Saco la espada y te apunto con ella. Es hora que conozcas quien soy de verdad.
No soy tu ÁNGEL, no dependo de un CHICO, no necesito RESCATE, porque no soy una PRINCESA. Aunque digas delante de todos que no, te gusta tenerme indefensa a tu lado. Te gusta hacerme ver inferior a ti cuando tú y yo sabemos la verdad. ¿Cuál verdad cariño? Que me tienes miedo, que necesitas mantenerme rebajada para sentirte seguro. Yo soy mucho más de lo que puedes soportar. Yo lucho mis propias batallas, el fuego está en mis venas. Me cansé de dejarme reducir por ti, me cansé de no ser yo por tú manipulación.
A partir de hoy te enseñaré a tratarme como una reina, a partir de hoy el esclavo serás tú. Cojo la corona que tienes sobre tu cabeza y la pongo sobre la mía. Un bonito traje va cubriendo poco a poco mi cuerpo, mientras para ti solo aparecen harapos. No me dejaré pisotear por nadie más, la advertencia está hecha. Pego mi espada a tu garganta y sin querer hago un pequeño corte que parece un rasguño. Veo el miedo en tus ojos y eso hace que una sonrisa arrogante se dibuje en mi rostro. Te obligo a ponerte de rodillas y que alces el mentón para que me observes.
No hay palabras, mi mirada dice todo lo que necesitas saber. Y mi sonrisa crece de victoria cuando te escucho responder:
"Sí, su majestad"
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro