At the next day... 🙂🙃
(9:37 a.m. Inframundo)
Kanon se despertó muy tranquilamente y vio a Rada a su lado.
Kanon:- ¿Acaso me levanté tan temprano? - Se cuestionó al ver al rubio aún en la cama. - ¿Qué hora es? - Tomó el su teléfono para saber la hora y cuando la vio comenzó a sacudirlo. - ¡Maldición! ¡Radamanthys, despierta, ya es tarde! - Gritó despertando a Aiacos.
Aiacos:- Kanon y la madre que te parió... - Gruñó y se levantó para empezar su protocolo de aseo personal.
En la habitación de Minos tampoco había vida. Y no era para menos... Lune estaba haciendo el labor de los tres ya que al dar las 8:00 a.m. no había nadie en su puesto. Al dar las 10:00 a.m. se cansó de esperar y fue a las habitaciones. Tocó las tres puertas y lo que encontró sí estuvo bien raro...
Kanon:- ¿Lune? ¿Qué haces aquí? - Preguntó inocentemente abriendo la puerta después de haberse aseado.
Lune:- No está ninguno de los tres jueces en sus puestos de trabajo. Quiero saber ¿qué demonios ocurre con estos tres? - Dijo furioso.
Aiacos:- ¿Qué? ¿Cómo que ni Minos ni Rada están en sus puestos? - Salió ya con su Sapuri de su habitación creyendo que Minos no lo había despertado porque estaba enojado con él.
Kanon:- Rada no se despierta. - Dijo preocupada abriendo la puerta para que vean al danés durmiendo como tronco.
Aiacos:- Esto es extraño. - Frunció el ceño y abrió directamente la puerta del noruego. - Minos, ya es tarde, despierta. - Dijo elevando un poco su tono de voz, pero Equis... no respondió. - ¿Minos? - Fue hacia él y lo movió, pero tampoco reaccionó.
Kanon:- Esto es preocupante. - Miró con preocupación al compañero de su pareja.
Aiacos:- Minos, ¡MALDICIÓN! ¡LEVÁNTATE YA! - Gritó y logró despertarlo.
Minos:- ¡¿QUÉ?! ¿Qué? ¿Qué pasó? - Levantó la mitad de su cuerpo apoyando las manos sobre las sábanas.
Aiacos:- Son las 10:15 a.m. y aún sigues dormido, idiota. - Le explicó enojado. - Vístete y vamos a los juzgados. - Le ordenó y el mayor comenzó a vestirse.
Kanon:- Aiacos... - Llamó su atención y el nepalí fue hacia ella mirándola con molestia, pero la bronca no era con la hermosa peli agua y ella lo sabía. - ¿Crees que podrías despertar al tronco que está en mi cama? - Señaló hacia atrás y el azabache pasó su mirada a la puerta de Wyvern. - Es que no puedo gritar muy fuerte porque no puedo hacer fuerza por las niñas... - Lo miró con ojitos suplicantes acariciando su pancita.
Aiacos:- Hmph. - Asintió con un leve movimiento de cabeza y salió de la habitación del ariano para ir a la del escorpiano. - Muévete, Radamanthys. - Dijo con voz seria elevando su tono, pero no recibió respuesta, así que lo destapó y lo sacó de la cama, literalmente, de una patada. ¡RADAMANTHYS, PEDAZO DE IMBÉCIL, LEVÁNTATE YA, DE UNA PvT@ VEZ, SON LAS 10:25 a.m. Y HAY QUE IR A TRABAJAR! - Al fin reaccionó...
Radamanthys:- ¡YA! ¡Ya voy! Sí señor. - Se puso de pie aún sin saber ni dónde estaba parado.
Aiacos:- Vístete y a tu juzgado, inmediatamente. - Su tono militar y autoritario inspiraba realmente respeto. - Nos vemos, Kanon. Cuida que este imbécil no se duerma otra vez. - Volteó hacia Balrog y caminó hasta estar a la par suya. - Lune, ayúdala si es necesario. - Le ordenó y salió de la habitación.
Lune:- Sí señor. - Asintió con algo de miedo, Garuda no era así. - Vaya... ¿qué habrá ocurrido...? - Pensó ya que se lo veía realmente furioso.
