Un mes ha pasado desde que Thor llevo a la casa mis "cenizas" y las de Gideon. Si bien en la cabaña tenía todo lo necesario para entretenerme y seguir haciendo planos para futuros juegos, ya no toleraba seguir encerrado. Claro que eso cambio al iniciar la segunda fase del plan

-¿Qué ves, cielo?- pregunto Thor apenas entro a la habitación, viéndome con la tablet en mano

-Anthony está a punto de iniciar la segunda fase del plan, y Natt me hizo el favor de transmitirlo. ¿Quieres verlo?-

-Claro-

*POV's Tony*

-Tu mes de plazo se termino, Anthony, es hora de que inicies tu parte-

-Lo sé, lo sé, no tienes que recordármelo-. La sola idea de que tenía que besar a Fandral me provocaba nauseas, pero era por el bien de todos

-Mira, ahí viene-

Natt me empujo al ver que Fandral entraba a la casa, arregle un poco mi cabello y desabroche los primeros botones de la camisa (Sabia que a él le encantaba ver mi pecho cargado de leche). Camine hasta el –Hola, Fandral- dije haciendo que mi voz sonara lo más tierno posible

-Amm... ¿Hola?-

-¿Cómo te sientes?-

-Un poco cansado-

-Pobrecito, ven aquí-. Tomándolo de los hombros, lo hice sentarse en el sofá antes de quitarle su saco, comenzando a masajearlo

-¿Te sientes bien, Anthony?- pregunto algo confundido

-¿Por qué no lo estaría?-

-Bueno, es que creí que no te agradaba-

-Te equivocas, querido, a decir verdad te quiero mucho-

-¿En serio? Pero creí que tu y Steve...-

-No estamos hablando de él, hablamos de ti-. Pude ver que Natasha empujaba a Steve hacia la cocina detrás de Fandral –Tu solo relájate, déjate llevar por mis manos-

-¿Sabes, rollito? Siempre creí que eras muy lindo- dijo mientras con, su asquerosa mano, acariciaba mi mejilla

-Tú también eres muy guapo-. Tomo mi rostro con su mano y me beso, la sensación era horrible, un sabor amargo. Me asuste al sentir sus manos colarse debajo de mi camisa, aun así no me separe; pero lo que si me salvo de que las cosas avanzaran fue su teléfono –Demonios, tesoro, debo regresar a la delegación-. Se despidió dándome un pequeño beso antes de salir de la casa, cuando me cerciore de que su coche se había alejado, corrí a toda velocidad hasta el baño. Enjuagué mi boca con mi cepillo de dientes y agua

-Odiaría ser tú- comento Natasha burlonamente

-Esta me las vas a pagar-. Me fui a mi habitación, era una suerte que Peter se encontrara profundamente dormido. Creí que podría descansar unos minutos, pero antes de poder echarme en la cama, Steve me jalo del brazo para sentarme en el sillón

-En este momento me dirás que sucede entre tú y Fandral-

-No sé qué pasa por tu cabecita, Steve, pero no es nada de lo que te estás imaginando-

-Explícame entonces-

-Mira... Loki no está muerto, entre el, Natasha y yo fingimos su muerte. Sharon fallo su prueba y los 3 sabemos que Fandral tuvo algo que ve, tuvimos que hacerlo pasar por muerto mientras investigamos lo que sucedió. Y a mí me toco la parte de sacarle la información a Fandral-

-¿Pero seduciéndolo? Y además, ¿Por qué tu?-

-Lo hicimos limpiamente, y perdí... Mira, no tienes nada de qué preocuparte, confía en mí-

-No me gusta para nada la idea, pero que es la única forma. Pero... Antes de que ese imbécil te toque-. Sin ninguna delicadeza, me arrojo contra la cama y se coloco encima de mí al mismo tiempo que besaba mis labios. Sus grandes manos hicieron trizas mi camisa, antes de que se atreviera a lamer mi cuello, lo tome por las mejillas para alejarlo

-Si vamos a hacerlo, no dejes marcas donde se puedan ver-

-Entendido, su majestad-. De un tirón, me despojo tanto de mis pantalones como de mis bóxers, rápidamente comenzó a lamer mis muslos. Dios, este hombre sabia como usar su boca para enloquecerme; sujete sus cabellos, conduciéndolo más abajo -¿Quieres que te lama aquí, dulzura?-

Asentí mientras mordía mi labio, ni corto ni perezoso, comenzó a lamer mi entrada; varias veces introdujo su lengua, haciéndome arquear mi espalda y soltar varios gemidos. Hizo esta acción varios minutos, justo antes de correrme, se acomodo entre mis piernas e introdujo su miembro en mi cuerpo de un solo golpe. Mis manos se aferraron a su amplia espalda, yo no podría tener marcas visibles, pero el vaya que los tendría

Vaya que la cuarentena después del nacimiento de Peter le afecto, no espero ni 5 minutos cuando empezó a moverse como un poseído –Dios, si no fuera porque Peter nació hace 3 meses... Te dejaría preñado de nuevo-

-T-Te mato si lo haces-

Siguió moviéndose cada vez más rápido, en lugar de mordisquear mi cuello (Como suele hacerlo) beso mis labios, robando el poco aliento que trataba de recuperar. Sentí su espalda estremecerse, una señal de que estaba a punto de correrse; como no me encontraba en mis días fértiles, lo deje terminar dentro de mi –Te... Te amo- susurro en mi oído, no pude responderle, trataba de recuperar la mayor cantidad de aire posible. Espero varios minutos para sacarlo, con algo de dificultad, logre levantarme de la cama. Entre al baño para ducharme, vistiéndome solo con una bata de seda; baje a la sala, allí estaban Natt, Bruce, Mollie y mi pequeño (Quien, apenas me vio, extendió sus brazos hacia mi)

-Tienen suerte de que Fandral haya ido a su trabajo, o todo el plan se habría arruinado-

-Díselo a Steve-

La pequeña Mollie presto atención a una bolsa que se encontraba detrás de Bruce; tras verse descubierto, solo atino a tomarla y sacar de ella un oso de peluche. Casi al instante, la pequeña se rio al mismo tiempo que extendía sus brazos, era imposible que le negara el peluche -¿Qué no es el de edición limitada?-

-Este...-

-Bruce-. Natt trato de regañarlo, pero el solo jugó con sus dedos

-Mi amor... Era el que Mollie quería-