Llegaron a la habitación y el mayor bajó al danés parándolo en el suelo.

Kanon:- Listo, ya estás. - El juez aún no reaccionaba. - Oye Radamantis, ¿quieres dejar de comportarte como un baboso? - Abrió la puerta y lo jaló hacia adentro. - Radamanthys... - Ya se estaba cansando. - ¡¡REACCIONA DE UNA VEZ!!! -
Radamanthys:- ¿Qué? Ya, ya estoy... -
Kanon:- Ajám... ya veo... - Estaba cruzada de brazos mirándolo de pies a cabeza, con una mirada pervertida.
Radamanthys:- ¿Qué ocurre? ¿Te gusta lo que ves? - Abrió sus brazos algo engreído.
Kanon:- Mmmmm... déjame pensarlo... - Se tomó el mentón mirando hacia arriba algún punto en el techo. - Por supuesto, pero... - comenzo a acercarse sensualmente al menor - Te ves mejor sin el Sapuri... - lo acorraló contra la puerta y comenzó a besarlo.

El rubio no se quedó atrás y la abrazó por la cintura. La temperatura comenzó a subir...
Las manos de Radamanthys se escabulleron por debajo de la ropa de Kanon haciendo que suelte un pequeño gemido... el interior del menor ardió en llamas con ese leve, pero excitante sonido.
Se separaron unos segundos para respirar en los que el menor se despojó de su Sapuri.

Radamanthys:- ¿Ahora estás más contenta? - Se acercó a ella.
Kanon:- Sí mi amor. - Le dijo en un tono suave y coqueto sonriendo divertida.
Radamanthys:- Mi Señor ha de quererme mucho, te dejó hermosa. -
Kanon:- Hasta que al fin me das una opinión... - Rodó los ojos divertida.
Radamanthys:- Sí, ¿por qué crees que no podía decir nada? - La tomó por la cintura elevando su rostro ya que había "perdido" como diez centímetros de altura (1,78mt). - Kanon... -
Kanon:- Me siento una enana... - Bajó la cabeza y el rubio rió levemente.
Radamanthys:- No eres una enana. - Levantó su rostro por segunda vez y la besó dulcemente. - Eres mucho más alta y hermosa que todas las amazonas al servicio de Athena. -

Géminis se sonrojó, le alegraba que su novio la viera de esa forma. Saltó y lo abrazó colgándose de su cuello y volviendo a besarlo. Rada sólo atinó a tomarla por la cintura con ambas manos para que no se cayera.

Kanon:- Eres el mejor, ¿sabes? - El menor se ruborizó un poco sonriéndole y viéndola con ternura.
Radamanthys:- Y pensar que ella será la madre de mis hijos... -

Sí, ese era el por qué...

* Flashback *

Un mes atrás...
Estaban en el café bebiendo té y a Kanon se le cruzó por la cabeza una duda existencial al ver a unos niños correr en el parque de enfrente.

Kanon:- Oye, Rafael... - El rubio hizo a un lado su bebida y le dedicó toda su atención. - ¿Tú crees que podamos tener niños? -
Radamanthys:- Bueno... yo... - Lo tomó desprevenido. - ... realmente no lo sé. Pero sería lindo. - Le sonrió cálidamente.
Kanon:- Pero yo no puedo quedar embarazado, ¿o sí? -
Radamanthys:- Técnicamente no... pero quizás si le pido a mi Señor Hades que te convierta en chica podría resultar. -
Kanon:- ¡¿Qué?! ¿Estás loco? ¿Yo? ¿Una chica? - El gemelo se exasperó.
Radamanthys:- ¿Tienes alguna otra brillante idea? - Géminis bajó su cabeza suspirando y negando con resignación.
Kanon:- Está bien, supongo que así podría funcionar. - Se tomaron de la mano y siguieron con su té.

*Fin Flashback *

La bajó con delicadeza, pero ella saltó nueva mente hacia él repitiendo pequeños saltitos algo emocionada. Lo presonó más contra sí e inconscientemente le hizo sentir su "pechonalidad" al rubio. - ¿...? - Abrió grandes los ojos sorprendido por esa acción y la abrazó tomándola desde las piernas y la cintura quedando sus pechos en su cara. La presionó contra sí hundiendo su rostro en sus opais aspirando su aroma.
Kanon:- Mmngh... Rada... ocurre algo? -
Radamanthys:- ... - No le prestó atención. Caminó casi a ciegas hasta su cama y, al querer apoyarla, cayó sobre ella.
Kanon:- ¡Wyvern! ¿Qué diablos te...? - No pudo emitir más palabras, el danés se adueñó de sus labios y no se resistió.

