Vi como salía de la bodega completamente en shock, hasta ahora ella se ha convertido en la primera sobreviviente, algo dentro de mi me decía que Sharon cambiaria en su forma de ser –Fandral, lo he estado pensando... Tú organizaras el siguiente juego-

-¿Qué? ¿Por qué?-

-Ya has presenciado cómo se realiza un verdadero juego, creo que es hora de que tú te hagas cargo de uno- respondí mientras le entregaba una carpeta, que contenía la información sobre el siguiente jugador

-Mark Wilson... Un juego algo sádico, ¿Tiene todo preparado?-

-Los materiales, si, pero a ti te tocara prepararlo todo. Iré a un chequeo con el Dr. Banner, nos vemos-. Salí de mi casa y subí a mi coche, maneje hasta el hospital para mi chequeo rutinario. Tal y como las veces anteriores, los resultados arrojaron que el cáncer no había regresado

-Bruce, los alumnos de la Universidad de Stanford lo esperan- le aviso su asistente

-Gracias, Carla. Lo siento, Loki, olvide que tenía una clase... Oye, ¿Crees que pudieras servir como una muestra?-

-C-Claro-

Salió y a los pocos segundos regreso con un grupo de jóvenes estudiantes, era raro, pero estar rodeado de personas me había sentir un poco incomodo –Muy bien, este paciente hace poco fue diagnosticado con cáncer de páncreas en una etapa muy avanzada, el cual logro eliminar gracias a un nuevo tratamiento. Y ante todo pronóstico, resulto ser todo un éxito, pues el cáncer no ha regresado-

-Su nombre es Loki, Dr. Banner, es una persona muy interesante-

-Gracias por la información, Zep. Y gracias a ti, Loki, por tu apoyo-. Me levante de la silla y salí del hospital; al llegar a mi casa, supe que la comida ya estaba hecha, lo supe por el olor. Todo era tan ameno, por un momento, imagine que así sería mi vida si Jill no hubiese fallecido. En fin, a la semana siguiente, Fandral ya había traído a Mark; lo llevamos hasta otra casa abandonada. En el sótano, las paredes estaban repletas de números pintados y el suelo lleno de fragmentos de vidrios

Salimos, casi al instante, Mark despertó notando al instante la viscosidad en su cuerpo. Al alzar su mirada vio encima de una caja fuerte una vela encendida al lado de una grabadora. Bastante nervioso, la tomo y oprimió el botón de Play

Hola, Mark, si estas tan enfermo, ¿Por qué tengo tantas fotos de ti estando bien y tan sano? Vamos a poner a prueba tu supuesta enfermedad. Ahora mismo un veneno de acción lenta corre por tus venas, el antídoto esta dentro de la caja, la combinación de la caja está escrita en la pared. Apresúrate a conseguirla, pero fíjate donde pisas; y por cierto, eso que tienes untado en el cuerpo es inflamable. Así que... Yo tendría mucho cuidado con esa vela. Si fuera tú, por toda la gente que engañaste con tu farsa quizás ahora tengan aquí su venganza

Tras gritar varios minutos por ayuda, finalmente tomo la vela y comenzó a caminar, soltando un sinfín de quejidos al sentir como los vidrios cortaban sus pies. Memorizaba una cantidad de números y regresaba a la caja fuerte para tratar de abrirla. Para su desgracia, la vela se resbalo de su mano y la flama rozo con su brazo, incendiándose por completo. Inútilmente trato de apagar las llamas pero termino muriendo por las quemaduras

Entramos y vi como Fandral dejaba aquella lámpara en una de las esquinas –Creí que lo habías dejado en la prueba de Paul-

-Cuando regrese para dejarla, la policía ya estaba investigando el caso. Tuve que disimular para que no sospecharan-

-De acuerdo, será mejor irnos, Thor me informo que ya registraron la desaparición de Mark-. Tome mis cosas y ambos salimos de la casa, la policía no tardo en encontrar el cuerpo y la noticia fue primera plana en el periódico. En el fondo me sentí como esos escritores anónimos cuando escuchaban excelentes comentarios sobre sus obras, pero inmediatamente recordé que esto no lo hacía por fama