Y así, fue a ver que Grifo se esté preparando y hasta que ambos estuvieron listos, no dejó de vigilarlos. Todos fueron al salón comedor y desayunaron en silencio. Aiacos fue el primero en levantarse y salir de ahí, estaba realmente furioso y no quería ni ver a sus compañeros. ¿Mencioné ya que estaba echando humo de la rabia? (Se pone en posición pensativa.)
El peli plata y el rubio cruzaron miradas relámpago y volvieron la vista a sus desayunos. El noruego sonrió haciendo poner un poco nervioso al danés que sólo bajó la cabeza. La pobre e inocente señorita Kanon les restó importancia y lo único que pensó fue...
Kanon:- Par de idiotas... - Creyendo que se sonreían entre sí como ella con Milo luego de ser descubiertos haciendo alguna c@g@d@...
Minos:- No puedo creer que nos hayamos dormido. - Hablaba vía cosmos volviendo a mirar su plato.
Radamanthys:- No es para menos... Anoche fue demasiado intenso, ¿No crees? - Respondió de la misma manera.
Minos:- Hmph. - Sonrió de costado ruborizándose un poco y miró hacia otro lado para que no lo note la geminiana. - ¿Crees que se dará cuenta? - Siguió bebiendo su café negro con un toque de Vodka.
Radamanthys:- No mientras actuemos normalmente. - Lo observó un poco y frunció el ceño. - Oye, ¿cómo le haces para poder beber eso todas las mañanas? - El peli plata rio un poco, el danés sólo tenía un té algo fuerte con bastante azúcar para despertarse.
Minos:- Estas cosas se llevan en la sangre, cejón. - Lo miró con una sonrisa retadora levantando su taza.
Kanon:- ¿Qué cosa? - Los miraba sin entender.
Radamanthys:- Lo que está bebiendo es café con Vodka. - Géminis menor lo miró sorprendida.
Kanon:- Wooooow... - Dijo sorprendida pero con un volumen bajo y no tan explosivamente. - Cuando esté apto, quiero probarlo. - Minos miró al rubio como buscando su aprobación.
Radamanthys:- Sí, claro. Sólo espera a que las niñas dejen de lactar. - Explicó.
Kanon:- ¿Qué es "lactar"? - Preguntó con curiosidad e inocencia.
Radamanthys:- Bueno es... - Se acercó a su oído y le susurró lo que era y ella se quedó con cara de trauma psicológico.
Minos:- No pongas esa cara, ¿acaso nunca lo hiciste? ¿Qué no te querían de baby? - El escorpiano se aguantó la risa, pero a Kan no le hizo mucha gracia su comentario poco acertado.
Kanon:- Nosotros llegamos al Santuario envueltos en sábanas blancas siendo bebés recién nacidos, nunca conocimos a nuestra madre, siquiera sabemos por foto cómo o quién era. - Dijo con un pequeño deje de tristeza.
Minos:- Yo... - Se sintió terrible. - Lo siento, discúlpame, por favor. - Dijo con su voz calma y luego de disculparse, terminó su café. - Debo ir a hacer mis deberes. - Se puso de pie y salió hacia su juzgado. - Te veo afuera. -
Radamanthys:- Yo igual. - Terminó su té. - Seguro. - Tomó las manos de Kanon y las besó. - Te veré luego en la habitación, ¿Ok? - Besó su frente y se puso de pie.
Kanon:- Está bien. - Sonrió como siempre y lo vio irse.
Una vez afuera, Minos lo esperaba y fueron juntos hacia los juzgados. Por su lado, ella terminó su chocolate y regresó a su habitación, pero antes... Tenía que ver por qué ninguno de los dos pudo levantarse.
Al llegar al pasillo donde estaban las habitaciones, se detuvo y miró hacia todos lados. Al ver que no había nadie, se metió en la habitación de Grifo.
Mientras tanto, en las afueras cercanas del castillo de Hades...
Minos:- Perdón por haber sido tan rudo con ella. - Se disculpaba mientras caminaban a un lugar (sí, un lugar, no precisamente a los juzgados como bien se les había dicho).
Radamanthys:- Descuida, él no es tan sensible con esos temas. Ya lo tiene asumido desde hace mucho tiempo. - Trataba de hacer que el noruego se relaje.
Minos:- Está bien. - Siguió caminando sin saber específicamente a dónde iban.
