*POV's Jeff*

Abrí los ojos, todo estaba oscuro, por un momento creí que había quedado ciego; pero al tocar mi rostro, pude darme cuenta de que estaba encerrado. No tenía la certeza de en que, unos pocos rayos de luz, logre ver algo que se encontraba a mi lado, era una especie de grabadora, la tome antes de presionar "Play"

Hola, Jeff, en estos años te convertiste en una sombra de lo que solías ser antes. Fuiste consumido por la venganza, venganza contra el chofer ebrio que mato a tu hijo varón, el mismo que fue liberado tras un apresurado juicio. Pero hoy... Tú serás juzgado. Para escapar de tu prisión, deberás pasar por una serie de pruebas. Sufrirás para poder avanzar, pero también tendrás la oportunidad de enfrentarte al responsable de la perdida de tu hijo. Esa será tu prueba máxima, ¿Podrás perdonarlo? Date prisa, porque las puertas se cerraran en 2 horas, convirtiendo este lugar en tu tumba. Has esperado mucho tiempo por esto, Jeff, que comience el juego

Me desespere, golpee muchas veces la caja, logrando romper una de las tablas. Comenzó a moverse, supe que me encontraba sobre una superficie en el aire, eso no me importo. Seguí pateando, hasta que por fin la caja cayo (Conmigo dentro) al suelo; gracias al golpe, quede recostado sobre la madera completamente aturdido. Fue ahí donde recordé un momento que sucedió días atrás

*Inicia Flash Back*

-No tiene caso que supliques... Tú sabes quién soy yo... Soy tu maestro, pedazo de basura... Maldito hijo de...-. Practique con mi arma frente a un espejo, antes de terminar la última frase, tuve el presentimiento de que algo faltaba. Mire a todos lados, mi vista se poso en una mesa que tenia los peluches de Dylan, faltaba uno. No tuve que pensar mucho sobre donde podría estar. Entre al cuarto de mi hija, la había despertado -¿Dónde está?-

-¿Qué cosa?-

Abrí sus cajones, revise debajo de su cama, vi sus manos cruzadas sobre su pecho -¿Cuántas veces debo decírtelo para que se te grabe en la cabeza?-. Jale su cobija, detrás de ese oso de peluche, había otro con forma de cerdito

-Q-Quería dormir con algo-

-Tú nada. Tu no debes tocar nada de la habitación de Dylan, ¿Entiendes?-. Ella solo asintió, tome el peluche y salí de su cuarto; acomode el juguete en su lugar y me senté en su cama; mire todos los rincones, quizás... Para asegurarme de que todo estaba en su lugar, los segundos parecían haberse convertido en horas

-Papa, lo siento-

-Te amo, hija... ¿Pero qué crees que diría tu mama si viera esto?-

-...Voy a alistarme para ir a la escuela-. Corbett salió de la habitación, coloque la camisa de mi hijo en su ropero. Pero cuando cerré la puerta, sentí una punzada en mi cuello, después todo me dio vueltas y luego... Desperté en la oscuridad

*Fin Flash Back*

La imagen de mi niña me hizo reaccionar, ella fue la última persona a la que había visto antes de que esa cosa me atacara... Tuve miedo de que también hubiese sido secuestrada. Con algo de dificultad logre ponerme de pie, tome una de las tablas y camine por varios pasillos; me di cuenta de que estaba siendo grabado gracias a una cámara que, a simple vista, se notaba que fue instalada recientemente. Bajo esta había una caja, que contenía un trozo de papel, la tome

Abre la puerta, Jeff

Debajo del papel había un trozo de fotografía rasgada, era mía, la habíamos tomado cuando Dylan aun vivía. Me di cuenta de lo mucho que había cambiado desde entonces, bajo la foto estaba una llave. Frente mío estaba una cortina de plástico, como la de los refrigeradores, en una de las paredes había una puerta. Quizás la habría ignorado de no ser porque tenía candado, recordé la llave que estaba en la caja, la saque pero embono. Continué caminando, llegue a otra puerta, este tenía pintado la frase Enfrenta tus miedos

La abrí, era un congelador, el frio colaba hasta los huesos; apenas entre, la puerta se cerró y por nada del mundo se abría. Mire hacia dentro, en medio de la habitación había una mujer, desnuda, y atada en manos mientras colgaba del techo. Creí que estaba muerta, hasta que la vi levantar su cabeza –P-Por favor, desátame... P-Por favor, ayúdame, te lo suplico-

-L-La llave-. Saque la llave de mi bolsillo, quise usarla en el candado, pero ni siquiera entraba –Maldición... No entra... Espera aquí- dije antes de correr a otra puerta, también tenía candado, pero tampoco encajaba la llave. Mi vista se poso en una esquina, ahí estaba otra de esas grabadoras, la tome para dar en "Play"

Bienvenido a tu primera prueba, Jeff, en los últimos 3 años has maldecido a aquellos que creíste responsable de la muerte de tu hijo. Fantaseaste muchas veces en que se haría justicia, la mujer frente a ti esta encadenada para evitar que corra... Justo como lo hizo el día del accidente de tu hijo. Se llama Danica Scott, fue la único testigo del crimen, sin embargo decidió callar, ambos sabemos que provoco en el juicio. Hoy te daré la oportunidad de castigarla, solo déjala congelarse; o puedes perdonarla. Si deseas salvarla, debes obtener la llave que se encuentras tras los tubos. No será fácil, te lo aseguro, apresúrate antes de que ella calle... Para siempre

Apenas termino la grabación, unas pequeñas regaderas que estaban a su lado comenzaron a rociarla con agua por varios segundos -¡¡No te hice nada a ti!!-

-Exactamente... ¡¡No hiciste nada!!-

-P-Por favor... M-Me estoy muriendo-

-¡¡Mi hijo murió!! En mis brazos... Solo tenía 8 años, y murió en mis brazos-. Nuevamente, el agua la roció, soltó un enorme grito agónico; gracias a esta y a lo frio del lugar, comenzaron a formarse costras de hielo en su piel y cabello

-M-Me equivoque... Y-Y lo lamento... S-Soy humana c-como tu hijo- dijo tiritando. Rápidamente fui hacia los tubos, allí pude ver la llave colgando de una cuerda; cubrí mi mano con la manga del suéter y metí mi brazo entre los tubos, estirándolo lo más que pude, pero ni siquiera logre rozarla. El agua no dejaba de rociar su cuerpo, con cada segundo que pasaba, sus gritos disminuían. Cuando el cuarto quedo en total silencio, la mire, su cuerpo estaba completamente congelado, como una estatua de hielo. Había muerto

Nuevamente acerque mi brazo a la llave que estaba colgando tras los tubos, esta vez destape mi mano, logre rozarla un poco; así que pegue mi cuerpo a los tubos, incluyendo mi rostro. El tubo congelado quemo mi mejilla, me apresure lo más rápido posible para tomarla. Cuando lo conseguí, me aparte de inmediato, parte de mi piel se quedo pegado en el tubo