Una semana después. En un auto rentado.

Harumin– ¡Estoy emocionada!

Yuzu niña– ¡yo también! ¡Por fin podré jugar con todos esos juguetes que Aihara tiene en su cuarto.

—¡si!

Yuzu– ¿a ti solo te interesan los juguetes de Aihara no?

Yuzu niña– ¡claro que no! También quiero jugar con Aihara! Pero jugar con ella y su juguetes me alegría mucho más! Y a ella también. Estoy segura.

Yuzu– entiendo, bien, ya estamos cerca. Jugarán el tiempo que ellos les den ¿entendido?

—si.

Yuzu niña– ¿eh? ¿Por qué no podemos jugar hasta tarde?

Yuzu– pues, porque el abuelo de Aihara es quien dice cuanto tiempo ella puede jugar con sus invitados. La semana pasada fueron dos horas. ¿No?

—si.

Yuzu niña– yo quería seguir jugando... - baja la cabeza en señal de tristeza.

Yuzu– si. Lo se. Pero así son las cosas. Además, es la mejor forma de seguir teniendo la oportunidad de jugar con Aihara cada semana.

Yuzu niña– si... Pero quisiera poder jugar más tiempo con ella...

Yuzu– entiendo bien lo que sientes, pero, como dije antes, así son las cosas. No es como que puedas transferirte a su escuela y ya. Eso sería genial, pero eso implicaría hacer muchas cosas y tener buenas notas y...

Yuzu niña– [estudiar en su misma escuela ¿eh?] ¡eso es!

Yuzu– ¿eh? ¿Qué cosa es?

Yuzu niña– ¡Es un secreto! ¿Lo harías conmigo Harumin?

—¿eh? Claro ¿qué es?

Yuzu niña– ah, eso es.. {¿por qué no pedimos a nuestro padres que nos transfieran a la misma escuela en la que estudia Aihara? ¿Sería genial no?}

—bueno, no lo se, pero les preguntaré. ¿Si?

Yuzu niña– ¡si! Gracias Harumin! -la abraza.

—... -sonrisa.

Yuzu– aaah, qué lindo. Jeje.oigan ¿Puedo saber cuál es el secreto?

Yuzu niña– ¡No! ¡Ya te dije qué es un secreto!

—Yuzucchi...

Yuzu– está bien, no preguntaré más. Muy bien ya estamos aquí.

—gracias por traernos Yumicchi. - hace una reverencia.

Yuzu– no es nada. Diviértanse. ¿Si?

—claro!

Yuzu niña– Hump. -se baja del auto sin decir nada.

Yuzu– sigo sin caerle bien del todo. ¿Verdad? Jeje.

—No es eso, es que para Yuzucchi...

Yuzu niña– Harumin apurate!

—ya voy! Nos vemos.

Yuzu– ¡oye espera! ¿Qué es lo que me ibas a decir?

—ah, ya no me acuerdo. Hehe.

Yuzu– ¡eeeeh!

—jeje. Nos vemos más tarde. -corre hacia donde está yuzu.

Yuzu niña– ¿no te pregunto nada?

—no.

Yuzu niña– ¿Y no le dijiste nada?

—nop, tampoco, jeje. [si yumicchi supiera que a Yuzucchi Le agrada muchísimo, ¿no sé qué haría? Pero no lo demuestra. Porque sí lo hace. Eso sería darse por vencida] jeje.

Yuzu niña– ¿eh? -frente de la puerta principal.

—Nada. Jeje.

Unos minutos después.

Ama de llaves– bien, esperen por favor en lo que aviso a la señorita.

Yuzu y Harumin– claro!!

—bien. -sube hacia la habitación de Mei. Señorita. Ya han venido. ¿Las hago pasar?

Mei– hazlo por favor.

—enseguida señorita. [vaya cambio tan rápido qué ha tenido desde que La señorita Taniguchi trajo a esa niña. Con ella. La señorita se volvió más comunicativa y más agradable. Ahora pareciera que en verdad le divierte jugar con ellas. Bueno, eso me alegra. Me parece bien que sea así. Y espero que así siga siendo La señora era quien más la hacía sonreír y divertirse con ella. Pero ahora ya no está y eso afecto mucho al señor. Pero sobre todo a la señorita. Pero ahora. Creo que no tengo nada de que preocuparme...] - sacando una pequeña foto de la mamá de Mei. [Y se que usted tampoco] Jeje. Bien! Pueden subir. El tiempo que se les concedió fue de tres horas apartir de este momento. Espero que se diviertan! - reverencia.

Yuzu y Harumin– si! -hacen también una reverencia.

Cinco minutos después.

Yuzu niña y Harumin– bien, aquí vamos... -tocan a la puerta.

Yuzu niña– bueno...

