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Cap. 24

La conversación con Jimin se extendió más de lo esperado, dirigió sus manos a su rostro en señal de frustración.

Su mejor amigo no dejaba de hacerle preguntas relacionadas a Jungkook y eso solo conseguía incomodarlo más de lo que ya estaba.

La parte más difícil ya había pasado, había reconocido tener sentimientos por el menor, lo cual era un gran paso para él, no podía negar lo asustado que se sentía al pensar en eso.

Sabía que Jungkook correspondía a sus sentimientos, pero eso no era lo que lo estaba atormentando, sino, sentía un pánico horrible que lo invadía ante la posibilidad de ser lastimado nuevamente.

Él ya había entregado todo de si mismo por una persona que no lo valía, no quería cometer el mismo error dos veces.

Sufrió y a paso muy mal, creyendo que él estaba mal y no merecía el amor de nadie, una sonrisa sarcástica abandonó sus labios al recordar un pequeño detalle.

Había dejado de tener tales pensamientos gracias a la conversación que había tenido con el menor hace unos días.

Se quiso golpear mentalmente ¿en serio pensaba que la persona que pudo sacarlo de su sufrimiento podía hacerle tal daño? en ese momento sus pensamientos tomaron otro rumbo recordando el rostro de su amado, la expresión que puso al ser rechazado, las lagrimas cayendo en gran cantidad por sus mejillas, su pecho dolió por la culpa, Jungkook siempre trató de hacerlo sentir bien y él... solo le provocaba tristeza.

Una mano moviendose constantemente frente a su rostro lo trajo de vuelta a la realidad, parpadeó repetidas veces antes de dirigir su mirada a donde estaba su amigo.

- ¿Qué ocurre? - su voz estaba más ronca de lo habitual por haber estado llorando, su amigo lo miró con una mueca que no pudo describir.

- Te estaba hablando pero parece que no me escuchaste - quiso decirle que no, que se equivocaba, que había escuchado cada maldita palabra que le había dicho, pero no podía y sabía que si mentía sería descubierto.

- Lo siento - fue todo lo que se limitó a decir, sintió como Jimin tomaba una onda respiración antes de ubicarse frente a él, en la posición que estaban, él sentado en el sofá de la sala mientras Jimin estaba parado frente a él, se sentía intimidado, la mirada penetrante de su mejor amigo le causaba cada vez más nerviosismo.

- Esta bien, solo te estaba haciendo una pregunta ¿Qué harás ahora? - eso mismo era lo que se preguntaba él, no sabía que hacer, ¿debería guardarlo como un secreto? eso no era una opción, si no se lo decía a Jungkook este seguiría con sus muestras de afecto publicas con su noviesito y eso no le agradaba para nada, entonces ¿debería decírselo? aunque era consciente de los sentimientos que el menor tenía por él siempre estaba la posibilidad del rechazo, él era un gran ejemplo de eso, lo rechazó a pesar de estar demasiado colado por él.

Pero... él que no arriesga no gana ¿no?

- Le confesaré mis sentimientos a Jungkook - una gran sonrisa se dibujo en su rostro, siendo rápidamente contagiada a su amigo.

- Esta bien, ¿cuando lo harás? - en un simple movimiento se levantó de donde estaba cómodamente sentado.

- Lo más pronto posible, si lo sigo pensando me arrepentiré y no quiero eso - ahora si Jimin largó una carcajada mientras tomaba sus cosas de donde las había dejado.

- Pues, ahora me voy a casa, si quieres puedes acompañarme, ya es bastante tarde y tu padre no parece tener intenciones de llegar, luego podrías ir a dormir a casa de tu abuela, se lo mucho que te agrada pasar tiempo con ella - la idea sonó lo suficientemente bien para él que sin dudarlo tomó su celular y envió un mensaje a su padre para avisarle donde pasaría la noche.

Cuando recibió la respuesta afirmativa por parte de este corrió a su dormitorio para llevar todo lo que necesitaría, no tenía muchas de sus pertenencias en casa de su abuela, las que estaban allí eran casi todas viejas, de cuando era más pequeño.

- Estoy listo Jiminie, vamos - entre saltos emocionados y pequeñas charlas emprendieron camino hacia el hogar del mayor, su mente tratando de organizar sus palabras de la manera correcta para decirle a Jungkook lo que sentía por él.

Aquella bella sonrisa que llevaba no se fue de sus labios en ningún momento, estaba feliz, ansioso y emocionado, ya casi no podía recordar la ultima vez que se había sentido de esa manera.

Los pasos de ambos se detuvieron al llegar a la casa donde aquellos hermanos vivían, Jimin sacó sus llaves y abrió la puerta, grande fue su sorpresa al notar que no había nadie allí, el lugar estaba sumido en un absoluto silencio.

- Al parecer Jungkook no esta aquí - Taehyung habló más para él mismo que para su acompañante, pero este de igual manera lo escuchó.

- oh ahora que lo recuerdo, Kookie salió de la universidad con Yugyeom, tal vez aun esté con él - sus palabras no contenían malicia alguna, pero se sintió terriblemente culpable al ver como su mejor amigo bajaba la mirada, si, esto debía estar siendo duro para él.

