—¡Qué lindo vestido!, Me gustan los vestidos de esta época, tan adornados y con vuelo, ¿Tú qué opinas Marty?— lo miré mientras el veía hacia su chaqueta acomodandola

—Pues la verdad la ropa de hombre es un poco...— me miraba con una expresión que no pude deducir, se quedó a media palabra con la boca un poco abierta y miraba mi vestido

—¿Pasa algo malo?, ¿Muy floreado?— me rasqué la cabeza mirando igual el vestido

—No, no... Te queda muy bien— apartó la vista con una risa

—Mmm...

Más tarde habíamos llegado a la escuela de Hill Valley, ¿Cuántos años tiene está antigüedad?, Yo aún estudio aquí.

—Ohh, limpiaron muy bien este lugar,  parece nuevo— dijo Marty bromista

—Imaginate, en mi tiempo aún sigue funcionando y existiendo, mi sorpresa es aún mayor viendo el edificio tan... De su color— reí

—Marty, recuerdo que según mi teoría interferiste en el primer encuentro de tus padres, si no se encuentran, no se enamorarán, no se casarán y no tendrán hijos, tu hermano mayor está desapareciendo de esa fotografía, tu hermana seguirá, y a menos de que repares el daño tu serás el siguiente— dijo el Doctor

—Eso suena demasiado pesado— contesto Marty

—¿Pesado?, Que expresión tan boomer— saqué la lengua

—¿Que demonios es boomer?

Entramos en la escuela, justo en el momento donde sonó la chicharra y todos los estudiantes salían de los salones.

—¿Cuál es tu padre?

—Es ese joven...— señaló al pobre enclenque que venían pateando y burlándose de él

—Yo pienso que fuiste adoptado— dijimos el Doctor y yo al mismo tiempo

—¡McFly!— llamó la atención un profesor al padre de Marty

—¡Strickland!... ¿Ese viejo nunca tuvo cabello?— alcé una ceja mirando al de mi lado

—¡Comportarte, eres un holgazán!, ¿Quieres ser un holgazán el resto de tu vida?— le quitó unos papeles que traía pegados en la espalda y luego se fue

—¿Que le vería tu madre a ese sujeto?

—Ah, no lo sé... Creo que sintió lastima por el porque su padre lo arrolló con el auto...

—¿Uh?

—Me arrolló a mi con el auto...

—Es el síndrome de Florence Nightingale, sucede en los hospitales cuando las enfermeras se enamoran de sus pacientes— le dió una palmada en la espalda a Marty —¡Actúa muchacho!

—Vamos— dije entusiasmada

—Un segundo jovencita, si piensas ayudar a Marty será mejor que mantengas tu margen, puede resultar esto en una catástrofe aún peor— el Doctor me tomó del hombro

—Pero quiero ayudar, no solo quiero hablar con este tonto— lo señalé

—¡Oye!

—Ten mucho cuidado con lo que haces, puedes ayudarle pero te lo advierto, cada palabra, movimiento y acción tienen consecuencias, será mejor que elijas lo correcto, ¡vayan ya!— nos empujó a ambos

Marty se adelantó y lo ayudó a levantar uno de sus libros, yo también recogí algunos que terminaron más lejos.

—¡Hey, George!, Amigo, te he estado buscando por todas parte, ¿Me has olvidado?— le di los libros a George y me miró un poco intrigado, pero Marty rápidamente lo levanto y abrazó por el hombro —soy el que te salvó la vida

—Eh... Si— me miraba de reojo de vez en cuando

—Bien, quiero que conozcas a una persona— sentía la mirada de determinación del abuelo sobre nosotros

Caminamos hasta la loca y las chicas a sus lados que parecían ser sus amigas.

—Lorraine— llamó el de chaqueta roja con café

—¡Ay, Calvin!— se echó hacia atrás sorprendida, chocando con los casilleros

—Ehm... Quiero presentarte a mi buen amigo George McFly

—Je, hola, es un gran placer conocerte— se acercó a ella pero está no apartaba la vista de Marty

—¿Cómo está tu cabeza?

