miró desconsolada a tu madre mientras lloraba bastante asustada.
Sentiste un dolor en tu garganta por el nudo que yacía ahí, pusiste tu mano en su hombro para calmarla. Ella al verte se sentía tan incrédula y tan feliz a la vez, quería abrazarte pero todas las emociones solo la hicieron desmayarse.

—“esto está tan descontrolado! Estoy en shock.”— Murmuró el de ojos verdes mientras tomaba con fuerza tu mano. —“Pero señorita, ¡Lleveme con mi abuelo! Por favor..”—

—“Louis.. Siento ser yo quien te lo diga pero tu abuelo está muerto! No puedo dejarte solo, no con ese loco en la ciudad!”— Exclamó Mearest con dolor al chico que veía por el retrovisor del carro.

—“¿Q.. Qué....?”—

Continuará…🐛