Lo abrazó por el cuello intensificando ese beso que a cada instante quemaba aún más. El menor pasó sus besos a su cuello mientras con su mano derecha acariciaba la pierna izquierda de la peliagua subiendo por su cadera y su cintura hasta llegar a sus pechos. Pasó suavemente uno de sus dedos por encima de su pezón izquierdo y dio un respingo en su lugar.

Radamanthys:- Mmm... parece que son más sensibles que antes... - Ronroneó en su oído mordiendo el lóbulo de su oreja izquierda. Apretó con suavidad el seno de Géminis haciendo que soltara un gemido ahogado.
Kanon:- Aaagh... - Todo eso era nuevo para él que ahora era ella. - Detente Radamanthys... - Se sentía extraña. - No entiendo qué le pasa a mi cuerpo... - El juez sonrió maliciosamente al verla toda sonrojada debajo de él.
Radamanthys:- Yo te enseñaré qué es lo que te ocurre... -

Se quitó su camisa dejando ver su majestuoso físico y se deshizo de la camiseta de entrenamiento que ahora se había convertido en algo similar a un vestido quitándole de su cinturón previamente.

Comenzó a chupar y succionar su pezón izquierdo a la vez que con su mano izquierda pellizcaba suavemente el derecho.

Con una sola mano y gran habilidad se quitó su cinturón, el pantalón y la ropa interior liberando su ansiosa erección. La geminiana sólo atinaba a tomarlo por sus hombros, pero la fuerza le fallaba, no podía coordinar sus pensamientos.

Kanon:- Rada...manthys... Radd... - Sintió la mano del danés bajar hasta su zona baja acariciándola de arriba a abajo con un solo dedo por encima de su ropa interior. - ¡Aaaah...! - Según tenía entendido, por lo que le había contado Radamanthys, las mujeres no tenían un "amigo" entre las piernas, pero... - Entonces, ¿por qué me excito tanto? - El menor siguió haciendo círculos con su dedo medio mirando las reacciones de la peliagua.
Radamanthys:- Esto te dolerá un poco así que relájate, ¿está bien? - Géminis asintió y él apartó un poco la prenda. Con mucha delicadeza se atrevió a meter un dedo en su intimidad. Ella reaccionó clavando sus uñas en la espalda del menor. - ¡Yigh...! - Cerró sus ojos con fuerza y apretó los dientes inspirando profundamente para poder aguantar ese dolor sin lastimarla. - Cálmate... -

Sintió que se relajó un poco y empezó a mover su dedo lentamente simulando su movimiento... su humedad se sentía jodidamente excitante y verla retorcerse de placer lo hacía sentir aún más deseoso. Le quitó sus bragas e introdujo un segundo dedo cerrando y abriendo ambos a la vez.
Jamás lo había hecho antes con una chica, pero había leído sobre ellas. No era tan estrecho como hacerlo con un hombre, así que buscó "algo" en la mesa de luz, se lo colocó y volvió con ella.

Kanon:- ¿Qué haces? ¿Qué es eso? -
Radamanthys:- Shh-shh-shh-shh-shhh... - Le dio un pequeño beso en los labios. - Lo voy a meter, pero aún no estamos listos para tener niños. ¿No crees? - Ella asintió con un rápido movimiento de cabeza. - ¿Puedo...? - Como todo un caballero, pidió permiso.
Kanon:- Sé gentil, por favor. Tengo un poco de miedo... -
Radamanthys:- Está bien, tú sólo relájate. -

Ella asintió y el juez retrocedió unos centímetros. Se posicionó entre sus piernas y frotando su pene en su entrada lo hizo entrar con lentitud para no parecer desesperado.
Géminis sintió dolor, pero al estar tan húmeda fue pasajero. Movió un poco sus caderas dándole a entender que ya podía proceder.
El rubio empezó su movimiento lento y no tan profundo observando cómo la cara de dolor de Kanon se transformaba en una de placer soltando algunos gemidos y jadeos que acompañaban el vaivén del danés. Poco a poco aceleró su ritmo, pero Géminis quería más.
Lo abrazó por las caderas con sus piernas y lo atrajo más hacia sí haciendo que le dé una fuerte y profunda embestida.

