—Encontré esto... ¿Tal vez es tuyo? ¿Es la memoria de tu robot?

—¿Dónde lo encontraste?

—Mi papá me lo dio... ¿Por qué?

Craig lo miró, pensó por un momento que debía hacer y decidió...

—Entra —dijo, jalando el brazo de Tweek.

—¡GAH! ¡ME SECUESTRAN! —Tweek gritó, con su brazo libre intentaba zafarse mientras lloraba y sorbía sus mocos.

—Callate y entra. Tenemos que hablar, —Craig simplemente susurró.

—¡GAAAAAAaaaah...!

La puerta se cerró.

Craig lo agarró con fuerza y ​​arrastró a Tweek a su habitación, donde luego lo arrojó sobre la cama.

—Estás causando tantos problemas. Se supone que no debo estar cerca de ti, ahora tienes este chip.

—¿Quién te dijo que no te acercaras a mí?

—Silencio.

—¡No soy tu juguete!

Entonces, se escuchó un clic en la puerta. Thomas llamó.

—¿Estás ahí? —preguntó el hombre en voz baja.

Craig se quedó mirando la puerta y le dio una mirada confiada. De nuevo, agarró el brazo de Tweek y lo arrojó al armario.

—Ni una sola palabra.

Thomas entró en la habitación y saludó a Craig. Mientras tanto, Tweek en lo que estaba en el armario encontró un botón extraño.

—¿Qué carajo? —Susurró— ah mierda , esa fue una palabra... ¡Ah, mierda, lo hice de nuevo!

Después de calmarse y respirar con normalidad de nuevo, levantó el botón y lo miró un poco más de cerca, pero no podía verlo bien ya que estaba oscuro en el armario. Silenciosamente lo guardó en su bolsillo y escuchó a escondidas la conversación entre Thomas y Craig.

—Tengo que ponerte a prueba un poco. Vale, pregunta número uno, ¿no puedes acercarte a...? —preguntó Thomas. CT miró al suelo y parpadeó un par de veces hasta que respondió.

—Tweek Tweak.

El hombre asintió y dijo:

—¿Por qué?

—No sé...

Una sonrisa se dibujó en el rostro del pelirrojo.

—Bien. Tu memoria se ha ido. Está bien, tengo que irme. Fue una sorpresa que tuvieras... o casi tuviste una relación romántica con este chico. Qué coincidencia que ese chico es el hijo de Richard.

Tweek se estremeció. ¿Hablaban de su papá? Es cierto, de alguna manera él está involucrado en esto. Recordó la escena que vio cuando se arrastró hasta la casa de los Tucker. El rubio estaba asustado y todo su cuerpo temblaba. Comenzaron a salir lágrimas de sus ojos y fue seguido por un hipo, trató de ocultarlo.

—¿Qué fue eso? —Thomas se dio la vuelta cuando estaba a punto de salir de la habitación.

—¡Mi estómago! —Le gritó Craig. Una risa salió de la boca del hombre, lo miró con lástima.

—La peor excusa del mundo, tú no tienes estómago...

CT apretó los ojos y se golpeó en la cabeza. Cuando Thomas se acercó y estaba a punto de abrir el armario, Craig tuvo que enfrentarse a una decisión difícil. ¿Acaso tenía elección? Era un robot, su vida debería haber sido programada. Todo, de principio a fin. ¿Entonces por qué sentía que en realidad tenía una opción? ¿Venció su propio sistema?

—¡Alto! —Gritó el niño y saltó entre el armario y el señor Tucker. El hombre parecía enfurecido.

—¿¡Cómo te atreves!? —Gritó y abofeteó a Craig tan fuerte que cayó al suelo. Pero CT se puso de pie y se tambaleó nuevamente frente a él y susurró.

—¡Detente...!

Fue entonces cuando Thomas golpeó fuerte y agarró a Craig del cuello. Lo echó de la habitación, le dio al armario una mirada amenazadora y salió de la habitación. Antes de que la puerta se cerrara, Tweek se asomó por el armario y miró preocupado los ojos cerrados y el cuerpo sin vida de Craig. Aunque estaba asustado, temblando, retorciéndose y casi orinándose, decidió salvar a Craig y habló.

—¡HEY, deténgase justo ahí!

El padre de Craig se dio la vuelta pero no se veía nada contento. Sus pasos hacia Tweek eran pesados ​​y llenos de ira. El miedo hizo que Tweek retrocediera muy lentamente. Miró a su alrededor en busca de algo para protegerse, pero no pudo encontrar nada. Cuando llegó al final de la habitación, entró en pánico y miró hacia atrás, solo vio una ventana. ¡Tenía que hacer algo, cualquier cosa! Todavía amaba a Craig, tenía que hacer algo para protegerlo. Especialmente después de lo que acaba de hacer, protegerlo de su papá. No vio ninguna salida, así que simplemente... golpeó el vidrio de la ventana, sorprendiendo a Thomas. A pesar de que las manos de Tweek estaban ensangrentadas y dolidas, agarró un fragmento y corrió hacia el hombre con toda su fuerza.