Mei– ¡llegaron! -abriendo la puerta y corriendo a abrazarlas.

Yuzu niña y Harumin– si!!

Mei– bien, entren, entren. -toma la mano de Yuzu y la lleva hacia adentro. ¡No hay tiempo que perder!

— si! ¿Y a que jugamos?

Mei– uuum, no lo se,

Harumin– yo tampoco se. Hmmm.

—Hmmm... Ya se!

Mei y Harumin– ¿qué?

—por que no jugamos....

Mientras tanto en la sala.

Ama de llaves– las cosas parecen ser mejor cada vez más.

Sirvienta 1– si. La señorita se veía más emocionada porque llegará este día.

Sirvienta 2– si. Ella se veía mucho más alegre que al principio. Bueno, creo que volvió a ser la misma de antes.

—tienes razón, ella parece que está volviendo a ser la de antes. Aunque realmente espero que no sea por poco tiempo...

Ding Dong, Ding Dong.

Sirvienta 1– ¿quién será?

Ama de llaves– no lo se.  Ve a ver. Quizás estén buscando al señor.

—enseguida!

Ama de llaves– tu lleva estos dulces con la señorita.

Sirvienta 2–  ¡si! ¡Ahora mismo!

Ama de llaves– ¿quién es?

—bueno, es... La señorita momokino.

Ama de llaves– ¿la señorita momokino? ¿Qué hará aquí? Todavía no es el día que se supone vendría. ¿O si?

—¿eh? Ahhh, bueno... Yo creo que si. Porque se ve que viene preparada para la ocasión.

Ama de llaves– entiendo, dejala entrar y ve a recibirla y llevala con la señorita.

—¡si!

Ama de llaves– no, mejor traela hacia aquí y dile que espere, mientras yo iré a avisar a la señorita.

—si!

Unos minutos después.

Sirvienta 1– espere un momento por favor.

Himeko– ¿por qué tengo que esperar?

—Ahhh, es que...

Ama de llaves– la señorita esta terminando de vestirse. Bienvenida señorita Momokino. -hace una reverencia.

Himeko– oh, entiendo, bien, esperaré.

Ama de llaves– entendido, veo que ya trae todo lo necesario para el juego de hoy.

Himeko– así es, traje lo que más le gusta a Mei Mei. Jeje. Oiga, ¿no se está demorando mucho?

Ama de llaves– ¿eso cree? No lo creo, apenas van unos cinco minutos. Jeje.

Himeko– pues no, ella siempre aparece rápido. Iré a ver.

—¿eh? ¿No debería esperar un poco más señorita?

Himeko– no, creo que sea necesario esperar más. Así que, muevanse!

Ama de llaves– pero señorita Momokino, la señorita todavía no está lista aún.

Himeko– no importa, quizás necesite mi ayuda, ya que ustedes no parecen serlo de mucho. Hump...

Ama de llaves– Aaaah, Haaa.... siempre se pone así cuando es sobre la señorita el tema del que se habla.

—si. Solo espero que no haya ningún problema por las dos visitas que están con ella.

Ama de llaves– tienes razón, aunque por eso mismo intente detenerla. Espero que Yuki haya hecho lo propio.

—si...

En la habitación de Mei

Yuki (la sirvienta 2) – ah! Porfavor señoritas, ya cálmense. -con Harumin Mei y Yuzu encima de ella.

Yuzu niña– ¡no! Dijiste que ibas a jugar y ahora házlo...!

—...[¿por qué me dejo convencer tan rápido? ¡Genial! Mejor hubiera sido maestra de kinder. Con lo que me gustan los niños. "Pero no" Yo quería seguir el legado familiar. Y convertirme parte de la servidumbre de esta casa! ¿Bien pensado no Yuki? Haaa... Bueno, ya no importa. ¡Ah! ¡todavía no le he dicho nada a la señorita de la visita de la señorita Momokino! Bueno, después de este juego se lo diré...] -sonrisa mientras tiene a Harumin encima.

Yuzu niña– bien! Me ayudaste a vencer al monstruo, pero es él momento de terminar nuestra pelea.

Mei– si!

Yuzu niña– ahora si Mei Chan, tu... Perderá! - se lanza encima de Mei.

Mei– ¡ni lo sueñes! ¡Aaaah! -ella hace lo mismo.

Himeko– Mei Mei! Ya vine... -abriendo la puerta..

Yuzu niña– me rindo! Me rindo! - Mei estaba encima de ella.

Himeko– ¡¿Eeeeeeeh?!

Bueno, hasta aquí llego el capitulo 8 espero que sea de su agrado e interés, si es así den clic a la ⭐ y comentar que les pareció, y si no. Gracias por la atención. Sin más que decir, hasta luego, hasta el siguiente capitulo, cambio y fuera.