La superpicasia era uno de los momentos más bellos y dulces que vivían durante el tiempo juntos en Montt, estaban corriendo y sus capacidades cada día mejoraba más, por el duro entrenamiento que ejercían día a día, mientras pasaban los días, se fueron coordinando para alcanzar sus sueños, aún una semana de que se graduarán, Yoongi, Nam, Jin y Tae se esforzaron cada uno por llegar a ser mejores corredores, al principio Jin Hyung no dejo que Yoongi se le acercara a Tae en la uni y por las tardes, permanecían juntos para compartir momentos inolvidables, su amor era lo mas lindo y estando solos en su mundo corrían juntos en sus autos veloces para no se interferido con la gran caos ideas que llevaban por delante, con los días Tae le enseñó a derrapar a su hyung y Jin le explicaba todo lo relacionado de como armar y desarmar un auto, cada pieza colocada, era un éxito, Tae aprendía muy rápido por amor y pasión a los autos.

Por otra parte, Nam, Yoongi y Ken también se preparaban para la gran carrera anual, estaban dispuesto aplastar a Jung y Jin, no querían que obtuviera ninguna ventaja, pero Ken apesar de que estaba de su lado, no quería que Jin estuviera perjudicado en ningún aspecto.

Jung seguía en la panadería y por las tardes veía con frecuencia a su güero de ojos azules, eran tan eficientes, que encajaban muy bien ambos, sus derrapes y la adrenalina que marcaban en cada cambio de velocidad eran ejemplares, todo parecían indicar a que serían unos rivales no fáciles de vencer, en cualquier nivel de corredores, estando en la orilla del mar, las luces prendidas de sus autos reflejando la siluetas de ambos, estaban juntos viendo el atardecer del día...

—Jung, ¿crees que ganemos esa carrera anual?—estando muy preocupado por su capacidad

—Debemos de confiar en que ganaremos, no puedo fallarme a mi mismo, necesito mucho dinero y resperto, quiero que nada ni nadie se te acerque, quiero mantenerte a mi lado siempre—expresó su sentir ante sus palabras de su Jung.

El pelidorado no espero para acercarse a su bello rostro, estaba orgulloso y no dejaba de admirar su belleza a pesar de que tuviera un pasado oscuro, aún no revelado por su madre...

—Apezar de todo, eres mi valiente y tienes las agallas para enfrentarte a quien sea—dándole una sonrisa coqueta el pelidorado.

—Continúa o a mi lado, nada podría faltarme en estos momentos—no quedándose con las ganas de besar a su güero hermoso.

Las arenas, el mar y el cielo oscuro, se detuvieron por un instante al ser testigos de su amor, Jung se regocijo y lo abrazo por detrás de su cintura esperando a que Jimin aceptará sus brazos, la nostalgia lo invadió sintiendose feliz, puso su cuello de lado para que Jung lo besara, su satisfacción reaccionó enseguida y recorrió con dulces y tiernos besos el camino de ese cuello blanco y pálido que suavisaba sus labios en cada beso marcado que dejaba.

Jimin sintió la exitacion en todo su cuerpo vibrar y pudo entonces sentirse pleno al dejar que siguiera su Jung besandolo.

Sus manos moviendo con las suyas, al dejarlas en las partes, donde quería ser tocado.

La tensión y atracción sexual se hicieron presentes, cuando Jimin lo miró con profundidad siendo una tentación total para el pelinegro.

Se invadieron sus labios con los del güero, sus lenguas se cruzaron como un nudo enredado sin poderse desenredar, su saliva invadía su boca y sus manos tocaban el trasero redondo y firme de su güero, dando un leve gemido de placer al sentir sus manos encima de sus glúteos enormes.

Al dejar que lo invadiera la pasión, Jung le quito la playera que traía puesta y beso sus hombros y su espalda, su respiración se empezó agitar y Jung lo acosto sobre la arena, dejándolo total en su poder, dejándose llevar por las olas, el apuesto güero jalo de sus cabellos lacios, éxitandolo gustando de ese acto, gimió sintiendo su ereccion presente y sus pantalones de ambos les estorbaban tanto que les apretaban de tanta ereccion en sus miembros.

Era la segunda vez, que estuvieran juntos, conociendo perfectamente el cuerpo de su güero le fasinaba verlo desnudo, encima lo siguió tocando hasta bajarle la cremayera que tanto deseaba que no estuviera encima.

Jimin no pudo más, gimiendo aún más fuerte hasta desearlo completamente, se quedo quieto hasta desnudarlo y seguirlo esperando hasta que ya no pudiera mas...

—¡Hazlo Jung! mira como me tienes, con una ereccion que quiero desquitar—apretando sus dientes con mucho deseo.

—Será una noche que nunca olvidaras—frunció su ceño y desnudo por completo a su güero jalandolo con rudeza el pantalón de cuero que traía pegado el pelidorado.

Jung, atrapó con lujuria los deseos de su chico, dándole lo que pedía se sumergió entre su piel dando asi un amor satisfactorio y haciéndose uno mismo, penetro a su güero con deseos de servirle más y mas.

Jimin y Jung gritaron de placer hasta embriagarse de sus cuerpos sedientos sin dudarlo totalmente sus pieles y corrieron hacia el mar para  refrescarse y seguir amandose con mucha pasion, Jimin lo miro con ojos, de corderito enamorado tocando sus biseps se sonrojo de nuevo...

—Me encanta todo de ti, eres el chico mas hermoso que he conocido en mi vida, y sobre todo, ¡te siento mio!—no dejando de mirarlo con deseos de atracción de nuevo.

Jung sólo lo abrazo y siguieron en el agua, hasta dejarse llevar por las mareas de su amor.

La noche era hermosa y las estrellas brillaban en todo su resplandor, una mirada brillo por completo y una silueta se reflejo en aquel valcon, donde veía desde su casa el cielo claro....

—¿Jin hyung eres tu?—pregunto el pelicastaño oscuro.

Jin hyung traía una locura y estiró su mano hacia el valcon y lo llamó en silencio diciendole—¡ven a mi!—corrió y bajo desde su casa, donde sus padres notaron que ya había mucha preferencia al ver a Jin parado en frente de su casa, el cielo se oculto y empezó a llover después de un día muy caluroso en Montt.

Tomándolo de la mano caminaron lentos y seguros, dejando mojarse con la lluvia del anochecer...

—¿Porque el misterio mi amor, a donde vamos sin los autos?—pregunto Tae mientras seguía mirando a su hyung.

Sus pasos se detuvieron quedandose con su cabello mojado oyendo los truenos despejarse sobre el cielo...

—Cuando la atracción y la lujuria invaden y se unen en un momento que inunda todos mis sentidos, atrapandome en una unión con esa persona que me cautiva me hace sentir cosas increíbles, eres tu quien me hace mover todo esto que estoy sintiendo dentro de mi ser—pegando su cuerpo a su Tae, mojado por las gotas de lluvia caer.

Tae alzó su mirada y cerró sus ojos dejándose llevar por la atracción que lo invadía al desirle esas palabras...

—Espero que así sea, porque he tenido tantas preocupaciones, que necesito olvidarlo todo en tus brazos—dejándose llevar aun por la lluvia que caia en su rostro.

Tocando sus labios para que no dijera más, mojo sus labios en señal de atracción de nuevo...

—Guarda silencio cuando no tengas nada que decir, cuando la pasión genuina te mueva, di lo que tengas que decir, y dilo caliente—dejándose llevar por completo a la imaginación.

Las miradas se fundieron en ambos, sus corazón latieron y sus cuerpos temblaron al ejercer una atracción sexual, el deseo los invadió y Tae miro su pecho mojado con su playera marcada, no pudo resistir y el dijo a su hyung imnotisado con su belleza...

—Bésame, tocame, ¡hazme tuyo! y seamos uno mismo de bajo de la lluvia, que cae sobre nuestros cuerpos.

El placer invadió por todos sus sentidos al pelicastaño claro, añadiéndole en un susurro en su oído al de su amor...

—Quiero ahogarme en tus labios, susurrarte con palabras mudas el deseo que siento por ser parte de ti y ahora, ¡no quiero despertar!—añadió muy sensualmente el apuesto joven Jin.

—El deseo de estar contigo amado mío, me lleva a perder la cabeza por tu belleza—enseguida le contestó el pelicastaño oscuro, sin dejar de mirarlo a los ojos.

Jin hyung lo tomo de la mano de nuevo y lo acorralo entre una pared oscura, donde nadie pudiera verlos...

