XIX
Me queda lejos la intención que, entre lágrimas, suelo comprender simplemente porque permanezco a solas.
Vislumbro -o no- una verdad a medias, una partícula de tiempo detenido, un recuerdo en leve pausa: tú y nadie más que tú deambulando -o no- la mísera estancia que abarca tu existencia en mi memoria.
Tanto fuiste... tanto debías ser... y la injusticia se volvió tu abrigo sin siquiera haberlo notado.
Fuimos ciegos. Fuimos creídos. Fuimos tantas cosas tras hallarnos embarazados de una desgracia invisible... una fatalidad innombrable.
Vislumbro, entonces, lo poco que me queda de nosotros... de ti... y tu nombre resuena en tus canciones mientras, en mi corazón, siento innumerables punzadas -sonido a sonido, palabra a palabra- porque estas ahí como nunca, estas aquí como siempre... para siempre.
A.V
08/08/2021
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro