Mientras comías un pedazo de pan que habías partido a la mitad y lo habías hecho un saludable sándwich, leías un libro de romance vampiro adolescente, en lugar de estar estudiando Matemáticas o Inglés o Japonés como te lo había ordenado la mayor de la casa, que había adoptado el papel de madre. De pronto, tanto tu jugo, como tu persona, cobija y almohadas comenzaron elevarse en el aire y al cabo de unos minutos te estrellas te contra el suelo haciendo un completo desastre. Entraste en pánico por un momento debido al desorden, pero después te corrió un enojo inofensivo por las venas, te asomas te por la ventana para ver al causante de tu 10ma caída en la semana.

-¡Enma! ¿Otra vez? -preguntaste con algo de enfado por la repetitividad del accidente.

-L-lo siento (T/N) -dijo el pelirrojo avergonzado.

Bajaste a la sala, donde te encontraste a Suzuki Aldelheid, aquella chica que adoptó el papel de madre en tan pequeña familia que quedó desamparada desde menor.

-¿Otra vez lo hizo? - preguntó ella con tanta serenidad a pesar de que estaba lidiando con otras cosas.

- Sí... pero ¡No te preocupes! Yo lo limpiaré

- No pensaba en ir a recoger eso, es tu cuarto y tú obligación mantenerlo limpio, ¿Ya estudiaste?

-¡Apenas desayunaba! - dijiste con nerviosismo al recordar que estabas leyendo cursilerías no tan curisis en lugar de mejorar académicamente.

-Bien, cuando termines, vas a ir a entrenar Box con Koyo...

- Y de ahí a practicar japonés con Shittopi-chan, luego jugar con Rauji, entrenar béisbol con Kaoru, y en el transcurso del día evitar los constantes acosos de Julie, para final del día, ayudar a Enma con su llama, I know, I know es mi rutina de todos los días, ¿Cómo se me va a olvidar convivir con mi familia? - le sonreiste a la chica mientras tomabas una toalla y trapeador para limpiar tu cuarto.

Cuando terminaste, fuiste con Aoba Koyo, quién era un buen boxeador, aunque muy malo tratando te

- Estaba a punto de irme ¿Por qué tardaste (T/N)? - dijo enojado.

- Enma otra vez hizo que mi cuarto se descontrolara, como sea ¿Iniciamos? -dijiste acomodando en tus manos unas vendas.

- Claro ¿Si no a que venías? -dijo imitando tu acción.

- Eh ¿Y hoy que entrenaremos? -dijiste atando tu cabello en un chongo.

- Pues, que cubras y...desvíes - tiró un golpe hacia a ti.

Bajaste el hombro derecho rápidamente y te acercaste lo suficiente para tomar su brazo y apretarlo contra su cuello.

- Ah, ¿Entrenas de más, eh? -dijo riendo con cierto orgullo.

- Adel me enseñó algo de defensa personal y lo aplicó siempre, para cuando Julie se me acerque, poder patearle el trasero con estilo - dijiste riendo con superioridad - Por cierto, no lo he visto desde ayer ¿Y tú?

- No, y tampoco me interesa donde esté, bueno empecemos con el calentamiento - dijo poniéndose en guardia.

Suspiraste y te pusiste en guardia, tras dos horas de entrenamiento pasaste con Shitt-p, bueno, como ella adoraba ser llamada "Shittopi-chan" ella era una chica en todo el sentido de la palabra "rara" pero aún así la querías con todo y su forma de ser

-¡(T/N)-chan! Por poco no llegas, estaba a punto de empezar con la lección de inglés.

-Don't worry for The english, i speak good the language - dijiste con un poco de superioridad- But, i have practice more the japanese

-¡Iniciemos de una vez! Muy bien, Watashi wa Shittopi-chan -dijo con su extraño tono alzado.

-Ah...¿Tu eres Shittopi-chan? -la de pequeño fleco asintió- bien, voy yo "Watashi wa (T/N) des" - dijiste con dificultad.

Continuaron con la lección, al principio solo idioma básico, para que al final trabajarán con aprendizajes más complejos.

Te retiraste de ahí y fuiste con Rauji, era un tipo grande y regordete, pero era bastante agradable jugar con el, siempre jugaban juntos con videojuegos, una vez jugaron hasta las 4:00 am, hubieran seguido, de no haber sido por Adel que los descubrió y los mando a dormir, claro después de haberle regañado.

