Ya no sé qué hacer ayudar.
Ojalá la hubieras visto llorar.
Gritándole al vacío que ya no puede más.
Y tengo miedo que se intente suicidar

La escucho cuando se quiere desahogar.
Cuando me dice que ya no quiere respirar.
Que no sabe si algún día lo podrá superar.
Si escucharas todo aquello te llegarías a odiar.

Ya no sé qué responder a sus porqués.
A la tristeza en sus ojos color miel.
Cansada de en el piso arrodillarme con ella a sus pies.
Y susurrarle al oído que todo estará bien.

Eres tú quien al final va a perder.
Cuando le de asco quererte ver.
Que ni recuerde que tú fuiste su ayer.
Que la vida le sonría otra vez.

Y no me vengas a buscar después.
A qué recuperarla me vengas a convencer.
Por mi parte te miraré y de tí me reiré.
Y simplemente te diré:

"Lo hubieras pensado bien."