Jimin frunció el ceño al ver el número de su padre brillar en la pantalla de su celular, no por el hecho de que la razón sea para comer juntos, si no por la hora que era.

Faltaban tres minutos para las 10, había cenado hace rato y justo estaba considerando la idea de irse ya a dormir; pero el sonido de su celular se interpuso en sus planes.

─ Ya estoy afuera, hace frío y la comida pesa  ─ habló el omega del otro lado de la línea. Jimin camino en dirección de la puerta, aquello era raro pero no desagradable, no creía que el mayor se fuera a tomar tan en serio sus propias palabras y quiera recuperar el "tiempo perdido" llegando a su casa a estas horas de la noche.

─ Voy a abrir ─ anunció acelerando sus movimientos.

Cuando abrió la puerta se sorprendió al verle con pijama y una caja de pizza con Soda.

─ Buenas noches ─ Misuk sonrió animado, aquella sonrisa era similar a la de Jimin, prácticamente el menor había heredado varios de sus rasgos físicos de su padre, claramente por el paso de los años los de Misuk eran más maduros, se podría decir que Jimin era su versión más joven.

Llegó un momento en el pasado que el peligris se preguntó porqué no se parecía a su madre alfa, cuando Susy tenía rasgos de ambos; incluso en su inocencia cuando aún era un cachorro creyó que la razón por la cual su madre lo rechazaba era por ser completamente diferente a ella.

Hoy en día si le preguntan es algo que agradece enormemente.

─ Entra ─ se hizo a un lado para que el mayor entrara, luego cerró la puerta con seguro.

Sora salió de su escondite al sentir el aroma de la pizza, moviendo su cola y ronroneando se restregó en el pie del mayor, mirándolo amigablemente. Jimin solo pudo estrechar su mirada porque sabía que detrás de tanta tranquilidad se escondía un interés enorme.

─ Oh ─ el mayor dio un pequeño saltito al sentir la bola de pelos pasearse de aquí para allá en sus pies; pero cuando vio que se trataba de la mascota de su hijo se tranquilizo y sonrió ─, descuida pequeño, para ti también traigo.

Luego su vista fue a parar a los ojos verdes de su hijo, aquellos que lo miraban con curiosidad ─. Espero que mi visita no te moleste ─ mencionó con algo de temor, sobretodo al ver que Jimin no mostraba emoción alguna, su rostro lucía siempre neutro y era difícil saber lo que pasaba por su cabeza.

─ No lo hace ─ su respuesta fue muy corta, para lo que su padre esperaba.

─ ¿Seguro?

─ Seguro ─ confirmó tomando a su gato entre sus manos para caminar junto a su padre hacia la sala.

─ No sabía que traer, pero tampoco quería venir con las manos vacías, lo único que se me ocurrió fue pizza; es la que te gusta, trae mucha piña ─ el menor sonrió levemente, pero para Misuk fue suficiente para saber que aquel detalle le había gustado.

─ Iré por platos y vasos ─ comentó soltando a su gato y dirigiéndose hacia la cocina.

Y mientras lo hacía la cálida sonrisa que Misuk mostró cuando Jimin abrió la puerta se borró casi de inmediato.

Fue difícil después de la llamada que recibió. Susy y Minhae, su propia familia se le había volteado y le había dicho cosas que jamás imaginó poder escuchar; su esposa lo amenazó con dejarlo en la calle y su hija con prohibirle las visitas con sus nietos. No entiende, como esposo y omega jamás cometió una falta, quizás como padre no lo hizo bien, porque con Jimin fue un cobarde y con Susy demasiado dejado.

Suspiro entrecortado, habían tantas cosas de su vida que quería cambiar. Siempre se sintió vacío y todo empeoró cuando Jimin abandonó su hogar, aquel regalo que siempre le recordaba lo más hermoso que vivió en sus días de juventud también lo dejó, entiende que en parte se lo buscó por no cuidarlo como era debido.

Su corazón jamás podrá borrar aquel día, era de noche y llovía como si el cielo se fuera a caer, Jimin lloraba silenciosamente mientras terminaba de sacar sus maletas y las acomodaba atrás del taxi que lo llevaría  a la estación de trenes. Sus ojos verdes lo miraron por última vez, estaban vidriosos y opacos, Jimin lo miraba con profundo pesar en la entrada de su casa, era el momento de decir adiós, sus palabras aún duelen.

"Lo lamento padre, ya no resisto, siento que me asfixió y mi dolor parece ser invisible para tí y todo el que me rodea"

Todo el tiempo Jimin fue infeliz, todos a su alrededor sonreían pero pocas veces vio una sonrisa en el rostro de su hijo; por su cobardía Jimin tuvo que tragarse varios traumas y aprender a vivir con ellos, por su falta de atención su hijo se volvió una persona distante y fría y mientras todo aquello ocurría el solo se quedó callado siendo conocedor de todo el dolor que Jimin cargaba en sus hombros.