—Ah... Bien, bien

—Estaba tan preocupada por ti desde que te fuiste la otra noche...— miré detrás mío, dejando de prestarle atención a la conversación de ellos, viendo como George se iba

—¡Oye, espera!— lo alcancé y el se dió la vuelta

—Oh, eres tú...— me miró igual que cuando le entregué sus libros

—Si, ¿Por qué no vuelves con la amiga de Marty?, Se que le encantará conocerte— sonreí

—Yo... Bueno, no se notó que estuviera interesada en mi— se rascó la nuca

—Aww, vamos, así somos las chicas, un poco despistadas y fantasiosas...— la verdad no, pero necesito ayudar al tonto

—¿Cómo te llamas?— sonrió un poco

—Me llamo __________, y ella Lorraine— dije algo nerviosa

—¿Te puedo ver en el almuerzo?— abrí los ojos con sorpresa

—Yo...-- —la campana me salvó, literalmente

—Espero verte ahí, ¡Me tengo que ir!—

—¿Qué acaba de pasar?— miré horrorizada el vacío

—¡__________!— una mano tocó mi hombro, por lo que me exalté —¿Qué haces aquí?— era Marty

—Creo que tú papá me invitó a almorzar— lo miré con el mismo horror

—¿¡Qué-- —le tapé la boca

—Callate, cállate, cállate, el abuelo no me va a dejar de regañar si se entera— cerré los ojos con fuerza mientras tenía ambas manos en la boca de Marty, luego me babeo —¡Qué asco!— me sacudí y luego me limpié en el

—¿¿Abuelo??— me miró asombrado y extrañado

—Uy... Ehm, luego te cuento, vámonos ya— lo tomé del brazo y corrimos

Ya era el almuerzo, ambos buscábamos a George, y cuando lo encontramos estaba solo en una mesa con muchos libros y su comida.

—Muy bien __________, no abras tu boca para nada, no voy a dejar que mi papá se enamoré de ti, eres rara y eso sería extraño— me dijo Marty

—¿Rara?, Lo dice el modelo 85— le saqué la lengua, camina— fuimos a sentarnos con el

—George, amigo— se sentó el primero  saludándolo, pero el no levantó la vista

—Hola, George— saludé sentándome, recordé lo que me dijo Marty y no tardé en sentir su mirada asesina al darse cuenta que cuando yo saludé el levantó la vista sonriendo

—Si viniste...— me dijo dejando de lado un momento su trabajo

—Ahm...— miré a otro lado

—Olvidala, ¿Recuerdas a la chica que te presente?... Lorraine— ambos la miraron en su mesa, luego George volvió a su trabajo —¿Qué estás escribiendo?

—Eh, historias, historias de ciencia ficción acerca de visitantes que vienen a la tierra desde otros planetas y...— miré asombrada su libro y cuaderno en el que anotaba, me encantaban las historias

—No lo creo, no sabía que hacías cosas creativas-- —

—¡Increíble!— aún miraba con admiración

—¿T-te... gustaría echarle un vistazo?— me miró George

—No, a ella no les gustaría— me jaló el cabello ligeramente, por lo que me quejé y de nuevo desvíe la mirada

—Cambiando de tema, ¿Recuerdas a Lorraine?, Le gustas mucho, ella me dijo que te dijera que la invitas al baile del encanto bajo el océano— me aguanté una risa, ¿Qué clase de nombre para un baile es ese?

—¿De veras?

—¡Sí!, Todo lo que tienes que hacer es ir a invitarla

—¿Qué?, ¿En este instante?, ¿Aquí en la cafetería?, ¿Que haré si dice que no?, Creo que no podría soportar esa clase de rechazo... Además, creo que prefiere ir con otro— volvió a escribir

—¿A-ah, sí?, ¿Con quién?— preguntó Marty algo desconcertado

—Biff— señaló en la dirección de Lorraine y nos encontramos con un acosador y sobrepasado Biff

—Vamos no seas orgullosa, se lo que quieres y sabes lo que quiero, tu sabes que quieres que te dé un beso

—¡Déjame en paz, tienes muy sucia la boca!— le dio una bofetada, pero eso solo alimento su ira —no soy esa clase de chica— Marty se iba a parar para defenderla pero yo tomé la iniciativa primero

—Tal vez lo eres y aún no lo sabes

—¡Quítame tus tentáculos de encima!—

—¡Ya la oíste, fantoche!— me puse enfrente de el con los brazos cruzados

Se levantó con una mirada amenazante primero y luego sonrió como hace un momento

—¿Qué tenemos aquí?, A una preciosura...— me iba a poner una mano en la cintura pero lo detuve

