Primero que nada pido disculpas por cualquier error ortográfico

Personajes hablando: -Hola-
Personajes pensando: -(Hola)-

Nota: Sé que a algunos les puede aburrir pero los primero 5 capítulos más o menos son única y exclusivamente a la construcción de Izuku como protagonista, ya que evidente es diferente al Izuku del manga original. La acción como tal empieza en el capítulo 6 que es el examen a Yūei...así que para aquellos que les aburra que me gaste tantos capítulos de construcción, es libre de saltarse los capítulos. Cada capítulo es como de 2k a 4k palabras aproximadamente. En ese sentido el inicio es un poco lento pero luego se pone interesante. Saludos

Izuku Midoriya, un chico de 6 años, peliverde, 4 pecas en cada mejilla y para su edad su estatura era promedio. Una descripción si se quiere, peculiar...En cuanto a su personalidad, es un chico alegre y juguetón aunque también es perspicaz, vivo, inteligente y para algunos niños era raro

El peliverde se levantó de su cama, eran altas horas de la noche aproximadamente 11 p.m. el pequeño niño no podía dormir, últimamente tenía sueños en los que peleaba con otras personas, cuando se despertaba no podía recordar casi nada

Salió de su pequeño cuarto y caminó por el pasillo mientras tenía en su mano un peluche de All Might, pasó por los cuartos de sus hermano, Hizashi e Izumi. El chico se detuvo en la puerta que decía: "Kaito e Inko". Cuando lo leyó dió un paso atrás meditando si debía o no hacer esto, probablemente terminaría como siempre, con una golpiza de su madre diciendo que era su culpa que su padre, Kaito, muriera

Alcanzó la manija con las mano libre y abrió la puerta, para el miedo del niño la puerta se abrió demasiado lento e hizo un ruido desagradable al abrirse. Pensó en volver a su cuarto pero no quería volver a ese lugar, las pesadillas solo ocurrían allí y sentía que siempre un par de ojos lo observaban

Inko abrió los ojos, estaban rojos, las pupilas dilatadas, su rostro se veía sucio, a su lado una botella de alcohol vacía, la peliverde también tenía sobrepeso, en general un aspecto de un bebedor

Se levantó y su vista se posó y lo primero que vio, que fue a Izuku en la puerta, la mujer entrecerró los ojos y se levantó tambaleándose levemente y caminó hacia Izuku quien solo se congeló al escuchar la voz de la mujer

-¿Qué haces aquí pequeño mocoso?- preguntó fríamente Inko

Izuku se giró y entre tartamudeos respondió
-N...No podía dormir...Mamá- intentó disimular su miedo el niño

Inko entrecerró los ojos y de un segundo a otro estos se llenaron de ira

-Te lo había advertido pequeño mocoso, que no me volvieras molestar y ya me harté de tu presencia en esta casa, ¿por qué no puedes ser como Izumi o Hizashi? Tu hermana si vale mi tiempo al igual que tu hermano...- en este punto Izuku estaba temblando e Inko hizo una pausa -pero ya voy a encargarme de eso- sentenció para proceder a tomar a Izuku del cuello de la pijama y arrastrarlo hasta la puerta

-¡¿MAMÁ?! ¡¿QUÉ HACES?!- Gritó el niño en pánico. Inko solo lo miro fríamente y respondió

-No soy tu madre- eso fue lo último que dijo ante de abrir la puerta y lanzar a Izuku fuera de la casa

El chico tenía los ojos abiertos como platos, estaba horrorizado, su propia madre lo había echado de la casa, lo había dejado a su suerte

-(No puede ser...ella realmente me echó)- pensó aún en shock el niño

No fue hasta que un auto pasó y lo mojó con un poco de agua en el suelo que el chico salió de sus pensamientos y se levantó del suelo

El chico solo empezó a caminar por las calles sin tener idea de dónde estaba o dónde debía ir. Para la mente joven del niño parecía que habían sido años desde que salió de su casa, las piernas le temblaban, sus brazos pesaban, tenía frío, no podía recordar cuando soltó su peluche de All Might solo recordó que simplemente ya no tenía fuerza para cargarlo. Los párpados del niño empezaron a cerrar lentamente mientras caminaba hacia una caja en un callejón, el chico simplemente se echó sobre ella y cayó dormido.

Una mujer rubia de ojos azules caminaba por las calles rumbo a su casa luego de su trabajo como cirujana

Estaba vestida con una ropa que para algunos era extraña, tenía una blusa de color blanco con estampados de flores, una falda azul hasta las rodillas y unos tacones negros

La mujer aparentemente sin ninguna preocupación caminó por las calles apenas iluminadas por unas pocas farolas, cruzó en una calle y por pura casualidad miró a su izquierda y vió a un niño de no más de 6 años tirados sobre unas cajas de basura. Rápidamente la rubia corrió hacia el niño, tocó el cuello, aún tenía pulso y sin importarle la suciedad lo tomó entre sus brazos y empezó a caminar rumbo a su casa

Pov ?