• • •

Una gota de sangre estaba en el rostro de Tweek, echó un último vistazo a Thomas, quien desmayado y sangrando en el suelo. El rubio se sintió orgulloso de lo que hizo y corrió hacia Craig. Sintió su corazón explotar cuando lo vio allí medio muerto. Lo recogió y salió corriendo de la casa, pensando en un lugar bueno y seguro para ir. No tenía tiempo porque Craig estaba herido, Thomas podía encontrarlos y alguien más podía presenciar esto y pensar algo extraño, como que Tweek lastimó a Craig, o que se va a deshacer de él... Tenía que admitirlo, se veía realmente extraño. Tantas preguntas y ninguna respuesta. ¿Qué quiso decir con que Craig no tenía estómago? ¿Y cómo y por qué se borró su memoria? ¿Es por eso que estaba actuando tan frío con él? Además, ¿por qué no tenía ni un solo rasguño en la cara? Es como... ¿Él no era humano?

Cuando llegó al estanque Stark miró a su alrededor, no venía mucha gente aquí, ya nadie disfrutaba de la naturaleza —tal vez en el pasado sí— pero ahora todos estaban demasiado concentrados en matarla. Científicos.

Puso a Craig en el banco e inspeccionó su mejilla. No estaba hinchada pero era muy suave. Aún así, ¡eso no cambiaba el hecho de que no se estaba despertando! ¡Era realmente preocupante que ni siquiera respiraba! Tweek entró en pánico, ¿podía llamar a la policía? ¿Llamar a la puerta de alguien? No tenía teléfono y se sentía tan inútil. Levantando a Craig, lo abrazó fuerte.

—¡Despierta, oh dios, por favor...!

Fue como magia, Craig comenzó a abrir lentamente los ojos y miró directamente a los ojos esmeralda de Tweek. El rubio soltó un grito de felicidad y volvió a abrazarlo.

—¿Qué pasó? Argh, siento que hay algo sobrecalentado dentro de mí...

Tweek suspiró y agarró los hombros de CT, dándole una mirada muy seria.

—Salí del armario y me enfrenté a él. Estaba enfadado, así que entré en pánico y... le di un puñetazo a tu ventana... Tomé un fragmento y...

Los ojos de Craig se abrieron, lo que nunca había sucedido antes... Se sentía tan diferente con respecto a Tweek. ¡Él realmente se SENTÍA sorprendido!

—Mierda, no sé qué hacer ahora. Pero tienes que darme explicaciones... Por favor... Necesito saber todo. ¿Tienes estómago? Y si no lo tienes ¿por qué? ¿Y por qué dijiste que algo se está sobrecalentando dentro tuyo? ¿Y cómo es eso que te borraron la memoria? ¿Qué diablos es ese chip y-?

—Cálmate. Voy a explicarte, así que cállate.Se supone que no debo decirlo pero creo que no tengo otra opción. Escucha con atención, esto no es una broma. No me importa si no me crees pero pediste respuestas. Está bien, primero que nada, no tengo estómago porque soy un maldito robot. Un robot, ¡¿escuchaste?!

—Espera, espera, ¡espera! ¿Eres un QUÉ?

—R-O-B-O-T, idiota.

—¡¿QUÉ?! ¡¿Es en serio?! ¿Estoy enamorado de un robot? ¿Eso significa que tus sentimientos por mí eran... falsos?

—¡Dije que escuches, maldita sea! No lo creo, pero no puedo recordarlo. Solo tengo esta sensación cálida y reconfortante cuando estoy contigo. Estoy seguro de que se supone que ningún robot siente esto. De todos modos, no sé lo que éramos antes de que me borraran la memoria, pero sé que éramos especiales. Sí, mi memoria se borró porque estaba haciendo algo en contra de las "reglas". Estaba sintiendo algo. Y ese chip fue la razón. Lo sacaron con la esperanza de que me impidiera amarte o lo que los humanos llaman esta mierda. Bueno, no funcionó. No estoy seguro de por qué pusieron eso dentro de mí en primer lugar. Y el por qué sigo sintiendo esto es cuestionable también.

—Estoy... tan confundido y conmocionado, Craig... ¿Cómo pudiste negarte a escuchar a tu papá y... salvarme?

—No lo sé. Cuando estoy contigo, siento que tengo libertad, que nadie me controla. Siento que soy el único que elige cómo debe ser mi vida. Es raro, arruinas todo mi programa.

Craig puso una mano en su frente y cerró los ojos.

—Crees que soy raro ahora, ¿verdad? Lo siento. Arruiné tu vida.

Tweek suspiró y tomó la otra mano de Craig. Luego le quitó la mano de la frente y le besó su cabeza. El rubio miró fijamente al lago completamente sonrojado.

—No arruinaste mi vida... ¡Y no eres raro! Yo lo soy... porque todavía me gustas...

De repente, Craig parecía realmente deprimido. Cuando Tweek le preguntó qué lo atormentaba, él simplemente respondió:

—Lo siento mucho... Es que... No sé... Realmente quiero que me vuelvas a gustar, pero no sé cómo.

—Está bien... No te esfuerces demasiado...

—Quiero ser humano. Quiero estar contigo.

—Yo... No sé si eso es posible... —, Tweek susurró con voz entrecortada.

—Yo tampoco. Pero te lo demostraré, Tweek Tweak. Todo es posible.