- emm... creo que me iré a casa de mi abuela, no quiero que se duerma entes de que yo llegue, ya sabes, luego pensará que soy un ladrón y me perseguirá con la escoba - la sola mención de este echo les sacó unas cuantas risas a ambos, porque parecía chiste, pero era anecdota.

- Esta bien, ve con cuidado - se despidieron con una pequeña reverencia y Tae se encaminó a la casa de su abuela esta vez.

A penas cruzó aquella puerta de madera un rico olor llegó a su nariz, su abuela había echo galletas, sus pasos fueron ligeros, sin querer hacer ningún ruido, quería sorprender a la anciana.

Sus planes se vieron interrumpidos al escuchar risas provenientes de la cocina ¿su abuela tenía visitas? su curiosidad pudo más que su cordura y entró a aquel cuarto de la casa.

- Abuela ¿puedo quedarme esta no... Jungkook? - sus ojos se abrieron mucho a la vez que una fiesta quería desatarse en su interior, no sabía el motivo del por qué Jungkook estaba allí, pero, si estaba con su abuela significaba que no estaba con Yugyeom.

- Gracias por la comida, pero ya se hace tarde y omma podría preocuparse - el más pequeño de ese lugar estaba muy nervioso, no sabía que hacer y su primer instinto fue escapar.

- Bueno, es una lastima que no hayas llegado antes Taehyunie, estuvimos toda la tarde conversando - otro punto más para la alegría de Tae, su sonrisa decayó un momento al ver como el menor pasaba por su lado sin siquiera mirarlo.

No perdió el tiempo y sin darle explicaciones a su abuela lo siguió hasta la salida del lugar, una vez los dos estuvieron fuera se apresuró a tomar el brazo contrario.

- ¿Qué quieres Taehyung? - el tono de JK era firme pero estaba temblando como una gelatina en su interior.

- Quiero que hablemos, por favor, tengo que decirte algo muy importante - el menor retiró su brazo con brusquedad mientras lo encaraba.

- No tengo nada que hablar contigo Kim, lo dejaste todo muy en claro el otro día y si lo que quieres es preguntarme como estoy con eso dejame decirte que estoy muy bien, aun no se como lo haré, pero te voy a superar, no hay nada que quiera más en este momento que desaparecer los sentimientos que tengo por ti, gracias por abrir mis ojos y dejarme ver quien eras en realidad - sin darle tiempo al contrario a que procesara corrió hasta su casa, preguntándose el por qué de los ojos irritados del mayor.

A penas entro en su hogar apoyó su espalda en esta, dejándose caer hasta quedar sentado en el piso, el portazo que dio no pasó inadvertido para su hermano e hizo acto de presencia, trayendo con él un montón de preguntas.

- ¿Donde estabas?¿Qué hacías a esta hora fuera? - quiso callarlo pero sus latidos desenfrenados no se lo permitían.

- Estaba en casa de la abuela Kim - ante la sola mención de eso los ojos de Jimin se iluminaron y comenzó a dar saltos en su lugar, malinterpretado la postura de su hermano y lo agitado que se veía.

- Oh por Dios, dime como fue ¿Taehyung te lo dijo?¿Qué le respondiste?¿Ya son novios? oh espera eso no es posible porque tu ya tienes a Yugyeom, ya pensaste que hacer con... - sus palabras fueron interrumpidas por Jungkook que lo miraba con cierta duda e sus ojos.

- ¿De que hablas? - sus palabras tenían un tono de sincera curiosidad pero obviamente su hermano no lo tomó así, sino como una muestra de timidez.

- No te hagas el bobo, quiero saber como Tae te dijo lo que sentía por ti, osea fue algo como "Jungkookie, te amo se mi novio" o fue más como "No puedo vivir otro día sin estar a tu lado, me harías el chico más feliz del mundo si me permitieras estar contigo" yo me lo imagino más como la primera, Tae suele ser más directo - Jungkook seguía sin comprender lo que salía de la boca de su hermano, hasta que de pronto lo hizo, Taehyung quería decirle algo y él no lo dejo... él quería decirle que le gustaba, que era correspondido, que también lo amaba, y él como un total estúpido no se lo permitió.

- ¿Taehyung se iba a quedar en casa de la abuela esta noche? - Jimin asintió sin entender el por qué de aquella pregunta.

Sin esperar que su hermano le dijera algo más abrió la puerta y corrió nuevamente hacia ese lugar que había dejado hace a penas unos minutos.

Tocó la puerta repetidas veces sin importarle nada, la adrenalina corría por sus venas, nada le preocupaba, solo el echo de ver a Tae.

Como si escuchara sus pensamientos la puerta se abrió mostrando a un Taehyung con los ojos algo rojos, ni le dio tiempo de nada antes de lanzarse sobre él y presionar sus labios sobre los contrarios.

Taehyung estaba sorprendido a la vez que feliz, no dudo ni un segundo en corresponder el desesperado beso que su menor le estaba dando, solo se separaron por falta de aire, quedando aun así muy juntos, apoyado sus frentes juntas, estaban tiernamente abrazados, la escena era simplemente perfecta, sin nadie que se atreviera a perturbarla, o bueno, casi nadie.

-¡Lo sabía!¡Se aman!¡Ahora se casaran y adoptaran 30 hijos! - los gritos emocionados de la anciana resonaron por todo el lugar poniendo a ambos menores muy nerviosos, provocando un intenso sonrojo en ambos. 

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