Kanon:- ¡AAAGH! - Eso preocupó al danés.
Radamanthys:- ¡Kanon! ¿estás bien? - Se apartó un poco de ella.
Kanon:- Sí o eso creo... pero deja... - Volvió a hacer que la embistiera rápida y profundamente. - ... de... - Otra vez lo mismo. - ... torturarme... con... ese... ritmo... tan... parsimonioso... - Y así entre cada palabra. El mismo roce le hizo perder el control.
Radamanthys:- A tus órdenes gatita... - Ronroneó a su oído y aceleró sus embestidas haciéndolas cada vez más bestiales y profundas.
Kanon:- ¡No te detengas, Wyvern! - Ella disfrutaba el momento, en su vida se había sentido así, pero todo tiene un final y ella casi estaba por llegar.
Radamanthys:- Ya no aguanto Kanon... -
Kanon:- Yo tampoco, ¡hazlo! ¡HAZLO! - Un par de embestidas más y...

Ambos:- ¡AAAAAAAAAH! -

Kanon clavó sus uñas en la espalda del menor y éste casi cae sobre ella, pero sólo empuñó las sábanas apretando los dientes. A ella todo se le puso blanco mientras sintió una corriente eléctrica recorrer todo su cuerpo.

Radamanthys:- Perdón por arruinar el bello momento, pero debemos ir con Pandora. Debes hablar con ella temas importantes. -
Kanon:- Hmph. - Asintió con su cabeza y esperó a que él saliera de su interior.

Sintió un escalofrío rarísimo que nunca antes había sentido. Se levantó lentamente y observando todo su cuerpo. Tomó sus opais apretándolos levemente y moviéndolos de arriba a abajo. Le parecían extraños... los levantaba y bajaba viendo que tenían un cierto peso. A Wyvern le causó gracia ver esa escena.

Radamanthys:- Oye, ya déjalos. Me estás tentando. - Ella lo ignoró.

Siguió mirándose a detalle, había visto a las amazonas de Athena, pero ninguna tenía mucho atractivo sexual o un físico muy interesante.
Giró frente al espejo de cuerpo completo que tenía Rada en su habitación y se vio en detalle... caderas anchas, lindo trasero, cintura "de avispa", Opais del tamaño justo, ni muy grandes, pero tampoco plana. Se puso de perfil y observó sus piernas, se veían fuertes y bien formadas, sus brazos igual. Luego volvió a ponerse de frente y se detuvo en ESE lugar... en donde "debería" estar su "amigo".

Kanon:- Qué cruel es la naturaleza... - Comenzó a vestirse. - Pero es un precio que hay que pagar. - Terminó con sus sandalias se acomodó el cabello y fue con su flamante novio. - Oye, Radamanthys... ¿para qué debemos ir con Pandora? - Lo abrazó por la cintura apoyando su cabeza en su pecho y él la abrazó por los hombros.
Radamanthys:- Es que ella tiene que darte algunos detallitos de los ciclos reproductivos de una mujer. -
Kanon:- ¿Que te qué? - No entendió ni media...
Radamanthys:- ¿Recuerdas el libro que estaba leyendo cuando viniste y me encontraste en la biblioteca? - Ella se tomó el mentón mirando hacia arriba en posición pensativa.
Kanon:- Déjame recordar... -

* Flashback imaginación de Kanon *

Llegó y lo abrazó por el cuello
Radamanthys:- Hola amor, ¿qué haces aquí? - No le quitaba la vista de encima al libro.
Kanon:- Lune dijo que estabas aquí y vine a buscarte. - Le dio un beso en la mejilla y observó el libro en las manos del danés. - Oye, ¿qué es eso? -

Radamanthys:- Es un libro de anatomía. - Siguió compenetrado en su lectura.
Kanon:- ¿Y por qué usas lentes? -
Radamanthys:- Porque sino luego me duelen los ojos.
Kanon:- Aaaaah... ya. -

* Fin Flashback imaginación de Kanon *

-¡Ah! Sí, ya recordé. ¿Qué ocurre con ese libro? -
Radamanthys:- Lo leía con fin de no llevarnos ninguna sorpresa cuando Hades te convierta en chica. -
Kanon:- Está bien, vamos. -

Salieron de la habitación y las miradas masculinas de lobos hambrientos no se hicieron esperar. Pues claaaro... nadie se dio por enterado de que Kanon ya no era "él" sino "ella".

