Capitulo 20 Llegada en modo princesa
No estoy seguro cuanto tiempo paso hasta que desperté pero cuando lo hice seguíamos en ese oscuro abismo en el cual flotábamos hace bastante rato. Abrí mis ojos esperando encontrarme algo nuevo y lo único que encontré fueron unos brazos que me rodeaban dándome un poco de vergüenza, pero entendía que estando durmiendo yo no sería capaz de sostenerme como él me había pedido al principio de esta extraña travesía, me separe lo poco que pude y mire alrededor buscando alguna novedad. Esta vez además de la espesa oscuridad habían unos cables o hilos de colores, no estaba muy seguro de lo que eran pero brillaban bastante e iban en muchas direcciones.
Al parecer Cillian que no había dicho nada de la extraña postura que habíamos adquirido se dio cuenta que miraba extrañado ese fondo brillante y colorido
- Estos son las cuerdas que unen los destinos, los que saben utilizarlos los usan para viajar de un lugar a otro, suele ser dentro de mi mundo, esta debe ser la primera vez que alguien viaja de tu mundo al mío y viceversa, por eso resulta más largo y agotador, este lugar genera tanta comodidad que, como tú y muchos otros se queden dormidos; si no sabes manejar este sueño puede que te pases de tu destino y termines dormido para toda la eternidad flotando por quién sabe dónde- El sueño que seguía teniendo se me fue tan rápido como vino y para más seguridad mía con una mano golpee mi rostro, para estar más seguro.
- ¿No estás cansado? – le pregunte, me sentía un poco culpable, yo había dormido quien sabe por cuantas horas y él estaba despierto en la soledad de este lugar; el negó ante mi pregunta y sonrió
- No te preocupes, ya falta poco, puedo ver el inicio de nuestra cuerda- Dijo mientras observaba hacia un punto que yo no veía, supongo que debía confiar como había confiado en todas sus palabras, no dije nada más y me quede callado- ¿No tienes preguntas que hacerme?- me pregunto mientras me miraba tratando de darme un poco de apoyo, mis brazos ya estaban cansados
- Tengo muchísimas, pero al mismo tiempo ninguna– le conteste, y sentí como mi mano ya estaba un poco entumecida de agarrar por tanto tiempo la ropa del pelinegro, mis nudillos estaban blancos – Voy a dejar que tu mundo hable por si solo- era un poco loco decir eso, y lo sabía, pero no sentía que mi mente iba a entender y aceptar lo que él me dijera, lo más fácil era verlo con mis propios ojos, o eso espero.
El pareció entenderme y me dejo estar tranquilo; paso un rato más y mis manos ya no daban más, y Cillian que ya me había dado cuenta era bastante observador se percató de ello, sus manos fueron hasta mis muñecas y me susurro un "suéltate", dado que sabía que mi agarre no daba más le hice caso tentando un poco mi futuro. Pero cuando me solté el no dejo de sostenerme las muñecas y me acerco a su pecho, obligándome a apoyarme en él, sus brazos me rodearon hasta quedar en una posición bastante comprometedora. Sentía como mis mejillas ardían un poco, trate de quejarme pero su agarre no aflojo así que nos quedamos de esa manera por un tiempo indefinido. No voy a mentir, termino siendo bastante cómodo, pero nunca lo voy a admitir frente a nadie, esto se va a la tumba conmigo (que espero que no sea pronto).
- Agárrate fuerte, que ahora empieza lo difícil –
Me dijo y sin esperar a mi respuesta empezamos a caer a una velocidad descomunal, torpemente me sujete de Cillian buscando desesperadamente un agarre que me sostuviera a él. Nunca espere unas turbulencias tan turbulentas. Cillian no dejaba de abrazarme y antes que me diera verdadera cuenta, dejamos de caer en picada y volvimos a flotar suavemente; pero gracias al susto recién vivido yo no quería abrir los ojos.
Unos toquecitos en mi cabeza me dieron la señal para salir de mi covacha, saque mi cabeza para ver la cara de Cillian que con una mirada me indico que observara el paisaje. Y lo hice, tal vez esperando ver algo parecido a lo que ya conocía, como montañas nevadas o lagos cristalinos, pero lo que se encontraba ante mí era algo que nunca me hubiera imaginado, mis palabras se quedarían cortas ante tal lugar.
Caímos cual plumas, por un cielo que se parecía al nuestro, pero cuando mirabas hacia la tierra podías encontrar montañas de colores impresionantes que en nuestras normalidades nunca verías en la naturaleza sino más bien en alguna pintura impresionista. El rosa se fundía perfectamente con el mar turquesa solo visto en postales del caribe, pero eso no era lo más impresionante de todo, no había solo un sol, habían tres o tal vez mas pero eran un poco más pequeños, tal parece que era el atardecer porque su brillo anaranjado hacia que todo el lugar brillara de una manera increíble. Mientras caíamos lentamente, podía observar como hojas que habían sido arrastradas por un viento cálido nos rodeaban y seguían con su camino. Cillian me apunto hacia un lugar, era una especie de castillo, que desde esa distancia se podía observar por lo que, si, era muy grande. En ningún momento los brazos que me rodeaban dejaron de sostenerme y a mí ya no me importaba, ese paisaje completamente nuevo me tenía embobado, y si no fuera por el me encontraría flotando con las hojas.
Mientras seguía en ese trance observatorio, Cillian solo se dedicó a observarme y cuando me percate de ello trate de girarme haciendo que casi me soltara, lo que hizo para su gusto que me agarrara más fuerte de él, su risa jocosa hacia que me enojara un poco con él, pero lo deje estar, no era muy buena idea discutir a más de cinco mil metros de altura.
Note como lentamente el viento nos llevaba hacia ese castillo que ahora se veía aún más grande, tenía muchas torres que no llegue a contar y muchas de ellas tenia vidrios de colores que seguro formarían alguna clase de vitral, y en la punta de estas se encontraba una banderas de color bordo con alguna clase de imagen que no llegue a ver con claridad porque había mucho que ver.
Cuando nos acercábamos más empecé a escuchar cada vez más voces provenientes de dentro y fuera del castillo; Cillian cambio su posición y me agarro estilo princesa sin que yo me diera demasiada cuenta porque no dejaba de ver como miradas curiosas nos seguían desde los ventanales gigantes que allí se encontraban.
- Ya llegamos, prepárate- me dijo, empezamos a caer un poco más rápido pero no tanto como la anterior vez. Me sostuve de donde pude que en esta situación fue del cuello de Cillian, realmente espero que en este mundo no existan cámaras fotográficas.
Y finalmente llegamos al dichoso mundo de Cillian.
En modo princesa.
-------------------------------------------------------------------------
Holis ¡veinte capítulos! WOW ni yo me lo creo.
Y por fin llegaron al bello mundo de mi bello hijo Cillian, jejejejej no esperaba tardar tanto en que llegaran, pero la verdad no quise apurar la situación, pero bueno ya llegaron.
Nada los quiero mucho como siempre
No se olviden de picar la estrellita hermosa que esta allá arriba o acá abajo jajaja y si quieren compartirles esta historia a sus amigos, se los permito, no tengan vergüenza ( jajajajajajaj háganlo okno en realidad si)
Besitooooooooooooos
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro