Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

Capitulo 7 Damien ¿que onda con los extranjeros?


Esa noche hacia bastante frio, en el termómetro que estaba afuera de mi casa marcaban menos un grado pero se sentía más frio, me puse la capucha de la campera para que mis orejas no se cayeran a causa del frio. Rápidamente me puse a caminar por esa calle tan conocida por mi memoria, recordando como la señora Isabel siempre nos retaba por estar jugando en la calle a la hora de la siesta, o como desde la casa de la joven pareja, que ahora están divorciados, salía un frondoso árbol de manzanas, que para mí y mis amigos era el mejor tesoro de nuestras aventuras mágicas, aunque nunca nos las comíamos porque eran acidas y muy duras. También esta Fito el perro del remisero Jorge que al principio le tenía miedo pero resultó ser un muy buen compañero de salidas, ahora estaba bastante viejo y de uno de sus ojos ya no veía, cada tanto pasaba a darle algo de cariño y a tomarme unos mates con su dueño, el cual a veces me daba algún trabajo como cortarle el pasto o juntarle las hojas del jardín en esta época del año.

Desde mi casa hasta la librería había un trecho de más o menos veinticinco minutos, pero con este frio se me estaba haciendo demasiado larga, camine por algunos atajos que solo unos pocos conocíamos, salude a alguna que otra persona y seguí mi rumbo un poco más apurado para poder entrar en calor. Parecía que la temporada de nevadas este año llegaría antes y con más intensidad, decían los meteorólogos de la zona. A los trabajadores de este pueblo les venía de maravilla ya que la mayoría vivía del turismo, cosa que en los anteriores años la temporada de deportes de invierno se acorto por falta de nieve y eso afecto a la economía de este pueblito.

Tras varias cuadras ya pude ver la puerta de la librería iluminada con esos carteles brillantes que cambiaban de colores los cuales resultaba el clásico "Abierto" pero en ingles aunque a esta librería veníamos solo los habitantes de este lugar. Me quede un minuto leyendo los carteles que había en la vidriera, ¡ay por favor! Volvieron a aumentar el precio de las fotocopias, es una estafa que valgan cinco pesos cada una, eso lo hacen porque no tienen competencia; resignado entre al local y salude a los que esta noche estaban atendiendo, saque un papelito donde recitaba mi número de turno y me puse a esperar a que me atendieran, habían solo tres personas adelante mío por lo que tras pasados unos diez minutos ya estaba esperando a que el trabajador me abrochase el trabajo, le pedí un folio para que no se me arrugue. Pague sin quejarme de los precios y salí del lugar volviendo a sentir ese frio seco característico de mi zona, en este lugar casi nunca hay humedad, lo cual se agradece porque yo odio la humedad.

Con mi trabajo recién impreso retome mi camino, esta vez volviendo por un camino un poco más iluminado porque era noche cerrada, y aunque este fuera un pequeño pueblo nunca sabes que loco puede estar andando por ahí. Los faroles hacían que la vista de esta calle desierta se hiciera un poco más tétrica, estaba solo caminando por ahí lo cual no era sorprendente la mayoría ya estaba cenando en sus casas.

Decidí caminar un poco más despacio de vuelta disfrutando un poco de la noche que no era estrellada porque las nubes no dejaban paso a ver el cielo, pero la sensación de silencio que regía hacían que una calma se plasmara en mi cuerpo. Es una sensación que hace que mi mente se relaje hasta el punto de no pensar en este momento, si no que la misma mente te lleve hacia donde ella quiera. Después de un rato empecé a sentir mi cara cada vez más fría y esa fue la señal de que era hora de que volviera a la comodidad de mi hogar. Faltaban solo dos cuadras, casi llegando a la casa de Jorge el remisero, cuando un ruido hizo que me pegara el susto de mi vida, gire mi vista buscando al causante de tal sonido, era un sonido fuerte y como algo de metal golpeando contra el asfalto, ese tipo de ruido. Trato de mantener la calma pero mis piernas empiezan a temblar, otro sonido se hace presente, es una especie de quejido.

Quiero salir corriendo pero estoy asustado, vieron lo que dije de los locos antes, yo claramente llamo a la desgracia; logro mover mis piernas un poco y como si no sucediera nada yo sigo caminando para aparentar que no escuche nada. Escucho más ruidos metálicos pero no quiero mirar, así que solo camino más rápido. Falta solo una cuadra para llegar a mi casa así que decido que es hora de correr; pero algo me detiene y ya no es un sonido, es una voz.

Trato de no detenerme pero la voz me llama.

- Eh, chico ¡Te estoy hablando! – grita al notar que estoy tratando de ignorarlo, decido enfrentar la situación y lentamente me giro, para encontrarme con un joven de veintitantos vestido muy raro, iba casi todo de negro pero con detalles en plateado, a su vez tenía unas botas completamente metálicas, pero lo más extraño es que llevaba el pelo largo, y no largo como hasta los hombros si no que llevaba una coleta, y tenía el pelo completamente negro como el de los asiáticos solo que él no tenía esos rasgos; deje de enfocarme en su extraño aspecto, para volver a la realidad.

- Estoy buscando a un chico que se llama Damien, - dijo pronunciando el nombre como si fuera inglés o una cosa así; me puse pálido, pero como estamos a una distancia bastante alejada el uno del otro el no pudo notarlo; tengo dos opciones en este momento, salir corriendo o ayudar al extraño a ese tal Damien que espero no ser yo, seguramente soy yo con la suerte que estoy teniendo últimamente.

- Ah, creo que lo conozco puedo preguntar ¿Por qué lo busca tan tarde en la noche? – Respondo tratando de sonar seguro ante el tipo este.

- No tengo porque decírtelo- contesta de manera prepotente, yo solté una risa sarcástica, claro el otro pide ayuda y no puede contestar una simple pregunta.

- Entonces que Montoto te ayude porque yo no lo pienso hacer- dije para darme vuelta y seguir caminando como si estuviera tranquilo solo faltaban unos pocos metros para mi casa.

- Entonces dime donde encuentro a ese Montoto, humano- Que buena idea acabo de tener, sonrió para mis adentros, este extranjero no sabe que Montoto es un personaje ficticio.

- Montoto vive a cinco kilómetros de aquí en la casa vieja que está al frente del lago – dije señalándole la dirección, el asintió y se fue tan rápido como vino, cuando lo vi irse completamente, corrí tan rápido como pude hasta que llegue a mi casa, me tranquilice como pude y entre como si nada.

Subí rápidamente a mi cuarto y me tire en mi cama, ¿Qué acaba de pasar?


-------------------------------------------------------------------------------

Hola criaturas, como andan?

Vieron que les dije que empezo la temporada de nevadas, pues ayer nevo y me cortaron la luz, la peor combinacion de todas.

Bueno nada eso espero que les guste

Dejen su amor en forma de comentarios y estrellitas 

i lov iu

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro