“—A cold Freezin' night! ~ Holy cow!
Why do you always get away with things?
It′s not fair, I tell ya. It's not fair. —”

Despertaste de golpe al escuchar esa canción en tu mente, al oírla en tus sueños veías aquellas imágenes un tanto intrusivas, tu respiración estaba sumamente agitada y sentías que sudabas frío. Pusiste tu mano en tu frente para tratar de tranquilizarte, lo tomaste como una pesadilla así que trataste de volver a dormir.
Más de esas imágenes venían a ti de nuevo junto a los gritos de tu madre y hermana, las imágenes intrusivas cambiaron a la escena de cuando tu padre te encerró en aquel juego pero, todo era más raro. Querías despertar y no podías, ojos te miraban directamente mientras te encontrabas ahora en el pasillo tan extraño de la casa donde ahora vivías.

—“¿Qué está pasando?”— Pensabas repetidas veces mientras mirabas directo al vacío del pasillo.

Un sonido bastante fuerte logró despertarte tomando aire de manera agresiva por la impresión, al levantarte notaste que era Senpai queriendo tomar un vaso de una alacena. Suspiraste tranquilizandote y acercándote a él con cautelo, notó tu presencia sonriendo al verte.

—“¡______! ¡Estas despierta!” —

—“Uhm si.. Eso parece.. —”

—“No te noto bien.. ¿Pasó algo?—”

—“N.. No! Todo bien!—”

—“Oh, esta bien. Bueno, aprovechando la hora.. ¿Qué tal si hacemos lo que hacen los enamorados a estas horas?~”— Dijo aquello último en tono seductor.

—“¿Tratar de dormir después de tener pesadillas toda la noche? Claro, me interesa!”— Respondiste apresurada y llendote al sofá de nuevo.

—“¿Huh? ¿Sigues durmiendo en el sofá?”—

Ignoraste su pregunta haciéndote la dormida, aquel chico te miraría un ratito y después se iría a su habitación un poco enojado.

>…<

Se notaba que ya era mañana el rubio estaba preparando el desayuno sin forma, o así lo llamabas tú.
Despertaste poco tiempo después y te dirigiste a la cocina al escuchar algo de ruido.

—“Ay _______, ¿Te desperté?”— Preguntó preocupado el de ojos verdes.

—“No, tranquilo.”—

Te sentaste al lado de él para desayunar, por alguna razón sentías tu pecho extraño al estar al lado de él. Seguía siendo confuso ese sentimiento, ¿cuándo lo despejarás bien? ¿Acaso es justo sentir amor por ambos? Por una parte lo era, es la única persona con la que convives desde hace meses ya, no debería ser tan raro. Sin darte cuenta recargarías tu cabeza en el hombro del contrario, pensabas en todo lo que te estaba sucediendo y si era justo. Louis se sonrojó un poco al sentir tu cabeza en su hombro, no quiso decir nada y siguió comiendo.

Habrían llegado tarde a aquel instituto educativo pero no parecían muy interesados en haber llegado tarde, Senpai se fue a su salón y tú al tuyo de mala gana. Realmente te cansaban las chicas que te preguntaban por tu amigo y el porque salias con él; tratabas de ignorarlas pero muchas veces eran tan molestas que parecía imposible la tarea de ignorarlas.
Como para la penúltima clase habrías pedido permiso para ir al baño, al concedertelo corriste rápido allá para librarte un rato. Te metiste a un baño y te recargaste en la puerta al cerrarla, comenzaste a sentirte extraña por alguna razón, aquel sentimiento de confusión habría llegado. Comenzaste a pensar en ese chico y su doble personalidad tratando de aclarar por quién sentías eso, pensabas en ambas personalidades y en cómo te trataban. Sentías tu rostro arder por imaginar el rostro del chico cerca tuyo, cubriste tu cara con ambas manos negando todo lo que sentías. Poco tiempo pasó cuando veías tu piel de un tono extraño, abriste de golpe tus ojos al ver tu piel en un tono morado igual que tus padres, aquello sucedía solo cuando te sentías muy emocionada, ¿tan así eran esas emociones por ellos?

Esperaste un tiempo para ver si tu piel volvía a su tono disfraz, pero seguía el morado. Te empezó a preocupar pero por más que lo intentabas seguías pensando en él y su apariencia.

—“No! No! No! No!”— Repetías una y otra vez en tu cabeza.

>…<

POV Cherry.

Era mi última semana sola en mi casa, se supone mis padres vuelven entre hoy y mañana. No me sentía con muchas energías y mi celular no paraba de sonar, me cansé de estar escuchándolo así que lo agarré para silenciarlo un rato, no podía apagarlo debido a que mi mamá me llamaría en cualquier momento.
Me levanté sin muchas ganas para comenzar a limpiar el desastre que había hecho, estaba 50/50 a decir verdad. Después de limpiar me tiraría de nuevo a mi cama para dormir un poco, me sentía bastante cansada y quería dejar de pensar en las cosas malas que le pudieran estar sucediendo a mi hermana. Me quedé profundamente dormida al cabo de unos segundos, sentía comodidad en mis ojos por al fin cerrarlos.

>…<

Una voz me despertó y abrí mis ojos lentamente, al abrirlos noté que era mi madre.

—“¿Hija estas bien?”— Me preguntó preocupada al verme.

—“S.. Si mamá, estoy bien..”— Respondí sin muchas ganas, pude ver que hizo una mueca seguro no me creía nada. Se dió la vuelta y se fue.

Suspiré pesado y me volví a acomodar entre las sábanas, no podría bajar a verlos, mucho menos a mi padre. Empecé a cerrar mis ojos para quedarme dormida de nuevo.

Después de dormir otro rato desperté notando que era de noche, bostece y me levante de mi cama para ir a la cocina a comer algo. Cuando bajé pude escuchar a mi padre hablar por teléfono, sinceramente no quería saber nada ya pero parece que me vió al bajar y colgó de golpe.

—“¡Cherry, hija mia despertaste!”—

No hice contacto visual en ningún momento e ignoré lo que me decía, tomé un pedazo de pay que me había quedado y lo agarré también tomando un tenedor junto a un vaso con té. Tomé las cosas y me fui a mi habitación con una expresión de poca importancia a lo que me decía, subí las escaleras para finalmente entrar a mi habitación y cerrar la puerta.
Me senté en un sofá pequeño que teníamos ahí, comencé a comer mientras veía los miles y miles de mensajes de Keith, Nene y Pico. Estaba teniendo una llamada entrante de Keith, lo pensé dos veces si responder o no pero debía hacerlo, lo sentía. Respondí y pude escuchar a Keith preocupado pero feliz a su vez

—“¿¡Cherry estas bien!?”— Pude escuchar del otro lado del celular.

—“Si, estoy bien.. Lamento haberme desaparecido estas dos semanas pero no me sentía muy bien.”— Respondí tratando de justificarme ante la situación.

—“Al menos hubieses avisado!”— Dijo aquello último para después soltar un suspiro aliviado. —“Pero me alegra que no te halla pasado algo malo..”—

Sonreí un poco por escuchar a mi novio de nuevo, le cambié el tema para hablar de otras cosas y así fue.

>…<

POV ________.

Aquel suceso del baño me tenía loca, aún sigo sin poder verme normal. Realmente no me molestaría esto, si estuviera con mi familia! Aquí no puedo!, a demás.. ¿Tan fuerte es esta apariencia para desafiar los códigos? Aunque dudo que yo tuviese alguno, después de todo no tengo el lugar de ningún personaje.. Si, debe ser por eso.
De igual forma no pienso salir de aquí, ¿será que me quedaré así? Que molesto! Después de quejarme me vi al espejo y vi que estaba en mi tono disfraz, solo fue unos momentos al parecer. Después de aquello salí del baño para irme al salón, me encontré con Senpai en el pasillo parece que me esperaba.

—“Hola linda~”— Me saludó caballeroso acercándose a mi.

Respondí a su saludo moviendo mi mano en señal de saludo igual mientras sonreía al verlo, ya me esta pareciendo molesto sentir todo esto. Comenzamos a hablar y sin querer perdimos mucho tiempo, estábamos tan concentrados en una plática que el timbre nos asustó. Corrí a mi salón por mi mochila y él al parecer también, salimos de ahí para caminar rumbo a la casa; durante el camino el rubio me abrazaría de la cintura pegándome a él poco a poco, mi corazón latía demasiado, yo solo correspondí el abrazo con algo de pena. Al llegar lo pude notar un poco extraño, eso me preocupó un poco a decir verdad; se dirigió al sofá y se sentó soltando un suspiro. Me miró y dió unas pequeñas palmadas al lado suyo invitándome a sentarme a su lado, acepté sin pensarlo mucho viéndome sentada a su lado.

—“______...”— Pude escuchar su voz proviniendo de mi al lado, volteé a verlo para después sentir mi rostro ardiendo.
Aquel rubio estaría tan cerca mío, su respiración tan cerca de la mía me causaba una explosión de emociones.
Quité mi rostro girando mi mirada a otro lado, me senté en la posición que estaba anteriormente. Sentí las manos del chico acariciar mis hombros, su respiración en mi cuello me hacía sentir escalofríos por todo el cuerpo; quería quitarlo pero algo me hacía quedarme inmóvil. Sentí sus labios en mi mejilla, me estaba dando besos casi por toda la mitad de mi rostro hasta sentir sus besos por mi cuello, puse como pude mi mano en su rostro para pararlo, él lentamente apartó mi mano y tomando mi mentón obtuvo el control total de la situación.

—“Tranquila ________, relájate no te haré daño..”—

Aquello no me tranquilizaba nada me sentía bastante inquieta, siguió besando mi cuello y no me molestaba del todo solo.. No me sentía lista.

Continuará... 🐛