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II

— Craig, ¿puedes escucharme? —, Thomas preguntó. 

Los ojos del robot se abrieron con una luz azul brillante saliendo de ellos. Él quitó el cargador de su espalda y se paró. 

— Si lo escucho, señor —, le dijo.

Thomas sonrió mientras lo arrastraba a las escaleras, directo a la cocina. De repente se detuvo y suspiró. 

— Espera un momento... — El hombre pelirrojo dijo —, tú ni siquiera comes. 

CT parpadeó y asintió. 

— No hay duda de eso, señor. 

Thomas rápidamente negó con la cabeza, se volteó y tomó a Craig por los hombros. Craig se quedó mirándolo y comenzó a hablar. 

— Su agarre es 28% más fuerte de lo normal, señor. Estoy buscando razones porqué —. Los ojos del niño pelinegro comenzaron a brillar mientras pequeñas pantallas con forma de rectángulos aparecieron. Sólo entonces, habló de nuevo: — el internet dice que eso demuestra los nervios o la ira de una persona. También dice que, una persona que aprieta fuerte, probablemente tiene algo importante que decir. ¿Hay algo importante que quiera contarme, señor? 

Thomas se rascó la cabeza y exhaló profundamente. Nervioso, dejó libre a Craig de su agarre y sonrió. 

— No... Solo... Solo quería disculparme porque... tal vez te estuve tratando como mi hijo. Te nombré CT porque quería llamarte Craig Tucker. Sí, Tucker es mi apellido y sí, Craig era el nombre de mi hijo. Murió de cáncer. Solo quiero que sepas que no eres un reemplazo. Eres tú, ¿okey?

La cabeza de Craig se inclinó a la derecha.

— No tengo ningún problema con ser un reemplazo. 

— No... — dijo el hombre —, a los humanos nunca les gusta sentirse como un reemplazado. Hace que se sientan como si fueran alguien más. Siempre querrás ser tú mismo. Ahora, Craig, toma esta memoria USB. Contiene tu ruta escolar y tu horario. Espero que tengas un día agradable en la escuela. 

El señor Tucker le dio un abrazo y un beso en la frente a CT.

— ¿Qué fue eso? — Craig preguntó. 

— Oh, es lo que las personas hacen cuando son cercanas a otras personas. Los padres lo hacen muy a menudo. 

— Está bien, señor. 

Thomas negó con la cabeza. 

— Llámame "papá". 

— Está bien, papá.

El hombre pelirrojo empujó al robot fuera de la casa y le dio una linda maleta marrón. Después, Thomas se despidió y cerró la puerta. Pequeñas pantallas aparecieron al frente de sus ojos de nuevo. 

"Ruta
21 minutos caminando,
7 minutos en bus,
9 minutos en carro volador.

Horario, 
Primera clase, matemáticas, pero primero debo ir con el director."

Comenzó a caminar mientras la pantalla se cerraba de nuevo. 

— El bus llegará en 2 minutos. Activar super velocidad. 

Mientras corría a la estación del bus, la nieve debajo de sus pies se derretía. Iba más rápido que un ser humano normal. Al llegar allá, los papeles y libros de tres estudiantes salieron volando debido a la rapidez de Craig. Uno de ellos se veía muy maduro, usaba una sudadera morada y su pelo era negro y rizado. El otro tenía cabello castaño bien peinado y una chaqueta roja de invierno. El más pequeño de todos —también el más raro—, era rubio con el pelo erizado como un puercoespín. Una camisa verde mal abotonada y jeans negros. Sostenía una taza de café, temblaba y llevaba la misma maleta que Craig. 

Craig decidió pararse al lado del chico tembloroso. 

— Hola —, habló el robot con monotonía. — Mi nombre es Craig Tucker. También puede llamarme CT. Soy nuevo aquí. 

Tweek levantó una ceja. 

— Mi... mi nombre es Twe-Tweek Tweak... Pero, ¿por qué tu apodo es sé té?

— CT. Las consonantes, no sé té, señor Tweak. 

El rubio se retorció y se agarró del cabello. 

— ¿Señor? ¿Me acabas de decir "señor"? — Craig asintió — ¡Es-es mucha presión, no lo vuelvas a hacer!

Sin mirar hacia otro lado, Craig se quedó mirando fijamente los ojos verdes de Tweek y dijo:

— ¿Cómo lo llamo entonces, caballero?

— ¡¿Caballero?! ¡Solo dime Tweek! — Tweek susurró — Jesús, eres raro...

Craig apartó la mirada y se quedó viendo la nieve. Era un día frío, muy frío.

Al llegar a la escuela, CT se dirigió a la oficina del director y vio a un hombre alto que tenía una camiseta verde. Parecía un palo usando gafas. El otro, un hombre rubio, usaba una camisa azul y gafas de sol. Estaban discutiendo sobre algo hasta que Craig apareció. 

— ¡Hola! Debes ser el niño nuevo —. Dijo el rubio. Craig pudo notar que su cabello era más castaño que rubio. 

— ¡Oh! Craig Tucker, m'kay... sí. Bienvenido a la escuela secundaria de South Park m'kay. Así que huh, dinos algo sobre ti. Como uh, ¿presentándote?  