Y mientras ellos buscaban un lugar para estar más solos, Kanon miraba todo. Su sofá, su baño, su pijama, su cama... hasta que lo encontró. Haciendo uso de su gran vista halló... un cabello rubio del largo del cabello de Rada en la almohada derecha de la cama.
Kanon:- No... - Sus ojos comenzaban a cristalizarse. - Esto no puede ser cierto. - Entonces, se le ocurrió una brillantísima idea que corroboraría el hecho de que su supuesto prometido había estado en esa cama la noche anterior. - Espero que no... - Olfateó la almohada donde encontró ese cabello y efectivamente, ahí estaba... - Su perfume... ese es su perfume... - Estaba a punto de romper en llanto, pero primero había que ver la ropa del danés. - Debe ser... - Salió rápidamente de esa habitación, primeramente verificando que no haya nadie que la viera, y entró a la de Wyvern. - Maldito... - Cerró la puerta tras de sí y soltó esas lágrimas que contuvo anteriormente. ¿Dónde está su bata? - Miró hacia todos lados buscando con la vista la dichosa bata de seda de un color bordeaux similar al de su Sapuri. - Ahí está. - Su pancita pesaba así que caminó hacia ella y encontró exactamente lo que estaba buscando. - No puedo creerlo... - Un cabello blanco del largo del de Minos estaba en el hombro de la bata. - Radamanthys, ¿cómo pudiste...? - Olfateó nuevamente la prenda y efectivamente, estaba el aroma del perfume del ariano en ésta. - Esto es la guerra. - Dijo con rabia estrujando la prenda entre sus manos y respiró profundamente para calmar sus nervios y no volver a tener contracciones.
En algún recoveco lejos de la vista y la percepción de los demás espectros, se encontraban el rubio y el peli plata sin sus Sapuris teniendo un pequeño "round de cariño". Simplemente, estaban besándose apasionadamente mientras Minos abrazaba a Radamanthys por el cuello y éste metía sus manos bajo la ropa del noruego. Sus lenguas batallaban enérgicamente callando los leves gemidos del mayor. Hasta que algo se puso tenso.
Minos:- Debemos detenernos, no podemos aquí. - Acarició disimuladamente la entrepierna del escorpiano que gruñó ante su atrevimiento.
Radamanthys:- Luego no te quejes cuando me toque el desquite. - Sonrió y llamó a su Sapuri para poder salir de ahí. - Haz lo mismo, debemos irnos. - Salió de ese lugar y Grifo salió pocos segundos después ya con su Sapuri y todo.
Cada uno con su casco, lo que no permitía verle los ojos al mayor. Al llegar a los juzgados, Aiacos los miró con mala cara.
Aiacos:- ¿Estas son horas de llegar? - Preguntó seriamente y molesto.
Minos:- Nos entretuvimos hablando con Kanon. - Garuda no le creyó mucho, pero para no perder su inspiración, decidió ignorarlo.
Aiacos:- Vayan a lo suyo. - Les quitó la vista de encima y volvió a su juzgado.
Radamanthys:- Hmph. - Él se dio la media vuelta y fue a "ver a sus muertitos".
Pero dentro de la habitación del cejón...
Kanon:- Kanon a Aiacos, repito: Kanon a Aiacos. - estaba llamándolo vía cosmos.
Aiacos:- ¿Kanon? ¿Qué ocurre? -
Kanon:- Ven urgente a la habitación del idiota de Radamanthys. - Soltó un par de lágrimas y el azabache se preocupó.
Aiacos:- Ya voy. - Se aseguró de que nadie lo siguiera y fue hacia su encuentro con la peli agua. - ¿Qué demonios será...? - Pensó fugazmente y entró sin tocar. - ¿Qué es lo que ocurre? - Trató de hablar con calma y hasta algo de dulzura para no ser brusco.
Kanon:- Radamanthys y Minos... - Estaba de espalda a la puerta.
Aiacos:- ¿Cuál es el problema con ellos? - Ella sólo levantó la bata de su novio dándole a entender que se acerque y la tome. - ¿Por qué me das es...? - No pudo terminar de hablar.
Kanon:- Huélela. - Ordenó con la voz quebrada y él obedeció con algo de desconfianza, pero al olerla enseguida se dio cuenta de lo que ella quería decirle.
Aiacos:- Hijos de p*ta. - Dijo enojado y con rabia. - Vete al Santuario. - Dijo como una orden o, más bien, sugerencia. - Sabía que había algo raro en esos dos. - Sólo lo pensó para no hacerla sentir peor.