A las 6:30 era buena hora para practicar con Kaoru al béisbol, el mejor beisbolista que conocías, aunque es bastante tímido tiene un excelente potencial, tanto Adel como tu lo han impulsado a que sea más seguro, pero de igual manera el sigue siendo bastante penoso.

Para final del día practicar con Enma a dominar su llama, todos en la mafia tenían llamas, las más altas y populares eran: Cielo, Tormenta, Lluvia, Rayo, Niebla, Nube y Sol. Pero los shimon eran diferentes, ellos poseían las llamas de la tierra, Shittopi-chan poseía la del pantano. Rauji, la de la montaña. Koyo la del bosque. Adel la llama glacial. Kaoru la del desierto. Y por último, Kozato Enma, poseía la de la Tierra, la llama que poseía el jefe, ese pequeño pelirrojo que creciste con el y con el tiempo hubo más que amor fraternal que el que hubo con su hermana, que trajica mente fue asesinada. La especialidad de la llama del jefe era la gravedad, este era equivalente a la de una estrella, pero no saber controlar ese poder era un problema para todos.

-Uh Hola Enma -saludaste algo nerviosa.

-H-hola (T/N), yo...lamento lo de esta mañana, no quise desorden...

- T-tranquilo, ya limpie mi cuarto, era cosa de nada, bueno, te voy a ayudar con ese problema~

-Gracias por ofrecerte, Koyo y Julie solo me consideran inútil al no lograr controlarme -dice avergonzado.

-Descuida, es algo normal no lograr las cosas a la primera, bueno, empecemos, levanta esta piedra -dices señalando una pierda gruesa, grisácea azul grande.

Después de media hora, la piedra no se movió ni un centímetro.

Pero...todo alrededor del pelirrojo si estaba flotando, incluso tu, que ya habías dejado calvo a la rama del árbol donde te sujetabas

-Ah...Enma...- dijiste algo nerviosa por la altura y no queriendo recalcar sus errores al pelirrojo.

-Espera, se que puedo, se que puedo -decía incrementando sus llamas.

-Con un demonio ¡Bájame de aquí! -gritaste enfadada y asustada.

Todo lo que antes estaba flotando cayó de golpe, incluyéndote, cayendo encima del pelirrojo. Y ante tal pose tan comprometedora e incómoda, quedaste admirando su rostro, el cual iba enrojeciéndose como el tuyo, pero igual, ante tal caída apenas si tu cuerpo se re acostumbraba a la gravedad de la tierra.

-Narra (T/N)-

¡¡¡AH!!! Qué vergüenza...gah...y-yo, m-mis piernas, no puedo mover las y mis brazos mucho menos, ¿Por qué ahora? ¿Por qué con el? El...me gusta desde que éramos pequeños...y ahora esos ojos me miran con vergüenza...esos ojos...tan lindos, rojos como un rubí, tan lastimados...su cabello, igualado al rojo del corazón que ahora me late como loco...yo...yo...

-Narrador-

-Enma...-ladeaste un poco la cabeza, mientras te acercabas peligrosamente a su rostro.

-(T/N)...-quedo inmóvil el chico mientras su rostro se enrojecía mas.

-Vaya vaya, quien lo diría, Enma y (T/N) no me imagine que esto hacían mientras entrenaban -ríe de forma picara.

-A-ah J-julie, n-no es l-lo que t-tu c-crees...-dice el pelirrojo sonrojado.

-{¿Julie?} -te alejaste de Enma después de recuperar el completo control del movimiento- ¡AH! Es cierto no es lo que tu...

-Narra (T/N)-

Hace no mucho que no miraba a Julie, el era el típico hombre que se creía irresistible y que todas las mujeres morían por que el se fijara en ellas, era un tipo con un ego y autoestima bastante grandes, en ningún momento el se sobrepasaba conmigo, hasta que yo veía que siempre "acosaba" a Adel, pero claro ella siempre lo golpeaba para que la dejara en paz, el punto de mi convivencia con el es que jamas me ha hecho sentir incomoda, al contrario, el me causa bastante gracia...pero...hoy, ahora era diferente, su mirada...no se que sentimiento siento ahora...¿Es ansiedad? no lo se, pero quiero gritar y correr, pero otra vez no puedo moverme...es mas...¿Estoy temblando? ¿Por que estoy temblando? 

Instintivamente me oculte tras de Enma, como cuando eramos niños...como la vez que vimos a ese rubio al que yo le dije "impius" hasta la fecha no se que dije ese día

-¿Eh? Así que si estaban haciendo cosas indebidas -dijo el riéndose, no se porque pero detesto esa forma de reírse...no es suya...

