╭ the party ╯
FIRST CHAPTER.
El ambiente era calmado, aún no había llegado mucha gente, así que Jungkook aprovechó para ponerse al día con aquellas personas que no había visto en muchísimo tiempo.
La mayoría eran antiguos compañeros de clase o universidad en general, pero algunos familiares o parejas que desconocía.
Cuando alcanzó a Yoongi, un viejo amigo de fraternidad, ex compañero de habitación y anfitrión de la fiesta, le dio una palmada amistosa en el hombro.
──¡Vaya! Has crecido muchísimo ──bromeó con una sonrisa de conejo.
El pelinegro fingió una sonrisa desganada y alzó el mentón para verle.
──Sigues tan gracioso como siempre. ──Se quejó, aunque segundos después le devolvió la palmada.
A su lado, una cabellera rosa se agarró del brazo de su compañero, dejando a Jungkook sorprendido.
──Jk, este es Jimin; mi novio. ──Les presentó Yoongi.
El recién llegado sonrió con amabilidad pero algo de timidez.
──Un placer ──saludó Jungkook.
──Igualmente ──respondió el pelirosa── ¿De dónde viene la abreviatura?
El tatuado, sorprendido por la angelical voz, sonrió.
──Es Jungkook ──explicó.
Yoongi sostuvo la cintura de Jimin con algo de fuerza y carraspeó.
──¿Vienes con Taehyung? Escuché que al final os habíais casado ──comentó, ajeno a la realidad.
Jungkook hizo una mueca de disgusto, pensando en el vacío de su anular. Desde que se habían separado las cosas no le habían ido muy bien, y prefería no hablar sobre ello.
──Sí pero... Ya no estamos juntos ──murmuró, observando la puerta de la casa, donde algunos invitados más llegaban.
Jimin le dio un disimulado toque a su novio cuando este volvió a abrir la boca, entonces calló.
──Perdón ──dijo entre dientes.
Jungkook rió por lo bajo y se cruzó de brazos con cansancio.
──Está bien ──musitó──, hace ya unos meses que nos separamos.
Yoongi asintió, sin saber qué decir, no era demasiado bueno para esa clase de conversaciones y Jungkook lo sabía.
Por suerte estaba Jimin, que se giró en busca de unos vasos de cerveza y se los tendió.
──Has venido a divertirte, aprovecha para distraerte y no pienses en él ──sugirió con un guiño.
El castaño agradeció el amable gesto y tomó el vaso.
──Es verdad, quizá incluso puedas conocer a alguien más, aprovecha la fiesta ──insinuó Yoongi, con un codazo amistoso.
Los tres rieron un poco, mirando a la gente que llegaba como si estuviesen pescando.
Sin embargo, los ojos de Jungkook dieron con un cabello negro y algo ondulado entre un grupo de ex alumnas que no conocía muy bien y que pasaban frente a ellos.
Aunque la persona estaba camuflada, reconocería su figura en cualquier lugar.
──¿Tae? ──preguntó con un deje de nostalgia en su voz.
El chico se giró hacia la voz que le había llamado, siendo demasiado familiar para pasar de largo. En cuanto sus ojos ámbar se toparon con los café de Jungkook, retuvo el aliento.
──¿Kookie?
Una sonrisa se esbozó en sus rosados labios. Se alegraba de verlo, de hecho había querido hacerlo días atrás, cuando supo que había regresado de sus vacaciones en Europa.
──Vaya, no sabía que vendrías ──mintió, acercándose── ¿Cómo estás?
Las chicas con las que iba se detuvieron, siendo testigos del reencuentro, al igual que Yoongi y Jimin.
Jungkook tragó saliva y apretó inconscientemente el vaso de plástico en sus manos. Cuando Taehyung se acercó a él, pudo notar el olor de su perfume, el mismo que seguía en las camisas y sudaderas robadas de su armario.