Gracias a Thor, me entere que a los pocos días, el Dr. Banner había sido investigado por los detectives Tapp y Sing

*POV's Bruce*

Tras una típica consulta con uno de mis pacientes, me recosté en mi asiento, quería descansar un poco después de tanto trabajo. A mi parecer, la vida no quería que eso sucediera, alguien llamo a mi puerta –Dr. Banner, 2 oficiales quieren hablar con usted-

-¿Conmigo?- pregunte bastante confundido, a lo que ella asintió con la cabeza –Que pasen-

Los 2 oficiales entraron a mi consultorio, sentándose frente mío –Dr. Gordon, soy el detective Tapp, el es el detective Sing, homicidios locales. Esto es muy impresionante- comento señalando mis diplomas

-Gracias, hago lo que puedo-

-Lamento interrumpirlos mientras trabajaba-

-No se preocupe, ¿En qué puedo ayudarlos, caballeros?-

-¿Podría decirnos donde estaba entre las 11 de la noche y la 1 de la mañana de ayer, doctor?-. Esa pregunta me sorprendió bastante

-¿Y porque están tan interesados?-

-Nos gustaría hacerle algunas preguntas de esto, pero por su propio bien, sería mejor si las hacemos en la comisaria. ¿Nos acompaña, doctor?-

-Temo que eso es imposible, no puedo irme, tengo trabajo que hacer y mi esposa tiene el auto hoy, así que...-

-Está bien, puede venir con nosotros, doctor-

-Lo lamento, tendrán que decirme otra vez de que se trata-

Uno de ellos saco del bolsillo de su saco una bolsa, que contenía... ¿Mi lámpara? -¿Esto es suyo, doctor?-. La tome mirándola fijamente, en efecto, era mi lámpara; no me quedaba de otra, tuve que acompañarlos a la comisaria. Apenas llegue ahí, entre a una de las oficinas, espere unos minutos hasta que llego Brett (Mi abogado y mejor amigo)

-¿Así que no tienes idea del como tu pluma-linterna apareció en la escena del crimen?-

-Por supuesto que no, Brett-

-Perdón, pero tengo que preguntarte. ¿Qué estabas haciendo anoche?-

-Estaba viendo a alguien-

-¿A quién?-. No pude responder, ni siquiera él lo sabia –Bruce, si no puedes ser honesto conmigo...-

-Estaba con alguien y no era un paciente, ¿Ok?-. A juzgar por su rostro, estaba muy decepcionado de mi, el siempre alegaba que mi matrimonio era el más estable que alguna vez conoció -¿Qué voy a hacer?-

-Como tu abogado y colega, te aconsejo que digas toda la verdad y que cuentes tú coartada ahora, porque nadie va a creerte después-. Le hice caso, les conté a los oficiales lo que había pasado esa noche. Una vez que termine, los 2 salieron, me quede solo en aquel cuarto por varios minutos

-Ok, revisamos lo que nos platico y se confirma- comento el detective Sing mientras entraba a la oficina

-Bien, ¿Puedo irme a casa?-

-Tenemos a una de las victimas que logro escapar, quería saber si no le importaría quedarse un poco y escuchar su testimonio. Quizás usted pueda recordar algo-. Mire por la ventana, una joven rubia se sentó en completo silencio, jamás en mi vida la había visto

-Me gustaría ayudar, pero...-

-Si nos ayudaría, ella fue la única que escapo-

-Sharon... En tus propias palabras, dime la primera cosa que recuerdas-. La mire fijamente, pude notar en sus mejillas un leve rastro de sangre. Comenzó a hablar, con cada detalle que daba, su voz se entrecortaba; no pude evitar sentir un poco de lastima por ella

-Tú eres una drogadicta, ¿No es así, Sharon? ¿Crees que te escogió por eso? ¿Estás agradecida, Sharon?-

-E-El... Me ayudo-