—Creo que Zack es muy tierno.— dijo Dakota—No puedo creer que estén viviendo juntos.

—Yo tampoco—reí.— ¿Y sabes que es lo peor?— ella negó— Que yo creía que me estaba engañando con esa chica del aeropuerto, y es la novia de su prima.

—¿En serio?— asentí.— Aunque me sorprendes Leah que ese día hayas actuado tan normal.

—El embarazo, aunque no creas me cambió, creo que ahora soy una persona más estable.

—Que bueno Leah.

—¿Cuando vamos a ir a ver la universidad? Tengo que pedir aunque sea el primer mes, para poder estar con mi bebé.

—¿Crees que te lo den?

—Pues a mi mamá se lo dieron — me encogí de hombros.— No creo que me lo nieguen, además tanto mis padres como el de Zack son ex-alumnos de allá.

—Pues vamos ahora mismo.

Salimos de mi apartamento y Dakota empezó a conducir, en verdad ella no era la mejor conductora pero creo que era mejor que ella lo hiciera a que yo. 

Cuando llegamos a la Universidad todas las miradas se fueron a mi barriga, y aunque en un principio me hubiese molestado ahora estaba muy feliz, nos dirigimos a la oficina de la decana de Derecho, el cual al verme se sorprendió, corrió hacía mi y me saludó, en verdad creo que ahora la confundida era yo y Dakota me miraba como si fuese un bicho raro.

—¿Hola? — dije cuando me soltó de su abrazo.

—Sé que debes estar sorprendida — se rió — Pero yo te conozco, eres Leah Caroline Garret.- sonrió.

—¿Cómo lo sabe?

—Bueno, hace algunos meses recibí esta carta de tu madre, ella fue y bueno es mi mejor amiga— dijo extendiéndome la carta — ¿Cómo estas con respecto a su muerte?

—Bueno.. ella siempre quiso que yo fuese alguien fuerte, y creo que por primera vez lo estoy siendo—me removí incómoda. 

—Eso esta muy bien Leah, si quieres ven, siéntate y lee la carta— sonrió— Y tú— señaló a Dakota, también puedes sentarte.

—Muchas gracias— dijo Dakota.

Abrí la carta y ver la caligrafía de mi madre me puso sensible. 

"Querida Leah, si estas leyendo esto es por que fuiste a visitar a mi mejor amiga Dalila, y bueno, porque lastimosamente yo ya fallecí. Espero que no me odies  por no haberte contado de mi enfermedad en el cerebro, bueno, mamá no te iba a durar para siempre ¿verdad?. Estoy muy orgullosa de que hayas aplicado a Derecho en Columbia, estoy demasiado orgullosa de ti, y espero que tu padre y Maggie también, y aunque no lo creas Will me ha informado sobre tu relación con Zack y espero que este funcionando muy bien. Quiero que sepas que te amo mucho hija, y que estaré desde arriba apoyándote con todas tus decisiones, y estaré vigilandote para que no hagas ninguna estupidez Leah, también quiero que sepas que Dalila te apoyará en lo que necesites en la universidad por que ella es mi mejor amiga. En fin hija, no es una buena despedida, ni te explico todo bien, pero espero que sepas que te amo y te amaré siempre, nunca lo olvides."

—Ella sabía que iba a morir.— traté de no llorar — La extraño— susurré.

—Ella estará siempre contigo.— me abrazó dakota.

Dalila me extendió un vaso con agua y por fin pude calmarme.

—Y bien Leah, sé que no viniste para saludar, ¿En que te puedo ayudar?

—Bueno..Como puedes ver estoy embarazada y bueno, quisiera saber si podrías darme un permiso de un mes, te prometo que voy a estudiar desde mi casa.

—¿Un mes?

—Si, es que cuando la bebe nazca y cumpla dos meses aún las clases no empezaron y bueno, quiero estar con ella tres meses.

—Claro que si Leah, sólo si me prometes que vas a estudiar desde tu casa.

—Si claro— sonreí.

—Pero eso sí, tienes que hacer al menos una amiga para que te ayude a adelantarte, así que tendrás que venir los primeros días.

—Claro que si, muchísimas gracias.— sonreí.

—¿Y tu que vas a estudiar? — le preguntó a Dakota

—Arquitectura— sonrió.

—Genial, bueno chicas un placer hablar con ustedes.—me miró.— Un placer conocerte Leah, tenía muchas ganas de hacerlo, la última vez que te vi eras una bebe.

Yo solo reí, nos despedimos y salimos de la oficina cuando una chica nos sonrió, fue algo raro, pero fue aún más raro cuando se acercó a hablarnos.

