Se estiró en su lugar, intentando recordar que fue lo último que hizo antes de caer dormido pero después de unos segundos se rindió, estaba demasiado cansado como para pensar en algo, lo cuál no tenía demasiado sentido ya que acababa de despertar. Se restregó los ojos durante un momento para después abrirlos lentamente, parpadeando varias veces pae acostumbrarse a la luz que se colaba por la cortina que se hacía pasar por puerta.

—¿Cómo dormiste?— una voz a su lado preguntó, y Jackson reconociendola al instante se sentó en su lugar y sonrió al más alto, que todavía se encontraba mirandolo, más serio de lo que se le hacía costumbre últimamente.

—Hola.— sonrió bobamente mirando como el de sombero desviaba la mirada y después de un momento volvía a mirarlo. —¿Todo bien?

—No.

—¿No?— Jackson hizo un puchero, preguntándose que era lo que tendría de aquél humor a Carl, y entonces de repente y con fuerza recordó aquella noche donde le cortó la mano derecha a el líder de los Alexandrianos, sorprendiéndose por aquella cosa que llegó a su mente; no le había pedido perdón a Carl por aquello.

Bajo la vista al suelo por algunos segundos, pensando que era exactamente lo que debería decirle, pero antes de que siquiera pueda pronunciar palabra, Carl se reincorporó, parándose de el borde de la habitación donde había estado en silencio recostando vaya a saber Jackson desde que momento. Black se levantó al instante, impidiendo al más alto salir por la puerta entre comillas y agarrándole de las muñecas.

—Lo siento mucho, Carl.— susurró Jackson, apoyando su cabeza en el pecho del mayor, el cuál se tensó al inesperado toque, como se le había hecho costumbre cada vez que Jackson decidía que era buen momento romper el espacio personal.

—¿Qué?— preguntó confundido el mayor, pero aún con ese tinte de enojo que estuvo presente desde que se despertó.

—Lamento haberle hecho eso a tu padre, realmente necesito que me perdones Carl... tú- sabes que me gustas mucho y lo he arruinado varias veces pero no quiero que te alejes de mí.— recargó ahora su mejilla en el pecho de Grimes, justo encima de su corazón, escuchando como este iba demasiado acelerado, Jackson no sabía si aquello era bueno o malo. Al sentir el potente silencio que había dejado después de sus palabras, agregó. —Porque yo no sé qué haría si decides alejarte de mi, Carl.— susurró, restregando su mejilla en su pecho y subiendo lentamente su rostro intentando ver la reacción de Grimes.

—Jackson no puedo perdonarte eso.— comenzó Carl, separando sus manos de las del chico, el cuál por la tensión había apretado más fuerta las muñecas de Grimes, dejándoles una fuerte marca roja a ambas. —Pero tampoco me alejaré de ti, ya no puedo hacerlo.

Black terminó de separarse al escuchar eso, no sabía lo que significaba exactamente, pero si Carl decía que no se iba a alejar, de momento para Jackson aquello era suficiente, sonrió en grande viendo como Grimes intentaba no hacerlo y lo abrazó, fuertemente, como había extrañado hacerlo en todo aquél tiempo. Sorprendentemente Carl le respondió el abrazo, pasando ambos brazos por su cintura y acercándolo más a su cuerpo, apoyando su cabeza sobre la de Jackson y sonriendo, sabiendo que ya el menor no podía verlo.

—¿Cómo es eso de que yo te gusto?— preguntó Carl, después de un largo silencio, aún estando abrazados, sentía todo su rostro sonrojado así que no quería separarse, por que sabía que el menor se iba a burlar, así que cuando este comenzó a removerse intentando separarse, Grimes le agarró más fuerte de la cintura y negó con la cabeza. —Quieto.— ordenó, Jackson suspiró, haciendo caso.

—Pensé que lo sabías.— murmura Black, intentando dispersar el tema lo más posible.

—Nunca dijiste nada y no soy adivino, así que no, no lo sabía.— explicó Carl, intentando recordar algún actuar en el menor que le dijera aquello, pero solo encontraba gestos cariñosos entre hermanos, recordó cuando le dijo aquello y comenzó a reírse, a Jackson no le había gustado demasiado, ahora Carl entendió el por que.

—¿Qué?— preguntó Black, sin entender la risa.

—Yo te considero más un hermano.— habló después de un momento Carl.

—No es cierto.— se quejó Jackson, volviendo a removerse, pero otra vez lo inmovilizó Grimes.

—Sí, lo es.— respondió restándole importancia.

—No.— Black susurró esta vez menos convencido, haciendo reír otra vez a Carl. —Nop, definitivamente no es cierto.— declaró el más bajo.

—¿Por qué tan seguro?— preguntó curioso Grimes.

Jackson en vez de darle palabras por respuesta, acercó su rostro al cuello del mayor, colocando ambas manos en sus hombros y comenzando a dejar besos y lametazos por toda la zona, corriendo la camisa del más alto para seguir los besos en la clavicula y volviendo al cuello hasta la mandíbula en un lento ascenso, escuchando los gemidos involuntarios de Carl, los cuáles estaban siendo amortiguados por una mano de este, siguió besándolo durante unos segundos más para después comenzar a reírse a carcajadas. Escuchando la agitada respiración del mayor, el cuál concluyó el acercamiento, para recostarse en la pared, apoyando los antebrazos en el frió muro y dándole la espalda a Jackson, el cuál se acercó desde atrás, abrazándolo por la espalda y dejando un último beso en su nuca.