Y lo único que pudo hacer fue romperse en llanto mientras veía a su hijo volar hacia otro rumbo.

Igual a él…

─ Volví ─ por un momento lo vio reflejado en la mirada de su hijo, y no lo resistió más.

De sus ojos brotaron lágrimas gruesas, su omega lloraba y la fuerza para sonreír lo habían abandonado. Jimin lo observó sin entender nada, ¿porque lloraba su padre si hace unos momentos estaba bien? ¿Porque el nudo en su garganta cuando no había motivo para sentirse triste? Ninguna respuesta, solo un mar de incógnitas.

Misuk llevó ambas manos a su rostro y limpio el caminito de lágrimas; pero más y más brotaban como cascadas.

─ Lo siento ─ sentía vergüenza. Quizá fue mala idea haber venido, el solo quería ver a su hijo, pasar una noche a gusto con él, hablar con libertad sin la sombra de su esposa e hija, ser él mismo sin el miedo de ser juzgado, dejar salir todo el afecto y cariño encarcelado y entregar el amor que se cachorro no le pudo dar.

Pero algo salió mal, la culpa, el dolor y añoranza le hicieron una mala jugada.

Volver a nacer y hacer las cosas bien desde un principio es lo que anhela, pero no es posible, ¿enmendar sus errores? Más que desearlo es algo que debe hacer, ¿pero por dónde debe empezar?

¿Será que para renacer no necesita volver el tiempo atrás?

─ ¿Qué te ocurre? ─ Jimin no lo comprende pero su lobo también llora, quizá su omega sea aún un cachorro en busca de afecto de su padre.

─ N-nada importante ─ a lo mejor había llegado el momento de hablar con la verdad ─ , olvida esto Jimin ─ pero justo ahora no era el momento indicado, antes debía prepararse mentalmente para dejar libres sus fantasmas del pasado y decir todo de una vez, incluyendo el hecho que entre Jimin y Minhae no existe ni un vínculo.

Yoongi estaba decidido, ahora que por algún motivo el valor había llegado a él como tormenta en un día soleado se encargará de aferrarse a él como si su vida dependiera de ello, incluso sí aquello le trae un doloroso rechazo valdrá la pena porque dejará que sus sentimientos se desborden, porque simplemente ya no caben en su pecho.

─ ¡¿Estás hablando en serio?! ─ Hyebin pregunto emocionada, feliz y orgullosa de que su hijo haya tomado valor y decida luchar por su omega.

Yoongi asintió aún si su sonrojo era exagerado y los nervios aumentarán con cada segundo, el tictac del reloj le recordaba el gran paso que daría y que el momento estaba más cerca de nunca.

─ Así es ─ incluso si lo decía con mucha seguridad temía llegar a acobardarse ─, lo haré mañana mismo.

Lo había planeado todo y quizá era algo precipitado; pero lo considera necesario, entre más rápido mejor, ni él ni su alfa pueden seguir callando, porque lo que una vez comenzó como algo pequeño se volvió un enorme sentimiento, del cual Jimin era el único dueño. Sin querer el omega se había adueñado de sus pensamientos, de su atención, de sus sonrisas, de sus sonrojos, de los latidos desordenados que su enamorado corazón no puede controlar.

─ Cuánto has crecido ─ la omega sonrió cálidamente ─, estás haciéndolo bien, tu padre estaría orgulloso.

Y sin esperarlo aquello terminó de dar ánimos al joven alfa.

─ No mentiré, tengo mucho miedo ─ admitió, sus manos temblaban y sudaban.

─ Mi vida, no dejes que el miedo te doblegue, si lo haces te estarás privando de tantas cosas; yo estoy segura que harás lo correcto y las cosas se darán conforme a lo que la madre luna creé conveniente ─ las palabras de su madre siempre le traían una sensación inmensa de alivio.

─ Quiero ser un buen alfa, uno que esté a la altura de Jimin ─ no ser suficiente era lo que más le aterraba.

─ No quiero volver a escuchar que te expresas de esta forma ─ Hyebin habló para llamar la atención de su hijo, lográndolo inmediatamente ─, eres perfecto, ni menos ni más que el resto de los alfas, quizá algo inseguro; pero son tus buenos sentimientos los que te hacen único y especial ─ odiaba que la baja autoestima de su hijo se manifestara en estos momentos, quería eliminarla y que Yoongi pueda ver lo que ella todo el tiempo había hecho ─, tenlo siempre presente.

─ Tienes razón ─ sonrió algo arrepentido por haber mencionado algo que disgustara a su madre ─, dire como me siento, espero que nada salga mal.