-¡N-no! -dijo Enma tan rojo que me dio un poco de risa.

-Bueno, bueno, no vine a espiarlos para luego decirle a Adel, si no que traigo un regalito para ti (T/N) -dice sacando y mostrándome una caja negra.

Tome la caja y la abri, vi un anillo de color negro como la obsidiana, con dos fragmentos como de metal cruzados formando una cruz. Lo mire curiosa, era raro que Julie regalara algo...bastante raro

-¿Y esto? -pregunte.

-Es un anillo, ¿No siempre te quejas de que tu no tienes llama? -dijo el con un tono un poco irritante.

Pero era verdad, todos en mi familia tenían una llama y anillo, pero yo no tenia y aveces yo sola me sentía rechazada, el tener uno ahora me emocionaba, pero este era muy diferente al de todos ellos, ni siquiera parecía un anillo de los elementos del cielo.

-¿Y que clase de llama se supone que es? -dije un poco enfadada, pensé que era una broma.

-En general se le conoce como la llama "indefinida"

-Nunca había oído de esa llama -dijo Enma

-Esta no es muy conocida, como nosotros -dijo Julie con una sonrisa que me daba miedo.

-¿De donde la sacaste? -dije sacando el anillo de su caja y lo analice mejor.

-Durante ocho generaciones estuvo en la familia de los Shimon, pero no se en que momento dio a parar con los odiosos Vongola -dijo el.

En mis venas corrió una ira y rencor incontrolables, teniendo el anillo en mano, de este salieron incontrolables llamaradas negras como si de un incendio forestal que arrasaba todo a su paso se tratase. No solo yo, si no que Enma también vio aterrado y sorprendido esa escena. Solté el anillo de inmediato y cayo no tan lejos de mi, ahora emitiendo llamas mas débiles hasta casi nulas.

-¿Q-que fue eso? -dije incrédula.

-Es tu llama, la llama indefinida -sonrió el con mucha superioridad.

-Narrador-

Al llegar la noche eras el centro de atencion en la mesa a la hora de cenar.

-¿Llama indefinida? -dijo Rauji.

-¿Un anillo negro? -cuestiono Kaoru.

-Eso es bastante raro -dijo Shitt-p.

-Lo mas raro aquí es, ¿Por que la tenían los Vongola? -dijo Koyo molesto.

-No lo se...-dijiste pensativa mirando el anillo.

-Bueno, investigue y la llama es mas poderosa de lo que creemos -dijo Adel leyendo unas hojas de un folder que se veía que antes había sido mordisqueado por algún animal.

-Tienes razón -dijo Julie arrebatando le el folder y redactando bastante contento- La llama indefinida es bastante poderosa, puesto que esta es capaz de controlar las doce llamas mas poderosas

-¿12? -dijo Enma.

-Es decir, las 6 llamas de la tierra y las del cielo, las llamas superiores no las replica con el poder suficiente -dice Julie molesto por su incompetencia.

-¿Y no viene información de por que estaba con los Vongola? -pregunta Adel.

-Nop, eso no esta registrado -dice Julie cerrando el folder.

-Mi pregunta es...¿Como la conseguiste? ¿Como sabias que estaba con ellos? ¿Por eso te desapareciste?

Eran preguntas bien estructuradas por la de ojos (C/O), así que todos fijaron su atención al chico de fedora, que este respondió con toda naturalidad y tranquilidad del mundo.

-Pues últimamente me había puesto a investigar por que (T/N) siempre molestaba con que ella quería tener una llama, así que después de leer tanto, descubrí esta llama, pero esta no estaba con nosotros y después de un par de investigaciones mas, descubrí quien la tenia. Fui con aquella bella mujer y se lo pedí amablemente, claro que con mis irresistibles encantos no se negó y me lo entrego -dijo poniendo su mano en su barbilla y sonriendo con superioridad.

La tensión bajo ante tal explicación coherente, pero igual el chico seguía hablando.

-Bueno (T/N), ahora que lo sabes, debes practicar para dominar nuestras llamas ¿Que dices?

-Supongo...que si...-seguías confundida pero igual aceptaste, seria una excelente oportunidad para volver te mas fuerte.

Un mes después de que te habías acostumbrado a tu llama, comenzaba a ser mas fácil la convivencia con tu familia, puesto que pasabas mas tiempo con todos ellos, tanto era la dedicación que cada quien tenia un día designado para pasarla contigo.