Craig suspiró. Aunque su expresión no cambió ni un poco. 

— Soy Craig Tucker, tengo 17 años. Me gustan los animales. — Los dos hombres se miraron y tosieron nerviosamente. 

¡Cool! Soy el Director PC, el tipo más genial de por aquí. Si tienes preguntas, solo ven y pregúntame y ya. 

El otro hombre habló.

— Uh... hola. Puedes llamarme uh, señor Mackey, m'kay. Ayudo con los problemas personales y como eres nuevo huh, debemos hablar de tu género, sexualidad y de más. Toma asiento, m'kay. 

El director PC se despidió con la mano y se fue de la habitación. CT entonces tomó asiento al frente de Mackey. 

— Primero que nada... huh, ¿cuál es tu género?

— Masculino — Craig murmuró. 

— ¿A qué géneros te sientes atraído?

El robot comenzó a pensar. Thomas no le informó nada sobre "estar atraído a algo o alguien".

Craig preguntó:

— ¿Puede darme algunos ejemplos, por favor?

El maestro gentilmente se acomodó las gafas. Casi se caían.

— Uh... masculino, femenino, ambos, ninguno, ya sabes. 

Craig levantó una ceja. Y decidió decir la única palabra que le era familiar. 

— Solo masculino — suspiró. 

— Ah, — el señor Mackey sonrió — entonces eres gay... Puedes preguntarle a tu compañero Tweek si tienes alguna duda. También es homosexual. 

— Tweek Tweak. Rubio, ansioso, adicto al café. Tiene 16 años y usa a menudo jeans negros y una camisa verde mal abotonada. Los nombres de sus padres son Richard y-

— Uh... — El señor Mackey lo interrumpió — Así que ya lo conoces, m'kay... Eso es bueno, él puede mostrarte la escuela...

El hombre puso el dedo sobre un botón y habló a través del micrófono:

— Tweek Tweak, por favor venga a la oficina principal. 

El robot y el maestro esperaron por 5 minutos hasta que el rubio tembloroso llegó. Al entrar, dejó salir un "ah, Jesús" mientras temblaba de nuevo. 

— Muestrale la escuela, Tweek — dijo Mackey. Tweek asintió y tomó la mano de CT, sacándolo de la oficina.

— ¡Viejo! — gritó — ¡gracias a ti me salte una clase! Gracias, ¿cómo puedo pagartelo? 

Mientras pensaba, Craig recordó lo que Thomas le había dicho y lo intentó. 

— ¿Qué tal un abrazo o un beso en la frente? 

— ¡¿Qué?! — el chico gritó — Bueno... teníamos un examen... y tú me sacaste de ahí... Bien. 

De repente, el rubio puso sus brazos alrededor de Craig y lo abrazó con fuerza. Su agarre disminuyó y comenzó a sonrojarse. Lentamente, dirigió sus labios a la frente de Craig y le dio un pico rápido. 

— Creía que solo las personas cercanas hacen eso — mencionó Craig.

— ¡Tú...! ¡Tú me lo pediste! Y yo lo hice porque... eres un poco... lindo. 

— Lindo... — murmuró Craig.

— Por cierto —, dijo Tweek con un poco de curiosidad y confusión en su voz — ¿tus padres son ricos o algo? La-La ropa que usas es muy cara.

Craig miró al piso. 

— Solo tengo un padre. Y sí, él es rico.

— Ah, lo siento... ¿Y pasa mucho tiempo contigo? Digo, ser rico es una cosa muy...

Recuerdos de las palabras de Thomas inundaron su cabeza. Thomas dijo que debía decir cosas como que su mamá murió y que su papá no pasa mucho tiempo con él. Sin embargo, Thomas también dijo que los humanos nunca querrán ser alguien más y que Craig debía ser el mismo. ¿Qué debía elegir? Era una pregunta difícil porque ambas opciones responden la misma pregunta y no sabía qué consecuencias traerían. Aún así, lo principal era no revelar que no era un ser humano. Se quedó pensando hasta que Tweek lo tocó en el hombro. 

— ¿Amigo? ¿Estás ahí?

— Uhm... sí — Craig asintió.

— Lamento la pregunta rara... Es-es solo que, siempre me he preguntado cómo sería ser rico. Mi padre es muy importante para mí, y me pregunto si lo perdería por el dinero y la fama. Pero si pudiera tener dinero y a él al mismo tiempo, ¡sería increíble! Okey olvidalo. Entonces, ¿él pasa mucho tiempo contigo?

Craig hizo su propia opción y sabía lo que diría.

— Sí. Mi papá es increíble. Realmente se preocupa por mí y está allí cuando lo necesito. Sin él, yo no estaría aquí. 

Tweek le dio una sonrisa ladina y asintió. 

— Sí... Igual. Los papás son increíbles.

CT decidió no mentir o seguir las instrucciones de su padre. Tenía que decir lo increíble que era realmente Thomas y aunque se sintió mal —por no seguir sus palabras—; quería que Tweek supiera que después de todo, Thomas era la razón por la que estaba aquí.

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