Era muy tarde, pero Jimin aún no podía dormir; sin embargo su padre había caído como una roca hace al menos media hora.

Habían comido toda la pizza y la Soda mientras veían una película de los años 90. Para Jimin fue raro que algo así hubiera pasado; pero no se queja porque aunque lo tomó por sorpresa lo había disfrutado. Ahora el omega mayor se encontraba felizmente dormido sobre un colchón inflable en el piso de la sala mientras él había decidido usar el sofá para descansar, claramente con la compañía de Sora que se negó a dormir en su camita.

El petricor y la menta siguen impregnados sobre el mueble, deleitando al omega y al humano al mismo tiempo, Jimin incluso abrazo la almohada con fuerza enterrando su nariz y aspirando la adictiva fragancia mientras sus ojos se cerraban para disfrutar mejor e imaginarse al dueño de aquel aroma que ahora le encantaba.

De nuevo los latidos de su corazón se habían acelerado sin motivo alguno, se vio obligado a darse la vuelta dejando que su espalda repose sobre el sofá, su mano fue a su pecho ahí donde la sensación extraña se sentía con fuerza. De nuevo abrió los ojos encontrándose con el blanco techo lo que lo hizo dejar salir un suave suspiro por sentirse incompleto.

Jimin admite que aceptarlo le cuesta, no por queja o algo parecido; más bien por el miedo, no quiere sufrir una desilusión, sabiendo las condición de Yoongi, él jamás se enredará con alguien que ya está en una relación.

Y aunque aquel omega le resulte odioso, tiene algo que él anhela.

Y es justo por eso que la presión en su pecho aumenta, este sentimiento amargo es nuevo y la razón de este es por el simple hecho de imaginarse a Yoongi en los brazos de Jungkook, su omega gimotea al imaginarse aquella escena y Jimin puede sentir el nudo en su garganta, si tan solo pudiera desactivar o bloquear sus emociones.

─ Me gusta Yoongi ─ repite para el mismo, ya no puede negarlo ─ me gusta y eso no es bueno.

Sabiendo que era inútil seguir durmiendo se levantó y fue por un vaso de agua. Su expresión era de aburrimiento completo, quería quedarse dormido; pero el sueño había escapado dejándole un insomnio desagradable en su lugar.

Su departamento no es muy grande, en realidad es uno económico, pero bastante cómodo y completo para una persona: aún así en su falta de sueño recorrió cada rincón, bostezaba de vez en cuando pero esto debido al aburrimiento y cansancio. Justo el reloj marcó las 12:00 cuando la pantalla de su celular se encendió llamando su completa atención.

Más aún al ver el nombre de Yoongi en grande, era la notificación de un mensaje, y a pesar de la hora no le causó curiosidad saber el motivo de dicho mensaje, sino más bien si al igual que él él alfa tampoco podía dormir.

Abrió el chat casi vacío que tenía con el alfa, leyendo detenidamente las palabras escritas.

Yoongi.

Hola, buenas noches… ¿o buenos días? Como sea, perdón por la hora. Puede que veas este mensaje hasta que el sol salga; pero yo debo hacer esto ahora antes de que me retracte.

Podrías llegar al parque central mañana temprano por favor, es importante porque tengo algo que confesarte;  pero tranquilo, no es nada malo, al menos es lo que espero, aunque todo dependerá de cómo lo tomes tú.

Igual estoy consciente de la enorme posibilidad que existe de que no vayas, quiero que sepas que no es obligación y entiendo si tienes otras cosas más importantes que hacer. Pero si decides ir te estaré esperando a las 8:00 am.

Los latidos de Jimin se descontrolaron al leer aquello, pero no era nada a comparación de los del alfa quien al ver que su mensaje fue visto comenzó a temblar y sudar, llevando sus uñas a su boca para morderlas y así contraatacar los nervios y pánico que lo azotó con fuerza.

Ambos no podían dormir, ambos pensaban en el otro y ambos necesitaban desahogarse. Esa noche la Luna brillaba tanto que parecía anunciar el inicio de algo grande, algo que involucra a ambos amantes quienes a paso lento pero seguro caminaban a un destino inminente mientras los hilos de sus almas se unían más con cada paso que daban.

Y exactamente un minuto después la simple y corta respuesta llegó, pero esas dos palabras fueron suficientes para sacudir todo el interior del alfa.

Hyung.

Ahí estaré.

Holaaa.

En el próximo capítulo es la declaración de Yoongi a Jimin 🥺😭 estoy igual de emocionada que ustedes.

¿Cuál creen que sea la respuesta de Mimi?

Yo sí se, pero ni les boa decir.

Nos leemos hasta entonces, cuídense mucho :3

05/01/22.