No puedo creer como alguien sería capaz de dejar a un simple niño en semejante estado, diablos incluso su ropa se ve vieja, como si no tuviera otra, al parecer no lleva nada más consigo, esta frío...al llegar debo llevarlo rápidamente a una tina para subir su temperatura, parece tener algunos moretones en los brazos, sea como sea voy a ayudarlo, creo que es lo que ella hubiese hecho

Fin pov

Mañana siguiente

Izuku abrió sus ojos lentamente, la claridad entraba por la ventana, el chico sin darse cuenta aún de donde estaba se desarropó, se estiró

-Ma...- iba a empezar a hablar el pecoso pero una avalancha de recuerdos atacó su mente

El pequeño niño tomó su cabeza entre sus manos y empezó a entrar en pánico ¿Donde estaba? ¿Que hacía allí? ¿Como había llegado ahí? Y ¿Quién lo había llevado a ese lugar? Muchas preguntas llenaron la cabeza del niño cuando...

-Parece que despertaste -habló la mujer rubia que lo salvó aunque eso el niño no lo sabía

Izuku soltó su cabeza y lentamente miró hacia la puerta, al ver a la mujer se asustó un poco pensando en que podría hacerle, sabía que no tendría ninguna posibilidad de escapar...aunque... si quisiera dañarlo ya lo habría hecho ¿no?

La rubia miraba al niño atentamente buscando alguna señal de lo que podría estar pensando, pudo ver miedo angustia y al final un poco de alivio en sus ojos

La mujer caminó hacia la cama y no fue hasta eso momento donde Izuku vió que tenía una bandeja de comida en sus manos

-Entiendo si no quieres hablar, pero deberías comer un poco- habló suavemente la mujer mientras dejaba la bandeja en una pequeña mesita de noche que estaba al lado de la cama

Izuku solo miró la comida por unos segundos, eran unas tostadas con queso, huevos revueltos y tocino

Riza solo miró como el niño con un poco de dificultad ponía la bandeja en sus piernas

-¿Cual es tu nombre niño?- preguntó de repente la mujer

Izuku dejó se comer para mirarla y no dijo nada, estaba tratando de ver algo que le dijera que pensaba la mujer

La mujer se levantó e hizo una pose estilo Jiraiya que por alguna razón a Izuku se le hizo familiar

-Yo soy Riza II Mustang Hughes- Gritó la mujer aún en la misma pose

Izuku se río levemente de la mujer y habló sin pensar

-Soy Izuku, Mido...solo Izuku- habló con un tono bajo sin decir su apellido

Riza alzó una ceja ante el nombre del niño, se le hacía familiar

-(Izuku Mido y ahí terminó, espera...cabello verde, pecas, ojos verdes, ¿podrá ser?)- pensaba la rubia

-Disculpe Señorita Riza, parece que vió un fantasma- habló más alto Izuku esta vez

Riza sacudió la cabeza y le sonrió al niño
-Estoy bien- respondió con un tono cariñoso hacia el niño

Izuku se sonrojó levemente y siguió comiendo

-¿Quieres hablar sobre lo que pasó?- preguntó casi en un susurro Riza

Izuku dejó la bandeja a un lado y miró a la mujer directamente a los ojos sin aparente vacilación

-Si no quieres no tienes que...- intentó hablar Riza pero Izuku la interrumpió

-Está bien, después de ver como me ha tratado puedo ver que puedo confiar en usted Riza-San- habló mientras se sentaba totalmente recto en la cama

-(A pesar de ser solo un niño puede al menos mínimamente saber si alguien quiere hacerle daño, claro que es muy superficial en ese sentido, podría estarle mintiendo y querer hacerle daño)- pensó la rubia

-Verá esto fue lo que pasó...- empezó Izuku cuando de repente su tono se volvió quebradizo

Unos minutos después

Izuku estaba dormido en el regazo de Riza mientras esta lo abrazaba y apretaba los dientes por la impotencia. ¿Como una madre puede hacerle eso a su hijo? Por otro lado, ya sabía a ciencia cierta quien era el niño, su familia y lo que llevaba dentro de sí así que su deber era ayudarlo

-No importa que Izuku, sueña lo quieras soñar, ve a donde quieras ir , se lo quieras ser. No te preocupes de ahora en adelante estaré ahí- susurró al oído del niño quien inconscientemente sonrió

FIN DEL CAPÍTULO

Palabras: 1458

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-Echo-Sempai