—Deja de molestar chicas y dedícate a estudiar, para eso estás en la escuela, deja a mi amiga en paz— me asqueo decir eso, no es mi amiga y no creo que lo llegué a ser en algún momento

—Parece que la princesa tiene garras...— rió de nuevo y se acercó amenazante a mí, yo iba retrocediendo pero tropecé con algo, que cliché

—Auch...— me sobe el trasero

—Veamos...— aún se acercaba

—¡No te le acerques!— de la nada salió Marty y lo empujó

—¿Qué quieres cara de mono?— le devolvió el empujón —¡Has estado pidiendo una buena golpiza!— ambos ya se tenían agarrados de las camisas y con los puños en posición, por suerte el profesor de hace un rato apareció a mi lado

—Je, je, je... Ya que eres nuevo, hoy, ¿Por qué no te comportas como nena y sales de aquí?— lo soltó y se fue

—¿Estás bien?— me dió la mano para ayudar a levantarme

—Si, gracias— miramos a la mesa en donde estábamos, George se han ido...

Después de las clases caminábamos por el barrio para seguir a George.

—Nunca vuelvas a tratar de pelear con un gorila como Biff— Marty me miró enojado

—Joven McFly... Si tú te parabas a defender a Lorraine ibas a empeorar las cosas— reí

El me miró un poco confundido al principio, pero luego alzó las cejas.

—Eres más inteligente de lo que pareces— dijo con un tono de burla y yo le di un golpe en el brazo

—Terminaste defendiendome a mi, mi héroe~ — me dejé caer a sus brazos los cuales sabía que iba a poner para evitar que me cayeran

—Agh... ¡Pensaran que somos pareja o algo así!— me miró asqueado y me levanté

—Entonces sería otra ventaja para ti, así Lorraine tendrá menos esperanzas de... Querer salir con su hijo— me burle

—Basta, eso suena raro, pero tal vez tengas razón— se encogió de hombros

—¡Mira allá está!— señalé la dirrección donde estaba George

—¡George!— gritó Marty y corrió tras el

—¿Por qué estás siguiéndome?— corrió igual para intentar evitarlo

—George... Escúchame, si no invitas a Lorraine al baile voy a lamentarlo el resto de mi vida

—Pero si voy al baile no podría ver mi programa favorito; ciencia ficción en el teatro

—Si pero George, Lorraine quiere ir contigo, dale una oportunidad

—Oye, aún no estoy listo para invitar a Lorraine al baile, y ni tú, ni nadie más en este-- —me puse a lado de Marty para integrarme en la conversación, me había quedado un poco atrás —Hola __________...

—Hola— saludé con la mano y luego desvíe la mirada

El me miró un momento, subiendo de espaldas las escaleras a su casa lentamente, cuando llegó a la puerta igualmente la abrió sin apartar la vista de mi y entró, yo solo lo miré con una ceja alzada.

Marty sacó la foto de sus hermanos del bolsillo de su chaqueta, a su hermano solo le quedaban sus pies.

—Se ve como una edición de mi tiempo, ¿Conoces Photoshop?— reí

—Creo que tengo una idea...— me miró con una sonrisa

Al día siguiente, después de la escuela, Marty y yo nos encontrabamos comprando un par de sodas, traían corcholata y yo no traía un destapador, y creo que el tampoco.

—¿A qué hora volviste anoche?— miraba la soda

—Ow, ¿celosa?— sonrió

—Cállate, solo quiero saber que no pones en peligro tu existencia, creo que eres crucial en mi existencia— le saqué la lengua

—Hablando de ello, ¿Qué hay sobre el Doctor, por qué le dijiste abuelo?— alzó una ceja

—Bueno... Por lo obvio, el es mi abuelo— tosí un poco nerviosa

—¿¡En serio!?— se sorprendió bastante

—Si, pero no sé que será de mi ahora que quedé aquí y estoy moviendo toda la línea del tiempo— reí nerviosa, pero algo triste

—La primera vez que vimos al doctor aquí... Lo viste muy feliz, ¿En tu tiempo--?

—Ya no vive, sí, murió cuando tenía 11 años— sonreí nostálgica

—Oh...— miró el suelo avergonzado —lo siento...

—No te preocupes, verlo tan enérgico y llenó de emoción y... Aunque suene raro, preocupado, me hace sentir muy feliz...

—Entonces... Si el doctor es tu abuelo, eso quiere decir que tuvo hijos

—Que inteligente Marty, te doy un diez— reí un poco

—¿Dónde están tus padres?— mi sonrisa despareció

Miré el suelo, con una expresión neutral.