—¿Vas a estudiar derecho? — dijo sonriente.

—Si.

—Eso es genial, yo también.

—¿Nos veremos en clase?

—No sé si el primer mes, pues voy a dar a luz.

—si pude ver, pero me daba pena preguntarte.—ella rió.

—No te preocupes, igual nos veremos, por cierto, ¿Cual es tu nombre?

—Lady. ¿y el tuyo?

—Leah.

—¡Que lindo nombre! ¿Y el tuyo?— le preguntó a Dakota. 

—Dakota.— sonrió.— Un gusto.

—Que hermoso nombre también.  Bueno Leah, Dakota las dejo, iré a ver a mi madre.

—¿Tu madre es la decana?

—Si..Bueno, nos vemos Leah, ¡Que tengas un lindo día!

—Lo mismo.

(.....)

—¿Quieres besarme?— negué divertida.— ¿Porqué no?

—No quiero.— susurré cerca de sus labios.

—¿Segura?— se acercó demasiado y nuestros labios se rozaron, cuando estaba apunto de besarlo se alejo de mi con una risa.—Yo creo que si querías besarme.

—Te odio.— reí con él. Me acerqué y lo besé, fue un beso tierno, de verdad Zack era un excelente besador y eso hacía que mis piernas flaquearan.

—Me encantas.— dijo cerca de mis labios.— No te imaginas cuanto.— dijo besándome.

—Tu también me encantas.— sonreí.

Me senté en el sofá que había en la sala de nuestro apartamento, y el hizo lo mismo, levantó mi camiseta y colocó sus manos sobre mi vientre.

—Hola Isa.— dijo— Soy yo, papá.

Y es como si ella le hubiese entendido, por que sentí unas pataditas en mi vientre.

—Zack sentiste eso.— dije y el estaba quieto, estaba con los ojos llorosos.

—Se movió — dijo emocionado.— ¡Nena, se movió cuando le hablé! 

—Lo sé Zack, ella sabe que eres su papá.

—Esto es increíble.— dijo colocando de nuevo sus manos en mi vientre.— Isa, ¿Sigues ahí?— ella volvió a moverse.

Esto era demasiado hermoso, sentía ganas de llorar

— Te amo— besó mi vientre— Y a ti también.- me sonrió.

—Yo también te amo idiota.- sonreí.

—¿Vemos películas?— dijo moviendo sus cejas.

—Claro que si, veremos películas.— dije y el rió.

—¿Que quieres ver?

—Algo de amor, o de drama.

—Sólo si me prometes que no vas a llorar.

—Zack, eso es imposible, yo lloro con todo.

—Es cierto, recuerdo cuando vimos Tinker Bell y la bestia de nunca jamas y lloraste como dos horas, sólo por que encerraron a la bestia.

—Oye.— lo golpee— Dijiste que no le contarías a nadie y lo olvidarías

—Imposible hacerlo, pero bueno, ¿Que quieres ver?

—Love Rosie— sonreí.

—Esta bien.— dijo

—Bueno, mientras la pones iré por algo de comer, ¿Que quieres?

—Palomitas con mantequilla.

—¿Y de beber?

—Coca cola. 

—Esta bien— dije.

Cuando llegué a la cocina solo quería llevar las palomitas con coca cola, pero bueno, vi unas barras de chocolate y un paquete de gomitas. Llevé todo y cuando Zack me vio soltó una risa burlona.

—¿Qué?

—Nuestra hija va a nacer obesa por tu culpa.—dijo divertido.

—Claro que no, la doctora dijo que estaba sana.

—Esta bien, como digas.

—Te prometo que cuando la bebe nazca voy a dejar de comer como un cerdo.

—No importa Leah, si engordas mejor para mi, porque serás solo para mi.

—Que tonto.—reí.

—Yo siempre estaré contigo, así estés gorda, flaca, lo que sea.— dijo besándome —¿Entendido?

—Entendido— lo abracé.

El le puso play a la película, y bueno, no iba ni la mitad y yo ya estaba llorando, Zack me miraba divertido y yo solo secaba mis lagrimas, así fue la tarde, y en verdad fuemuy linda, amaba estar con Zack, amaba mucho a Zack.

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Hooli, acá hay un nuevo capítulo y ya casi esta más cerca el final, si no he subido nuevo capítulo es porque estoy muy enferma lol, pero bueno me obligué a mi misma a venir hasta el computador y subir jaja.

Quería contarles que estoy obsesionada con Cheap Thrills omg, no la puedo superar.