──Todo bien, algo cansado de las vacaciones, irónicamente. ──Sonrió algo incómodo y se pasó la mano tatuada por el cabello──. ¿Y tú?, ¿qué... haces aquí?
Taehuyng notó sus mejillas colorarse cuando vio el brazo de Jungkook; había añadido tatuajes nuevos y se encontró mirándolos más tiempo del debido.
──Yo... Vine con ellas ──murmuró, señalando al grupo de chicas──. Solíamos salir en grupo en la universidad, Aisha estudiaba en tu universidad.
La explicación aclaró las cosas, al menos para Jungkook, quien se alivió de que el mayor no hubiese buscado una excusa barata para verle.
Sin embargo, eso era precisamente lo que Taehuyng había usado.
──Que coincidencia ──comentó el tatuado con una sonrisa forzada──. Pues... Pásalo bien, supongo.
El de ojos ámbar asintió, comenzando a incomodarse por las miradas de las chicas y los dos compañeros de su ex marido.
──Ya nos veremos. ──Se despidió, bajando la mirada.
Jungkook asintió en respuesta, observando cómo se giraba y echaba andar hacia la cocina.
Yoongi dejó ir un suspiro largo.
──¿Estás bien? ──preguntó a su ex compañero.
Él se encogió de hombros y apartó la mirada hacia el techo, terminándose la cerveza de un trago.
──Lo estaré.
────────────────
Taehyung exhaló el humo con sabor y olor a frambuesa y pasó el cigarro electrónico a Jennie, que estaba a su lado.
──Vale, Tete, ¿verdad o reto? ──comentó Soyeon.
Él se recostó en el sofá y cerró los ojos, cansado.
──Estoy aburrido, dame un reto. ──Bufó.
Aquello que había comenzado como una ronda de juegos típicos de la facultad, se había vuelto un centro de cotilleos. A Taehuyng le gustaba el ambiente, pero no cuando se tocaba el tema de él y Jungkook.
Sin embargo, los planes de la Soyeon eran muy distintos.
──Bien, bésate con alguien que no sea Jungkook, pero asegúrate de que él lo vea ──canturreó.
Automáticamente las demás gritaron entusiasmadas a su alrededor, mientras que él prácticamente saltó del sofá.
──¡No, no, no y no!
──¡Claro que sí! ──rió Jennie──. Quiero ver su reacción, ¿has visto cómo te miraba?
Taehyung rodó los ojos y siguió quejándose, negándose y poniendo excusas, porque aunque quería verlo y le extrañaba, eso era demasiado. Pero nada sirvió, porque prácticamente le arrastraron hacia la zona donde Jungkook charlaba con sus conocidos.
Allí se sintió pequeño, como si todo el mundo le juzgase, como si todos los murmullos fuesen de él. Pero nada más lejos de la realidad.
Sin embargo, alguien sí hablaba de él.
──Eh, Taehyung no te quita la vista de encima ──comentó Yoongi.
Jungkook chasqueó la lengua con diversión.
──Siempre le gustó llamar mi atención.
Mientras ellos dos intentaron no darle mucha importancia, Jimin frunció el ceño con confusión.
──Se está acercando ──susurró.
Ante eso Jungkook volvió a mirar a su ex marido.
Taehyung se acercaba con pasos firmes, decidido, clavando la mirada al frente. Había tomado una decisión y nadie le haría cambiar de idea.
El tatuado estaba guapísimo con esa camisa negra que dejaba ver parte de su pecho, esos pantalones a juego de cuero ajustados y las botas oscuras. Quería besarlo, sus pies le llevaban hasta él, pero sabía que no debía.
Por eso pasó de largo, aunque sintió los ojos café seguirle, hasta llegar a una muchacha rubia que parecía no tener compañía.
La sujetó como si fuese el amor de su vida, como le gustaría que Jungkook le sujetase a él, y la besó.
NEXT PAGE: THE KISS.
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