—Te quiero como para leerte, cada noche linea tra linea, espacio por espacio—tocando su mano sobre su cintura, Jin beso a Tae con pasión reflejando el fuego que quería apagar con su hyung.

Nacieron la poesía de sus labios, el arte de sus cuerpos mojados y pegados, la esencia de sus aromas impectados en sus pieles y la esclavitud de sus deseos eroticos, que jamás habían vivido de bajo de la lluvia.

El placer invadió sus almas, dejándose llevar por sus gemidos, Jin Hyung posee el cuerpo del deseo y su ereccion placentera satisfecho con su cálido calor, la humedad de la lluvia mojaba al paraíso, pero Jin hyung mojaba a Tae en cada caricia y en cada beso de amor...

—Bésame, dame la humedad de tu lengua, de tus labios, haz que tu saliva se confunda con la mía, creando el sabor del temperamento—el pelicastaño claro accedió a su petición y mojo cada parte de su hombre dejándolo sin aliento.

Sintiendo la mano perfecta, suave y mojada que se deslizaba por entre las bragas bordadas de encaje, justo para desnudar mis riñones con precisión, pero tiernamente con reverencia la idea que se le vino a la cabeza—redacto sus palabras, mientras seguía siendo poseído por su apuesto chico.

Las palabras fueron sintetizadas y marcadas en cada exitacion.

Las caricias eran el camino hacia un orgasmo que ambos habían sentido al juntarse en uno mismo, entrando a su Hyung a su ser de Tae.

La humedad los llevó a la perdicion del sexo, la atracción que se sentían muy fuerte por ambos lados, no dejando de sudar ya estaban desnudos sin sus prendas mojadas que estaban tiradas en el suelo.

Cuando dos almas se conectan, nada pueden deternerlas, es su destino estar juntos, las circunstancias no dejaron, ni limitaron a sus cuerpos de sentirse amados y deseados, el semental de Jin siempre activo y fogozo, quiso amar de nuevo sintiendose pleno sexualidad y sobre todo que su amor, aún crecía más y más por su Tae...

—Te cubriré de amor la próxima vez que nos veamos, con caricias, con éxtasis, quiero morderte con todas las alegrías de la carne—apretando sus labios en forma de seducción.

—Oh, mi Jin hyung, cuánto anhelo sentir tu cuerpo confundido con el mío, verte desvanecer, desvanecer y desvanecer ante mis besos—desplegando su sentir lleno de alegría.

La perdida cumplida se agonizo con profundidad al deseo y complacencia, de su Tae, le consedio su anhelo y fundió su amor hasta dejarlo sin sed ante su amado, estando en una bella tortura de placer, su abrazo iba más allá del abrazo, tanto que al final se confundían sus contornos, tanto que sus carnes desaparecían, tanto que perdíeran su respiración devorados por la misma boca sangrienta e insaciable.

Solo con mirarse se erizaba la piel al verse desnudos, parados sobre una pared oscura debajo de la lluvia, brotó el deseo de comerse a besos.

La mente que pasa cúando el deseo crece en ellos, Jin hyung sedujo a su chico y lo mantuvo en su nucleo de seducción y amor, Tae lo gozo y siguió estando poseído por sus labios de Jin...

—Tus manos siguen la senda de mi desnudo cuerpo y desembocan en los oscuros rincones de mis deseos, y allí cual firmes centinelas del mayor tesoro que poseo, y cual ladronas de cuento, se apoderan de mi voluntad de hierro.

—Eres mi único amor, me tienes completamente en tu poder, sé y siento que si en el futuro tengo que escribir algo bueno o noble, lo haré únicamente escuchando sobre las puertas de tu corazón—respondió su hermoso novio ante sus palabras.

Dejándose llevar ambos situados en su amor se quedaron amandose bajo la lluvia.

Hoy nuevo capitulo lindas lectoras...

Hoy pasion Jikook y Jintae 😍😏🔥🔥❤️💜

Espero que les haya gustado esta parte, yo lo disfrute mucho ☺

Dejandome su amor🌟☺️y sus comentarios que con gusto los leeré.

Hasta pronto y cuídenseme mucho mis lindas lectoras y amigas🌹🌹🌹🌹🌹✨✨✨✨✨✨✨✨✨✨