¿...?:- Buenas tardes, señorita. ¿Qué hace una flor tan bella en medio del Inframundo? -
Radamanthys:- Si no quieres salir herido, aléjate Minos. - Y adivinen qué...
Minos:- Cuando quiera tu opinión, te la pediré. Ahora entrégame a la señorita. - El peliplata ignoró completamente al rubio.
Radamanthys:- Si tú lo dices... - Miró cómplicemente a la geminiana y ésta entendió perfectamente el mensaje. - Ve con él. - Le guiñó un ojo y ella procedió. Con un solo salto lo paralizó quedando apoyada en su rodilla.
Kanon:- Sabes Minos... - Se levantó. - ... tienes que aprender modales para tratar a una chica... - Se dio vuelta aún a sus espaldas.
Minos:- ¿Qué... es... esto...? - Intentaba moverse, pero no lo lograba.
Kanon:- Ah, no es nada... - Apuntó hacia él con su dedo. - ¡GOLPE DE ILUSIÓN! -

El Noruego vio una luz cegadora y luego vio que volvió a aparecer en el mismo pasillo, pero no vio ni al otro juez ni a la chica que lo acompañaba. Movió sus manos y brazos viendo que podía moverse con libertad, sin problema alguno. Sintió una risilla por detrás y al voltear vio a esa señorita correr hacia las escaleras.
Fue caminando tras ella y sintió una voz como un susurro en susurro en su cabeza...

"Eres muy lento, no puedes alcanzarme..."

Vio que ella le hacía burla sacándole la lengua y los humos se le subieron a la cabeza.

Minos:- ¡Ya verás! ¡Te voy a atrapar! - Comenzó a correr hacia ella, pero al llegar a las escaleras, ella ya había bajado. Oyó nuevamente esa voz...

"Eres muy lento, no puedes alcanzarme..."

Minos corrió escaleras abajo yendo tras ella y luego salió del castillo encontrándose con algo irreal... habían nubes en distintos tonos de amarillo, naranja, rosa y violeta en el suelo y un desfile de ositos de peluche que llevaban globos gigantes de elefantes rosados voladores.

Minos:- ¿Qué demonios es todo esto? - Se veía y se sentía demasiado real. - ¿Dónde estoy? - Volvió su mirada hacia atrás y se encontró con que el castillo de Hades se había convertido en un castillo de burbujas de distintos colores. - ¿Pero qué...? - Se vio a sí mismo y tenía puesto un traje de colores chillones y un sombrero de copa.

Regresando a la realidad real...
Kanon le estaba relatando a Wyvern todo lo que veía y oía el peliplata mientras él reía a carcajadas hasta las lágrimas de sólo imaginar la situación. Ellos no se movieron jamás y vieron al otro juez salir corriendo hacia las escaleras gritando tonterías.

Kanon:- Bien, ya podemos irnos. - Dijo muy sonriente.
Radamanthys:- Está bien. - La atrajo hacia él y le dio un pequeño beso en los labios.

Ambos caminaron hacia donde estaba Pandora, debía tener una charla de mujeres con Kanon.
Ya con ella le explicaba a la inexperta Géminis los detalles de los ciclos reproductivos femeninos mientras Wyvern esperaba afuera recargado en la pared del pasillo. Todo muy tranquilo hasta que la hermana de Hades le especificó lo que ocurría en esos cinco a siete fatídicos días...

Kanon:- ¡¡¡¿¿¿QUEEEEEÉ???!!! - El grito se escuchó en todo el Inframundo. - ¡¿CÓMO QUE VOY A...?! DE MI... ¡QUÉ HORROR! - Radamanthys entró como rayo a la habitación.
Radamanthys:- ¿Qué ocurre? ¿Te encuentras bien? -
Pandora:- Sí, ella estará bien, vámonos. - Se levantó y fue a cambiar su atuendo.
Radamanthys:- ¿Te dijo algo? -
Kanon:- Me dijo más de lo que quería saber... (cara de trauma psicológico) - Rada suspiró y sonrió.
Radamanthys:- Tranquila, todo saldrá bien. - La abrazó por los hombros y le dio un beso en la frente. - Yo estaré contigo. -

Pandora regresó con ellos y les dijo que tenían que hacer compras antes de que "ese día" llegue. Kanon estaba aterrada y Rada ya sabía de qué se trataba...

Próximamente...
Kanon irá por sus cosas al Santuario y sólo Zeus sabe qué pasará...

Bien, aquí está el nuevo capítulo, espero lo hayan disfrutado y pronto les traeré el siguiente.

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Nos vemos 😘

Love you! ❤