Kanon:- No quiero que las niñas se queden sin padre. Lo soportaré con mi hermano a mi lado. - El nepalí sonrió con malicia aún a espaldas de ella.
Aiacos:- Perfecto, ¿quieres ir luego a tomar un helado conmigo? - Preguntó tratando de levantarle el ánimo.
Kanon:- Aiacos... - Al fin volteó a verlo, estaba sorprendida por las palabras del menor, pero lejos de mandarlo a freír espárragos, aceptó. - Está bien, ¿a qué hora? - Pareció sincronizado, pero, inconscientemente, ambos lo dijeron a la vez.
Ambos:- A las 6:00 p.m. - Rieron y Aiacos comenzó a caminar hacia la puerta.
Aiacos:- Recuerda actuar como que no ocurre nada. Lo último que queremos es que sospechen de que sabemos su "secretito". - Rodó los ojos.
Kanon:- Puedo con eso. - Sonrió. - Gracias por venir. - Se le escapó una pequeña lágrima. - Nos vemos luego. - Saludó con la mano.
Aiacos:- Sí. - También le sonrió y antes de salir, abrió levemente la puerta para ver que no haya nadie en el pasillo. - No hay moros en la costa... - Dijo lo suficientemente audible como para que ella lo oiga y ría por su ocurrencia.
Kanon:- Adiós, desastroso. - Dijo divertida y él la miró raro. - Así les decimos a los miembros de nuestro grupo. Estamos Milo, Aioria, Death Mask y yo. -
Aiacos:- Eso me agrada. - Sonrió de costado y salió hacia su juzgado.
El día fue pesado, pero al finalizar, minutos cerca de las 4:00 p.m., todos se juntaron en el salón de descanso. Kanon y Aiacos no se hablaron, como de costumbre. Minos y Radamanthys siquiera se miraban tratando de no hacer evidente lo suyo. Había un peculiar silencio inquietante.
Kanon:- Di algo aunque sea para que estos dos se relajen. - Le dijo vía cosmos haciéndose la tonta y bebiendo su té.
Aiacos:- Hmph. - Respondió de la misma manera y pensó un poco lo que diría. - Ya digan algo, hasta Yomotsu tiene más vida que este salón. - Se quejó tratando de actuar lo mejor posible.
Minos:- Yo aún sigo enfadado contigo, idiota. - Siquiera lo miró.
Aiacos:- Está bien, saldré luego. - Informó.
Minos:- ¿A dónde irás? - Preguntó con tranquilidad, pero por dentro se lo comían los nervios.
Aiacos:- A no te importa con un caballero de Atena. - Fue todo lo que dijo.
Radamanthys:- Déjalo, de seguro saldrá con Milo. - La geminiana y el canceriano sonrieron internamente.
Kanon:- Envíale mis saludos. Yo iré a ver a Dita. - Cerró sus ojos.
Radamanthys:- ¿Cómo que a Afrodita? - Se quejó el danés.
Kanon:- Oye, ¿por qué te quejas tanto? - Lo miró desaprobatoriamente.
Radamanthys:- Iré contigo. -
Kanon:- No, gracias. Podré sola. Y tú tienes OTROS asuntos que atender. - Lo evitó y salió hacia la habitación del escorpiano para arreglarse una vez que terminó su té.
Aiacos:- Y a esa, ¿qué le picó? - Preguntó como siempre.
Minos:- Probablemente está cansada de estar aquí. - Cruzaron miradas relámpago con el rubio.
Radamanthys:- Está bien, yo dormiré un poco. - Anunció y terminó su té para irse a su habitación.
Minos:- Yo aún no sé qué haré, pero tal vez le siga el ejemplo al cejón y duerma un poco. - Todos se levantaron y pusieron en práctica sus respectivos planes excepto el noruego que, contrario a lo dicho, comenzó a prepararse para ir junto a Camus.
To be continue...
Y hasta aquí el capítulo de esta noche 😊 Muchísimas gracias por leer y votar, en serio me dan más ganas de escribir.
Voten, comenten y compartan 😄 Yo comenzaré mañana con el siguiente (7 a 8hs aproximadamente).
Nos 'tamos leyendo 😉
Love you! ❤️
Bye! 😘
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