—No lo sé...— me encogí de hombros

—¿Cómo que no lo sabes?— le di la espalda

—¡Marty, Marty!— cuando escuchamos una nueva voz ambos volteamos

—¡Hola, George!, No fuiste a la escuela, ¿Dónde estuviste todo el día?— contestó Marty enérgico

—Ah... Me quedé dormida, oye, necesito ayuda, quiero invitar a Lorraine, pero no sé cómo hacerlo

—De acuerdo, actúa con aplomo, ella está en la cafetería— intentaba abrir su soda, había olvida por completo las bebidas

George tomó su soda y la abrió en una especie de buzón que teníamos a lado.

Miré un momento el buzón por todos lados el imité su acción, finalmente había abierto la deliciosa soda.

Ambos comenzaron a caminar y yo les seguí el paso, caminaban muy rápido, yo trataba de hacerlo pero no quería derramar mi bebida.

—¿Qué te hizo cambiar de parecer?— pregunté

—A noche, Darth Vader vino del planeta Vulcano y me dijo que si no invitaba a Lorraine al baile, ¡Me derritiría el cerebro!— miré a Marty un poco confundida y enojada

—Ay, que bueno, ¿Qué te parece si mantenemos eso en secreto?— Marty le acomodó el cuello de la camisa

—Si, si, si...

—De, acuerdo— seguimos caminando hasta la cafetería —ahí esta ella, ahora entra e invitala

—Pero no se que decirle

—Dile lo que sea, George, lo que sea natural, lo primero que se te venga a la mente

—¡Nada me viene a la mente!

—Cielos, George, no se cómo vine al mundo— hice una seña para que se callara

—¿Qué?

—Nada, nada... Oye, dile que el destino, los ha unido, que ella es la chica más hermosa que has visto en el mundo, les gusta oír cosas así

—¿En serio?, Pues ya no— reí y tomé de mi soda

—Ja, ja... ¿Qué estás haciendo?

—Estoy escribiéndolo es muy impresionante

—Si, si, si, asegúrate de hacerlo bien— entramos en la cafetería y nosotros dos nos sentamos en la barra mientras el fue con Lorraine

Intenté distraerme con algo un rato, por costumbre llevé la mano a mi pierna para sacar mi celular, recuerdo que no tengo ni bolsillo y mucho menos celular, el abuelo me lo quitó y lo guardo con mi ropa.

—¡Oye McFly!— todos volteamos, había llegado búfalo mala cara

—Oh no...— dijo Marty desilusionado

—Te dije que no quería que vinieras aquí, te costará caro— comenzó a caminar a George —¿Cuánto dinero traes?

—Bueno, ¿Cuánto quieres Biff?

Puse el pie para que tropezara, no fue un problema con los tacones que traigo, duelen, pero son una buen arma.

Cuando se levantó, Marty se levantó rápidamente para darle cara.

—Ahora verás torpe, te voy a--

—Oye, oye, Biff, ¿Qué es eso?— el tonto volteó y recibió un puñetazo de Marty

—¡Corre!— le dije y eso procedió a hacer, yo me perdí entre la multitud

—Oh, Calvin Klein, ¡Es un sueño!— ay, no...

Mirábamos tras la ventana de la cafetería, estaba a lado de George, quién quedó en medio, Lorraine estaba del otro lado.

Todos se preguntaban con asombró sobre la patineta de Marty, la cual le había robado a un niño, creo que en este tiempo no existían las patinetas.

—¡Es un sueño increíble!— la situación con Lorraine empeoraba

Aunque Marty tiene complicaciones con la situación, se cómo termina todo, es una de las mejores anécdotas que me contaron, ellos terminarán llenos de fertilizante.

Solté una leve risa.

Cuando dicho evento sucedió todo el mundo salió, yo fuí rápidamente con Marty para volver con el Doctor.

—¿Qué tal?, Estuvo genial, ¿No?— me abrazó entusiasmado

—Hay un contexto que no estuvo nada genial, tenemos que irnos

—¿Contexto?, ¿Que contexto?— caminábamos perdiendonos de la vista de las personas

—Marty, ¿Recuerdas lo que te dije que iba a pasar si peleabas frente a Lorraine?

—Oh...

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Lo largó que se hace un capítulo de solo 8 minutos de película, lol

Shaushau!!!